He notado que por alguna razon no hay muchas historias de mi personaje favorito en español asi que quise escribir una.

exitoso no es siempre sinonimo de beneficioso

La daga se acerca, cualquiera diría que la muerte no es tan mala si supiera todo lo que estas personas hicieron luego de matar a mis padres y secuestrarme, yo no soy cualquiera, detesto sentirme tan impotente, detesto las lágrimas que se deslizan por mis mejillas, pero sobre todo odio ha estas personas, odio sus ojos burlones sobre mi. odio sus carcajadas, siento como la daga atraviesa mi cuerpo, de un momento a otro todo se tiñe de carmesí.

-deseo riquezas-

-no, dame a mi poder-

Frente a mi aparece un hombre joven de cabello y ojos dorados. Supongo que el demonio a quien invocaron.

-no, no- me sonríe de forma macabra, ignorando los pedidos de la multitud.

Siento mis dientes palpitar, de un momento a otro me encuentro junto a una pila de cuerpos mutilados.

-veo que esta vez hicieron un buen trabajo-

-quien eres-

-el que te llevara con el jefe,sigueme-

Yo, Ciel Phantomhive,hijo del consejero imperial no recibo ordenes de nadie mas que del cesar y mi padre , sin embargo ,sabia que no tenia opción.

En el fondo del cuarto había un chico de facciones finas cubiertas con azulados mechones, negras alas emplumadas, confusión, la aparición imitó mi gesto mostrándome sus largos colmillos, sonreía con ironía, la imagen que el espejo me devolvía no era mas que yo mismo pero a la vez la conciencia de que nunca mas lo seria.

Invocar un demonio es simple, una mesa de piedra, una daga y un alma inocente corrompida por el odio y el rencor, además, de un grupo de humanos tan codiciosos y arrogantes como para llevar a cabo el ritual escrito en ese antiguo grabado,todo hubiera salido bien, de no ser porque faltaba una parte, pero claro, estaban tan ocupados que a nadie pareció importarle total no perderían nada por intentarlo, o al menos eso creyeron.

Ingenuos

El recuerdo de sus gritos agonizantes aun me persigue pero debo admitir que me satisface aun más de lo que en ese entonces me satisfacieron sus almas.

Aunque espero que les haya gustado, les pido su opinion sincera, despues de todo que seria de los autores si desconocemos la opinion del publico para el que, despues de todo, escribimos.