Reconstruyendo el Presente.
Disclaimer: Teen Titans no me pertenece, ojala que si, pero no. Aquí va mi primer fic, ¡besos!
Prefacio.
El tiempo sigue su curso con normalidad, nunca se detiene ni espera a los demás. Todos somos peones en el juego de la vida, un juego donde las reglas no existen, donde solo hay dolor y sufrimiento. Los cuentos de hadas no hacen creer lo contrario, pero lentamente esa simple ilusión se transforma en eso: una ilusión. Cada paso que damos está escrito en nuestro futuro, y marca -de un modo u otro- lo que aun falta por venir. La vida es monotonía pura, una condena a la que todos somos arrastrados y que debe ser cumplida hasta el momento del descanso eterno. Si es que eso existe.
Se supone que debería existir. Tal cual es la luz, y la oscuridad. Tal cual es el cielo, y el infierno. Debería existir el escanso eterno, aunque sea en el mismisimo y oscuro abismo. En aquel lugar no debería haber recuerdos, no más dolor, pero si aún un demonio en vida puede sufrir como sufro yo, ahora, supongo que el infierno no sería tan malo después de todo.
Contemple con los ojos entrecerrados la blancura del libro. Allí descansaba un joven. No un dragón. Un joven. Quería convencerme de ello. De que allí dormía un joven del cual la vida no había hecho más que darle tropezones y golpizas. Quizás así sería mucho más fácil confirmarme a mi misma de liberarlo.
Él había dicho que ahora sería bueno, que después que hiciera ese conjuro toda su bondad saldría a flote y no habría nadie más bueno que el. Aunque yo tenía mis dudas, quería convencerme. Quería tener la certeza de que sería un hombre. Que simpelmente sería el mismo.
"Hezberek Et Morine, Gost Wenthen Verbis Nex, Ind Obrium Bis Pendrule Paran Sic Cortis ¡Rex!"
Um, bueno, espero que lean. Será largo, un poco. ¡Comentar no cuesta nada, por favor! Besos y gracias.
