Capítulo 1 Soy Elio
y así me llaman mis amigos, o al menos lo hacían. Y voi a contar la historia de mi vida. El principal motivo de estar escribiendo esto en el papel es para intentar relajarme, y pensar que no estoy solo. Esta historia se remonta a mi infancia, a una bella época de mi vida, en la que pase grandes momentos y grandes males, y a un lugar posiblemente bastante lejano para ti, pero no me dejan ni pronunciarlo.
En mi hogar vivimos mis padres, mis abuelos maternos, mi hermano y yo. Pero además, tenía de familia a unos tíos los cuales yo amaba, y pasaba mucho tiempo con ellos, porque eran los únicos tíos míos que vivían en mi misma localidad: mi tío abuelo, hermano de mi abuela, sus hijas, es decir, mis tías, que a pesar de estar solteras, tenían una hija cada una, mis primas. Pero si eres malo recordando nombres, no te preocupes, solo tendrás que recordar el mío, el de mi hermano, Idro, el de mi tío abuelo Clow, y el de mis dos primas, Alba y Flor, que aun eran muy pequeñas. No necesitaras recordar los demás, pero aquí te los dejo:
Roy: padre
Marta: madre
Juan: abuelo
Ana: abuela
Sara y Flor: tías
A lo importante, yo soy una persona inteligente, y no inteligente de saber resolver un puzle, sino inteligente de saber manejarme en todas las áreas de la ciencia y su investigación, en especial la mecánica, porque por muy bien que se te de una cosa general, se te tiene que dar mejor una rama que otra. Para mi no es difícil entender el mecanismo de una bicicleta y copiarlo, con solo 4 años ya lo intente, pero los materiales que use no eran muy resistentes. Y si deciis que no es para tanto es porque no me has visto manejarme. Pero no me sobra el tiempo, mi hermano Idro es también muy hábil, y su especialidad es la informática, aunque también sabe reparar todo lo que pilla, ya tenga o no que ver con la electrónica. Yo como era muy inocente, me monté un laboratorio casero en mi sótano, que aunque no abarcaba a mucho con el presupuesto, se las arreglaba uno perfectamente. ¡Y con mis habilidades mejoré un microscopio que tenia una capacidad de amplificar unas 250 veces hasta que llegó a las 700 veces! Al ver que funcionaba, y creedme que funcionaba, supe que podía hacer grandes cosas.
Crezcí un poco, y mi laboratorio también. Poco después diseñe uno de los mejores diseños que jamas había hecho, una mano mecánica. Se que suena ridículo, pero tenía 3 veces mi fuerza y podía disparar bolas de plástico de las que se usaban para el airsoft. Y como quería ahorrar para el laboratorio, pues, no compraba bolas, las cogía del suelo de un campo donde se jugaba al airsoft en mi localidad. Con el tiempo mejoré mi artilugio, y empezé a investigar como solventar el problema de la energía en el mundo, ya harto de tantas campañas de concienciacion de ahorro de energía, que pienso que son un esfuerzo en vano. Y en vano tambien fué mi investigación. ¿Cómo podría yo haber pensado que seria tan facil solventar un problema tan actual como es la energía? Fui un tonto. Durante todo este tiempo mi hermano tambien se puso al día e hizo un par de invenciones, que en gran parte iban destinadas a ordenadores, microprocesadores defectuosos e hiperrendimiento de máquinas y componentes electronicos