Saludo a la comunidad Fanfiction con el mismo gusto de siempre. De nuevo comparto una nueva historia, ésta vez viene siendo el primer Crossover que escribo. Aunque está en modalidad Regular, la película en cuestión no aparece en la lista sugerida por fanfiction.
Antes de iniciar el relato quiero agradecer a Panzermig por haberme prestado a su Oc en ésta historia.
Hace 36 años el mundo conocía a un nuevo dirigente que supo dejar huella en el marco de la historia; este fic (que es la continuación de Media Luna) lo encamino un poco distinto a las otras historias escritas debido a que en ocasiones necesitamos ver hacia el interior de nosotros y encontrar aquello que nos haga estar de pie ante las pruebas de la vida.
En el volumen dos de Transformers Unlimited, sin pensarlo di algunas pistas; los nombres que se eligieron "no fueron producto de la casualidad". Esperando no causar incomodidad por la forma en que será abordada la historia y respetando el libre albedrío iniciamos éste viaje; determinando algunos aspectos:
Crossover: Fic Media Luna (Eagle Primecee) con la película Karol de Giacomo Battiato.
Autor Musical sugerido: Ennio Morriconne.
Shadowblaster/Whilhelm Friedrich von Stauffenberg No me pertenece; es un Oc propiedad de Panzermig.
Transformers no me pertenece, son propiedad de Hasbro y Takara. Sólo soy dueña de mis Oc's.
DE MEDIETATE LUNAE, DE LABORE SOLIS
Año 1967
Era una mañana fría que iluminaba a Polonia, el invierno empezaba a caer. La población polaca trataba de asimilar su nueva vida, aunque el decir la palabra "nueva" estaba demás. Una nación que había sufrido los embates de la segunda guerra, el ver morir a aquellos polacos que defendieron con su vida su patria; habían causado huellas imborrables.
Los niños procuraban sonreír y disfrutar lo propio de su edad, corriendo por las calles empedradas.
Sin embargo, en un pequeño departamento cuya ventana daba hacia la calle; una "pareja" permanecía observando los alrededores. La mirada de ambos denotaba una nostalgia.
Él hombre media un metro ochenta, podría notarse que era de nacionalidad alemán, de cabello castaño al igual que sus ojos. Podría notarse que en su momento fue un militar de alto rango, sin embargo no portaba un uniforme, vestía como civil. La mirada del hombre estaba pérdida; en ocasiones miraba a los niños que jugaban por la calle como a su vez levantaba su mirada hacia el cielo, buscando una respuesta.
La mujer que estaba con él se da cuenta de la tristeza de su "compañero"; era una mujer de un metro sesenta y cinco; toda una mujer polaca, aunque sus ojos eran azules como zafiros, su cabellera era larga y negra; sin embargo aunque vestía también de civil; comprendía el dolor de su compañero.
-¿Sigues pensando en él verdad? – preguntó la mujer con mesura.
-Sería un mentiroso si te digo que no. –Expresó el hombre con melancolía.
-Te prometo amigo mío que todo esto se aclarará.
-¡Eso es lo que quiero! –Expresó el alemán en un tono desesperado – ¡Llevamos 22 años en éste lugar y no hay nada!
La dama coloca sus manos en el hombro de su amigo.
-Nuestros enemigos creen que estamos muertos, ¿ya lo olvidaste Whilhelm? –Expresó con cierta dulzura la mujer de cabello negro.
-Pero tú tienes una misión específica, yo sólo viene con engaños…
-Al igual que tú; pero no por ello perderemos lo que la vida nos da.
-Creo que el estar con Lólek te ha cambiado mucho. –Expresó con una cierta sonrisa el alemán.
-No soy la única, y lo sabes. –Expresó la polaca con la misma sonrisa. – Creo que debemos cambiar nuestra actitud; ya que tendremos visitas.
Las dos personas habían visto a tres figuras conocidas que habían entrado al edificio, de inmediato deciden arreglar el pequeño comedor con el que contaban como a su vez el alemán ayudaba a colocar parte de la vajilla.
Los golpes de llamada en la puerta no se hacen esperar, Whilhelm se acerca y decide dejar entrar a los tres que llegan.
-¡Es un placer verte de nuevo Whilhelm! – Expresó un hombre de cabello rubio y tez blanca, de ascendencia polaca.
-¿Por qué no avisaste que el Tío Whilhelm estaría de visita? – Expresó una joven de alrededor de 20 años.
-Emilia, mamá tiene sus razones. –Expresó un joven de la misma edad.
-Es un placer que vengas de visita Lólek. – Mencionó la mujer de cabello negro mientras colocaba el desayuno en el comedor.
-Ya conocen cómo es mi vida. –Dijo Lólek emitiendo un suspiro, pero procuro darme tiempo para visitar a la familia; ¿no es así?
-Desde que fuiste nombrado cardenal tu trabajo se ha intensificado, pero noto que los soviéticos están tras de ti. – Intervino Whilhelm.
-Descuida amigo, no me preocupo por ello; mi conciencia está tranquila. He visto cosas peores. –Respondió Lólek con una sonrisa.
El polaco hace una pausa y observa cuidadosamente la escena: Un alemán, Una polaca, dos jóvenes con facciones polacas…
-Veo que en el tiempo en que los he conocido no pasan los años con ustedes. –Habló Lólek en tono animado.
-Ya vez como es esto: una vida tranquila te hace llevar una longevidad más aceptable. –Expresó el alemán.
-Veo que Silvia te ha ayudado a mejorar tu lenguaje; cuando te conocí hablabas solamente alemán. –Expresó sonriente el polaco.
-Hacemos lo que se puede, Lólek. –Dijo con cierta timidez la polaca.
En un lugar muy lejano (o a varios años luz)
Cybertron permanecía en cierta calma; como en toda civilización no faltan las confrontaciones, disgustos u anomalías; pero en sí, procuraban llevar relaciones armónicas.
Bumblebee junto con Bulkhead estaban a cargo de algunas misiones, ya que Optimus Prime últimamente no había entrado en combate. Al parecer una mirada dolorosa se expresaba en sus ópticos.
Optimus permanecía encerrado en su oficina, miraba algunas fotografías, como a su vez buscabainformación sobre un proyecto que en su momento se había considerado como "Clasificado".
Sin embargo, un mecanismo decide entrar a su oficina.
-Optimus… -Expresó titubeante el mecanismo.
Prime voltea lentamente y observa que su viejo amigo Ratchet estaba en el interior.
-Amigo mío, no estoy de humor para llenar informes. –Expresó el Prime con molestias.
Ratchet finge no haber escuchado nada y como en una actitud infantil, decide cerrar la puerta con seguro y empieza a buscar si había algún dispositivo oculto en la oficina. Prime conocía su amigo y cuando actuaba de esa manera, significaba que había algo grave.
-Optimus, Alpha Trion quiere verte. –Expresó el médico.
-¿Por qué yo? ¿Acaso Sentinel no está disponible? –Dijo el Prime con cierta ironía.
-La situación es más complicada de lo que crees; como a su vez reunirá a "otros".
-¿Podré llevar a la gente de mi confianza? –Expresó el Prime.
Ratchet asiente.
De inmediato el Prime sale con cierta discreción junto con Ratchet hacia el lugar donde los esperaba Alpha Trion.
Optimus decide que por seguridad, comunicarse con Bee y Bulkhead por medio de un código encriptado para que ambos lo alcancen.
Empezaba a oscurecer, un edificio que estaba "abandonado" sería el escenario en donde Optimus y su equipo se encontrarían con Alpha Trion. Los mecanismos proceden a transformarse, como a su vez de entre las sombras aparece el viejo mech. Los cuatro mecanismos hacen una reverencia.
-Saludos amigos, gracias por atender al llamado. –Expresó con gentileza el viejo mech. – El motivo por el cual los cité se debe a una misión que en su momento fue clasificado.
El viejo mech se interrumpe y observaba a los lados.
-¿Sucede algo malo señor? – Expresó el Prime.
-Veo que no los han seguido. –Emitió el anciano. – Pero temo que esto no es sólo exclusivo de los autobots. Necesitaremos la ayuda de alguien que ustedes conocen. –El mech desactiva sus ópticos por unos instantes. – Ya puedes salir.
De entre las sombras, un mech de aspecto gris y oscuro salía; los tres que acompañaban al Prime estaban sorprendidos, sin embargo Optimus sentía una ira al verlo.
-¡Megatron! ¿Por qué él? – Expresó con rabia el Prime.
-Creo que después de todo no fue buena idea Alpha. –Expresó el decepticon mientras sacaba su arma para defenderse.
Alpha Trion utilizando sus dones místicos logra detener a ambos.
-¡No tengo tiempo para sus acciones inmaduras, los necesito a todos! –Expresó con cierto reproche Alpha Trion.
Sin embargo, en el piso donde se encontraban empieza a abrirse y una especie de elevador surge de él.
-Si quieren conocer de qué se trata todo esto les sugiero que entren. –Expresó el anciano.
Optimus y Megatron por ciertas razones estaban incómodos al igual que los mismos autobots; pero no tenían alternativa.
Una nueva misión estaba por plantearse.
