Bueno... Este es mi segundo fic publicado en y pues... No sé que más decir xD Ya saben que los personajes no me pertenecen, si no a JK Rowling y los hermanos Warner... y eso ù.u (Aunque no este de acuerdo con ello x.x) Espero que les guste y si eso me dejen algún review!
Capitulo 1 - Freak Out
-¿Sabes que? ¡Me largo! -grito la pelirroja subiendo con extrema rapidez las escaleras de su casa, entro en su cuarto de malas maneras y comenzó a tirar al baúl todas sus pertenencias.
-¿Cómo que te...? ¡Eres menor! Y mientras lo seas y no estén nuestros padres yo estoy a tu cargo y tu no te vas a ninguna parte, jovencita -dijo su hermana interponiéndose en su camino.
-¡Aparta! -dijo la chica empujando a su hermana.
He dicho que no te vas a ninguna parte.
¿Desde cuando te hago caso?
¡Siempre me has hecho caso!
Es verdad... ¿Y sabes que? ¡Estoy harta! No seré lo que tu me digas, ni haré lo que me ordenes. Vete a decirle lo que tiene que hacer con su vida a otra y a mí, ¡d-e-j-a-m-e- e-n- p-a-z!
Pero, ¿quien te crees que eres...?
Alguien que se va de su casa porque no aguanta a su hermana.
Yo solo te lo digo por tu bien.
Lily Evans salió de la pequeña casa con un baúl y un pequeño gato negro. La joven dio media vuelta y miro con los ojos entrecerrados a su hermana.
Tranquila, puedes estar segura de que no volveré a pisar esta casa, ¡NUNCA MAS! -chillo Lily.
El viento que se había levanto en aquel instante revolvió el largo, liso y rojizo pelo de la chica.
Yo no estoy diciendo eso, Lily -dijo Petunia intentando tranquilizar a su hermana.
¡Es verdad! Tu intentas que deje de ser BRUJA.
¡Lilian! -grito Petunia aterrorizada.
Lily clavo sus ojos verdes como esmeraldas en los marrones de su hermana.
¿Que? ¿Te crees que me importa que me escuchen? -dijo Lily irónicamente.
Puede que a ti no, pero a mi si.
Ya te he dicho que no tendrás que preocuparte mas por eso. Me voy de aquí ahora mismo.
¿Y cuando vuelvan papá y mama que les voy a decir?
Diles que no te soporto, ¡qué ojalá no existieras!
Ojalá no existieras tu, eres una indeseable -dijo Petunia perdiendo los estribos.
Mira quien fue a hablar, de alguien tuve que sacarlo, ¿no?
Petunia chilló y cerro la puerta de un portazo. Lily cogió su baúl y su gato y echo a andar calle abajo. El coche amarillo y negro llamó la atención de la pelirroja.
¡Taxi!
El coche paro en seco, espero a que la chica metiera el baúl en el maletero y entrara en el taxi.
¿A donde te llevo? -pregunto el taxista.
Pues... -Lily se quedo pensando. ¿Y a hora a donde iría? Saco un pergamino muy arrugado del vaquero-. A Hallgminton, pero a las afueras... El numero 98.
Ah... Si ya sé... -dijo el taxista poniendo en marcha el coche.
o.O.o
Lily observaba distraída el sitio al que se dirigía, cuando el coche paro frente a una bonita casa de campo fue cuando despertó del trance en el que estaba. Saco dinero del bolsillo de la chaqueta y salió del taxi, dejando el baúl frente a la verja que dividía el espacio entre los terrenos de la casa y la carretera. Lily toco con timidez el timbre que se encontraba a su derecha.
¿Sí? -pregunto una voz femenina.
Esto... ¿Angie?
¡Liiiiiil!
Se oyó un estrépito al otro lado del interfono y la puerta principal de la casa se abrió de par en par. Una chica de unos 17 años de pelo liso, largo y rubio oscuro salió velozmente a recibir a su invitada. Salto la corta verja y abrazo a su amiga.
Pensé que no ibas a venir -dijo abriendo sus brillantes ojos azules verdosos.
Es que... No iba a venir, Petunia no me dejaba... Pero, me he ido de casa -dijo Lily ruborizándose.
¿Si? -dijo la rubia intentando no reír.
Y le he gritado a Petunia.
¿Tu?
Si... Y le he dicho que estaba harta de ella y que no dejaría de ser bruja porque ella me lo dijese.
Bien por ti -dijo Angelica con una sonrisa.
Creo que mis padres me van a matar... -dijo Lily mordiéndose el labio inferior.
No lo harán... Petunia no les dirá nada, si tu le escribes ahora diciéndole que les diga que te has venido a mi casa a pasar los dos últimos días...
Lily sonrió satisfecha.
Pero, mejor que escribir prefiero gritarle -dijo andando tras su amiga.
No te acostumbres, puedes terminar quedándote afónica -dijo Angelica-. Si has traído a Pelusa -dijo acariciando a la pequeña gata negra.
-¡Accio baúl!
-Ay, maldición... Le había prometido a Remus, a James y a Sirius que iría a pasar los últimos días con ellos. ¿Te importa?
¿Me estas diciendo que si me importa que nos vayamos a pasar los dos últimos días con ellos?
Angelica asintió.
Sé que...
¿Te has vuelto loca? Tengo suficiente con ver a Potter en el colegio y que me persiga como si fuera mi perrito faldero, como para tener que aguantarlo también en vacaciones.
Valeeeee -dijo Angelica-. No he dicho nada.
¿Sabes algo de Ben? -pregunto Lily con una sonrisa.
Solo se que vuelve mañana por la noche y que mañana tenemos que comprarle también a él los libros, el dinero me lo dio antes de irse.
Esta bien.
¿Seguro que estas bien después de lo que ha pasado?
Si, claro que si -contesto Lily feliz.
Me alegro de que estés aquí.
o.O.o
Una lechuza blanca como la nieve sin ninguna mancha entró directa a Angelica.
Esto ya sé que es de parte de James... -dijo Angelica al ver la lechuza.
¿Sabes como es su lechuza?
Si... Es que como te habrás dado cuenta es muy especial, la mires por donde la mires no tiene ni una sola mancha es perfecta...
Yo ahora me entero de que tiene lechuza... -dijo Lily encogiéndose de hombros.
Angelica puso los ojos en blanco y desenrolló el pergamino:
¡Hola, AM!
¿Que tal todo por ahí? Supongo que como siempre, solo y aburrido, ¿eh? Por eso estas cordialmente invitada (que pijada más grande) a pasar estos dos últimos días de escasas vacaciones a mi casa. En la que encontraras a seres como Remus Lupin y Sirius Black. En fin, sin mucho mas que decirte o a lo que invitarte, me despido.
James Potter
P.D: Si puedes convencer a Lily de que venga muchísimo mejor, ya sabes la engatusas para que vaya a tu casa y luego, ¡la arrastras hasta aquí!
Lily entrecerró los ojos mirando a Angelica.
No me arrastraras hasta allí.
¡Claro que no! Este James tiene unas ideas... Yo tengo una mejor, que vengan ellos aquí.
Lily miro con espanto a Angelica.
Hazlo y me voy a un hotel. He venido aquí escapando de mi hermana, no me hagas escapar ahora de Potter.
Angelica sonrió.
No te voy a hacer escapar de nadie, estaremos tú y yo solitas, bueno y mis padres y mi hermana, si es que piensan volver -dijo Angelica mirando con el entrecejo fruncido la puerta.
Lily saco una carta del baúl.
¿Te has fijado en que casi no tenemos que comprar libros?
Angelica asintió.
Pero, ¿te has dado cuenta en la cantidad de pergamino y tinta que usaremos?
¡Sí! -exclamó la pelirroja feliz-. ¿En que piensas? -pregunto Lily mirando a Angelica.
Que podríamos quedar con ellos mañana para comprar los libros, aunque lo mas seguro es que nos veamos allí.
¿Por que tienes tanto interés en verles?
Angelica se ruborizo.
Por nada en especial.
Ya... -dijo Lily entrecerrando los ojos-. ¿No querrás volver con Black?
¡No! -grito Angelica aterrorizada-. Con una vez en la vida me basta -dijo sacudiendo la cabeza.
Lily rió.
Es que solo a ti se te ocurre salir con Black...
Oye que tampoco es tan malo, es muy simpático y gracias a él ahora tengo mejor amigo.
Si, claro es verdad y a otro que te persigue para que me convenzas para salir con él.
Angelica rió.
Pobre James... Eres cruel con él.
No soy cruel, él se lo busca. Voy a mandarle a Petunia la carta -dijo levantándose-. ¿Me dejas a Blackie?
Claro, búscala, estará en el jardín en su casita de madera durmiendo.
Ahora vuelvo -dijo Lily sacando un pergamino y una pluma del baúl.
o.O.o
Lily salió por la puerta trasera de la casa y recorrió el pequeño caminito de piedras que llevaba hasta una casita de madera para pájaros, en este caso para la lechuza de Angelica. Abrió la puerta y acaricio el pico de la lechuza oscura.
Hola, Blackie... Tengo algo para que lleves, ¿vale? -La lechuza abrió sus grandes ojos amarillos y ululo. Una lechuza blanca descendió y se paro en el brazo de Lily-. Así que tú eres la lechuza de James Potter.
Lily se apoyo en una de las paredes de la casita y comenzó a escribir con rapidez:
Petunia,
Estoy en casa de Angelica, estoy bien. Diles a papá y a mama que ya les escribiré cuando este en Hogwarts, que siento mucho no haberme despedido de ellos, pero que Angelica me escribió y me pidió que fuera enseguida. Cuida bien del perro,
Lily
P.D: No les digas que me he ido de casa, ni que hemos discutido.
Lily releyó la carta, enrollo y la ato a la pata de la primera lechuza.
Recuerdas donde vivo, ¿verdad? -susurro Lily, la lechuza ululo en respuesta-. Ve y vuelve rápido, ¿vale? -Blackie echo a volar perdiéndose entre el bosque que limitaba los terrenos de la familia de Angelica-. Supongo que querrás descansar -dijo Lily metiendo el brazo en la casita de madera para que la lechuza blanca se acomodara. La lechuza parpadeó y pico suavemente a Lily en la mano, provocando una sonrisa en esta.
Se llama Evan... -dijo Angelica tras ella.
¿Evan? -dijo Lily irónicamente-. No me gusta para una lechuza.
¿A que te suena? -dijo Angelica con una sonrisa.
No me digas que le puso ese nombre por mi apellido... Es algo penoso...
Yo lo encuentro bonito.
Tu gusto no cuenta... -dijo Lily. Angelica la miro con los ojos entrecerrados-. Has salido con Black.
¡Deja de repetírmelo! A pasado ya un año desde eso, no me saques mas el tema por favor.
Lily sonrió.
Es que olvidaba que ahora sois amigos.
Somos amigos.
¿Con derecho a roce?
Lily.
Lily Rio.
Esta bien, esta bien -Angelica ato un pergamino a la pata de Evan-. ¿Que le has escrito?
Que ardes en deseos de verle -dijo Angelica riendo.
No serás capaz.
Uy, que no -dijo Angelica soltando a la lechuza.
¡No! Angelica Marie te juro que si lo has escrito no te vuelvo a hablar en la vida -dijo Lily intentando coger la lechuza.
Angelica rió.
Vale, estate quieta -dijo cogiendo a Lily para que dejara de saltar-. Le he dicho que nos veríamos mañana y que si coincidíamos que ya comeríamos juntos.
¿Quieres que coma con él?
No, la verdad es que prefiero que comas en una mesa aparte.
Lily alzo una ceja.
Pues eso haré.
Que tonta eres. No hace falta que hables con James o con Sirius, hablas conmigo y con Remus y ya.
Lily suspiro.
Como quieras.
Genial -dijo Angelica abrazando a su amiga.
o.O.o
Angie, hemos llegado -dijo una voz femenina.
Angelica asomo la cabeza desde su habitación.
Ah, genial.
Angie-gie -dijo una voz infantil.
Angelica salió de la habitación a recibir a su hermana pequeña. Andaba como un patito y sus rizos rubios se movían al compás de sus piernas.
Hola, princesita -dijo cogiéndola en brazos.
Buuu... Tu no vinis con nosotros -dijo la pequeña haciendo pucheros.
Lily salió del baño.
Ey... Ally... -dijo Lily acercándose a la pequeña
La niña alzo la vista y miro a la pelirroja.
¡Liii! -dijo Ally.
Ven aquí -dijo Lily ofreciéndole los brazos. Ally se colgó de su cuello-. Pero, como has crecido.
¡Lily!
Hola, señora Combs -dijo Lily tímidamente.
¿Cómo es que estas aquí? -dijo abrazando a la pelirroja.
Bueno...
Le dije que o se venia o no le volvía a hablar -dijo Angelica.
Lily sonrió.
Ya sabe como es Angie...
No me hables de usted.
Lily se ruborizo ligeramente dejando a Ally en el suelo.
Señod patataaaa -Ally salió corriendo en dirección al salón.
¿Estas cómoda?
Si, claro que si -dijo Lily con una sonrisa.
Me alegro, entonces os dejo chicas que tengo que darle de cenar a Ally.
Lily entro tras Angelica en su habitación, se sentó en la cama cerca de la venta y Angelica en la de en frente.
Ally esta echa una monada.
Angelica rió.
Si, además ahora dice que es un pato, por eso anda así. Ten cuidado por las mañanas porque te despierta a lametazos.
Lily miro sorprendida a Angelica.
Bueno... Será como estar en casa, mi perro hace lo mismo.
Ya, pero en este caso será mi hermana.
Lily rió.
Esta bien.
¿Habéis cenado? -dijo la voz de la señora Combs desde la cocina.
Si, comida china. Hay restos en la nevera. ¿Y papa?
Le han llamado del ministerio, quizás lo veas antes de irte.
Vale. Últimamente siempre tiene trabajo -dijo Angelica frunciendo el entrecejo.
¡Gatito! -dijo Ally entrando en la habitación-. Gatito bonito... -dijo acariciando el gato de Lily.
¿Te gusta?
Shi... Es muy bonito.
¿Sabes como se llama? -Ally en respuesta parpadeo los ojos y Lily sonrió-. Pelusa.
Pedusa -dijo cogiendo al gato-. Pedusa, pedusa -y salió corriendo de la habitación con el pacifico gato en brazos.
Angelica miro a Lily.
¿Sigues sintiendo algo por Ben?
¿Eh? -dijo Lily saliendo de su ensimismamiento-. ¿Ben? -Lily sacudió la cabeza-. Ben y yo terminamos en Junio, ya lo tengo superado -dijo Lily con una falsa sonrisa.
A mi no me mientas.
Lily suspiro.
Es que lo que siento por Ben es algo raro en este momento.
Sigues enamorada de él.
Yo... No lo sé.
.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.--.-.-.
Y... Aquí se acaba el primer capitulo de este fic, no es lo mejor del mundo... Lo se, pero es algo para empezar n.n Espero que les haya gustado y eso... El capitulo se llamará "Who's that girl?", bueno aquí les dejo un pequeño adelanto de lo que pasará...
Adelanto:
-¿Ben? -pregunto Lily mirando al chico.
-Pero si esta aquí mi pequeñina –dijo el chico abrazando con fuerza a Lily.
-¿Quien soy? –susurro una voz masculina en su oído haciendo que a Lily se le pusiera la piel de gallina.
-Potter, suéltame –dijo Lily de mal humor.
-Así que tu eres Lisa -la chica asintió sonriente-. Yo soy Angelica -dijo Angelica acercándose a ellas
