Humm... todos los derechos son de J. K. Rowling. Yo, solo soy una fan desesperada. Sin más, los dejo con el fic!
¿Me enseñas a besar?
Capítulo 1: ¿Me enseñas a besar?
Las cosas suceden así porque tienen que suceder. Intentó reír, pero no pudo. Había sido un cobarde…
…otra vez.
Había estado a segundos de decirle a Hermione lo que sentía por ella…
…pero no lo hizo.
Ya no recordaba qué estupidez había inventado, pero quedó como Hermione como un "sólo amigos".
Genial. Sólo amigos…
La invitó a pasar las vacaciones a su casa, tratando de que así, le fuera más fácil declararse.
Pero ya hace dos semanas que pasaba todo el día junto a ella, y no lo lograba…
- ¿Ron? – Hermione había dado tres suaves golpes a la puerta, y había ingresado a su habitación -. Harry y Ginny… salieron, es una cita.
- ¿Están juntos otra vez?
- Aún no, creo que hoy volverán – sonrió -. Tu madre y tu padre se fueron a una cena de aniversario, y ya que el resto de tus hermanos no viven aquí… estamos solos.
Solos. Estamos solos… Inhala, exhala. Inhala, exhala. Tranquilo. Todo va bien. Sólo… sé tu mismo.
- Ah… tengo hambre… - ¡Idiota! ¿Cómo pudiste decir eso? ¡Pero me dijiste que fuera yo mismo!
Hermione puso los ojos en blanco, pero no reprimió una risita.
- ¿Quieres que te prepare la cena?
- Yo te ayudo – eso es, mejora tu imagen, tú puedes…
- ¿Sabes cocinar? – alzó una ceja -. Eso si quiero verlo…
Pero lo inesperado por la chica sucedió: la cena resultó un éxito. Lo que Hermione no sabía, era que Ron había estado estudiando mucho para ése momento.
Estaba estudiando cocina, literatura, derechos de las criaturas mágicas…
En fin,
todo lo que le gustaba a Hermione…
Porque a él... ¡Le gustaba Hermione!
Terminaron de comer, luego de haber hablado sobre muchas cosas sin importancia. Pero se sentían bien.
- En fin, Ron, mejor me voy a dormir – dijo la castaña, y se levantó de su asiento.
- ¡No! Es decir… hummm… ¿Por qué no te quedas?
- No, estoy cansada… - lo besó en la mejilla -. Nos vemos mañana.
- ¡Hermione! – la llamó, desesperado. ¡Ya no tendría otra oportunidad como aquella!
- ¿Qué, Ronald?
- Humm… ¿recuerdas… aquel… beso que nos dimos… ha… hace un tiempo?
- Sí… - Hermione sólo lo murmuró. Sus mejillas ardían.
- Pues… estuve… hummm… pensando… - no la miraba a los ojos. Sencillamente no podía.
- ¿Qué?
¿Cómo se lo digo? Oh, no… está impaciente…
- ¿Piensas en eso de vez en cuando? – no supo el por qué de ésa pregunta… debería haber sido más inteligente y haberle preguntado si quería ser su novia. Pero ya era tarde…
- Sí – la voz de Hermione se volvió fría y bacía -. No besas bien ¿Sabes?
- Ah, ¿No? – sintió la ira fluir por sus venas -. ¿Acaso tú eres una profesional?
Hermione soltó una risita tonta. Y Ron sabía lo que eso significaba…
…pretendía herirlo.
- Pues Viktor piensa que sí, al igual que McLaggen…
Genial, lo había conseguido. Lo había herido.
Su sonrisa era radiante.
- Pues enséñame, a ver si eres tan buena.
- ¿QUÉEEE?
- Que me enseñes a besar – repitió, logrando controlar el rubor de sus mejillas -. ¿O es que acaso tienes miedo?
Se colocó a cinco centímetros de su boca. No sabía de dónde había sacado la valentía.
- No tengo miedo – susurró la aludida -. Ya verás.
- ¿Empezamos? – casi rozó sus labios.
- No hoy. Mañana es tu primera clase.
- ¿Debes lavarte los dientes? – Se burló el pelirrojo.
- Debo dormir. Adiós.
Y se marchó. Ron no pudo evitar sonreír.
Era una mejoría, ¿no?
Aún no debía declararse…
Le bastaba con besarla.
Sí, lo sé, el chap es cortísimo.
Pero es que.... ¿Por qué hacerlo más largo?
Seguirá pronto, lo prometo.
Publicaré cada tres o cuatro días...
Sin más,
bye!
REVIEWS, plis!
XD
