Pidiendo un Deseo. Cap. 1

Prólogo.

... ¿Te acuerdas de ella? ... ¿No? Entonces, déjame presentártela, ella es Gisele Overland, si, aquella chica que siempre (según sus amigos) lleva una sonrisa en el rostro, aquella chica con la que siempre puede contar uno sin importar la hora que fuese y aquella chica que cambiaría su propia vida solo por un simple deseo al azar, que más tarde ella se encargaría de cumplir, pero, de una manera un tanto peculiar...

Capítulo 1: " Her "

No faltaba mucho para llegar a su casa y ella sabía que significaba eso, había tenido un día "normal", si se puede decir de ese modo, en la escuela, los mismos amigos de siempre, los mismos profesores, las mismas materias y el mismo chico que llegaba a observar desde algún rincón escondida.
Si, ¿ya te acordaste? Ella es la chica que a pesar de estar ya en su casa, se tira al suelo con la espalda recargada en la puerta, que no hace mucho había de cerrar para entrar a su casa, ella es esa chica que mientras aún recargada, tira su mochila a un lado y se desata la goma del cabello dejando su cabellera castaña y larga al descubierto, como odiaba tener que amarrarlo todos los días en una coleta, pero así era su vida y no había nada que pudiera hacer para cambiarla.

Mientras se acomodaba para quedarse en esa posición unos minutos más en lo que se decidía que iba a comer esa tarde no negó las fuertes respiraciones que se anteponían a los posibles llantos, que más tarde desahogaría en su cuarto encerrada, si, odiaba su vida; tanto que le era inevitable no llorar todos los días al llegar a su hogar...

Después de unos minutos en aquella posición intentando controlar su respiración dio por hecho que era mejor comenzar a preparar su comida, después de todo, ella siempre tenía hambre y tenía que saciar ese apetito con el que había convivido sus 16 años de vida e incluso un poco más. Apenas retomo las fuerzas y la voluntad se levantó sobre sus pies y se cambió los zapatos, incluso, odiaba sus zapatos, así como el saco que debía portar, las calcetas tan blancas que debía usar y aquella falda que prácticamente no sabía que hacia ahí si enseñaba todo, aunque amenazara algún día con mandar todo al diablo, no podía, simplemente lo toleraba como siempre. Al llegar a su habitación decidió usar pantuflas y un ligero vestido color turquesa para que contrastara con su piel color durazno...

Se decidió a fin de cuentas por prepararse una pasta italiana y un poco de arroz con carne... ¿Qué más podía hacer? Al haber decidido vivir sola apenas a sus 16 años de edad era lo mejor que podía cocinarse para sobrevivir. Había pensado muchas veces volver a su casa, con sus padres, su hermano, he incluso sus abuelos, pero a veces era tanto el estrés de tener que cumplir expectativas que vivir sola era lo mejor, se valía bien por su cuenta, pero no podía evitar ese vacío dentro suyo.. Al terminar de fregar los trastes después de comer volvió a su habitación a comenzar su tarea, habiendo dado las 9 de la noche, era momento de salir, de salir a la azotea de su humilde hogar y cambiar su vida, no con esa intención, pero era inevitable cuando ella te escuchaba...

Hace mucho la verdad que no escribo un fanfic/historia/novela, porque no se, no me llegaba la inspiración, pero ahora que ando de ociosa y con más posibilidades de algo comprometedor :3 me presento con esta historia ~ Ojalá la disfruten ~.