By DARLA ASAKURA
Capitulo 1
Conociendo a Cupido
Hola, supongo que debo hacer esto como una especie de presentación a mí misma, "Claro que sí, como si nadie me conociera, como si fuera precisamente el tipo de persona que pasa desapercibida", por si no entienden, lo que acaba de pasar es que mi conciencia nuevamente a tomado el control y me ha gritado lo que siempre me digo a mí misma, cuando estoy sola: Luna, tú estás bien loca!. Lo cual no es cierto, vale la pena aclarar. Ahora sí, por donde iba... ah, sí... ante ustedes: Luna Lovegood, "la chica más loca que existe en Hogwarts"... no, no, no... ya basta. Quiero decir... soy Luna Lovegood, la nueva cupido de Hogwarts... o más bien la única que ha existido. Según mis investigaciones, Hogwarts, renombrado colegio de Magia y hechicería, nunca antes ha contado con el servicio que yo ofrezco y que sinceramente ya necesitaba con urgencia. De eso me doy cuenta, y creo que nadie más lo ha hecho... lo cual me parece extraño, porque es sumamente obvio.
Voy como siempre perdida en mis pensamientos, como la mayoría creen... sólo porque piensan que no veo más allá, pero la verdad es una sola... y mi verdad es que me distingo por ser la mejor actriz del mundo, jiji... bueno, estoy exagerando, porque no mejor les cuento.
-Ahí viene, Lunática-
-Hey, Lunática... lindo collar de perlas.-
Dos chicos de Slytherin me ven con desprecio y me gritan, al cruzar el vestíbulo para desviarme hasta el gran comedor, son dos mini gigantes... y los he visto antes, bastantes veces por cierto, ambos son golpeadores del equipo de quidditch, me encanta el quidditch, soy una fanática soberbia... siempre que me ven, no hacen otra cosa más que molestarme o intentarlo, porque sinceramente me tienen sin cuidado, los fallidos intentos de insultos de ese par de gorilones. Los miro un instante, y decido que siguen sin valer la pena, no así, el chico que viene con ellos. Rubio, alto, y con esa mirada, fría como el hielo de los glaciares... hay muchas cosas que no conozco, pero al ser una marginada de la sociedad estudiantil, he estudiado mucho el comportamiento de las personas que me rodean, aun cuando ellas piensen lo contrario, "que no me entero de nada y que vivo en otro mundo, junto con las criaturas mágicas de mi propia invención", sí, esta vez, mi conciencia no se equivoca, eso piensan ellos, pero no es cierto, eso sólo es otra más de las pruebas que me gusta llevar a cabo, diariamente, para ver... si encuentro a alguien que valga la pena. Hasta ahora no he tenido mucha suerte con mis pruebas, sólo he encontrado a tres personas con las que me llevo bien... "querrás decir que no te dicen en tu propia cara lo que piensan de ti"... ¿ya les dije que no deben hacer mucho caso a mi conciencia?, ella sí es mi parte maniática... las personas de las que les hablaba, son bastante diferentes, como yo... por eso me identifico con ellos, una es mi mejor o más bien única amiga... Ginny Weasley, ella es encantadora, los otros dos son dos chicos sumamente especiales, Gryffindors ambos, pero bien diferentes los dos, tanto o más como la nieve y el fuego, el día y la noche, Ginny y yo... el primero es un dulce y tímido muchachito de rostro ya no tan regordete como antes, cuyo nombre es Neville Longbottom, antes me tenia miedo, ahora... me he ganado un poco de su confianza y el otro, pues es nada más y nada menos, que el mismísimo Harry Potter. Claro que así como van las cosas, debería incluir a otra persona más, dentro de esos sujetos de prueba, se trata de este mismo muchacho, con el que me topé hoy, el de mirada fría y penetrante, de rasgos afilados y cabello lacio, de un rubio platino increíble, líder de los dos gigantes y buscador de la casa Slytherin... su nombre es Draco Malfoy.
Al escuchar lo que sus amigotes dicen en mi contra, el rostro de Malfoy, se da vuelta hacia donde los otros dos miran, y por una fracción de segundo sus ojos tan grises como el mercurio líquido se cruzan con los míos, él nunca dice una sola palabra ni en mi contra ni a mi favor y a mí me basta con eso. Siempre me mira como si estuviese al tanto de que mi locura es una farsa, y en aquel instante, como en muchas otras ocasiones, al observar sus arrogantes facciones que le dan cierto aire aristocrático, llego a la misma conclusión; él, el chico que le ha hecho deliberadamente la vida imposible a el-niño-que-vivió, desde el primer curso; él, Draco Malfoy, era quizá la persona con quien más semejanzas tenía. Por eso se callaba, por eso no decía nada... por eso, por eso mismo, pretendía hacerle creer al mundo, y a mí misma, que no tenía conocimiento de mí existencia, en lo absoluto.
- Luna-
Una voz cantarina llegó a mis oídos, antes de terminar mis pensamientos sobre aquel rubio. Al darme vuelta me encuentro con los ojos azules de Ginny, que me llama, desde la entrada al gran comedor, sigo mi camino desechando mis anteriores pensamientos, para unirme a la hermosa pelirroja, que de inmediato intenta asfixiarme con un abrazo especialmente caluroso.
- Vamos, Lunita consentida, colgada del cielo ... hoy te sientas conmigo.-
Dijo Ginny al separarse de mi atormentado cuello.
- Ginny, si recuerdas que vamos a casas diferentes, no?-
Intenté hacerle ver, sobretodo porque no todos los Gryffindors eran tan amables como ella.
- Pues claro tontita¿y eso qué?... ¿acaso un águila y un león no pueden ser amigos?
Me replicó la voluntariosa pelirroja, halándome al interior del Gran Comedor.
- Pues...-
Iba a ver si podía responder, cuando me sentí arrastrada hasta la mesa de Gryffindor.
- Hola Luna-
Me saludó Neville, apenas vio que llegaba en compañía de Ginny. Debo reconocer que el tiempo estaba haciendo maravillas con aquel chico, cuyos anteriores rasgos infantiles habían desaparecido por completo, cediéndole el paso a unos, mucho más masculinos, abrí la boca para responder, pero me vi, nuevamente interrumpida por mi querida amiga, cuyos ojos azules, brillaban aun más, en su pecoso rostro.
-Hola Neville, hazte para allá, Ron... ¿Cierto que no hay problema si nos sentamos aquí?-
Dijo Ginny, con lo ojos aun más brillantes que antes, sonriéndole a Neville al tiempo que me obligaba a sentarme entre ella y su hermano, quedando frente a frente con Hermione Granger.
- No ninguno, éste... ¿chicos? -
Preguntó Neville, en un gesto tímido y rehuyendo de la mirada azul e intensa de la recién llegada pelirroja.
- Yo no tengo problema-
Indicó Ron, entre bostezos que dejaban ver, que aun tenía sueño, mirándome de reojo.
- Ya daba eso por hecho, hermanito-
Declaró Ginny, con voz helada. Sin dejar de ver a Neville.
- ¿cómo vas, Lovegood?-
Se escuchó decir a la castaña frente a mí, habían cosas que particularmente no me gustaban de ella, la primera o la más importante quizá, era que siempre creía tener la razón y la segunda era la forma en la que me miraba, como si le hubiera robado algo.
-Ah..., como siempre Granger-
Dudé un poco antes de contestarle, pues Draco Malfoy y sus guardaespaldas, pasaban justo en ese momento detrás de la chica, pero para sorpresa de todos, el rubio ni siquiera abrió la boca, es más no dirigió a la mesa una sola de sus despectivas miradas, sólo continuo su camino directo hasta la mesa de Slytherin y se sentó allí, en silencio.
- ¿Qué le pasará?-
Murmuró Neville en un susurro.
- Estará enfermo-
Se encargó de aclararle Ginny, con una sonrisa de oreja a oreja.
- Debe ser así, nunca antes ha perdido la oportunidad de molestar-
Eso no siempre era cierto, no conmigo, pero Ron parecía seguro y yo no quise ponerle en entredicho con nadie. Así que como siempre, guardé silencio. Preferí fijarme en las actitudes de las personas que tenía a mi alrededor, y encontré cosas que me sorprendieron, Ron tenía los codos sobre la mesa y evitaba fijarse en nada en especial, parecía sin ánimo y alicaído. La castaña frente a mí, estaba más seria de lo acostumbrado, tenía el entrecejo fruncido y no había probado bocado, sólo se limitaba a mirar a Ron con tranquilidad forzada. Mientras tanto Neville parecía ausente, aunque intentaba hacer conversación de cualquier cosa, pero nadie más que Ginny le contestaba, sin quitar aquella sonrisa de su agraciado rostro. Y fue entonces que me di cuenta, aun hacia falta alguien en el cerrado grupo de amigos¿dónde rayos estaba Harry Potter?
GRACIAS POR LEER...
Att.
DARLA ASAKURA
