Como un Iceberg

Capitulo 1-Un trato y un chocolate

Declaimer: CCS y todos sus personajes le pertenecen a CLAMP esta historia y esta humilde autora solo los toma prestados para crear esta historia que solo tiene como objetivo entretenerlos = )

Nos conocemos desde la primaria al principio nuestra rivalidad fue sumamente evidente tanto que inclusive los maestros de deportes nos dejaban hacer nuestras competencias privadas, siempre deseábamos superar al otro hasta que ese "odio" si así se le puede llamar se evaporo al darnos cuenta de que ninguno cedería nunca supimos como pero una amistad tan fuerte como un iceberg se formo entre los dos. Caminábamos juntos a la escuela todas las mañanas, salíamos de paseo casi cada viernes, sabíamos todo el uno del otro y cuando la oportunidad se presentaba nos escapábamos de clase para charlar en la hierba del parque que estaba detrás de la escuela primaria.

Todo era perfecto entre los dos hasta que… entramos a la secundaria al principio todo era exactamente igual que antes pero por alguna razón él había cambiado mucho a como era un año atrás contrario a mi que seguía casi igual de plana y con cara de niña.

Él tenía un cuerpo mas desarrollado, los ojos ámbar que tanto me gustaba admirar antes ahora centelleaban cierto fuego y su voz sonaba mas ronca y varonil. Por estas y muchas otras razones las chicas comenzaron a acercársele y de un momento a otro se volvió como alguien inalcanzable para mi cada vez que quedábamos en algún lugar no faltaba la típica chica que con estrellitas en los ojos se colgaba de su brazo…era tan molesto.

Hasta que con el tiempo nos distanciamos, ahora sentada en clase de matemáticas, en la que por cierto no entiendo nada, me doy cuenta de que lo extraño muchísimo, mucho mas de lo que admitiría por mi misma e inclusive mi corazón duele cada vez que pienso en que tal vez nuestro iceberg se haya derretido para siempre.

La clase ha concluido, el profesor salé apresuradamente y yo permanezco inmóvil en mi asiento preguntándome cosas sin sentido.

-Sakura ¿estas bien?

-Si- Tomoyo me mira con preocupación, Tomoyo es la chica alta, delgada, de curvas bien pronunciadas, pelo color azabache y unos ojos azules sumamente enigmáticos siempre me he preguntado si esa será la fuente de su poder para adivinar lo que piensan las personas…- ¿estabas mirando a Li?- como ahora.

-No, lo que pasa es que no entendía las notas del pizarrón por eso estaba…

-¿Viendo hacía la ventana?- era inútil, me había descubierto y ahora era demasiado tarde para negarlo.

-De acuerdo tu ganas- una sonrisa picara se formo en sus labios al tiempo que me hace levantarme para ir al descanso

-Vamos un poco de aire fresco te hará bien

-No creo que aire sea lo que necesite Tomoyo

-Lo que necesitas es una dosis de Shaoran Li y yo te la voy a dar en este momento

-Shao…-tape su boca con mis manos antes de que cometiera una imprudencia que me metiera en mas líos

-¡¿Qué crees que haces?!

-Solo bromeaba, sabes que yo nunca sería capaz de hacer algo así- su sonrisa no se desvaneció en ningún momento sin embargo en un instante su cara cambio a una mucho mas seria.

-¿Sucede algo?

-Solo me preguntaba ¿Cuándo le vas a decir lo que sientes?
-¿Lo que sien-to?

-Si, ¿Cuándo vas a decirle que te gusta?

-¡Que me gusta! Esta vez creo que la leche si te hizo daño en la mañana- dije mientras reía a carcajadas- yo lo quiero mucho pero el solo es mi amigo aunque parece que ya ni eso

-Bueno… - su mirada se perdió en el horizonte al tiempo que una sonrisa ladeada invadía su rostro. Sabía perfectamente que esa mirada solo indicaba una cosa. Eriol Hiragizawa estaba a menos de tres metros de nosotras…

-Tierra Tomoyo ¿estas ahí?- pasaba la mano delante de sus ojos hasta que después de hacerlo por milésima vez reacciono.

El resto del día nos la pasamos como siempre bromeando y charlando sobre las cosas que sucedían en clase, esa tarde el sol se oculto entre las nubes haciendo el de ya por si melancólico día aun mas sombrío. El camino a casa lo recorrí sola pues mi amiga tenía que practicar con el coro, tenía una voz maravillosa por lo que no era de extrañarse, iba pensando en lo que me había dicho tan casualmente la ojiazul ¿y si esto que sentía en el pecho cada vez que lo veía sonriendo con alguien mas eran celos?. Sacudí la cabeza tan fuerte que inclusive me maree tratando de sacudirme esa idea pero fue en vano al contrario lo único que hacía era empeorar a cada momento. Sus calidos abrazos, su sonrisa ladina, la forma en como su cabello se revolvía con el viento, sus dientes casi perfectos, la forma en como me llamaba, las incontables veces que me salvo de caer en un charco de agua por despistada extraño todo de él y sin embargo mi orgullo no me permite doblegarme y buscarlo.

Tal vez no sea solo eso tal vez sea la forma en como acabo nuestra amistad no se lo he contado a nadie ni siquiera a mi mejor amiga aunque sospecho que ella lo intuye y por eso no me obliga mas de lo necesario a acercarme.

. . . .

Era un día sumamente lluvioso aquella vez, nuestros impermeables estaban tan mojados que nos podíamos comparar con dos peces recién salidos del mar, cuando llegamos a mi casa lo invite a pasar nos quitamos la capa y le ofrecí un poco de té. Se sentía muy bien el calor de la taza entre mis manos tanto que inclusive me olvide de lo ocurrido esa tarde frente a la escuela.

-Sakura hay algo que quiero decirte- mi sonrisa se amplio tanto que mi cara parecía la de un payaso de circo tal vez pensaba que me diría que le agradaba tanto como él a mi si lo se, se que dije que no me gusta pero en ese momento claramente sentí como mi corazón bombeaba chorros de sangre sin control hacía mis mejillas.

-¿Si?

-Bueno es solo que lo que paso hoy en el salón, me siento muy mal por eso

-No te preocupes el que me hayan puesto pegamento en la mochila por alguna razón es solo prueba de que la mala suerte me persigue

-No, no es eso- busque su mirada pero lo único que encontré fueron algunos mechones de pelo que los cubrían- Lo hicieron porque te han visto conmigo, esas niñas son tan odiosas!!

-Tal vez si fue por eso pero no importa- mi mirada se torno un poco mas triste de lo que supuse y él lo notó inmediatamente

-Creo que lo mejor es que no sigamos viéndonos nunca mas

-Pero…

-No me gustaría que siguieran ocurriendo ese tipo de cosas por mi culpa

-Solo fue una vez

-¡No fue solo una vez!- su voz era fría y tajante, la ira en sus ojos me asustaba mucho y sin embargo trate de parecer calmada- recuerdas cuando en gimnasia tu blusa estaba rota o cuando tus zapatos los llenaron de miel

-…-

-yo no quiero que eso siga sucediendo

-¿por esas tonterías quieres terminar nuestra amistad?

-Si así es como lo quieres ver- hizo una pequeña pausa y aunque mis ojos ya comenzaban a llenarse de lagrimas una leve esperanza se albergaba en mi corazón-si, quiero dejar de ser tu amigo por eso

Luego se levanto de su lugar tan rápido que me costo trabajo moverme pero aun así lo intercepte en la puerta haciendo uso de mis habilidades en deportes, me atravesé en la puerta y le impedí el paso.

-¿En serio? – ya las salinas lagrimas corrían por mis mejillas me pareció ver una mirada de arrepentimiento en su rostro pero luego simplemente me aparto de la puerta, no tan delicadamente, para salir a toda prisa sin siquiera ponerse el impermeable.

Lo vi alejarse tan rápido que doblo la esquina antes de que mi cerebro aceptara lo que había pasado realmente. Al día siguiente no se sentó conmigo es mas casi ni lo vi exceptuando en el salón de clases, después de varios días de lo mismo me di por vencida y aunque Tomoyo nunca había sido muy amiga mía me apoyo en esos momentos tan frustrantes.

. . .

Cuando al fin llegue a casa una fría llovizna ya caía, mi madre estaba preparando la cena y mi hermano como siempre trabajaba en uno de sus proyectos escolares.

-Hasta que llegas monstruo, con esta lluvia podrías caerte en la coladera y nadie lo notaria

-¡Hermano!- lo patee tan fuerte que el pequeño modelo de la torre de Tokio en la mesa que estaba construyendo calló

-¡Sakura!- subí corriendo a mi cuarto sin esperar su ira vegadora por arruinar su figurilla. Una vez allí me deslice detrás de la puerta hasta caer sentada en el suelo alfombrado aun me costaba trabajo creer que hubiera pasado ya un año desde aquel incidente y aunque me dolía un poco con el tiempo me acostumbre a ese vació constante en mi corazón.

-¡Sakura! La cena esta lista

-Ya voy- me puse las pantuflas y baje rápido antes de que el otro ogro se comiera mi porción, la comida estaba deliciosa debía admitir que mi madre tenía su toque para la cocina, nadie hablaba mucho pues los bocados lo impedían.

-Por cierto Sakura hace mucho que no traes al mocoso a casa ¿te hizo algo? Porque si es así yo…

-Es cierto ya va para un año ¿verdad?

El bocado que iba pasando por mi garganta casi se me va por otro lado y en un intento por dejar de ponerme azul me bebí toda el agua frente a mi. Mi madre y hermano veían asombrados y asustados al mismo tiempo.

-Lo que pasa es que ha habido mucha tarea y trabajo por eso ya no nos vemos tan seguido

Tal vez Toya sentía que algo andaba mal y lo demostró al mirarme con sus negros ojos y tratar de adivinar lo que pensaba cosa que no logro pues inmediatamente me levante de la mesa con la excusa de que tenía mucha tarea.

El sol alumbraba ya la ventana y con cada rayo mi visión se hacía mas borrosa, de nuevo otro día de escuela comenzaba y en la primera hora tocaba deportes para variar.

-Kinomoto salta los obstáculos

Me levante de mi lugar y me prepare para comenzar a correr.

-Espera- el profesor movía las manos llamando a alguien- los dos son mis mejores alumnos y hoy me gustaría probarlos por tiempo

Mi mirada se perdió en el horizonte tratando de despertar de esta horrible pesadilla pero por mas que me esforzaba mas real parecía, cosa que comprobé cuando el silbato sonó y tuve que empezar a correr y esquivar obstáculos.

De reojo lo observe, no parecía para nada turbado y al contrario ¡me llevaba ventaja! De nuevo mi orgullo hizo aparición ¡No señor, no me dejaría vencer tan fácil! Acelere el paso y una vez me empareje con él trate de ganar a toda costa.

Cosa que no pude cumplir gracias a mi falta de concentración en la pista. No era que lo estuviera observando pero el solo hecho de tenerlo al lado me desconcertaba.

-Buena carrera- susurro casi para sus adentros mientras pasaba a mi lado, mi corazón se acelero y mi mente luchaba por creer que aquello no era mas que una alucinación pensamiento que deseche al verlo girar un poco el rostro y dedicarme una leve sonrisa.

De nuevo una oleada de sentimientos me invadieron, no sabía si estaba en el suelo o volaba muy lejos de allí lo único que sabía y parecía importarme era el hecho de que en esos momentos mi corazón saltaba y daba pequeños vuelcos dentro de mi pecho.

En la hora de descanso mi amiga estuvo particularmente distraída no hacía otra cosa que no fuera ver hacía la cancha de fútbol comenzaba a preguntarme si tendría algo que ver con su llamada nocturna la cual no había alcanzado a contestar. Cuando al fin pareció despertar de su ensoñación y se digno a mirarme su rostro irradiaba cierta felicidad.

-¿A que se debió la llamada de ayer?

-¿Cuál llamada?- su voz era casi un susurro y su respiración acompasada indicaba que vagaba muy lejos de la escuela.

-Ayer a las 10, mi casa, ¿teléfono?

-Ah eso, bueno veras- parecía haber regresado a su estado habitual- ayer que me quede a coro salí ya bastante tarde y adivina que paso!!

-¿Te asaltaron?

-¡No! Eriol se ofreció a llevarme a casa

-¡¡Bromeas!! Eso es lo mas genial que me haz dicho en toda la semana- ella parecía revivir el momento en su mente, lo cual se notaba en su mirada que de nuevo estaba perdida

-Si, me dijo que nunca me había visto por el campus, que si era nueva

-¿Nueva?- mi cara mostró cierto fastidio al escuchar esto

-Le dije que me habían transferido desde Francia, se lo creyó y hasta dijo que mi acento era diferente

-Entonces ¿crees que le gustes?

-No lo se, hablamos solo de cosas sin importancia y como cree que soy nueva no pude mencionar mi repertorio de chismes

-Ese truco siempre funciona – ahora sus ojos ya no centellaban luz al contrario parecían irse apagando a cada momento-¿Qué sucede?

-Es solo que me gustaría decirle lo mucho que me gusta claro sin parecer que llevo días viéndolo

-¿Por qué no lo haces el 14 de febrero? Después de todo no faltan mas que unos días

-No lo se, la verdad no me veo dándole un chocolate- sus mejillas se tornaron de un color rojo

-Vamos Tomoyo a menos que- me costo trabajo decir la palabra- sea gay dudo que pueda rechazarte

Las dos reímos, luego ella dejo de hacerlo a pesar de que yo aun lo hacía, esa mirada en sus ojos indicaba que un plan estaba siendo formulado en su cabeza eso o que de nuevo Eriol estaba cerca lo cual descarte al voltear a todos lados y no encontrarlo.

Eso nos dejaba con…

-¡Tengo una idea!-sus ojos me daban miedo tan solo podía pensar en que se le abría ocurrido esta vez, de seguro estaba en problemas tratándose de ella cualquier cosa se podía esperar- Que tal si hacemos un trato

-¿Qué tipo de trato?

-Uno que te beneficiara a ti y a mi- de nuevo su sonrisa picara ¡Dios mío!- Di si o no

-De acuerdo – no estaba del todo entusiasmada pero si eso hacía que ella tomara valor tal vez valía la pena

-Ahora si no te puedes echar para atrás, yo le doy un chocolate a Eriol si tu le das un chocolate a otra persona

-Eso es fácil, escoge uno y veras mi chocolate en sus manos

-Se lo darás a Shaoran Li- mi sonrisa burlona se desvaneció y en su lugar un vació invadió mi pecho- Sakura no pueden permanecer mas tiempo así, he visto como lo miras y creo que el siente lo mismo ¿Por qué otra razón abría sacrificado tanto solo para que no te molestaran?

-Eso no es cierto, solo lo hizo para que no pensaran que tenía novia y ser totalmente libre

-No creo pero un trato es un trato y ahora te toca cumplirlo

Dude un momento en verdad me entusiasmaba la idea de darle un chocolate pero estaba completamente convencida de que nada cambiaría aunque hiciera eso.

-Pero tu iras primero, yo lo hago si tu lo haces

-Mmm se suponía que esto era para animarme a mi

-…-

-Esta bien, yo entregare primero pero luego vas tu ¡eh!

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Hola!! ^-^

Bueno espero hayan disfrutado de este pequeño capitulo la verdad esta historia pensaba presentarla en cierto concurso pero debido a una reducción del numero de palabras no lo pude hacer T - T en verdad intente recortarla pero al final le recorte tanto que perdía la esencia, luego intente dividirla pero con el numero de palabras pedido no me alcanzaba para llegar a la parte importante es por eso que mejor decidi no concursar y mejor dejarselas aqui para que la lean y sus comentarios seran el mejor premio de todos!! asi que por favor dejen muchos ; )

Jejeje para los que leen "la joya del convento" no se preocupen que ya pronto saldra el siguiente capitulo pero creo que me atasque un poco pero ya veran que muy pronto lo subire para todos = )

Si les gusta esperen al segundo capitulo que sera el último, es una historia corta y pensaba hacerla un one-shot pero es mas emocionante si la cortas en esta parte así que el proximo miercoles subo el capitulo 2. Por favor dejen muchisimos comentarios y sigan leyendo!!