-¿Quieres una prueba de embarazo?- el dependiente de la tienda lo miro con desconfianza.- No eres demasiado joven para embarazar a una jovencita.

Su sonrojo lo delato y quiso que la tierra lo tragara, solo escuchaba la risita del tipo que lo atendía y realmente deseo salir corriendo, pero el quería saber si estaba en estado o no.

Su maldito descuido lo va a terminar metiendo en mas problemas en los que ya está. Cuando el joven le entrego la cajita de la prueba en una bolsa, pago con el poco dinero muggle que tenía y salió como si conociera esa tienda desde pequeño.

Tendría que buscar un lugar para poder aparecerse. Aunque odiaba con todo su corazón el tener que usar un método mágico para poder llegar a su casa, lo utilizaba porque ya quería llegar y desmentir aquellos pensamientos que los estaban asfixiando desde hace una semana.

Desde aquélla conversación con Molly sus sentidos se han vuelto mas alerta, mas débiles y algo sensitivos (valga la redundacia). El no lo sabía o no se había informado,el punto es que en este momento no estaba para poder arrepentirse de lo que no hizo y debio de haber hecho.

Tomando la siguiente intersección en un callejón oscuro y con poca iluminación, saco su varita y se apareció en la entrada a la casa de sus padres en Godric's Hollow, revisando la casa para asegurarse de que sus padres no se encontraban ahí , salió corriendo a su habitacion en el piso de arriba.

Con el cerrojo puesto miro aquella caja como si contuviera su más grande sueño o ilusión, con manos temblorosas la tomó y fue a adentrarse al baño.

Los siguientes quince minutos fueron una tortura se apoyó en el lavamanos, se puso a leer las etiquetas del shampoo y acondicionador, también ordenó el mueble donde se encontraban las medicinas y el botiquín de primeros auxilios. Cuando la alarma de su teléfono sonó miro con terror la prueba que descansaba en el mueble de las toallas y con total confianza como si no tuviera miedo de la respuesta la tomó entre sus manos.

Cuando las dos rayitas hicieron aparición, quiso que la tierra lo tragara y lo escupiera en Alemania. No había problema, el no tenía problema, el verdadero problema era decirle a sus padres y a Sirius.

Ni cuando el quedó en Hufflepuff sus padres hicieron escándalo (su madre le acepto de inmediato, pero su papá y su padrino no lo tomaron tan bien) pero al darse cuenta que su retoñito (apodo al cual ya se acostumbro) estaba con su Domingo siete (1*) iban a, no, no iban a pegar el grito al cielo sino que lo obligarían a decir quién era el padre de la criatura que estaba esperando.

Y su padrino lo miraría con aquellos ojos que lo dejarían sintiéndose mal por ser un descuidado con las cosas carnales que las hormonas le obligaban a hacer.

Trato de respirar pero no podía, sentia sus pulmones quedarse sin aire y penso que debía de tranquilizarse. No debía de arrepentirse ya era todo un adulto debía de hacerse responsable de sus actos y afrontarlo con valentía.

Ahora tendría que esperar y que el momento adecuado llegase para contar su situación.

Esperaba que se lo tomaran bien.

(1*): Expresión usada cuando una adolecente o estudiante universitaria sale embarazada. Se utiliza dependiendo de la región o país en la que uno vive.