Título: Protección.
Fandom: Yu-Gi-Oh!
Personajes: Yami Bakura & Bakura Ryou. Mención de Marik.
Género: General.
Rating: T
Advertencias: Secuela de "Parte del Plan" (Coleccionistas Milenarios). Situado en Ciudad Batallas, insinuación de Shonen Ai; Yami Bakura/Bakura Ryou, implícito.
Resumen: Porque algunas veces, Yami Bakura protegía a su hikari de todo y todos.
Disclaimer: Yu-Gi-Oh! no me pertenece. Pertenece al talentoso, Kazuki Takahashi, al cual le agradezco infinitamente por traer a mi mundo tan bella y shipeable obra de arte.
06/02/11.
En sí, Yami Bakura no sabía por qué había actuado casi en todo momento. Porque luego de que Marik lo había apuñalado en su hombro izquierdo con el Cetro del Milenio y le había explicado el plan, había sido él el que mantuvo el control hasta que el egipcio se presentó ante los amigos del Faraón y liberó a Bakura de su control mental sólo por unos cuantos minutos, los necesarios hasta que él y el abuelo de Yugi estuvieron dentro del taxi para llevarlo al hospital...
... el plan había sido un éxito; el rubio había logrado un acercamiento hacia los tontos mortales sin levantar sospechas, y estaban un paso más cerca de su objetivo que por ahora, era común.
Después de eso, y con la primera fase del plan completada, volvió a tomar el control de nuevo y dejar la mente de su hikari en un estado inconsciente, donde no sintiera el dolor y pudiera descansar lo suficiente hasta haberse curado de su herida.
Así que mientras observaba a Bakura, inconsciente en la cama de hospital, su Yami detallaba en sus facciones y sus rasgos. Bakura Ryou era más débil que él, lo sabía; había muchas cosas que no podía hacer... y otras tantas que jamás, siquiera, se había planteado realizar pese a que tenía el potencial de hacerlas.
Su hikari era bueno... él no. Él, era un espíritu maligno, un Ladrón de Tumbas que buscaba los Artículos del Milenio para obtener poder y vengarse de aquellos que en el pasado lo habían lastimado y herido tanto.
Y aun así... ahí estaba velando y cuidando a su otro yo. Aunque no terminaba de entenderlo... quizá era por el bienestar de su propia existencia, o quizá, era algo más, no lo sabía; una especie de preocupación por su luz, por Bakura, que en ese momento necesitaba que alguien lo cuidara, que lo protegiera...
... aunque no dudaría en usarlo si era necesario, así se encontrara en ese estado.
Pero fuera como fuera y mientras tanto, Yami Bakura ahí estaría, a su lado, hasta que la siguiente fase del plan iniciara. Lo que el espíritu no sabía ni se imaginaba, era que poco después, cuando las finales de Ciudad Batallas iniciaran, se volvería a ver en esa situación que él mismo había provocado; en tomar una decisión sobre sí iba a intervenir o no en el final de la batalla contra Yami, e iba a permitir que Slifer atacara a Ryou, que en esos momentos ni siquiera se podía mantener en pie, presa del gran dolor que su herida en el brazo le provocaba...
... porque sólo tal vez, su otra mitad lograba despertar en él sentimientos que un Ladrón no debería de tener, y sin embargo ahí estaban; haciendo que lo protegiera de otros, aunque fuera él, el que más daño le causaba.
Era algo que no podía evitar, ni aunque quisiera... porque al final de todo, seguía siendo el Espíritu del Anillo del Milenio, el Yami de Bakura Ryou, su oscuridad.
Fin.
Yami Bakura, es un personaje complejo. Utiliza a Ryou para obtener lo que quiere, lo obliga a hacer cosas que no quiere, y otras tantas... se preocupa por él, lo salva, vamos. La relación entre estos dos es muy compleja, oscura y peligrosa por eso me gustar ver este tipo de escenas donde su Yami pasa de todos y todo, y muestra sus "sentimientos" por su Ryou.
La verdad es que adoro esta pareja, curiosamente es la única pareja de Yami/Hikari que me gusta ;3
En fin. Muchas gracias por leer y comentar de antemano, se los agradezco mucho :D