Muchos días son comunes y corrientes pero como ya eh dicho anteriormente, estos, siempre llegan a su fin.

Abril: Solo les aviso que esta historia no esta corregida, por que me da flojera esperar a que me la corrijan. Y una cosa más el verdadero nombre del fic es:

Kazemaru, el chico que no sabía quien era y que nadie conocía.

Es que no pude escribirlo por ser tan largo.

Un día como cualquier otro, Inazuma Japon practicaba en el campo de Raimon. Casualmente llegaron los antiguos jugadores y se unieron. Todo era perfecto para Ichirouta Kazemaru; rivalidad, amistad, competencia, su deporte preferido… solo que el no pensaba que algo o alguien a quien, desde la tragedia, no había visto hace muchos años apareciera.

No tan lejos del campo, en lo que se reía con Midorikawa por haber chocado accidentalmente con el, alzo su vista y silencio súbitamente. Lo vio… vio ese auto negro de hace nueve años, un alto joven de cabellos negros bajo de el, sabía que lo observaba. Se miraron por unos largos segundos.

-Jajajaja- Reía aun Midorikawa –Ka kazemaru- Dijo aun entre risas, pero callo un poco –¿Qué estas observando?- Su compañero reacciono y negó con la cabeza y sonrío con amabilidad.

-No nada, sigamos- Y siguió disfrutando el día "Tal vez solo lo imagine" pensó.

Quince minutos después alguien le toco el hombro mientras seguía jugando. Se giro y encontró a anteojos.

-El entrenador Kudo quiere verte- Informo con su pillota voz.

-¿A sí? ¿Para que?- Pregunto con curiosidad.

-No lo se, solo dijo que te dieras prisa.

-De acuerdo- Dijo corriendo a donde estaba Kudo –Me llamo entrenador- Dijo ya junto a el.

-Así es Kazemaru.

-Hola Kazemaru- Dijo una voz algo melosa –Me alegra volverte a ver- Y detrás de una pared, salio un alto hombre, de cabellos negros y alborotados, lo miraba con azules ojos maliciosos. "No puede ser" negó el joven en su cabeza. No tenia palabras, si apenas lograba mantenerse con la boca medio cerrada -¿Sorprendido?

Los otos jóvenes seguían divirtiéndose cuando…

-¿Oigan, alguien sabe donde esta Kazemaru?- Pregunto Endo dándose cuenta de la ausencia de uno de sus mejores amigos.

-La verdad no lo se, creo que se fue hace unos minutos- Dijo Midorikawa. En eso el joven del que hablaban venia trotando a la cancha -¡Ah miren! Hay esta- Señalo. El joven de cabello turquesa tomo su mochila.

-¿A dónde vas Kazemaru?- Pregunto Endo.

-Lo siento Endo, tengo que alistar algunas cosas. Nos veremos en la cena- Dijo meneando su mano y trotando a los dormitorios.

-¡Hay te vemos!- Grito de vuelta. Pero algo no estaba normal, el veloz chico tenía una pequeña expresión en su rostro, algo así como; disgusto y tristeza. Casi no se notaba.

Al llegar la hora de la cena, Ichirouta no se presento. Endo penco que quizás estaba demasiado cansado para comer o tal vez seguía ocupado. De cualquier modo. Los jóvenes acabaron, recogieron y se fueron a sus camas exhaustos del pesado día. Ir a dormir… eso es lo más delicioso que uno puede hacer. Sentir una enorme pesadez en el cuerpo, los músculos aguados, ganas de acurrucarse entre las frescas sabanas, cerrar los ojos y entregarse a la noche.

Por desgracia esto no era una opción para Kazemaru. Acostado en su colchón, pensaba y pensaba sin parar. Estaba nervioso y lo savia, no iba a dormir bien.

A la mañana siguiente, Endo salio de su habitación y comenzó a saltar por los pasillos cual caperucita roja cantando una tonadita sobre lo que Aki le informo que desayunarían.

-¡Saaal-món, aa-rroz, sopa de miso, y tsuke-mono!- Vaya que el le ponía contento. Estaba a un metro de bajar las escaleras. Pero recordó lo de ayer. "Será mejor ir a ver a Kazeamru" Pensó con una sonrisa. Camino hasta toparse con la puerta abierta del cuarto de su amigo.

CLIK

Kazemaru cerró su maletín. Había terminado de empacar.

-¡¿Qué estas asiendo?- Pregunto alarmado. El joven se giro lentamente y desvió la cabeza para evitar encontrarse con la mirada de su mejor amigo. En eso llego el alto hombre.

-Te explicare- Dijo con una sonrisa –Llama a todos los jugadores y reúnelos en el comedor –Endo no entendía nada, solo quería respuestas. ¿Por que se estaba hiendo? ¿Seria acaso lo mismo que con los emperadores? ¿Quien era aquel hombre? –Anda ve…- Ordeno el joven dándole un suave empujón para que siguiera su camino. Kazemaru lo miro con el seño fruncido –Es hora.

-Lo se…- Dijo con tristeza –Pero te habías tardado mucho tiempo Eleganse…

¿Les gusto? Se que ahora no entienden muchas cosas, pero todo será revelado.

Me dio gusto escribirles, tratare de no tardarme mucho con el capitulo siguiente.

Chao.

P.D. Elegance es el nombre del joven.