Disclaimer: Army of Two pertenece a Electronic Arts.


Adrenalina


Las máscaras ensangrentadas de P.I. y Castle lo alteran más de lo necesario.

Desde que Bravo forma parte de la T.W.O. ha visto a muchos compañeros caer. Pero esta ya es la segunda vez que le tocan los cojones en menos de un mes; la segunda vez en que ve a otro dúo fallar. Es una cagada.

Además, ¿qué parte de la vida dice que tienes que morir?

Le enfada hacerse a la idea de que la máscara de Alpha y la suya podrían caer al suelo. Como mercenario que es reconoce que un paso en falso puede significar la muerte y, sin embargo, no se preocupa demasiado por ello. Su cuerpo se mueve solo, vacía cartuchos enteros sobre enemigos que hablan otro idioma y le aseguran que no va a salir vivo de allí.

Bravo no puede mentir (no negó que quería un barquito pesquero o que le daban miedo los mausoleos). Tampoco oculta que se apoya en las manos enguantadas de su compañero para subir a lugares tan altos como el mismo cielo.

No teme fallar, porque si se cae Alpha lo levantará.

Correrá hacia él evitando el fuego cruzado, le inyectará un poco de dulce adrenalina y le gritará que se quede con él; el tono autoritario de su voz se atenuará por la preocupación.

A Bravo le hace mucha gracia, pues su compañero muestra una desesperación contenida en medio de sus tácticas militares y planes de respaldo que le provoca reír. Lo cual es una señal de que ambos vivirán, de que aunque las cosas vayan muy mal aún tienen una oportunidad de remontar.

De que el cabrón de Alpha se preocupa más por él que por su novia canadiense imaginaria.

Han pasado tanto tiempo juntos que ya sólo se fastidian con temas banales. Son americanos, pero no por eso son unos insensibles e ignorantes, ¡si él se ha tomado la molestia de conocer el Día de muertos!

La novia de Alpha es uno de esos temas banales, todo lo contrario a su ilusión de formar una familia. Igual que su propia necesidad de pescar; de hecho, la idea de usar dinamita para pescar no se escucha nada mal... hasta podría hacer las cosas un poco más interesantes.

¿Con quién, sino Alpha, se sincronizaría de esa manera? ¿Quién mantendría la cabeza fría cuando él sólo quiere correr hacia delante y dispararle a todo lo que se mueva?

Bravo le dedica el tiempo suficiente al otro como para decirle si un francotirador le está apuntando o no. Le permite escuchar sus pensamientos más vulnerables, aún cuando los está reservando para una persona que nunca haya visto una pistola de verdad en su vida. Una mujer no-imaginaria.

Perderlo no es una opción. Perderse no será su elección. ¡Si son un ejército de dos personas! ¿Quién necesita de Fiona? No sabe disparar una ametralladora ni aunque el enemigo esté a menos de cinco metros de ella. Sus granadas no siempre son efectivas.

Solos, son la leche.

Solos, pero juntos, no sufren por la pérdida de un tercer integrante.

Así que Bravo aprieta con fuerza su fusil, observa las máscaras y sale corriendo tras El Diablo.

No permitirá que la máscara negra con blanco caiga, ni que el amarillo de la suya sea el único color vivo en medio de alguna habitación manchada de sangre oscura. Si Alpha muere, él morirá con él.

¡Si por algo Dios les manda tantas desgracias! Ya debe de saber que son un equipo.