Mi segundo fanfic c:, esta vez es Kyman con varias parejas metidas por ahí, en especial Staig (CraigxStan) o como se diga y otras un poco crack pero we xD.

Como ya sabrán South Park pertenece a Trey Parker y Matt Stone, no hago dinero con nada de esto, es por simple y llano placer.

Gracias por leer y espero lo disfruten :)

CAPITULO 1

THE GAME IS ON

Tome un pequeño frasquillo de incoloro contenido, sentado, apoyando mi cabeza sobre un brazo recargado en la mesa, suspiré . Levanté el recipiente moviendolo desinteresadamente contra la única luz del lugar dejando aquellos reflejos del líquido recorrer aburridamente mi rostro , lo alejé para luego dejarlo caer al suelo disfrutando ese efímero sonido de algo quebrándose, de algo esparciéndose por el ya sucio lugar.

"¿aburrido?" me levanté, pateé la silla sintiéndome en un extraño bucle de recuerdos frustrado por hallarme por enésima vez aquí.

"¿ansioso?" caminé por la pequeña y tan familiar habitación que incluso sentía, con desagrado, que volvía a mi hogar. Dí un vistazo al bizarro collage de basura que se amontonaba en las paredes, recordé algunas imágenes e incluso sentí una sonrisa al ver algunos recortes de periódico orgulloso deseando revivir esos momentos.

"quieres más … sí, si quieres más … mucho más ¿verdad?" no pude evitar golpearme mentalmente, no pude evitar maldecir hacia la burlona voz que no parecía venía de ningún lugar

"la sangre hierve, hierve y quema como nunca antes, tu naturaleza se subleva sobre tu raciocinio" me moví hacia un descuidado y polvoriento estante , tomé una pieza de porcelana empolvada, le observé con amargura rememorando tediosos tiempos.

"naturaleza, naturaleza… cuánto odias esa palabra Theo Theodore" la estreché entre mis manos deseando desaparecer esa voz, voz que seguía una extraña melodía que no recordaba haber escuchado en mi vida pero que a su vez me hacía sentir extraño, sumamente extraño. Soplé al frío y sucio objeto en mis manos sintiendo vacío, tan nostálgico y afligido al ver el polvo dispersarse, alejarse feliz por no hacer más parte de tan desagradable historia. Le observé por un momento más

"nuestra obra maestra espera, espera con ojos jade, con rizos carmín y tez de marfil… ¿marfil profano?si, así es, marfil profano Theodoro" rabia curso hiriente por mi pecho hasta mi brazo lanzando sin cuidado alguno la pequeña taza contra la única luz en la habitación. Luego solo hubo oscuridad, total oscuridad.

Me encontré con una tenue luminosidad, estreché mis párpados ante el dolor de luz contra ojos acostumbrados a total oscuridad, mi cabeza dolía

"ahora vamos a hablar sobre lo que vio" manos ajenas apartaron unos gruesos audífonos de mi, todo giró por un pequeño momento, casi insignificante

"la misma mierda de siempre" había un tono monótono en mi voz, inevitable teniendo en cuenta que llevaba viniendo desde hacía dos meses atrás cada puta semana .Escuché un suspiro de parte del otro hombre

"entonces cuénteme de nuevo, ¿que vio?"

"la misma habitación , rompo cosas, habían fotos, recortes y demás porquerías en la pared, luego rompo el único bombillo y todo desaparece" omití la parte de la voz, siempre lo hacía, no necesitaba a un imbécil con titulo para entender aquello que era pan de cada dia para mi

"no estamos avanzando Eric" me limité a observar el techo disfrutando del fastidio en la voz del más anciano, esa sonrisa involuntaria surgió burlona en mi rostro, ¿cuánto faltaba para que el viejo se cansara?

"consigase otro trabajo entonces señor" me senté, estaba acostado en un largo sillón unos segundos atrás "otras cinco semanas y no tendré que escuchar más mierda de usted" logre ver al anciano fruncir el ceño exhausto, enojado. Tomo un par de cigarrillos de su bolsillo, encendió uno sin importarle en absoluto la presencia del menor. Había empezado a hacer eso tras la cuarta sesión y no le culpaba, estudiar por años para tratar con adolescentes estúpidos cada día por culpa de algún inútil programa del gobierno no sonaba atractivo en absoluto. extendió uno a hacía mí, lo tomé entre incrédulo y agradecido, dejé que el anciano lo encendiera en señal de tregua momentánea.

"podría hacer un informe rápido, maquillarlo un poco y dejarlo ir sin necesidad de más sesiones"Creció en mí bastante interés dejando ir una calada de humo en el proceso "si usted coopera" amaba ganar, ganar era como una especie de orgasmo mental para mí, un momento sublime que recorría divertido mi cuerpo como un festival no hippie, no pude evitar sonreír.

"cooperare viejo" miré hacia el reloj aún regodeándome en la rendición, tres y cincuenta, solo diez minutos más y no vería a ese viejo marica en mi vida.

"bien" el anciano se alejó con cigarrillo en mano hacia su escritorio, lo puso en su boca para empezar a teclear. Mi vista rotaba por la oficina perezosamente fijándome de vez en cuando en como el humo salía de forma graciosa por la nariz de él, dejé mi cigarro en el cenicero de la mesa de té .

Solo unos cuantos minutos más.

"no fue para nada placentero señor Cartman, pero si fascinante su comportamiento, espero no verlo de nuevo en mi consultorio" una leve sonrisa entre agradecida y victoriosa surgió de mí, caminé ansioso hacia la carta, seguramente se la tendría que mostrar al consejero o a la directora, daba igual.

"no se preocupe, ha de tener más casos de adolescentes trastornados por impulsos maricas o suicidas que atender "sentí la hoja aún tibia por la impresora, la firma del anciano en una esquina .No me moleste en contener ese tinte burlón en mi voz, ví una pequeña sonrisa en el viejo

"más fácil que un sociópata"

"entiendo, muy complicado para alguien tan viejo" caminé hacia la puerta "actuaré un poco mejor de ahora en adelante, más no le puedo asegurar que haya tomado la decisión correcta a largo plazo" y salí no sin antes ofrecer una sonrisa a las tupidas cejas unidas en desaprobación. Viejos, siempre pasando de lo complicado porque no vivirán lo suficiente para verlo en su cúspide.

Salí de la oficina de la directora, un convincente monólogo sobre la terapia y la carta , simplemente perfecto. Observé fascinado a la nada aun saboreando esa última victoria, reproduciendo la sensación de mis puños golpeando contra carne dos meses atrás, Butters suplicando indefenso, tan pequeño, tan insignificante… tan débil que me instigaba nauseas con solo verle, pobre criatura, recuperar algo de esa agrietada amistad sería difícil.

A veces me pregunto cuando dejó de ser todo un juego de niños, cuando tener la última entrega de cualquier saga de juegos o la última figura de acción de Ben 10 se volvió algo secundario, cuando mi papel de rey en mis estúpidos juegos empezó a crecer en mi interior tan desastrosamente, incontenible y salvaje… A veces me pregunto que clase de animal sería si no hubiese llegado a controlar esa extraña ira en mi interior, probablemente el mismo que tomó mi lugar dos meses atrás cuando Stotch decidió hacer un comentario equivocado.

Lo quería todo, cuanto deseaba, cuanto cruzaba por mis ojos y susurraba mi nombre, lo quería todo tan desesperadamente. En medio de esa extraña sensación veía a cuanto idiota se me acercaba y sentía desagrado, disgusto ante su estupidez, su cabello rojo, su pobreza… ese odio irracional se torno irascible en cuanto crecí. Tome parte de tantas, pero tantas peleas entre mis doce y trece años que aún tenía una o dos cicatrices por aquella época. Una fuerza que no entendía simplemente tomaba total control de mi, mi vista se tornaba borrosa y en cuanto volvía en sí mi puño golpeaba airado contra algo, algo efímeramente suave hasta sentir dureza a través de piel magullada y rodeada de espeso líquido rojo… aun recuerdo cuán vivo aquello me hacía sentir, cuan extasiante y embriagante sensación corroía mi razón y cuán incorrecto se sentía volver de ese lapso de caos.

Observe al vacío pasillo desinteresado, caminaba a paso realmente lento hacia la clase de segundo periodo la cual probablemente ya habría empezado, miré hacía una pizarra con los nombres de aquellos con notas más altas en ese último semestre, mi nombre en primer lugar seguido por Kyle, luego Wendy.

Aun recordaba la expresión de esos dos al ver por primera vez mi nombre sobre el de ellos. Fue tan, casi sexualmente, placentero que se convirtió en algo por hacer semestre a semestre, ver sus rostros frustrados, esas horribles ojeras tras los exámenes finales y esa mirada de odio puro cuando yo no hacía ni la mitad de esfuerzo que ellos… era sublime. Pero más allá de torturar a los 'pobres', por más entretenido y excitante que fuera, buscaba favoritismo por parte de profesores y demás. ¿Cuantas veces me había salido con la mía solo por eso?, no sabría decir, eran demasiadas.

Entré al salón, mostré el permiso que la directora me había dado y tras una sonrisa de la profesora me moví entre una que otra mirada, más interesante aún, el ceño fruncido de Kyle, sus labios curvados en desaprobación probablemente previendo mi victoria, era un judío inteligente, debía admitirlo. Sonreí hacia él confirmando sus sospechas recibiendo a cambio un silencioso "vete a la mierda" antes de sentarme unas filas más atrás, cerca de Kenneth Mccormick, la puta de la secundaría.

"¿no deberías estar en esas estúpidas terapias?" escuché a mi lado, un leve susurro gutural. No pude evitar observarle divertido, sus ojos azules buscando respuestas, interesado más en mi que en la clase. Me encantaba presumir de mis hazañas y el siempre estaba ahí para escuchar y reír conmigo… no siempre, no cuando sucedió lo de Stotch o cuando sucedían cosas similares, pero era lo más cercano a un 'amigo' que podía llegar a tener, asentí.

"el viejo se cansó" susurré, la profesora lanzaba preguntas realmente fáciles, lo suficiente como para que la mayoría del salón estuviese levantando la mano y hablando constantemente, nuestros susurros se perdían entre respuestas estupidas, agradecí por ello.

"bueno, te tomo dos meses" le vi sonreír, seguramente no había puesto cuidado en toda la clase, su aburrimiento le llevaba a buscar de mi, no es como que me molestara.

"que importa lo que tardé, lo que importa es que salí" la profesora escogió a Kyle para responder, este se puso de pie y recitó lo que sea que fuera sistemáticamente, como aprendido de memoria, como si fuera una especie de máquina. "¿por qué es tan perfecto? es desagradable" murmuré. Pensar en él de esa forma me hastiaba, el no era una máquina, un ser 'perfecto' o algo así, él podía ser lastimado, él lloraba y gritaba y se quejaba. Una complaciente y familiar sensación recorrió mi pecho al pensar en él en tan degradante estado. Sentí la mirada de Kenneth sobre mi sonrisa, sonrisa inconsciente claro.

"no es perfecto, y lo sabes" otra pregunta surgió, nadie levantó la mano. El judío buscaba entre sus apuntes perezosamente seguro de que de hecho nadie lo haría, probablemente queriendo confirmar si su respuesta era acertada.

"¿si Erik?" la mayoría giró hacía mí en cuanto la profesora me nombró, logre ver satisfecho el ceño fruncido de Kyle.

"son oraciones coordinadas, en la segunda parte se presenta una elisión del sujeto y del objeto directo pero el verbo cambia, no es subordinada pues no está..." recité aburridamente, pero bastante divertido por las cejas elevadas de Kyle, me hubiese encantado saber que estaba pensando en ese momento, tal vez en lo genial que yo era, o en lo equivocado que él estaba. La profesora sonrió satisfecha.

"muy bien Eric" tomé asiento, el judío volvió a su cuaderno, probablemente fastidiado porque le había ganado… de nuevo.

"te encanta ¿no?" escuché a mi lado la familiar voz, no pude contener una diminuta carcajada.

"no tienes idea cuanto" Kenny suspiro enterrando su rostro entre brazos cruzados sobre el pupitre, probablemente se dormiría para luego pedir los apuntes de Kyle. Yo por otro lado debía poner atención por más molesto que fuera, pero siendo que repetía cosas fáciles para los imbéciles del salón podía darme el placer de dejar mi vista hundirse en la delgada espalda de Kyle. Algo de tez blanca relucía sobre el cuello de su suéter naranja, rizos rojos se deslizaban espontáneamente por la parte trasera de su cuello cubriendo de forma casi sobreprotectora la poca piel visible… lamí mis labios recordando algunas palabras de esa extraña voz "mi obra maestra". No quería adentrarme mucho en ello, sentía que era un terreno que no quería pisar, no aun.

"lo miras como si quisieras tirartelo en cada esquina de este salón" claro, tirarmelo, si le quería clavar algo no era precisamente mi… "oírle gritar y gemir tu nombre" continuó con tono divertido y perezoso "Cartman oh si si Cartman, más duro, más más " fingió en leves susurros, uno que otro volteó a verle.

"eres tan simple Maccormick" atiné a decir, escuché una risilla venir de él.

"no estoy muy lejos de la realidad culo gordo" aquello llamó mi atención.

"¿realidad?" se había dormido el muy imbécil, suspiré para seguir con la estúpida clase. Siempre se me venían este tipo de pensamientos a la cabeza, del como todo era tan monótono, tan aburrido y sin sentido… malditas clases te hacían recordar porque la adolescencia era tan mierda. Aburrido, aburrido, aburrido… dios. Me dejé llevar por recuerdos interesantes, a veces lo único que hace lidiable la monotonía del día a día son recuerdos de mejores momentos ¿triste verdad?, recurrir a algo en él pasado para hacer del presente algo más vivible, odiaba eso.

¿Que había dicho Butters aquella vez? no recordaba realmente, por más insignificante que el insulto hubiese sido solo necesitaba una excusa para golpear algo, la lotería cayó sobre el pobre…dios, a veces simplemente sentía que era un animal estúpido en busca de una presa para darle caza. De verdad estoy jodido de la cabeza.

Cuando toda la euforia dio paso a mi conciencia solo pude encontrar al pequeño rubio llorando, suplicando por que parara, solo pude sonreír, luego reír a sabiendas de que toda la cafetería miraba hacia mi, me importo una mierda y me levanté sin intentar contener mi risa al ver el rostro de algunas personas, en especial el de Kyle. Caminé directo a la oficina de la directora, no es como que me interesara evadir lo ineludible, si, redundante. Soy un estudiante perfecto, notas a tope, presidente del consejo estudiantil y capitán del equipo de fútbol americano ¿que gané entonces? unas estúpidas terapias con un psicólogo durante tres meses. Dos en realidad.

El glorioso sonido de la campana sonó, me tomé la molestia de despertar a Kenny, este levantó la vista desorientado, no pude evitar reír ante ello, qué desastre de ser humano.

"joder, siento que dormí mil años" murmuró tomando sus cosas perezosamente, decidí esperarlo, no tenía realmente mucho que hacer.

"a qué te referías con 'realidad' " no pude evitar preguntar, aquello había movido una que otra tuerca en mi, no es como que el pobre fuese muy inteligente, era buen observador eso era todo. Su mirada rodaba entre las cosas que metía en su maleta y una que otra chica saliendo del salón.

"no lo sé, estaba medio dormido"

"no te creo" por primera vez desde que despertó me miró, su mirada demasiado ilegible para mi gusto. Mantuvo silencio por un pequeño momento, como si tratara de confirmar algo en mi, no le di el gusto, permanecí tan impávido como él, claro que yo era mejor en ello.

"una semana Cartman" se levantó "Butters estuvo una puta semana en el hospital y fue tu culpa" decidí seguirlo. Volteó sobre sí para encontrarme, me tomo algo desprevenido "Kyle…" suspiró perezosamente "como sea, solo vámonos de aquí antes de que nos saquen a patadas, encontraron a un par teniendo sexo hace una semana y ahora parecen un grano en el culo cada vez que encuentran gente aquí tras la finalización de clases" sonreí.

"¿un par?… más bien a ti y a alguien más ¿quién era esta vez?"

"tu puta madre Cartman"

"al menos la mía tiene trabajo pobre de mierda" no se molestó en responder, caminamos en silencio hasta la salida, la pequeña hermana de Kenneth esperaba por él en la entrada, le miré por un momento, siempre tenía esa estúpida sonrisa en su rostro cuando veía a la niña esperando cada día, hizo una seña hacia mi en forma de despedida y corrió hacia ella para luego empezar a caminar a su lado en dirección a la parte mierda de la ciudad, solo le observe en silencio por un momento.

"¿que hiciste esta vez para que te dejaran salir antes de las terapias culón?" giré hacia la voz, Kyle estaba parado allí a la expectativa de una respuesta.

"¿y tu novio?, no vino hoy ¿verdad?" frunció su ceño, probablemente junto a Wendy, pero me gustaba la expresión del judío cuando le recordaba él como su mejor-amigo-para-siempre ahora prefería pasar más tiempo junto a ella que junto a él, ¡ah! dulces hormonas.

"seguro habrás llorado como de costumbre, diciendo alguna manada de mentiras para justificar tus acciones"

"no hice nada en realidad, el psicólogo simplemente me dejo ir Kahl, aunque no lo creas también puedo conseguir lo que quiero sin mover un dedo" soltó aire exasperado para simplemente irse rendido.

Suspiré hacia la verde fachada de mi casa, un par de pedazos de madera cortada en el suelo rodeada por nieve y la camioneta de mi madre en su lugar, las luces encendidas. Entré, no busque por ella, realmente no deseaba verla. Avancé hacia las escaleras que daban al sótano, traspase el umbral y cerré con llave tras de mí, busqué entre la oscuridad el interruptor de la luz y la encendí, una única luz en todo el lugar, recortes, fotos… había hecho de las paredes un sucio collage tal como en esos sueños maricas en los que me inducía el psicólogo ese.

Tome asiento, la misma silla de ese estúpido sueño.

Este lugar me tranquilizaba aún cuando me disgustaba, me sentía en casa, pero me desagradaba llamar este lugar 'casa', como un perro vagabundo a su respectivo sucio y asqueroso callejón, deseando por algo mejor pero atado a ese frío lugar.

Mr Kitty se acercó a mi, se restregó de forma curiosa contra mi pierna, probablemente estaba en celo de nuevo … los animales eran fascinantes, al verles actuar de tal manera me sentía bien de una u otra forma , sentía que cada persona a mi alrededor solo era un ser actuando por instintos básicos de formas complejas, como animales ocultando su estado por medio de estructuras complicadas y tediosas. Ver a las personas de tal manera hacía de cierta manera mas fácil mi trabajo, tratar de entender y manipular era mas fácil si creía que trataba con un estúpido animal.

Observe por un largo rato una semi fresca mancha de sangre en el suelo, recuerdos me inundaron arrollando mi 'humanidad', haciendo aumentar mi pulso, haciéndome desear sin recato alguno derramar un poco más de ese preciado líquido sobre el lugar. Eso siempre daba paso a sentimientos que cualquiera consideraría aberrantes, a síntomas similares a los de un drogadicto en abstinencia, a un deseo irracional por poseer algo y luego destruirlo... esa sensación de poder equiparable e incluso superior a cualquier alucinógeno o acto sexual existente.

Otro día de mierda, nada realmente más interesante que hacer que atender a reuniones estúpidas del consejo de estudiantes y practicas de fútbol. De momento solo era receso, me limite a buscar una mesa, Stan, Kenny y … no Kyle por alguna razón,estaban en la mesa de siempre.

Stan al parecer había terminado con Wendy de nuevo así que no me apetecía verle llorar como niña por esa perra.

Caminé hasta toparme con el pequeño Stotch en una mesa, estaba solo, a veces se sentaba con los otros maricas, a veces simplemente se aislaba un poco por razones que desconocía y no me interesaba conocer, no pude evitar sonreír por la oportunidad que el pequeño me estaba dando.

Sus ojos se encogieron aterrados en cuanto chocaron contra los míos, de inmediato huyeron hacia la comida que a duras penas había tocado, tome asiento fascinado por su actitud, su miedo.

"hey Butters" sus manos bajaron de inmediato a su vientre, chocaba sus nudillos de forma casi maníaca sin saber exactamente a donde mirar.

"C-Cartman" casi susurró "escuche que te dejaron ir antes de las terapias ¿que bien no?" fingió una pequeña sonrisa, era bueno en eso.

"cálmate Butters, solo vine a disculparme" su mirada se elevó por un momento al igual que sus cejas, sus azules ojos cayeron en los míos por un momento antes de huir de nuevo al confirmar que mentía, como siempre.

"no hay nada por lo que disculparse, yo también fui malo contigo"

"tienes razón ¿qué fue lo que dijiste?" se tensó, no pude evitar sonreír ante su nerviosismo.

"a-algo sobre tu mamá creo" susurró, probablemente preguntándose si había dicho algo mal

"exacto Butters, no debiste hacer eso" fingí tristeza, sabía que él veía a través de ello pero no me importo "fue realmente grosero de tu parte tratar así a mi madre" asintió apresurado.

"s-si Cartman, lo siento mucho"

"esta bien si lo sient… "

"¿que coño haces culo gordo?" la enojada voz llamó mi atención, otro par de ojos azules miraban hacia mi, Kenny estaba allí de pie.

"¿no ves? vengo a hacer las paces" dije como si fuese lo más obvio del mundo.

"vete Butters, necesito hablar con Cartman" observé atento a Stotch quien se debatía entre si hacer caso o no "¡Butters!" insistió, el pobre temblaba, busco mi aprobación por medio de una insegura mirada, asentí, tomó su bandeja y se fue "dios"

"¿a qué viene este show bolsa de mierda?" debía admitir que estaba algo molesto por la interrupción, Kenny tomó el lugar de Butters.

"aléjate de Butters Cartman" al parecer ya que Kyle no estaba hoy el estaba tomando el papel de 'voz de lo moral y éticamente correcto'.

"y le haría caso a un pobre de mierda por… " empece a comer, el receso acabaría pronto.

"dos costillas fracturadas, tabique, varios dedos… creo que esa es más que suficiente razón culón"

"oh eso… "escondí mi sonrisa, tenía que ser serio aquí "ya pedí disculpas" le observe por un momento, había incredulidad en su rostro, el enojo permanecía.

"¿estas de coña?"

"oh vamos Kenny, solo estaba teniendo un mal día, todo el mundo tiene días así"

"deja el estúpido acto Cartman, puede que toda la puta escuela crea que has cambiado pero ahora que tus delirios son mayores tu fachada también lo tiene que ser ¿no?, vaya show de mierda has montado culón, presidente del consejo estudiantil, mejores notas…" bueno, aquello me había tomado por sorpresa, esperaba este tipo de cosas más de parte de Kyle que de Kenny pero igual aquí estaba… suspiré.

"no no Kenny, tu eres la puta, Kyle es el paranoico, te estas saliendo de tu papel un poco" sonrió ante el comentario.

"me pregunto que tan grandes serán tus crímenes Cartman… te esfuerzas bastante últimamente… " no pude evitar endurecer mi expresión, sentí mi ceño juntarse en señal de enojo, Kenneth solo me observaba atento, estudiando, no me gustaba aquello "aléjate de Butters" repitió.

"o que, ¿me cogerás hasta la muerte?" suspiró para luego ofrecer una calmada sonrisa.

"estoy tratando de ser serio aquí Cartman ¿enserio tenemos que pasar por todo esto?"

"puedo lidiar contigo Kenneth, así que no te preocupes, puedes ser tan serio como se te de la gana pero tu palabra seguirá valiendo nada" se mantuvo tranquilo, su sonrisa se disipó pero debía admitir que era bueno controlándose.

"sol..."

"aunque puede que tengas razón… " sus cejas se elevaron en sorpresa "fue estúpido de mi parte hacer eso enfrente de todos, a la próxima tendré mas cuidado" me levanté, saqué un billete de veinte y lo deje sobre la bandeja, me observaba incrédulo, probablemente buscando cómo refutar aquello "¿podrías limpiar por mi?" se puso de pie enojado, las palabras en su boca a punto de golpearme, pero no necesitaba más de esta mierda así que simplemente le ignoré.

Saliendo de la cafetería el timbre sonó, el ruido de gente estúpida haciendo alusión a su estado de retraso por medio de sus conversaciones sin sentido inundó el pasillo, a veces me sorprendía las cosas tan absurdas que llegaban a mis oídos, me sentía desagradable por compartir espacio con esa gente … hasta que algo particularmente interesante llego a mi.

"¿puedes creerlo? a la directora, a la puta directora"

"¿como era su nombre?"

"Kyle Broflofka o algo así, no se ¿pero que importa? ¿quien coño te acusa por un puto cigarro? dios…" dijo alguien, busque entre el montón de gente al grupillo.

"si, dos semanas en detención por fumar en los baños , coño, solo era un puto cigarrillo…" dijo otro.

"escuche que llamaron a tu mama, ¿se enojo mucho? " y un tercero, caminé hacía el grupo, eran de un grado inferior pero útiles de igual manera .

"¿escuche Kyle?" todos giraron reconociéndome de antemano, uno de ellos retrocedió, era por mucho más alto que los tres, asintieron a la expectativa de un regaño por parte del presidente estudiantil, obviamente ese no era mi punto.

"e-el nos encontró fumando, se quejo con la directora y en fin… supongo que fue lo correc…"

"no, claro que no fue lo correcto" observaron algo sorprendidos por la respuesta "considero que deberíamos tener una que otra libertad, acusar a alguien por un estúpido cigarro no es nada genial, es de maricas" uno avanzó con algo de valor

"si, es verdad, eso estábamos pensando y…"

"y hay que darle una lección ¿no creen? yo lo haría por mi mismo pero verán, como presidente no puedo…" fingí lastima.

"bueno, fue solo una acusación, no creo que…" otro intento razonar, probablemente el único no implicado en el asunto del cigarro.

"oh no no, ¿dos semanas de castigo era? joder, yo si que estaría enojado por eso" apele a los otros dos, si ellos se movían el otro lo haría también, probablemente "dos horas después de terminadas las clases con Mr Mackey por dos semanas, supongo que eso hace tan fácil de molestar a los de décimo, no saben devolver el golpe" no había mucho más que hacer ahí así que simplemente me despedí con una seña.

"es verdad, se meterá de nuevo con nosotros si no hacemos nada" dijo uno, el estúpido del grupo seguramente, sonreí alejándome, mañana sería divertido.

Observé de nuevo a Kenny alejarse junto a la pequeña niña a la salida, no entendía porqué hacía eso, quedarme allí como idiota observando su estúpida sonrisa y la razón de ella, simplemente quería entender supongo… sentía que observaba a un naufragó nadar hacía un barco de rescate, o a un cachorro abandonado correr hacia brazos amigables. No podía evitar preguntarme qué clase de expresión tomaría al no ver a la niña esperando por él, o mejor aún, viendo que nunca más lo haría. Seguro enloquecería.

Tal vez, tan solo tal vez debería empezar a vigilar a Kenny un poco más de cerca, después de todo al parecer estaba un poco más consciente de mi que la mayoría, eso era malo.

¿Que sabía de Kenny? no más que los demás al parecer, tal vez un poco más en relación a su vida familiar. Sus padres se habían divorciado hace poco, aún me preguntaba porqué había tardado tanto. Vivía solo con su hermana y su mamá, su hermano mayor se había emancipado harto de sus padres y la pobre mujer hacía lo imposible por conseguir trabajo, claro que quien contrataría a esa clase de basura. Kenny trabajaba medio tiempo en un restaurante como mesero y en fin, me sorprendía que no fuera de prostituta.

Más allá de todo ese estúpido drama del común Kenny se podría describir como alguien 'promiscuo', un procaz de mierda que se pasaba el mundo por las bolas, muy muy literalmente. Todo el mundo podía coincidir en que el mayor 'me importa una mierda' del instituto era Craig, pero para mi definitivamente era él y las chicas lo sabían…jesús, las chicas eran medio retrasadas ¿que veían en ese desecho humano?, no dinero claro, seguro era su cara 'bonita' y esas maricadas, la promesa de un chico malo al cual rescatar de su mierda de vida y bueno , él definitivamente sabía cómo aprovechar eso.

Le empezaría a observar un poco más de cerca, al menos algo bastante fácil de reconocer era el afecto a su hermana menor, si algo salía mal esa era la respuesta, su punto de presión.

Caminé a casa, no había realmente nada interesante esperando allí… ¿ya he dicho lo aburrido que es todo? dios. Al menos el día siguiente prometía ser interesante.

Y como advertí, tras tener de cerca a Kyle todo el día me alejé lo suficiente en ese lapso donde suena el timbre y los pasillos se desocupan, caminaba al salón, yo mantenía mi distancia. Pasó cerca del servicio y dos personajes familiares le tomaron y metieron al baño tan rápido que el pobre ni siquiera pudo protestar, inhale y exhale despacio saboreando lo que estaba por venir.

Me recosté cerca de la puerta, no entraría, no aún. Discutían, Kyle pidiendo explicaciones en vano, diciendo que llegaría tarde a clases. Los dos, pues el inteligente al parecer había decidido no participar, se limitaron a reír, agua cayendo y más gritos de protesta del judío salían del baño, por cómo gritó y el cómo se quejaba del olor lo más seguro es que no fuese agua común, hubiese sido aburrido si lo fuera.

Más protestas, solo podía visualizar según los gritos y demás el que hacían con él, me hubiese encantado verlo pero era demasiado imprudente. Le habían despojado de su ropa, probablemente solo su camiseta, algo golpeaba, no estaba seguro de que era pero no eran puños contra carne, era algo más. El judío dejó de protestar tras un rato, tal vez era el mejor momento para entrar.

Contuve cualquier señal de felicidad o placer, les observe en silencio, se detuvieron de inmediato mirando hacia mí, uno a punto de abrir su boca, le fulminé con la mirada, volvió a cerrarla. Una tensión realmente curiosa lleno el lugar, ambos se miraron entre sí sin entender en absoluto que pasaba allí, porque les observaba como si fuesen dos pedazos de mierda.

"largo" fue suficiente para que lo hicieran, casi corrieron. Camine hacia la pared donde estaba Kyle, no muy lejos del ultimo cubículo. Miraba al suelo con varias marcas rojas palpitando dolorosamente sobre su piel ¿con que lo habían golpeado? no podía reconocer de qué se trataba. Olía terrible, había agua en el suelo de un tinte realmente desagradable ¿eso era agua siquiera?, "dios, hueles a mierda" tape mi rostro al acercarme. Kyle levantó la vista rendido, forzándose a sí mismo a no mostrar señal de debilidad aun cuando estaba ahí temblando. Su ceño fruncido, sus ojos brillando con un atractivo revestimiento de lágrimas a punto de caer, sus dientes presionando con rabia y sus mejillas rojas por emociones que no tenía el deseo de analizar, me bastaba con saber que sufría, eso era suficiente.

"¿fuiste tú?" preguntó de inmediato, contuve una sonrisa, no era el momento para eso.

"me ofendes judío" me agaché evitando tocar el agua, busqué sus ojos mientras trataba de levantarse, era como si la humillación lo arrastrara al suelo en cada intento "tengo una sudadera de repuesto si la quieres, hoy no tengo practica"

"no necesito de tu porquería de lastima culo gordo" gruño como un animal salvaje y orgulloso que acababa de ser lastimado.

"¿quién sentiría lastima por un judío de mierda? tendrás que comprar mi almuerzo por una semana al menos" me puse de pie, extendí mi mano y tal como esperé se levantó sin ayuda de esta.

"¿como sabias que… "

"es el baño de hombres Kyle, no el puto dorado" desvió la mirada frustrado, no encontrando forma de relacionarme con el suceso.

"bien, compraré tu maldito almuerzo, solo trae la sudadera" entró a un baño evadiendo por completo mi mirada, no pude evitar sonreír al saber que nadie se daría cuenta de ello.

Lo que vino después no fue de real interés , le di mi sudadera y se cambio, esperé por Kyle pues con lo pequeño que era lo más probable es que mi ropa pareciera una carpa a medio armar en él y de hecho así fue, parecía un niño en ropa de adulto.

"¿que me miras culón?" pregunto fastidiado tras salir del cubículo , no pude evitar reír ante lo ridículo que se veía.

"lo pequeño que eres, como una rata o algo así" suspiró, probablemente exhausto de pelear. Caminamos fuera del baño, habían botado su maleta en el basurero más cercano, lo sacó, me limité a observar la escena realmente complacido por las expresiones del judío… tal vez esto podría llevar a algo más grande, tal vez si…

"¿me seguirás todo el puto rato?"

"hasta que vayamos al salón, te necesito para tener una excusa convincente" giró sobre sí, miró con cierto odio.

"pues deberías inventar otra porque no pienso ir" desvió la mirada "no oliendo a alcantarilla y vistiendo como un jodido payaso"

"no muy diferente de lo normal" atiné a la broma fácil, frunció su ceño casi instintivamente, dio media vuelta, al parecer el estudiante modelo faltaría… de nuevo, decidí seguirlo. "ayer también faltaste" vi sus hombros tensarse un poco, su cabeza agacharse.

"si" por suerte no había profesor alguno por los pasillos, salimos del instituto sin ningún problema.

"¿puedo saber por qué?"

"no"

"Stan no faltó así que no estaban haciendo mariconadas juntos…" divague en voz alta, se detuvo.

"¿puedes dejarme en paz Cartman?" no pude evitar observar fascinado por un leve temblor que se pronunciaba en sus manos cerradas en puños, sus hombros encogidos en rabia, su delgada espalda contraída en tristeza y cansancio. Aquello le había afectado más de lo que esperaba.

"no, ahora estoy faltando a clases por tu culpa así que lo menos que puedes hacer es llorar un poco para mi judío" por obvias razones no podía ver su expresión pero seguro era algo digno de contemplarse.

"ni siquiera se porque estabas ahí en primer lugar… " un miércoles a esa hora no era el momento más movido de South Park, no estaba precisamente desértico pero por el poco tráfico y los pocos idiotas caminando cerca era realmente fácil escuchar aun cuando estaba casi susurrando.

"para ayudarte… " le seguía, no tenía idea de hacia dónde se dirigía pero realmente deseaba disfrutar un poco más del momento, era un poco enfermo divertirse tanto por esas pequeñas señales en él, ese sufrimiento silencioso del que hacía presencia, pero no me importaba. Una sarcástica risa llego a mi.

"ayudarme…" repitió con clara gracia en su voz, no miraba hacia atrás, no tenía el valor para siquiera mirarme a la cara para protestar. Su teléfono sonó en su maleta, se detuvo por un breve momento probablemente cuestionándose el si sacarlo frente a mi o no, le dejó sonar hasta que cesó.

Solo caminamos en silencio por un rato sin mucha idea de hacia donde ir, mientras tanto me dejé llevar por pensamientos estúpidos, por el placer de ver a el judío sufrir en silencio. No entendía porqué hacía eso y aun cuando la respuesta más fácil era atribuir todo al odio a Kyle debía admitir que tal vez había algo más ahí, pero bueno, no entendía mucho acerca de mí mismo últimamente aun cuando los últimos años los había dedicado enteramente a mejorar mis métodos… su celular volvió a sonar, esta vez al cesar empezó a sonar de nuevo, le observé con curiosidad.

"tal... "

"cállate" tomó su teléfono, se detuvo un momento al observar el nombre, colgó para luego detener un taxi.

"gracias" susurro dejando algo de orgullo atrás por tener que agradecer a su enemigo antes de entrar, antes de decir al conductor que se moviera sin decirle una dirección específica, arrancó.

Observe aburrido fijándome en el como tomaba su teléfono ¿quién era? no su madre o padre obviamente, no los habría ignorado, no Stan o alguien del colegio o al menos no a esta hora… ¿tal vez la razón por la que había faltado el día anterior? porque por enfermedad obviamente no era, y con lo estricta que era la perra de su madre muy poco probable que lo dejase faltar, sin contar que estaba bien domesticado, si faltaba por voluntad propia debía ser por algo realmente importante ¿pero que era tan importante?. Definitivamente había algo interesante allí.

Eso fue todo, agradecería mucho opiniones ya que no me siento cien por ciento segura acerca de la historia y si es entretenida o no, como sea, espero deseen mas capítulos y que hayan disfrutado :)