Bueno, esto es una propuesta del foro LPdF en le que se imponen 5 palabras para un amigo invisible desconocido hasta que lea el escrito, así que allá va.

Las palabras que me tocaron fueron las siguientes:

Entrometido

Brigada

Meñique

Explosión

Rechazo

Solo decir que a partir de hoy publicaré cada día un escrito, así no os torturaré con todo de golpe, y como me quedaron un poco largos, pues disfrutáis poco a poco, sin cansaros mucho de mi.

Ya sabéis que los personajes no son míos y este fic está realizado sin fines lucrativos. Así como la idea original de la propuesta que es de harryyher

Y sin enrollarme más os dejo con el resultado de la primera palabra impuesta.

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Pues como no podía ser de otra manera se lo escribo, dedico y le cedo plena libertad para hacer lo que quiera con este escrito a mi amant… digo amigo invisible lemonero, al que estoy ansiosa por descubrir. Un placer ser la afortunada que escribió para ti. Espero que lo disfrutes. Un besazo y Feliz Navidad.

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CALIENTE COMO EL HIELO

HÚMEDO (Rechazo)

Una ducha después de un entrenamiento de quidditch es lo normal entre los jugadores, pero cuando una chica se cuela en los vestuarios para ver al capitán en plena limpieza, pasa a ser perversión.

El resto de jugadores ya habían concluido su aseo personal y habían abandonado las instalaciones para dedicarse a otras actividades más productivas. Sólo el capitán del equipo de Gryffindor continuaba bajo el chorro de agua caliente. Sin alterarse, disfrutando del impacto del agua en su cuerpo, y de la paz de la solitaria estancia.

La prefecta de la casa de los leones se coló silenciosamente por la puerta trasera, solo utilizada en contadas ocasiones. Una vez dentro miró a su alrededor para cerciorarse de que no la habían descubierto.

Al no hallar ninguna anomalía en el entorno procedió a descalzarse y desprenderse de la molesta túnica y corbata. El vapor de las duchas humedecía su camisa, pegándola completamente a su cuerpo y volviendo lacio su enmarañado cabello.

Se adentró con paso decidido a la "zona de lavado", buscando al chico que se demoraba en salir. En la última ducha se distinguía la silueta borrosa de un muchacho. No vaciló en dirigirse hacia allí. Sin duda era el.

Su mano se elevó para abrir la puerta, pero antes de alcanzarla esta se abrió sorpresivamente, revelando al muchacho de la cicatriz mojado y cubierto tan solo por una toalla en la cintura.

Sus ojos no reflejaban vergüenza o asombro, su expresión era de alivio y alegría, sosteniéndole la mirada a la castaña.

-Hermione… - sonrió tendiéndole la mano.

-Harry… - aceptó gustosa el ofrecimiento.

-Ya pensé que no venias. – dijo atrayéndola hacia él.

-Jamás te fallaría. – dijo abrazándose a su cuello.

-Lo se. – susurró rodeando su cintura mientras la ojimiel lo besaba apasionadamente.

-Que calor hace aquí. – dijo la chica separándose bruscamente y desabrochando un par de botones de su blusa. – Estoy empapada.

-Si quieres puedo ayudarte – dijo recorriendo con la mirada la mojada camisa que se pegaba a su cuerpo, transparentándose completamente.

La muchacha se acercó sensualmente, apoyando su mano en el pecho del moreno. El ojiverde se deshizo de la camisa, mientras era atrapado en otro ardiente beso al que no se resistió.

-Mi falda también está mojada. – susurró contra su boca.

El obediente azabache retiró la prenda sin separar sus labios de ella. El vapor de las duchas seguía subiendo, cómplice de su intimidad, arrullándolos en su niebla.

Las prendas interiores no tardaron en caer abandonadas al suelo, entre fogosos roces e interminables besos. La bruja empujó al chico al interior de la ducha, mientras tiraba la toalla a su espalda.

Dos ojos observaban en la oscuridad el furtivo encuentro. Dos ojos rabiosos y tristes.

Ginny Weasley era testigo del amor profesado en ese vestuario. Consciente de que no sería ella quien despertaría al lado de su héroe. Sintiendo el rechazo de no ser la receptora de caricias cargadas de sentimiento. Celosa por no recibir esas miradas de Harry Potter. Pero comprendiendo, al fin, que ese lugar no le correspondía a ella. Ese puesto estuvo siempre ocupado por Hermione Granger. Y no pudo guardarles rencor, porque el destino estaba escrito y no había lugar para ella en esa historia de amor.

Y mientras se alejaba por el campo de quidditch sonrió, porque sus dos amigos merecían la felicidad más que nadie. Ella no era la elegida, pero sabía que esta vez el amor era verdadero.

FIN

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Pues hasta aquí el primer lemon, la verdad es que este no ha salido muy largo, pero poco a poco va subiendo la intensidad y necesito explayarme más. Pero no adelanto nada, ya lo ires leyendo vosotros.

Muchas gracias por tomaros la molestia de haber pasado por aquí. Y a mi amant... amigo invisible mandarte muchos besos y decirte que está escrito con todo el corazón para ti.

Gracias de nuevo por pasaros a leer, felices fiestas y nos leemos mañana.

Besazos .

Lucy