Desde el principio otra vez
¿Cuándo cambiaran las cosas para mí?
Desde que recuerdo he sido rechazado por la sociedad por mi situación especial. La niñez fue especialmente difícil de superar. Pero sin duda, la peor etapa es la preparatoria. Las hormonas te hacen cometer grandes locuras. Lo único que me calma es ir a las tiendas y sumergirme entre los Boss y los Versase; o el DVD de Beyoncé en vivo.
La vida en el McKinley sería imposible para mí sin dos cosas esenciales: Mercedes y el Club Glee. Aunque en el club tenga que verme cara a cara con Finn. No he hablado nada más que lo necesario con él después del día de Lady Gaga.
A veces me pregunto cómo diablos me fui a enamorar de él. Al menos papá está feliz y yo tengo algo con quien distraerme cuando se obsesionan con un partido de algún deporte. Sí, Rachel y yo tuvimos una especie de reconciliación
Flash Back
- Entonces ya no estás enamorado de Finn. – Preguntó Rachel recelosa y arisca.
- Cielo, créeme, estoy más que curado de él. – Dije dando gracias de que ya no se pusiera la carne de gallina al mencionarlo.
- No entiendo, cómo pasó. – Aún duele pensar en ello. Es difícil pensar que duermes todos los días junto a la persona que te destrozó por completo.
- Es difícil.
- Cuéntamelo todo, así será más fácil contarlo de nuevo.
Fin del Flash Back
Después de llorar por dos horas terminamos siendo buenos amigos. De tanto en tanto Mercedes, Rachel y Yo hacíamos fiestas de pijamas en casa cuando papá y Finn se iban de campamento.
En la preparatoria seguimos siendo perdedores y empiezo a creer que eso jamás cambiará, por más que Rachel insista en que debemos dejar de pensar negativamente.
- Bien chicos, es un nuevo año para Nuevas Direcciones. – El profesor Shuester llamó al orden en el salón de ensayos. – Meda gusto de verlos a todos de nuevo.
" Este es un nuevo curso, lo que significa una nueva oportunidad para todos y un nuevo y desconocido futuro."
Después de un sermón sobre segundas oportunidades llegamos al punto clave del asunto.
Lo mejor de una segunda oportunidad es saber aprovechar lo que aprendimos, ¿alguien me puede decir que podemos utilizar a nuestro favor esta vez? – El salón se volvió más silencioso que un museo de astronomía.
Ninguno de los presentes dijo nada, incluso Rachel. En los últimos meses Rachel desarrolló un extraño tic nervioso cuando mencionaban lo de las estatales pasadas. Su ceja derecha empezaba a temblar mientras que crispa los puños y sonreía como la hija perdida de Steven Tyler o el Guasón.
Levanté la mano después de que se me ocurrió algo.
- ¿Sí Kurt? – Dijo el señor Shuester.
- Quizá una posible solución sea, aunque me duela mucho, darle menos importancia a los números de Broadway y ofrecer algo más espectacular, pero con alma.
- Alma. Soul, claro; el Soul, Funk y R&B son el punto débil de Vocal Adrenaline. – Dijo Mercedes entusiasmada de que solo ella, Artie y Santana puedan con esos géneros.
- No malentiendan, tenemos que ofrecer algo distinto. – Me miraron extrañados. – Hasta ahora, solo Rachel y Finn se han quedado con los solos principales y son nuestra carta de presentación. No estaría mal si les damos algo más.
El señor Shuester me miraba emocionado. Fue como si hubiera dicho algo que no se le hubiese ocurrido más que Einstein.
- Es una increíble idea. – Dijo el profesor. – Un número completo dedicado a los grandes del Soul, Funk y R&B. Bien, esta es su tarea de la semana: R&B. Busquen algo con pasion.
Al salir del salón Mercedes estaba emocionada con la tarea de hoy.
- No sé cual elegir, pensaba en "Upgrade U" de Beyoncé o We Belong Together. – Decía Alegre la chica a mi lado.
- Cariño, te recomiendo "If this isn't love" de Jennifer Hudson, ni Beyoncé ni Mariah te hacen justicia. Creo que yo cantaré "Hate that I love you" de Rihanna.
- Necesitas a alguien para el dueto.
- Cierto. Ya pensare en algo
- Buena observación Kurt. – Finn nos alcanzó, seguramente Rachel estaría con el profesor para discutir sus opciones o algo así.
- Gracias. – Se había disculpado cientos de veces y me empezaba a agotar de ser diplomático. – Mercedes, hay rebajas en el centro comercial, podemos ir a un zafarí de prendas.
- Claro nene, arrasaremos como siempre.
- Adiós Finn. – Dije y aumentamos la marcha.
- Te veo en casa. - Gritó Finn cuando nos alejamos.
- ¿Cuándo lo vas perdonar? – Me reprocho Mercedes.
- Yo no tengo nada que perdonarlo. – Me jacté.
- Vamos, sé que sigues dolido por lo de Gaga, pero, ya te demostró que se equivocó.
- Lo sé y se lo agradezco, es solo que no somos muy compatibles y decidí que no lo voy a obligar a aceptarme, así que cada quien que haga lo que quiera.
- Como digas, pero sabes que tengo razón.
Esta historia continuará.
Es un capitulo pequeño, espero que les guste. Espero sigan algunos más.
Tambien sigan con mi otro proyecto. Harry Potter y el final de la senda destinada.
