DISCLAIMER: Saint Seiya pertenece a Masami Kurumada.

ADVERTENCIA: Posible OoC. Primera persona.

Pasen por mi fanpage "Aquarius-chan Art.". También cree el grupo de Saint Seiya llamado "Saint Seiya Fanfics, Fanarts y mas …" donde pueden subir sus trabajos o armar debates. Links en mi perfil :D


Stalker

Prólogo:

Me paré en el exterior del enorme edificio e inhalé profundamente el aire con una sonrisa en mi rostro. Un grupo de hombres bajaban mis pertenencias del camión de mudanzas para llevarlas hasta el piso 8, donde se encuentra mi nuevo hogar.

Es muy distinto a mi anterior casa, mucho más pequeña, pero sabía que iba a valer la pena este radical cambio. Entonces comencé a caminar hacia adentro con mis manos resguardadas en los bolsillos delanteros de mi pantalón de jean azul claro. Me cruzo con una joven que se dedica a mirarme de arriba abajo, dedicando mas tiempo a mi tórax cubierto por mi camiseta de mangas cortas negra con un estampado de Black Sabath, sin disimulo para después sonreírme. Llámenme engreído, pero ya estoy acostumbrado. Solo respondo con una sonrisa y sigo de largo, dejándola contenta.

El ascenso por el elevador se me hizo tedioso. Estaba ansioso por llegar. Necesitaba llegar. Veo en la pequeña pantalla de números rojos indicándome al fin, AL FIN, había llegado al tan ansiado octavo piso. Sonreí en cuanto las puertas se abrieron.

"Al fin" me seguía repitiendo, ya que al fin estaba aquí.

-Al fin – susurré con una sonrisa tan grande que mostraba mis dientes.

Yo fui quien eligió este lugar. Renuncié a la comodidad de mi antigua casa para poder residir aquí.

Se deben estar preguntando: ¿Por qué tanto entusiasmo? ¿Tanta felicidad? Tengo mis motivos. No, tengo MI motivo. Porque estoy aquí por un, según me dijo mi mejor amigo, capricho. Un capricho queme tiene un tanto obsesionado.

Estaba por entrar a mi nuevo apartamento cuando el ruido de una puerta abriéndose detrás de mí me detuvo. Y allí vi a mi insano capricho. Un capricho de casi 1,70 de altura. Con una mirada verde tan intimidante que me atraía, combinando perfectamente con su cabello ondulado del mismo esmeralda. Rasgo faciales refinados, labios rosados y delgados que pedían a gritos ser besados. Y un cuerpo escultural y tonificado, siendo cubierto por una delicada camisa blanca y una falda tipo tubo negra que la favorecía demasiado. Su vestuario finaliza con unos zapatos negros de tacón y una pequeña cartera que colgaba de su hombro derecho. Levanto su mirada hacia mí y me sonrió.

—Eres el nuevo, ¿no es así?

—Eh, si – muy mal momento para comenzar a ponerme nervioso frente a una mujer –. Mi nombre es Milo Caristeas– le tendí la mano –. ¿El tuyo?

—¿El mío? – Shaina Rossi – Shaina Rossi – me sostuvo la mano.

—Bueno Shaina, tienes el privilegio de ser la primera vecina a la que conozco – le sonrío.

—Aquí son todos agradables así que no te preocupes, ¿de acuerdo? – mira el reloj de su celular y frunce el ceño –. Mierda.

—¿Sucede algo? – sí que sucede algo, va a llegar tarde.

—Estoy saliendo tarde al trabajo – bufa molesta –. Lamento cortar la conversión, pero…

—No seas tonta y ve, que tu jefe se puede molestar.

—Si – comienza a caminar –. Fue un gusto conocerte Milo.

—El gusto fue mío… – la veo adentrarse en el ascensor –. Shaina.

Las puertas se cierran y sonrío. Shaina. Shaina Rossi. Nacida en Italia un 24 de marzo hace ya 25 años. Licenciada en marketing con honores. Hija única de padres fallecidos. Trabaja en la prestigiosa empresa de tecnología e investigación Polifemes desde hace más de un año.

Y se más sobre ella, aún más.

¿Recuerdan cuando dije que me tenía un tanto obsesionado? Les decía la verdad. Porque me sentí así por ella desde la primera vez que la vi. Cuando la observé desde lo lejos la primera vez, tenía la necesidad de saber todo acerca de ella. Todo. Y, además, tenía la seria necesidad de mirarla, de grabar en mi mente cada gesto suyo, movimiento. Todo.

Sonará enfermo, dirán que estoy enfermo, pero tuve que tomar medidas. Los trabajadores terminaron de subir mis pertenencias y lo primero que hice fue armar mi computadora. La encendí y abrí el programa que instalé ayer y mis labios se volvieron a curvar cuando imágenes de una casa aparecieron. Y no eran simples imágenes, eran filmaciones en vivo de una casa. Su casa.

No fue difícil, al menos me dijo eso el sujeto al que le pagué ayer para que instale cámaras en cada rincón del apartamento de "mi capricho". Todo funciona como yo quiero ahora que puedo observarla a cada minuto.

Shaina. Mi amada. Mi capricho. Mi obsesión.

Y yo, Milo. Su acosador.


Comentarios de la Autora: Hace más de dos meses que no escribo por falta de inspiración y hoy pude desarrollar el principio de esta historia que tengo en mente desde hace mucho.

En mi cerebro está bastante avanzada, por lo que se como continuarla. Pero lo haré si ustedes la aprueban y dejan su review opinando :D

Y si esperan por la actualización de "Despertares" y "Solo Amigos", les prometo que subiré cap en cuanto pueda.

Sin más que decir me despido. Saludos y nos leemos luego.