Phase 2

Craig decidió tragarse todo su orgullo para poder conversar con el pequeño rubio.

"Hey, solo quería que sepas que uhm creo que eres genial y que uhm bueno sabes tirar buenos golpes. También ehh siento haber empezado todo esto, nunca debí haberle creído a Cartman." Craig dijo todo eso en una sola oración, no respiró hasta terminar de hablar y tampoco levantó la cabeza en el proceso, manteniendo la vista pegada al sucio piso blanco del hospital. Los segundos pasaban y no escuchaba la respuesta del rubio, haciendo que el pelinegro se volviera más y más nervioso. Al final escuchó una risa temblorosa e infantil, levantó la cabeza con rapidez a tiempo para ver a Tweek riendo con fuerza. Craig se quedo maravillado, Tweek no solía hablar mucho y Tucker no recordaba haberlo visto reír antes. Cuando se calmó, el rubio respondió.

"C-creo que tú también eres ngh genial, nunca había conocido a nadie que ack supiera pelear tan bien." Las palabras de Tweek eran sinceras, acompañadas de una gran sonrisa. Craig se quedó callado un segundo antes de devolver el gesto, afirmando con la cabeza.

"Yeah."


"CRAAAAAAAAAAIG, C-CRAAAAAIG, Craaaaaaa-" El grito del rubio fue cortado por un mano sobre sus labios.

"Cielos Tweek, qué." Para ese momento todos los presentes miraban con curiosidad al rubio, susurrando entre risas y con miradas criticas. Craig le sacó el dedo medio a todos los presentes antes de arrastrar al rubio, una vez que llegaron a un salón vació lo soltó. Automáticamente Tweek se lanzó contra Craig, enredando sus brazos en su cuello y escondiendo su cara en su cuello. Craig podía sentir como la lágrimas del rubio mojaban su camisa pero se limitó a abrazarlo por la cintura, susurrando palabras tranquilas. Tweek lloraba con fuerza, sus hombros moviéndose con sus sollozos. Tras unos minutos de estar abrazados, el rubio logró calmarse y separándose del pelinegro le explicó.

"Los gnomos." Craig le mostró su cara de poker marca Tucker, tratando por todos los medios de no explotar.

"Me tienes que estar jodiendo Tweek." Sus palabras eran planas pero escondían un tono de ira. Tweek lanzó sus brazos al aire, indignado por el poco interés del otro.

"NO. No es una ngh broma, se llevaron mi último par." Craig podía sentir que su ojo empezaría a forma un tic en cualquier momento y ahogando un suspiro de resignación accedió.

"De acuerdo, esta noche te ayudare."


Esa misma noche Craig fue a dormir a la casa de Tweek, dispuesto a ayudar al rubio en su plan 'Salvemos La Ropa Interior.' Ambos se encontraban en la octava taza de café, tratando de mantenerse despierto –en el caso de Craig- y alerta –en el caso de Tweek- para cuando los gnomos llegarán. Ambos estaban sentados frente al ropero del rubio, habían creado una especie de fuerte frente a ellos con los muebles y sillones de Tweek, tratando de impedir el ataque de los duendes.

"Tweek esto es ridículo."

"Gah no lo es."

"Si."

"No."

"Tweeeeeek quiero dormiiiiiiir."

"Pero Craaaaaaaig se van a llevar mi ropa interior."

El pelinegro decidió que no tenía la capacidad mental para tener este tipo de discusión, él solo quería dormir.

"De acuerdo prometo darte un par de la mía." Craig pensó que era una solución razonable, Tweek tendría ropa interior y él podría dormir. Ambos felices.

Error.

Tweek soltó un grito horrorizado, cubriendo su boca con sus manos.

"QUE ASCO."

"¡Hey!"

"¡Piensa en todos los eek gérmenes Craig!" El pelinegro estaba a punto de responder sarcásticamente, tratando de defender su ropa interior, cuando escucharon un canto agudo. Ambos aguantaron la respiración en tiempo para ver los pequeños seres de gorros puntiagudos entrar en la habitación. Tweek codeó suavemente a Craig y ambos intercambiaron una mirada de decisión, esperaron a que los gnomos estuvieran lo suficientemente cerca para salir de sus escondites. Gritando cosas sin sentido en su intento por espantar a los gnomos.

"ATRÁPALO CRAIG."

"ESO HAGO NO ME VES."

"HEY NGH NO TOQUE ESO."

Tras varios gritos, golpes e insultos, ambos pudieron atrapar a la mayoría en una gran bolsa de basura negra. Los otros habían salido corriendo, insultándolos en el proceso y clamando venganza. Tweek les sacó la lengua antes de voltear hacia Craig, quien sacudía la bolsa con fuerza. Los agudos chillidos de los gnomos retumbando dentro de la bolsa.

"Bueno, eso fue fácil."

Tweek volteó los ojos.

"Claro, solo porque eek te dije que hacer."

"Pffft, como sea." Tweek le sonrió cálidamente por un segundo antes de señalar la puerta de su habitación. Craig entendió el gesto y asintió con la cabeza. Era hora de deshacerse de los pequeños bastardos.


Media hora más tarde y ambos regresaban exhaustos a la habitación del rubio. Una vez adentro Craig se dejó caer sobre la cama, Tweek decidió acostarse junto a él cuando observó que el cajón de su ropero estaba abierto. Alarmado, se acercó a inspeccionar solo para encontrar…

"¡GAH, BASTARDOS! SE LLEVARON MI ROPA INTERIOR."


AN: OK OK OK, ABRI WORD… porque quería escribir el segundo cap de Ruido Blanco PERO LUEGO ME DI CUENTA que nunca había escrito un fic Tweek y su problema con los gnomos. Imperdonable. De alguna forma apareció Craig (Todo lo que Gabi toca se convierte en Creek)