Summary: Mi primer oneshot Russame, la verdad es que deseaba hacer uno. Es mi pareja favorita junto al USAxCANxUSA (Me da igual quién sea el que de a quién lol)
Advertencia(s): Shonnen-ai, personificación de paises, moñadas infinitas...xD
Disclaimer: Desgraciadamente los personajes no me pertenecen. Hetalia y todos su personajes son de Hidekaz Himaruya.
Quería soñar con el olor a girasoles. Hacía tiempo que no podía dejar de hacerlo con el color violeta, con el frío, el blanco, la suavidad, el silencio.
El joven rubio de ojos azules los abrió lentamente para encontrarse de nuevo con el techo de estrellas de plástico luminiscente que lo decoraba. Desde pequeño le habían gustado aquellos Astros brillantes, soñaba con llegar lejos, con ser importante, con encajar en algún lugar. Creía que lo había conseguido, pero como buen ser humano era egoísta. Quería más que aquello, quería algo más. Un abrazo, una caricia, simplemente notar la cercanía de otra persona.
Pero era imposible.
Porque ambos eran muy diferentes.
Porque la vida era así de injusta.
Porque en este mundo el héroe no podía enamorarse del villano.
Se giró hacia un lado de la cama y volvió a cerrar los ojos. No podía dejar de pensar en él, ni siquiera cuando jugaba a la videoconsola, leía un libro o jugaba al béisbol. Cierta persona ocupaba su mente las 24 horas del día hasta el punto de, a veces, no dejarle dormir. Entonces su móvil resonó en la habitación, y como si fuese una invocación acudió a él esperanzado. Quizás era él, quizás se había acordado de su existencia. Cogió el teléfono con manos temblorosas y respiró hondo; no podía mostrarse nervioso, él era un héroe, era el mejor, el más especial y el que el otro más quería. Se lo llevó al oído soltando un suave "Hi", y al otro lado se escuchó un "Privet"
Oír la voz de Ivan Braginski jamás le había afectado tanto. Se acurrucó entre las sábanas hundiendo la cara en la almohada y derrumbando toda su anterior preparación. Sólo aquel maldito comunista lograba sacar todo lo malo que había en él, toda su debilidad. Lloró sin descanso durante varios minutos, llamándole por su nombre entre sollozos.
Ivan calló, escuchando aquellos sollozos que hacían palpitar su frío corazón.
¿Cuanto llevaba sin verle en condiciones? ¿Meses? La diferencia horaria era tan grande que nunca coincidían por teléfono, había pocas veces como aquellas, en las que podían hablar, desahogarse uno con el otro a través de aquel aparato.
-Te he echado de menos - se escuchó desde el otro lado del mundo - ¿Sigues siendo el mismo cerdo capitalista de siempre?
Alfred no pudo evitar reírse entre lágrimas, siempre lo hacía por él. Irónicamente, en esa época, hacerle reír y hacerle feliz parecía ser el orden prioritario de Ivan Braginski.
-Sí, lo sigo siendo, commie.
Y el otro sonrió para sí mismo. Necesitaba a Alfred F. Jones como un niño quiere un caramelo.
Entonces la noche siguió, entre risas, lamentaciones, susurros. Eso era lo único que les quedaba, pero a pesar de todo no les hacía infelices.
Ivan quería a Alfred
El villano quería al héroe.
Y aquello les estaba permitido, ya que cada noche para ellos empezaba su propio mundo.
En fin, eso es todo~
Alfred: ¡¿D-Desde cuando lloro cuando hablo con Ivan?
Mejor dicho, ¿desde cuando tu NO lloras cuando algo no te sale bien?
Alfred: .../
Ains~ pequeñin~ 8D
Agradecer mil millones de veces a Chibi Rukia por su infinita paciencia y darle un repasito al oneshot, que se que tengo fallos para parar un tren XD Y a mi ruso personal que sino fuese por él y nuestros eternos roles nunca me hubiese obsesionado con esta pareja. I love you, commie ò3o