Mucho gusto, lectores. Rossana's Mind a su servicio. Me llamó la atención este juego hace un tiempo, más que por el juego en sí, me llamó la atención su historia o las teorías que se trae. Simplemente me gustan historias así, bueno, el summary dice todo, aunque si tienen dudas, pueden preguntarme o algunas se contestarán aquí…
Es decisión de ustedes este One-shot, puede convertirse en un fic, lo que sí, uno MUY largo, porque uniré los tres juegos en una sola historia, o un simple One-shot, pero les advierto una cosa, tengo muchas historias pendientes, por lo tanto, me demoraré muchísimo en actualizar, así que ténganme paciencia en caso de que quieran que esto se transforme en un fic, bueno, sin perder más tiempo…
VAMOS!
DISCLAIMER: Five Nights at Freddy's NO me pertenece, tampoco los futuros personajes "Frank" y "Lisa". Solo "Amy" es de MI propiedad.
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Más Vida.
Apoyó los codos en sus pequeñas rodillas y reposó su cabeza en las palmas de sus manitos. Suspiró con aburrimiento. De verdad no encontraba nada divertido en una empresa, no podía entender cómo sus padres no se morían de aburrimiento. La habían traído al trabajo porque le tenían una sorpresa, solo esperaba que no fuera un lápiz, ya tenía suficientes…
— ¿Estás muy aburrida, Amy? — Escuchó la voz de un hombre joven.
La niña de diez años giró suavemente su cabeza para mirar al hombre.
—… Hola, Scott. — Saludó tras soltar un bufido.
— No te deprimas, estoy seguro que tus padres te tienen una sorpresa tremenda.
— Sé que apoyan un restaurante, pero no le veo el chiste. — Hizo un puchero molesto. Scott se rió y acarició su cabello castaño que le llegaba hasta los hombros.
— Te encantará, lo prometo. — Los ojos mieles de la niña se fijaron en él. — Además, serás perfecta para la prueba.
—… ¿Prueba? — Repitió. Él solo atinó a sonreír.
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Entró a una sala con ventanales grandes donde sus padres la miraban expectantes. Ella no dijo nada, estaba nerviosa. No sabía a qué había venido… Hasta que se quedó de piedra cuando vio un oso, un ¿pollito? Un zorro y un conejo que la miraban con curiosidad. Se acercó tímidamente a ellos sin comprender. Escuchó la voz de su madre en el parlante.
— Muy bien, linda. Te presento a tus nuevos amigos. — Miró el ventanal de reojo. — Él es Freddy. — Señaló al oso. — Bonnie. — Señaló al animatrónico más oscuro. — Chica. — Señaló al amarillo. — Y Foxy. — Finalmente apuntó al que tenía un parche en el ojo. — Están hechos para jugar contigo, princesita. — Amy miró a sus padres a través de la ventana. — Deben hacerte feliz y cuidarte, ¿comprendes?
Ella asintió y dirigió su vista a los sujetos. Todos la miraban fijamente, esperando algo de ella.
—…— Se acercó a Chica primero. — Hola. — Sonrió. — Me llamo Amy.
— Amy. — Repitieron los cuatro al unísono, haciéndola reír un poco.
— ¡Vamos a jugar!
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Luego de unas horas, Scott se acercó a ver a la pequeña cantando con Freddy mientras Bonnie tocaba la guitarra y Chica el teclado. Sonrió, la prueba había sido casi un éxito. Miró al otro animatrónico que observaba sentado en silencio las acciones de la niña. Se preguntaba por qué no se movía o interactuaba con Amy, hasta la misma niña lo notó. Dejó de cantar y saltó del regazo de Chica para mirar al zorro. Lo observó detenidamente a los ojos.
—… ¿No puedes jugar?
— Foxy no puede jugar con princesas. — Habló. — Podría causar daño. — Amy se sorprendió, pero luego infló sus mejillas, molesta.
— ¡Yo no soy como esas princesas! — Protestó. — Yo soy valiente, y se pelear. ¡Soy una princesa pirata! — Infló su pecho en orgullo. — Juguemos juntos. ¡Busquemos el tesoro!
Foxy siguió en silencio hasta que se levantó cuando Amy le jaló su única mano.
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Amy fue la primera niña que conocieron de cerca y la amaron al instante, así como ella a ellos. Se había divertido, sin bien también tenía amigos en la escuela, también era feliz interactuando con ellos en los trabajos de sus padres, también podía compartir con ellos. Todas las tardes después de la escuela iba a visitarlos, iba a cantar con Freddy y Bonnie, cocinaba, o al menos intentaba acompañada de Chica, y también corría, saltaba y revoloteaba por todos lados con Foxy. Si había algo que le encantaba era hacer actividad física.
—… Solo le falta escalar las paredes. — Se rió Scott, observando a la niña que ahora trataba de recuperar el aliento sentada en el regazo del zorro. Su teléfono sonó y contestó. — ¿Diga? ¿Ya está firmado el contrato?... Bien… Muchas gracias.
Suspiró. Si había algo que lo alegraba era ver a Amy jugar todos los días. La quería como su hija y de verdad que le resultaba triste hacerle esto. Entró al salón donde jugaba, llamando la atención tanto de ella como la de los animatrónicos.
—… Amy, necesito decirte algo. — La menor solo tendió a bajarse y acercarse a él. Tenía las mejillas rojas de tanto correr. —… Escucha… Me temo que ya no podrás jugar más con tus amigos.
El rostro de la niña mostró tal shock que al hombre le pareció que se había vuelto una estatua.
—… Sé que es difícil, pero… Hicimos un contrato con un restaurant. Les prestaríamos a Freddy y a los otros para tener… Mayor atención, ¿comprendes? Además, la interacción contigo fue un éxito, pero hay que programarlos para que tengan que hacer lo correcto en el momento PRECISO.
—…— Sus ojos se llenaron de lágrimas, pero no dijo nada. — ¿Cuándo se van?
— La próxima semana. Pero no te preocupes. — Dijo rápidamente al verlo derramar lágrimas en silencio. Tenía una triste mueca tratando de evitar sollozar. — Anímate, Amy. Podrás verlos en el restaurant.
—… ¿Y si no me reconocen?
— Claro que lo harán, no alteraremos sus sistemas, y tú aportaste en ello, así que, no te preocupes. No te olvidarán.
Amy usó la manga de su suéter para limpiarse la cara de tantas lágrimas. Asintió y suspiró. Scott le acarició la cabeza hasta que decidió dejarla sola en el salón. La castañita se acercó a los animatrónicos y se sentó en las piernas de Freddy.
— Amy no se ve feliz. — Notó Foxy.
—…— Suspiró. No le gustaba llorar, así que trató de calmarse lo mayor posible. — Ustedes se irán pronto… A otro lugar.
Si bien ella no entendió mucho las palabras de Scott, eso fue lo único que comprendió. Que sus amigos se irían. El silencio que surgió en la habitación no le gustó, pero no dijo nada.
—… No me gusta la idea. — Habló finalmente el zorro. Chica asintió, dándole la razón.
— ¿Por qué? — Preguntó Freddy, pues si bien estaba en desacuerdo, quería saber las razones.
—… No estoy segura. — Miró a Bonnie unos segundos. — Quieren llevarlos a otro lado para que los miren. Para llamar la atención. — Repitió las palabras del amigo de sus padres.
— ¿Es obligatorio? Porque no queremos estar lejos de ti. — Dijo Bonnie. Amy asintió.
— Lo es… Pero me dijeron que podré verlos.
— Entonces no tienes que ponerte infeliz. — Dijo Foxy como si fuese lo más obvio del mundo. Y Amy le dio la razón, los podría ver, no como antes, pero no tenía que ser tan sensible.
— Sí. — Sonrió.
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Fredbear's Family Diner.
Eso decía. Así se llamaba el lugar. Los animatrónicos tuvieron que entrar y recorrieron el lugar en que tenían correspondido moverse solamente. Cuando los dejaron a los cuatro, se sorprendieron de dejar a otro igual a Freddy, solo que este era dorado. Cuando cerraron la puerta y el sector, Freddy dirigió sus ojos al sujeto que era igualísimo a él.
—… ¿Estás despierto?
Sus ojos se abrieron, dejando ver que también eran dorados. Miró a los cuatro con cierta indiferencia y aburrimiento.
—… Golden Freddy. — Se presentó.
— Freddy.
— Bonnie.
— Chica.
— Foxy.
El dorado asintió y miró el techo.
— ¿Cuándo te hicieron?
— No sé. — La verdad era que no le importaba, de repente abrió los ojos y listo. Sabía que solo en ocasiones especiales debía salir y lo aceptaba, no era su virtud ser muy social.
— ¿Interactuaste con Amy? — Preguntó Foxy. Golden asintió.
— Le salía aceite de los ojos.
El resto no comprendió en un principio. Pero luego comprendieron que en realidad Amy estaba llorando.
— ¿Por qué?
— Porque están aquí y porque no está la creadora.
¿La creadora?
Si bien entendieron, quienes los construyeron fueron los padres de Amy.
¿Qué significaba eso?
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— ¡Nooo! ¡Mamaaaá! — Gritó por sexta vez la niña siendo abrazada por Scott.
Vaya, que la vida era cruel con ella, pensó el hombre. Amy había sido llevada a la empresa para interactuar con el nuevo animatrónico, Golden Freddy, pero cuando sus padres estuvieron en una conferencia por sus grandes logros en otro sector, cuando se devolvían, sufrieron un accidente automovilístico. Su padre estaba realmente grave, no estaban seguros si lograría salvarse…
Y su madre…
— ¡Prometiste que no me dejarías sola en las noches! — Chilló Amy. Las lágrimas no dejaban de salir, estaba devastada. No podía. El dolor no cabía en su cuerpo tan pequeñito. Temblaba con violencia en los brazos de Scott. Los escalofríos recorrían todo su ser, la sensación era desagradable con el hielo de la realidad.
Simplemente, el ver el cadáver de su madre ser llevado por los paramédicos le había congelado la sangre.
Su padre estaba GRAVE.
¿Y si él tampoco se salvaba?
Continuará…
Supongo que lo haré fic, es decir, por qué no? Meh
Siempre pensé que hubiese sido bueno que los personajes tuvieran una conexión primaria con un niño, en este caso, con Amy, antes que con todos los demás, es por eso que hice esta historia, además, los conflictos se vienen con el asesinato del niño, la mordida, la marioneta, el hombre púrpura, ya saben, esas cosas
Otra cosa que acatar, Scott es el sujeto del teléfono, así que lo veremos muy seguido, no han notado que a pesar de haber sido asesinado hablaba de una forma muy cariñosa de los animatrónicos? Bueno, en el fic, es así porque los conoce desde que fueron construidos, son recuerdos de los padres de Amy, que eran cercanos como una familia y que Scott ama a Amy como a una hija. Él será su pilar de apoyo en el futuro.
También aparecerán los guardias nocturos, Mike, Jeremy y el otro que ahora no me acuerdo cómo se llama XD
Además, Amy crecerá, los eventos del primer, segundo y tercer juego, ella estará presente, por lo tanto el amor que le tienen los animatrónicos evolucionará de forma distinta en cada uno, pero me centraré especialmente en Freddy, Bonnie, Chica y Foxy. Cada uno la amará de distinta forma
Amor fraternal
Amor de amigo
Amor maternal
Amor romántico
Sip, uno de ellos la amará por la mujer que se convertirá en el tiempo, pues, como dije antes, Amy crecerá con nuestros personajes
Espero que les haya gustado, no olviden dejar reviews para opinar al respecto!