5 años después de Hogwarts
NOTA: Este fanfiction no tiene ningún tipo de Spoiler ya que la Autora (N/A: Mejor dicho, Yo =)) no ha terminado de leer el 5to libro de Harry Potter "La Orden del Fénix" así que lo que diga que paso en su 5º grado en Howgarts fue invención mía (xDDD)
Los personajes, como ya saben, desgraciadamente no me pertenecen y por último espero que disfruten este Fic.
Autoras: Pechocha193 (anteriormente) pechochainhotmail.com
Juliette Snape juliettesnapehotmail.com
Capitulo 1: Los recuerdos que nunca se borran
Ahí, en un restaurant un muchacho de 22 años, cabello azabache rebelde y ojos verdes esmeralda se encontraba sentado tomando café y recordando su niñez...
A los 11 años de edad había descubierto que era mago e hizo a sus 2 mejores amigos, Ron Weasley y Hermione Granger; a los 12 casi muere por culpa de un mago tenebroso, Voldemort; a los 13 supo que tenia familiares(aparte de sus tíos odiosos), supo que tenia padrino; a los 14 Voldemort recupero todas sus fuerzas y en ese mismo curso su compañero Cedric Diggory pereció en la ultima prueba de los 3 magos, la cual se salio de control al ultimo momento; a los 15 supo que era el heredero de Gryffindor y, por ello, tenía poderes sobrenaturales al igual que todas las generaciones de los Potter pero al no poderlos controlar muchas personas murieron; a los 16 casi derrota a Voldemort pero no lo consiguió; a los 17 finalmente descubrió que estaba enamorado de su mejor amiga Hermione Granger.
En el restaurant había una música suave y calmada que le hizo que, al recordar su niñez y adolescencia, embozara una sonrisa de nostalgia.
Los viejos tiempos...que maravilla de sucesos que en el pasado habían dejado una huella imborrable de la mente y alma de Harry Potter, especialmente desde su 5º curso, donde en el transcurso de este, el trío se unió más, especialmente entre la joven de ojos castaños y el ojiverde...
La oscuridad lo rodeaba, la desesperación lo acompañaba, y la soledad habitaba en su alma. Nunca antes había experimentado ese dolor tan grande; miles de muertes por culpa de un miserable asesino y todo esto en sus manos estaba; una responsabilidad tan grande que ni el se lo podía imaginar...millones de personas tanto como del mundo mágico como del mundo muggel dependían solo de él, ¿y que hacia él al respecto?
- Nada-susurro el joven en la oscuridad de habitación donde se encontraba.
Llevaba ya más de 2 días que no salía de esa lúgubre habitación; muchos de sus compañeros trataron de animarlo para que saliera pero él ni se inmutaba y no les hacia caso...solo que...
De repente una luz ilumino sus pies...él, que estaba en la esquina al fondo de la habitación levanto la mirada de entremedio de sus rodillas para ver quien se atrevía a entrar donde él se encontraba.
- ¿Harry...?-una voz dulce y melodiosa resonó por todo el lugar, llenándolo a él de una tranquilidad que nadie más podría haber hecho.
Su voz lo reconfortaba y verla lo llevaba a las nubes...era la voz de SU ángel
La joven, que en cuanto se entero de que su mejor amigo volvió a caer en depresión fue a buscarlo rápidamente. En cuanto vio que en ese rincón, con sus manos alrededor de sus rodillas y su cara empapada de lágrimas reencontraba su amigo lanzo a abrazarlo.
Ella sabía que no debió irse y apartarse por unos días de su lado, más sin embargo ella confió en él cuado él le dijo que estaría bien
El chico, al sentirse entre los brazos de su mejor amiga se dejo llevar por el momento, su cuerpo se relajo y sintió como al sentir que ella lo abrazaba lo llevaba a la gloria.
- ¿Por qué no cumpliste Harry, Porque?-le pregunto con tristeza y cariño a la vez al oído
- Lo lamento mucho Hermi, pero al no tenerte a mi lado, como ahora, me hizo sentir solo y desdichado; pero ahora que estas aquí conmigo abrazándome, siento que vuelvo a la vida...
- Siempre estaré aquí Harry pero debes prometerme que todo lo que haz superado después de lo sucedido no lo volverás a desechar, ¿de acuerdo?
- Pero...
- ¿De acuerdo?
- De acuerdo
Con la varita en mano vio como Voldemort lanzaba el último hechizo de la batalla, ya que el Innombrable estaba MUY mal herido por los grandes poderes que el joven Potter poseía.
La maldición Cruciatus atravesó el campo donde se realizaba la batalla.
Harry instintivamente puso sus bazos cubriendo su cara pero después de unos segundos no sintió nada volvió la vista a lo que pasaba.
Ron y Hermione, que estaban a su lado, con muchas heridas y mucha sangre derramada seguían de pie, fieles a su deber, ahora se encontraban a unos cuantos metros atrás de Harry, retorciéndose en un terrible dolor.
Él se acerco fugazmente a ellos, se hinco junto a sus amigos, abrazándolos y hacerles sentir su presencia. Ron y Hermione, que nunca habían experimentado el dolor del cruciatus ahora lo vivían y era terriblemente horroroso, Harry, con ira, furia y sobre todo odio volteo su vista hacia el maldito causante del dolor de sus amigos y entonces se dio cuenta de lo que paso: Voldemort, el mago 'más poderoso del planeta' había huido como un cobarde rastrero donde un escondite en el cual Harry no lo pudiera encontrar, lugar que se encontraba a miles de kilómetros de allí, pero eso por ahora no importaba, lo que más importaba ahora era llevar a sus mejores amigos y a los demás sobrevivientes a un lugar más seguro...por supuesto, luego ajustaría cuentas con el cobarde de Voldemort.
Sus manos sudaban, su cuerpo temblaba y sus ojos se perdían en la mirada de la joven cada vez que lo veía a los ojos, al igual que en ese momento.
Sintió como su cara se sonrojaba rápidamente y como su miraba la apartaba para no quedar embelesado en su tierna mirada y en su rostro angelical.
Se volvió a concentrar en su trabajo... misión imposible.
Se paso una mano por su desordenado cabello negro azabache y se quito las gafas para volver a ponérselas, una costumbre cada vez que sentía como ella lo observaba con ternura y cariño.
Puso sus manos en su cabeza y volvió la vista a su trabajo:
Harry J. Potter Evans 7º curso
17 de Septiembre de 1997
Los basiliscos y sus ascendientes
'Los basiliscos son...'
Eso era lo que se leía en el pergamino.
Sintió como unas manos se postraban en sus hombros y una mejilla pegada a la suya, viendo lo que hacia el chico.
Harry cerró sus ojos y aspiro el dulce olor de su pelo...
- ¿Un viernes por la tarde haciendo tarea? ¡Vaya! Veo que mis influencias al fin han dado sus frutos-dijo Hermione burlonamente pero a la vez alegre
- Contigo acechando para que los estudiantes hagan sus tareas, pues quien no-le respondió el divertidamente, pero sin poner su vista en ella-Pero de todas formas, gracias
- Gracias a ti por valorarme en tu vida-dicho esto ella le dio un sonoro beso en la mejilla, claro esta seguía en la misma posición en la que estaba.
Harry solo embozó una sonrisa y dio un suspiro, el cual ella no noto. Sus mejillas estaban ligeramente sonrojadas.
- Acompáñame, como recompensa a tu responsabilidad voy a dejar que me aguantes en un paseo por el lago-dijo haciendo que el fijara su vista en su mirada
- Si esas son las condiciones, por supuesto...pero eso de aguantarte...
- Ni modo, esa es la restricción
- Si no me queda más-dijo él mientras se levantaba de su silla-andando
- Andando-dijo ella tomándolo de la mano y saliendo por el retrato de la sala común.
El sabía lo que sentía y no se arrepentía, era un hermoso sentimiento el estar enamorado perdidamente de su mejor amiga, y eso nadie se lo iba a quitar...
Pero eso fue en los viejos tiempos...la separación fue muy dura...cada quien tomo las riendas de su vida y cada uno tomo un camino distinto...
Los 3 amigos tenían la mirada en el piso, ninguno de ellos quería que pasara...ninguno.
- Creo...creo que es ora de tomar nuestras responsabilidades-dijo Harry
- Si...
- Eso creo-dijo el pelirrojo
- ¡Ron!-se oyó atrás de Ron-Cariño, ya tenemos que irnos; Hola Hermione, Harry, querido. Espero que les haya ido bien en su ultimo curso en Hogwarts
- Si, señora Weasley-respondió la pareja
- Deja que me despida mam
- Te esperamos afuera querido
La señora Weasley salió del andén
- Adiós Harry-dijo Ron y los 2 amigos se abrazaron-espero volver a verte…
- Yo igual Ron
- Toma, consérvalo-dio Ron dándole algo que parecía ser un cromo de magos. -Es la edición especial de cromos, tu imagen figura en el
- Muchas gracias Ron
Ron volteo para ver a su mejor amiga
- No llores, por favor-dijo Ron abrazándola
- Te voy a extrañar mucho
- Tranquila, mi pequeña sabelotodo, nos mantendremos en contacto-dijo Ron separándose de ella con una sonrisa- Nos veremos pronto, o al menos eso espero-dijo y le dio un beso en la mejilla al igual que esta
- Vale...Cuídate Ron
- ¡Nos vemos!-dijo Ron mientras salía del anden
Harry volteo a ver a Hermione y la abrazo como nunca antes
- Aunque yo me vaya a un rumbo distinto te llevare conmigo siempre, Hermi
- Yo también Harry-dijo Hermione y se separo ligeramente para poder besarlo...ya que quizás fuera el ultimo beso que le daría a su amado-Pero prométeme que nos mantendremos en contacto
- Te lo prometo, pequeña
- Te amo Harry
- Y yo a ti Hermione
- ¿Que vas a llevar guapo?- le pregunto la voz una mesera de aspecto algo peculiar, delgada, de largo cabello negros, al igual que sus ojos, que le eran muy conocidos para Harry
Esa voz fue lo que lo izo volver a la tierra pero aun seguía 'desorientado'
- Disculpa, ¿puedo atenderte?, ¿vas a llevar algo?-le volvió a preguntar un poco mas desesperada la chica de mirada fría, al ver a Harry tan abstraído en sus pensamientos
- Ah, ¿es todo? Bueno, entones, ¿te traigo la cuenta?-le pregunto volviéndose hacia el, haciendo que su pequeña credencial cayera sobre la mesa mientras Harry la atrapaba por sus dotes en Quidditch y veía ese nombre poco común en las personas...