Sueños.

"En sueños te vi y en la realidad me enamore"

Anónimo.

Una habitación obscura, un piano, un brote de sentimientos en forma de notas musicales, una persona que imprime aquellas emociones en cada tecla que es tocada desde lo mas profundo de su alma. Un sueño que aflora y notas que fluyen ejerciendo un compas.

Una única persona en aquella habitación, creando magia a cada movimiento. Un suspiro ajeno a al interpretador de aquel momento sin igual. Los movimientos cesan mientras el músico voltea para ver a su intruso, una mujer que le mira con ojos entrecerrados, embriagados por un mar de emociones que provocan un brillo inusual.

-No te detengas… -susurro.

Aquel músico, cuya vida solo se basaba en sueños rotos, sonrió y volteo hacía su viejo amigo, un piano de cola negro. Notas pesadas, frías, tristes que daban la impresión de querer herir a la persona que lo escuchaba, pero más que asustar o lastimar, atraían más a aquella persona. Las lágrimas bañaban el rostro de la chica quien miraba todo, no con sus ojos, si no con su corazón, leyendo como un libro abierto al compositor, que escondía sus miedos con aquella interpretación pesada que en el fondo escondía un gran dolor.

El pianista se volteo a verla por sobre el hombro, no dejando de tocar, e inmediatamente lo comprendió. Aquella joven entendía sus sentimientos, y era ella quien derramaba las lagrimas que el no se permitía liberar.

-¿Quién eres? –se aventuro a preguntar aquel joven pianista que ya había detenido su interpretación para fijar su vista en aquella hermosa aparición.

-Alguien que no volverás a ver cuando despiertes –susurro con una vos suave que iba acorde con aquel ambiente de paz que se sentía. Lentamente levanto su rostro, y dejo al pianista observar aquellos ojos que lo miraban con un entendimiento que no entiendo del todo.

-¿Acaso solo eres un sueño, una aparición? –pregunto con ojos tristes y melancólicos.

-Yo existo en un mundo, al igual que lo haces tú, pero mi tiempo no es el mismo que el tuyo y aunque intente buscarte, cuando este despierta, no te encontrare –dijo convencida de sus palabras, mientras que de sus grandes ojos verdes seguían botando aquellas aguas salinas que se negaban a dejar de salir.

-Si supieras mi nombre o si yo supiera el tuyo, te buscaría –dijo levantándose del banquillo de su amado piano, caminando a paso lento pero decidido hacia aquella joven.

-Te lo he dicho ya, mi tiempo no es el mismo que el tuyo. –repitió mientras sus grande ojos verdes eran cerrados para así calmar el llanto que no quería cesar.

- Nada pierdo con intentarlo –susurro. Tomando la quijada de aquella hermosa mujer que se había limitado a verlo acercarse a ella.

-Soy Maka Albarn –dijo, rompiendo aquel silencio que la embriagaba.

-Soy Soul Eater Evans –susurro tomando la mano de aquella mujer que, en sueños, había robado su corazón.

-Cuando despierte… te buscare y te encontrare sin importar lo que me cueste, es una promesa –susurro el pianista, uniendo sus labios con aquella chica que lo correspondió al instante y luego desapareció tras romper el beso-Te encontrare sin importar lo que me cueste –susurro a la, nuevamente, vacía habitación para retomar su lugar en el piano para comenzar a tocar una melodía que provenía desde lo mas profundo de su corazón, convencido que cuando despertara, la encontraría.

FIN