Fairy Tail y sus personajes pertenecen al genial Hiro Mashima.

Un Día en la Biblioteca.

*Ikhny Shy

-¿Así que no te importo? –

-No digo eso.-

-Pero solo quieres pelearte con todos, Gajeel… Nunca te fijas en mí! –

-¿Quieres más atención enana? Entonces lucha seriamente contra mí. Hazte más fuerte… -

Gajeel observaba con aire desinteresado las botellas sobre los estantes de la barra, su mente divagando en esa corta escena con Levy hace siete años en la Isla Tenrou, aunque para ellos esa discusión es de apenas una semana atrás. No había tenido oportunidad de explicarse con la maga de escritura sólida ese día por la interrupción por parte del Gremio Oscuro Grimore Heart, y al despertar del ataque de Acnología, la pequeña maga había sido literalmente secuestrada por sus dos compañeros de equipo que la seguían a sol y a sombra por todos lados constantemente como un par de perros perdidos. La imagen simplemente enfermaba al Dragon Slayer de Hierro.

Si no era por la presencia continua de los miembros masculinos de Shadow Gear, Levy se internaba en la biblioteca por horas con la intención de recuperar el tiempo perdido actualizándose en el nuevo material de lectura de esos últimos siete años. Gajeel aprovechaba esa oportunidad para estar cerca de ella, pero como era de esperarse, la maga ni se enteraba que él ingresaba en la habitación ya que los libros absorbían completamente su atención.

El mago bebió el resto de su bebida, manteniendo sus ojos rojos al frente, nadie en el gremio podría siquiera adivinar lo que sucedía dentro de la cabeza del exPhantom, su expresión seria no dejaba ver absolutamente nada de sus emociones, ¿Quien podría siquiera pensar que el Dragon Slayer se preguntaba cuál sería la manera de llamar la atención de la maga de escritura sólida…?

-Mira… ¿Has visto a Levy? –

Cualquier otro nombre habría pasado de largo para el mago de larga cabellera negra, pero no ese, no el de Levy McGarden y menos si quien lo pronunciaba era otro miembro masculino. Gajeel agudizó su oído echándose levemente hacia atrás, mientras sus ojos espiaban de soslayo al mago de cabello verde que se acercaba a Mirajane con un libro en sus manos. Solo alguien con la habilidad de Gajeel para esconder sus emociones podía notar el minúsculo cambio en la siempre presente sonrisa de Mira, que Fried preguntara por otra chica era tan molesto para ella como para Gajeel que esa chica en cuestión sea Levy.

-Creo que la vi en la piscina. – Respondió una alegre Mirajane.

-Gracias… - Dicho eso, el mago de las runas se dirigió al área mencionada.

Gajeel inclinó su cuerpo hacia la barra y apoyó su cabeza sobre la palma de su mano, sus ojos se posaron en la barman que seguía sonriendo, pero para el joven mago de hierro había algo más en ese rostro alegre, algo que nadie más podría ver…


Cuando le dijeron que la joven maga estaba en el área de piscina, Fried sabía que hablar con ella le costaría el doble que en cualquier otro lugar del gremio. No era un secreto, luego del examen de clase S, cuál era la debilidad del fanático de Laxus… y en ese preciso lugar del gremio era donde se reunía particularmente toda su debilidad…

Al salir del gremio, el mago se cubrió los ojos por el brillante sol que atacaba la zona, el verano estaba comenzando y el calor no se había hecho esperar, por eso el área en cuestión estaba bastante poblada. Fried sintió su rostro levemente cálido cuando sus ojos verdes se posaron sobre cada bikini que descansaba en las reposeras alrededor de la piscina, no podía evitarlo… simplemente era su debilidad…

Evergreen se encontraba cerca del borde vistiendo un provocativo traje de baño de dos piezas verde recostada sobre su pecho le alcanzaba un envase de protector solar a un muy sonrojado Elfan que tartamudeaba algo sobre la masculinidad y ser hombre… aunque nadie podía entender del todo lo que estaba diciendo…

Dentro del agua, había un ferviente campeonato de Volleyball en el que se enfrentaban Natsu, Erza y Gray contra los dos masculinos del Shadow Gaer más Bixlow, sobre el borde, la única que prestaba atención al partido era Juvia, quien solo animaba al mago de Hielo. Fried siguió buscando omitiendo el atractivo conjunto rojo de Erza que llamaba poderosamente la atención.

Cuando su mirada finalmente llegó al extremo más lejano del lugar, Fried pudo respirar aliviado, la persona que estaba buscando se encontraba allí recostada sobre una manta con su nariz enterrada en un libro, mientras se asoleaba de espaldas. Sin embargo, Levy no se encontraba sola, Lisanna y Lucy parecían haberse unido ella formando una especie de club de lectura. El mago suspiró resignado sintiendo sus mejillas arder con cada paso, ¿Porqué las mujeres de Fairy Tail eran tan exhibicionistas? Si bien la maga de escritura sólida era bastante discreta e inocente, el par que la acompañaba no lo eran y Fried dudaba de su capacidad de hablar frente a dos mujeres con tanta piel expuesta, Lucy exhibía un traje azul con algunos detalles en blanco, Lissana uno blanco con rayas celestes y Levy uno blanco que se sujetaba detrás del cuello. Fried se aclaró la voz con un sonido ronco y tratando de focalizar su mirada en un punto fijo del suelo, llamó a la chica que estaba buscando…

-Levy… -

La de cabello azul ni lo escuchó, ni se dio cuenta que estaba parado delante de ella.

-Levy… - Intentó otra vez con la voz un poco más firme y alta.

-Levy… - Lucy bajó su libro y miró al mago con curiosidad y luego fijó sus ojos en su amiga. Le sonrió con simpatía. Lisanna también había bajado su libro sorprendida de ver al mago de runas allí.

-No te escucha, Fried.- Le informó Lucy. - Está muy concentrada. –

Fried alzó los ojos algo exasperado recordando lo difícil que era apartarla de un libro una vez que éste la "atrapaba" y se arrodilló frente a la maga. Extendió la mano para tocar su hombro cuando sintió un escalofrío en su espalda. Se dio vuelta levemente mirando sobre su hombro para encontrarse a Gajeel apoyado sobre el marco de la puerta, de brazos cruzados observándolo intensamente, si bien su rostro serio con expresión ausente no demostraba nada, sus ojos rojos le advertían amenazantes. El mago de runas lo ignoró y tocó suavemente el hombro de Levy tratando de "despertar" a la maga de su concentración.

-¿Uh? – Levy sintió como levemente su mente salía del mundo descripto de su libro y se sorprendió al ver al miembro de los Raijinshuu. -¿Fried? –

-Levy, necesito pedirte un favor. – El mago le mostró el libro que tenía en su mano. Levy asintió aún sorprendida y se sentó en su manta haciendo un gesto para que él la acompañara. Lo pensó un momento, no creía que pudiese trabajar cómodo en aquel lugar con todas esas mujeres en esas diminutas prendas y con Gajeel vigilándolo tan celosamente desde el lado opuesto, pero accedió a quedarse para explicarle a la chica el problema que tenía con aquel libro.

-Encontré un hechizo que me ayudaría a crear runas más estables con menos símbolos, pero… -

-El lenguaje es levemente distinto… - Acotó Levy ya sumergida en el nuevo material de lectura. –Supongo que quieres que te ayude a integrarla con el lenguaje que tú usas. – Fried sonrió, sabía que alguien como Levy entendería enseguida, no por nada era la más inteligente del gremio. El mago se sentó en una posición más cómoda junto a ella para enseñarle los capítulos del tomo que necesitaría traducir.

Gajeel gruñó por lo bajo, perdiendo un poco el control que creía tener sobre sus emociones y su forma de esconderlas. Desde su posición y con el ruido que generaban los jugadores de Volleyball, le resultaba imposible escuchar lo que se hablaba entre Levy y Fried, era obvio que se trataba de aquel maldito libro que el mago estuvo paseando por el gremio antes buscando a la maga de escritura sólida, pero igual le molestaba. Su oído no llegaba hasta allí, pero si sus sentidos de la vista y olfato que no ayudaban a mantener la calma… Fried ya estaba en su lista negra.

Afortunadamente el Dragon Slayer de Hierro no era el único afectado por el intercambio amistoso entre el mago de cabello verde y la chica peli azul, ya que lo que estaba sucediendo del otro lado de la piscina no había sido tan accidental como el resto de los magos había interpretado…

Fried se había acercado aún más a Levy, la manga de su túnica tocando el hombro desnudo de ella y sus rostros tan pegados que podían sentir el calor del otro (pero a ninguno le importaba) cuando un líquido helado cayó sobre su cabeza manchando el largo de su cabello y ropas con un espeso color rosado dejando dos decorativas frutillas en la base de su cabeza…

-Oh, Fried… Lo siento tanto! – Exclamó Mirajane arrodillándose frente a él y con una servilleta en la mano comenzó a intentar limpiar el líquido que resbalaba por el rostro del mago. Olvidándose de la malteada que ahora decoraba su cuerpo, los ojos verdes de Fried se fijaron en el rostro de la barman, perdiéndose en sus facciones, en sus ojos, nariz, boca, en la mano que lo acariciaba tan suavemente… El mago movió la cabeza levemente, obligándose a despertarse de su trance.

-Estoy bien… emmm… iré a cambiarme… - Se levantó de su lugar, apartando lentamente a Mira y examinó sus ropas totalmente manchadas.

-Lo siento, Fried… me resbalé… - Se disculpó Mirajane.

-No es problema… es solo malteada. ¿Estás bien? –

-Sí. – Ambos se sonrieron mutuamente y Fried volvió su atención a Levy.

-¿Podrías esperarme en la biblioteca por favor? Enseguida voy. –

-De acuerdo, buscaré el material que necesitaremos. – Le respondió ella sonriente levantándose de la mata. Levy observó la mancha líquida que había quedado donde estaba Fried y se alivió al ver que ella no se había manchado, aunque era un poco raro que estando tan cerca la copa solo hubiera caído sobre el mago… era casi como si hubiese sido volcada sobre él apropósito… pero eso era imposible, ¿Verdad? ¿Porqué Mirajane iba a tirarle la malteada encima?

Encogiéndose de hombros la maga levantó el libro que estaba leyendo antes y junto con el que había traído su compañero los abrazó contra su pecho y comenzó su camino dentro del gremio. Sintió una mirada sobre ella y al levantar sus ojos se encontró con Gajeel recostado contra el marco de la entrada. Levy desvió la mirada y continuó su camino, se había propuesto ignorar al Dragon Slayer cuando volvieron de Tenroujima, todavía estaba un poco confundida por la escena que protagonizaron antes del ataque de Grimore Heart y se sentía demasiado vulnerable como para lidiar con el mago…

-¿Quieres más atención enana? Entonces lucha seriamente contra mí. Hazte más fuerte… -

-No puedo… soy débil y pequeña… -

Gajeel chasqueó la lengua al notar que ella lo ignoraba y se esforzó por mostrarse indiferente cuando la pequeña pasó por su lado con la vista fija en el suelo. El mago levantó la mirada a Mirajane, quien caminaba detrás de Levy con la copa vacía de malteada y le sonrió…

-¿Quién había ordenado malteada? – Le preguntó Gajeel con tono burlón. Mira solo le sonrió y continuó caminando. Como lo sospechaba, nadie había pedido nada.


Ya habían pasado un par de horas desde que los dos se habían internado en la biblioteca. Fried estaba bastante conforme con el trabajo de Levy, ella sabía exactamente que libro buscar para cada dificultad que se presentaba en la tarea…

-Parece un lenguaje más antiguo que el mío… - Comentó Fried.

-No me parece… creo que es de la misma época, pero en otro dialecto… como si hubiese sido escrito en otra región… - Corrigió Levy seleccionando algunos tomos de las estanterías. –Si te fijas bien hay algunos símbolos iguales a los que tú usas, no me sorprendería que significaran lo mismo. – El mago pareció meditarlo un instante concentrándose en las escrituras de su libro y levantó la mirada para agregar algo solo para encontrarse que la chica había movido la escalera justo al lado de él y se había subido unos cuantos escalones, desde su posición, Fried pudo ver sus piernas desnudas debajo de su vestido naranja y el asomo de su ropa interior, enseguida su rostro se tornó rojo y miró hacia otro lado avergonzado.

Gajeel, que se encontraba espiando detrás de una estantería, resistió el impulso de abalanzarse contra el mago de runas aferrándose con fuerza a la madera y dejando unas notorias marcas en la superficie…

-Quién pensaría que este payaso es tan degenerado…? – Pensó apretando las muelas y reprimiendo un gruñido. –Encima la enana no se da cuenta de nada… ¿Que tan inocente puede ser esta chica?- sintió una vibra extraña y tuvo que reprimir un grito. Mirajane se encontraba detrás de él, también asomada observando a los dos magos, la maga de clase S le dedicó una sonrisa a Gajeel y con voz baja inocentemente preguntó…

-¿Todo bien, Gajeel? –

-Por ahora… parece que sí…-

Levy le pasó a Fried un par de tomos de los estantes más altos y los sumaron a los ya 20 que habían esparcido sobre una mesa larga en el centro de la biblioteca, luego la maga acomodó los libros en pilas según la utilidad de cada grupo y con aquella organización tapaban la visión de los otros magos espías…

-Maldición… - Protestó Gajeel, extendiendo su cuello para intentar mirar que sucedía y luego se sentó en el suelo apoyando su espalda contra la estantería fastidiado. Levy y Fried habían bajado sus cabezas y no podía verse nada de ellos. Mirajane ladeó la cabeza…

-Vaya, vaya… Creo que se acabó la función… -

Fried levantó la cabeza por sobre los tomos…

-Creo que tenemos compañía… - Comentó reconociendo la melena negra que se asomaba desde el rincón de una estantería.

-Debe ser Gajeel… - Respondió Levy mientras pasaba rápidamente las páginas de un libro. –Últimamente está viniendo seguido… -

El Dragon Slayer, sintió que en su pecho el corazón se había salteado un par de latidos, no se esperaba que la maga hubiera notado su presencia en esa semana que se había atrevido en espiarla, ¿No era que los libros capturaban totalmente su atención?¿Realmente pudo superar la atracción de la maga hacia los libros?

-¿Gajeel?¿En la biblioteca? – Preguntó Fried confundido como si esas palabras fuesen imposibles de mezclarse. Levy se encogió de hombros.

-Quizás esté investigando algo, no lo sé. – Respondió ella sonando desinteresada. Gajeel bajó la mirada al escucharla, sin saber como tomar las palabras de la chica. –Mira, aquí hay algo! – Exclamó Levy contenta y el tema del Dragon Slayer quedó en el olvido.

-Oh, sí… -

-Esto significa que este párrafo… - Y así Levy se perdió entre las páginas y continuó hablando no tanto para Fried sino para sí misma mientras su pluma parecía volar frente a las hojas que había llevado, estaba muy cerca de resolver todo el texto de esa página.

El mago de runas se encontró rápidamente expulsado del trabajo cuando la maga de escritura sólida pareció olvidar que él estaba junto a ella. Gajeel sonrió al ver que Fried reposaba su cabeza sobre la palma de su mano con el codo en la mesa, permitiendo que su cabeza se asomara entre la pila de libros, mientras sus ojos escaneaban la habitación, sabía por experiencia como reaccionaba la maga cuando estaba por resolver un misterio con sus libros, solo que a diferencia del mago de cabello verde a él le encantaba verla tan inmersa en su tarea, escribir y leer con tata pasión lo hipnotizaban y tal vez fue por eso que el Dragon Slayer decidió tomar una iniciativa diferente…

Levantándose de su lugar, Gajeel tomó un libro cualquiera del estante y caminó hacia la pareja tratando de verse lo más natural posible. Fried lo observó con aire severo mientras el chico de melena negra se sentaba frente a Levy y abría el libro sobre la mesa. Tratando de ser lo más casual posible, apartó una pila de libros y así descubrió la cabeza azul de Levy que se había sumergido en las páginas que escribía…

-¿Qué haces? – Preguntó el mago de la túnica bordó algo molesto. Gajeel se encogió de hombros.

-Vine a leer. –

-¿Tienes que sentarte ahí? ¿No ves que estamos ocupados? –

-Voy a sentarme donde se me de la gana. – Respondió el mago de hierro sonando amenazante.

-¿Cuál es tu problema? – Desafió Fried serio.

-¿Cuál es el tuyo? – Gruñó Gajeel inclinándose hacia él sobre la mesa.

-Ya, ya, no se peleen. – Los detuvo una dulce voz. Mirajane también había tomado un libro y se había acomodado junto al Dragon Slayer. –Esto es una biblioteca, hay que hacer silencio. –

Los dos hombres se miraron con furia, pero ninguno acotó nada más. Por su parte Levy no se había dado ni cuenta del intercambio de sus compañeros, pues seguía sumergida en su tarea.

El clima dentro del salón cada vez se tornaba más y más tenso, siendo Fried el que más sentía aquella atmósfera. Gajeel lo vigilaba con recelo, sin siquiera haber mirado una sola vez el libro que había agarrado, Mirajane sí prestaba atención a la lectura que trajo, pero de a ratos le dirigía algunas miradas y sonrisas que ponían nervioso al pobre Raijinshuu. Por otro lado, Levy continuaba hablando sola proporcionando al ambiente un cántico monótono que llenaba el incómodo silencio.

-¿Alguien quiere beber algo? – Propuso Mirajane alegremente. –Traeré café. – Sugirió recibiendo solo un asentimiento de parte de Gajeel.

-Te acompaño. – Propuso Fried levantándose como un rayo, deseoso de perder un rato esa mirada vigía que lo amenazaba desde hacía más de 40min y así, Gajeel quedó a solas con Levy. Se preguntaba si la maga se había dado cuenta que él estaba allí frente a ella y lo estaba ignorando o estaba tan inmersa en su lectura que ni lo había notado…

-¿Quieres más atención enana? Entonces lucha seriamente contra mí. Hazte más fuerte… -

La frase se repitió dentro de la cabeza del mago retumbando en sus oídos, ¿Porqué le había contestado así? ¿Porqué había dejado pasar la oportunidad? Se hubiera golpeado la cabeza contra un árbol repetidas veces si la chica no hubiese sido atacada por los magos de Grimore Heart, ¡Qué estúpido había sido!

-Aha! Ya lo tengo! – La voz de Levy lo sacó de sus pensamientos y la miró con aire desinteresado, aunque sentía ganas de sonreírle y felicitarla por su trabajo. -¿Uh? ¿Y Fried? – La chica miró hacia ambos lados hasta que sus ojos marrones se posaron sobre el único que quedaba en la mesa -¿Gajeel? – El mago se alegró al ver que no lo había ignorado sino que, como él había pensado, la maga había sido hipnotizada por el trabajo. De pronto las mejillas de Levy se tornaron rojas mientras su mirada reposaba sobre el libro que había agarrado su compañero. –Gajeel! No sabía que… que te gustaban… esos… esos libros… -

-¿Eh? – Extrañado el mago bajó la mirada y su rostro ardió en llamas al leer las primeras líneas. -¿Qué mierda es esto? –

-Es de Erza… - Susurró la maga avergonzada. –Puedo sugerirte algunos si quieres… ese es muy… explícito… - Gajeel sintió ganas de llorar de vergüenza, de todos los libros que había en esa biblioteca, tenía que tomar uno Hentai y Levy, su pequeña e inocente Levy podía recomendar lectura de este tipo.

-Tú… tú… ¿Leíste esto? – Preguntó él aún avergonzado y más aún sorprendido.

-He leído casi todos los libros de aquí. – Respondió ella hundiendo su mirada en su regazo también avergonzada por el tenor de la lectura. –No es lo que más me gusta. – Agregó. –Así que… ¿Es eso lo que estuviste leyendo toda la semana?... –

¿Y qué podía contestar en ese momento el mago? ¿Cómo podría explicar que ese era el primer libro que tocaba de esa biblioteca? Tuvo que asentir levemente y dejar que la chica creyera que era un degenerado, aunque mirándola de reojo notaba que no parecía molestarle su supuesta preferencia de lectura.

-Supongo que… estos siete años nos afectaron un poco… ¿Verdad? – Preguntó ella inocentemente y Gajeel deseó salir corriendo, no solo había dejado entender que le gustaba la lectura Hentai, sino que ahora ella creía que él estaba queriendo recuperar el tiempo perdido y actualizarse en ese tipo de textos

El Dragon Slayer bajó la cabeza y apoyó su frente sobre la frente sobre la madera…

-Soy un Hentaii… - Murmuró avergonzado, Levy lo observó extrañada insegura si había escuchado correctamente las palabras del mago, pero no dijo nada más…

CONTINUARÁ…

Ikhny Shy

Notas de Autor:

Quería hacer de éste mi primer One Shot de Fairy Tail, pero se me fue a un poco largo… tendrá que ser en dos capítulos… (suspiro)

Mientras escribía los fragmentos del manga sobre la pequeña discusión entre Gajeel y Levy en la isla, sentí que los usaría en varias de mis próximas historias, siendo unas de mis escenas favoritas! Por otro lado, estuve releyendo la saga de Fantasía y vi una viñeta que antes se me había pasado de largo, Gajeel observando a Levy desde el primer piso del Gremio, esto me dio la idea de que él la está espiando todo el tiempo ^ ^