Tan concentrada estaba en esos documentos que no lo había sentido llegar, y no fue hasta que una pequeña bolsa estuvo frente a su cara que se percató que no estaba sola, dio un respingo por la sorpresa y dirigió su mirada hacia atrás donde él se encontraba.
-me asustaste- le dijo reproche, este solo la miraba divertido, para luego en un movimiento rápido unir sus labios
- llegue bien, un poco cansado pero gracias por tu preocupación- respondió el de manera burlona, esta solo rodo los ojos y agarro el paquete
- ¿qué es?-no era raro que le trajera detalles de vez en cuando, pero en esta ocasión no reconocía el logo que tenía estampado la bolsa.
- si quieres saberlo, tienes que abrirlo, lo vi y supe que sería perfecto para ti- fue lo único que recibió de contestación
- con cuidado de no dañar la envoltura saco dos pequeñas piezas de tela, en el momento que reconoció lo que tenía en las manos su cara se volvió tan roja como el cabello del hombre que la acompañaba
- lo único que falta por verificar es que la talla sea la correcta, pruébatelo y lo verificamos entre los dos- resoplo con voz ronca en su oído, encaminándose luego hacia la habitación, después de dos años de casados era muy raro que él se equivocara en algo como eso, pero no estaba de más verificar por si las dudas ¿no?