Academia Cross- Dormitorios Nocturna- Habitación de Kuran Kaname- Kaname Pov´
Miraba las gotas deslizarse por el gran ventanal de mi habitación. El cielo que se veía atreves de ella era oscuro y tormentoso, podía oír los relámpagos tronando continuamente, en eso un recuerdo asalto a mi mente.
Flash Back
Caían una impresionante cantidad de gotas sobre la ventana, mientras la habitación a oscuras era iluminada por los múltiples relámpagos. El albino en mis brazos comenzó a temblar cuando cayó un relámpago muy fuerte. Lo abrase más fuerte y le acaricie la espalda, pareció calmarlo.
- ¿Le temes a los relámpagos?- Ya sabía que la fachada de "frio y temible cazador" era solo una máscara, y que su verdadero yo se ocultaba siempre tras esa mascara, pero esta faceta del prefecto no la conocía.
Como respuesta enterró aun más su cabeza en mi torso desnudo y empezó a temblar aun más. Acaricie sus cabellos. Aunque no lo amara realmente, me daba pena ver al orgulloso cazador al cual todos temían temblando en mis brazos.
- Kaname- susurro aferrándose desesperadamente a mi pecho al caer otro relámpago. Al parecer no lo temía a las tormentas, sino que le aterraban, seguro producto de algún trauma.
Agarre suavemente su mentón, haciendo que me mirara, pose mis labios sobre los suyos, besándolos despacio. Eso pareció calmarlo- Te amo- no se lo decía en serio, solo pensé que sería divertido jugar más tiempo con el cazador.
- Yo también- me susurro con una tímida sonrisa y un sonrojo adorable, luego de decirlo, cayó a los brazos de Morfeo. No parecía el frio prefecto que le apuntaría a cualquiera de la clase nocturna con su Bloody Rose sin dudarlo, no, había logrado domarlo.
Fin Flash Back
Por su culpa Zero había huido de la academia, luego que él le dijo que no lo amaba. En verdad tenía que ser el más estúpido del mundo, el amaba a Zero, pero por ser tan imbécil lo perdió, y tal vez jamás lo volvería a ver. Pero eso no estaba dentro de sus planes, lo encontraría y le diría la verdad, esperando que el cazador fuera misericordioso.
Nadie sabía dónde estaba, y eso lo empezaba a desesperar. Ya había pasado un mes de la desaparición del prefecto. Tenía muy en claro que jamás debió haber jugado con él, pero lo que no se esperaba era que cuando se entero que el albino había huido, había también descubierto que en verdad lo amaba.
El director, Yagari, hasta el compañero de armas del prefecto, Kaito Takamiya, se habían movilizado y habían estado buscando con desesperación a Zero, pero ni rastro. El hace ya bastante había mandado a un grupo de nobles a investigar, con la excusa de que si se convertía en Nivel E, daría problemas.
Yuki, su adorada hermana, lo había sorprendido a él, a la clase nocturna, y a Kaito, el director y Yagari con lo que había dicho sobre Zero cuando descubrió que se había marchado, todos pensaban que se lo tomaría a mal, que lloraría o que se lamentaría como mínimo, pero no. Había dicho "- ¿Se marcho? ¿Mejor no? Un Nivel E menos para cuidar, una molestia menos. Además si huyo es por que es un cobarde-"Eso lo había shockeado de sobre manera ¿Su hermana podía ser así de cruel? Bueno, ahora que se ponía a pensarlo, se había vuelto muy caprichosa y berrinchuda desde que descubrió que era una sangre pura, pero no para tanto.
Estaba decidido, buscaría a Zero aunque tuviera que ir al mismo infierno para traerlo de vuelta y hacer que lo perdone.
Continuara…
