Alquimista & Mecánica
Capítulo 1: La celebración
Era de noche, la luna iluminaba parte de la carpa, también ayudaban los candelabros que estaban posados sobre las mesas de los invitados, éstas estaban esparcidas, y la rectangular mesa de los novios, en la que nadie estaba sentado, ni siquiera los invitados, todos estaban dando la enhorabuena a la pareja recién casada y otros despidiéndose de ellos, algunos estaban ebrios con su leal compañero que estaba ahí para impedir que hiciera alguna locura, como suele pasar en las bodas, alguna parejilla romanticona se había retirado para bailar al lado de un estanque bajo la luz de la luna y las estrellas, el agua del estanque era cristalina, en la que flotaban unos nenúfares con su hermosa flor, algunas ranas asomaban su cabecita, como si la pareja estuviera cometiendo algún delito.
La boda se realizaba en un gran jardín, lleno de arbustos, flores, grandes y firmes cipreses y abetos, unos rosales que desprendían su dulce fragancia…
Aunque era de noche, el firmamento estaba despejado, no se divisaba ni una sola nube, por lo que la noche era aún más bella, ya que podían verse claramente las estrellas, como si estuvieran ayudando a la luna llena a mantener su resplandor durante la noche entera.
Ya era la hora, el local cerraba, los invitados comenzaron a marcharse, no sin antes de estrechar las manos con los novios; había sido una gran boda, y el paisaje era encantador, aquella pareja que se conocieron en el Cuartel General de Central tuvieron una boda inolvidable, algo que mucha parejas desearían.
Los últimos en marcharse fueron sus inseparables amigos, los tenientes, sus dos alquimistas nacionales y la pareja del hermano mayor, se quedaron unos últimos minutos agradeciendo a los novios la ceremonia, les dieron de nuevo la enhorabuena, se despidieron y se marcharon a sus respectivos hogares, pues todo había acabado ya, y era hora de dar final a este maravilloso día y comenzar con otro amanecer.
Los tenientes se fueron en el coche que les prestó Roy y los tres amigos en el coche de Edward. En él, conducía Alphonse, ya que Ed condujo al ir a la ceremonia, Winry estaba comentando a los dos hermanos cómo había sido la boda, pues le entusiasmó muchísimo. Al solo se limitaba a sonreír, y Ed mantenía su mirada fija en el exterior del coche, pensativo, como si estuviera reflexionando sobre algo.
- Ed… ¿Me estás escuchando? – preguntó Winry algo molesta.
- Ah… Perdona Winry – dijo él. – Solo estoy algo cansado.
''La boda era 10:30 h, la ceremonia tuvo lugar en una iglesia, cuando el cura acabó de casarles el fotógrafo les tomó fotos a los novios, después a los familiares y por último a los amigos, la última foto se la hicieron con Ed y Winry, al terminar, el fotógrafo se marchó al exterior de la iglesia. Se quedaron para charlar con los recién casados.
- Oye, y vosotros dos ¿cuánto más vais a esperar para casaros? – preguntó Roy con una sonrisa picarona.
Ninguno de los dos respondió, se limitaron a mirarse el uno al otro sonrojados.
- Lleváis juntos casi siete años, ¿no os parece que empieza a ser la hora?-dijo Riza siguiéndole el juego a su marido.
-Bueno…- empezó a decir Winry. – Ya llegará. – terminó con una sonrisa algo forzada en el rostro. ''
La chica no dijo nada, estuvo contemplando unos segundos el rostro del chico que tenía al lado, luego apoyó un lado de su cabeza contra el cristal y cerró los ojos.
Edward inconscientemente ladeó la cabeza, estuvo observando a Winry mientras ella mantenía sus párpados cerrados. ¿Tenían razón Roy y Riza al hacerles esa pregunta de repente? ¿Era ya la hora? ¿Quería Winry entregarle a Ed el resto de su vida? Y lo más importante ¿estaban preparados?
Miles de preguntan rondaban en la mente del chico, jamás se había planteado eso de casarse, siempre que lo pensaba le parecía demasiado pronto, pero ya no lo era…
Volvió a clavar su mirada en la ventana.
En el coche reinaba un gran silencio, era un viaje tan largo, Al se estaba poniendo nervioso, no sabía qué decir para romper el hielo, así que bajó la velocidad del coche y puso la radio, sintonizó una emisora que emitía una música relajante, esa agradable melodía comenzó a inundar el coche.
Winry que estaba despierta, al escucharla sonrió levemente, y Ed seguía torturándose con sus repentinas preguntas sobre la que algún día, sería su boda.
Continuará…
¡Hola a todos! Espero que os haya gustado este primer capítulo, este fanfic lo tenía empezado desde el verano pasado, y se me ocurrió continuarlo en Navidad, además, me prometí a mí misma que lo terminaría :D Nos leemos en la segunda parte, ¡hasta entonces! ^^
