El Reino de Westeros se encontraba en relativa paz, la Guerra del Usurpador había terminado con una abrumadora victoria, exiliando a los Reyes Dragón que todavía seguían vivos, asegurando así su trono el nuevo rey Robert Baratheon, que lo tenía todo pero a la vez nada, ya que su amada prometida secuestrada por el príncipe dragón ahora yacía muerta.
Pero no hablaremos del nuevo rey en esta historia ni su mal gobierno, ni del hijo del hielo y fuego al que se le oculto su origen por su propia seguridad, no, hablaremos de un amor prohibido ante los ojos de los dioses y como es que uno de estos murió dejando a su amado con el corazón roto.
La Gran Casa Noble Wayne era una de las más antiguas de todo Poniente, se dice que sus antecesores ayudaron a los Targaryen a construir lo que hoy es Desembarco del Rey, al igual de que eran igual o más ricos que los Lannister. Cuando Robert Conquistó el trono perdono a la familia con tal de que esta le fuera leal, la familia lo hizo, dio sus votos pero poco tiempo después el Lord Thomas Wayne y Lady Martha fueron asesinados enfrente de su pequeño hijo, dejándolo al mando de una poderosa Casa, rodeado de traidores e hipócritas que no dudarían en eliminarlo si hablaba de más, sin embargo no estaba solo tenía a su fiel Maestre Alfred Pennyworth.
Ese Joven, creció bajo las enseñanzas de su viejo amigo para convertirse en el heredero de una gran fortuna que incrementa con el pasar de los años además de ser considerado el Adonis de todo Westeros y El caballero Oscuro, haciendo referencia a su armadura.
Sin embargo Bruce Wayne tenía un gran corazón y amor por su pueblo, lo demostró al adoptar a un pequeño, quien quedaría huérfano por culpa de la maldad del mundo. El nombre de ese pequeño era Richard Grayson pero él no fue el único, el siguiente sería Jason Todd, un delincuente juvenil, que trato de robarle a su carroza, después le siguió Timothy Drake, el ahora único Drake, finalmente su primer hijo sanguíneo, quien fue concebido fuera del matrimonio, una aventura de la cabeza Wayne, que tuvo con una asesina llamada Thalía Al'Ghul, por lo que lógicamente fue considerado un bastardo, Bruce los amaba a todos por igual, así que le pidió al rey Robert legitimarlos a todos, a lo cual acepto más por conveniencia que por gusto.
Ahora todos tenían los mismos derechos de heredar la fortuna Wayne, ya que tenían su apellido, pero dos destinos fueron sellados a ser mal vistos ante los ojos de los dioses los antiguos…y los nuevos, del cual podrían liberarse con la muerte o el sufrimiento de uno de ellos.
El castillo de Bruce Wayne era enorme, Lord de las tierras malditas o como a los forasteros les gustaba llamarla "Gotham", a los bardos les encantaba cantar canciones a cerca de lo oscuro y maldito de ese lugar, además de que el actual Señor de aquellas tierras había hecho un trato con los espíritus malignos para lucir joven, apuesto y que su fortuna nunca se acababa.
Bruce tenía 4 herederos. El mayor y futuro lord era Richard Wayne de 21 años casado con la hija del amigo de su padre, a veces jugaban a decir que estaba besada por el fuego: por el intenso color rojo de su cabello, su nombre era Bárbara, él reinaba cuando su padre tenía asuntos con el rey o en tierras lejanas a días de distancia, por ejemplo cuando visitaba "La fortaleza de la soledad", gobernada por el Lord Clark Kent.
Siguiendo a la línea sucesora estaba Jason Wayne que acababa de cumplir su décimo séptimo, día del nombre y no hacía más que hacer del vago en el castillo, entrenar sin importar cuantas veces su padre le haya dicho que era tiempo de que consiguiera una esposa, ya era lo suficientemente mayor para tener sus tierras y familia propia pero a Jason le valía un comino si el viejo lo echaba de ese ostentoso lugar, él no quería casarse y menos cuando ya amaba a alguien aunque sabía que este era un amor imposible y nunca le dijo nada al causante de esos sentimientos.
El tercero era Timothy o como a la mayoría de la corte le conocía Tim Drake-Wayne, después de cambiar su apellido. Era un Joven talentoso e inteligente capaz de memorizar libros enteros y resolver enigmas difíciles con tan solo 14 años, lo que lo ha vuelto un blanco de una parte de la familia Real al sentirse amenazados por su gran inteligencia y astucia, sin embargo, Tim tenía una debilidad, su hermano mayor Jason, el cual admiraba y amaba en secreto desde hace un tiempo. Consiente de su pecado, no sólo por ser su hermano ante todo el mundo y los nuevos dioses, había otro y ese era que ambos eran hombres, un tabú de la sociedad que debía ser borrado.
Y por último tenemos a el bastardo legitimado, Damian Wayne de tan solo 10 años que a pesar por ser consanguíneo de Bruce, no heredaría nada por ser el cuarto en la línea sucesora, teniendo que buscar su propio camino en el mundo y a menos que una gran tragedia suceda y termine por lo menos con dos de sus hermanos y su padre. Él sólo vivirá en la sombra de lo que deseara ser.
-¿Es una broma, verdad, viejo?- dijo incrédulo Jason, al escuchar lo que su padre adoptivo había dicho -Perdón ¿Puedes repetírmelo de nuevo?- Bruce le mando una mirada desaprobatoria desde la silla de su despacho -Estoy seguro que escuchaste perfectamente bien, Jason- dijo para girar su vista a unas cartas que había tomado con anterioridad.
-¿¡Estas de coña!? No acepto eso y menos viniendo de esa falsa Lady- refiriéndose a la propuesta de matrimonio hecha por los Tyrell -Puedes decirles que se metan su Propuesta de matrimonio por el...-
-¡Jason, un futuro Lord no habla así! Parece que no has aprendido nada en los años que has vivido aquí- le empezó a recriminar Bruce, interrumpiendo las palabras de su segundo hijo -Lamento decirte que no tienes opción, la oferta ha sido tomada y aceptada, te di una oportunidad para que te casaras con la mujer que había ganado tu corazón, no la aprovechaste, es por eso que lo harás a mi manera. Te casaras con ella, es un hecho, necesitamos lo que nos ofrecen los Tyrell y saben que se beneficiarán de nosotros también, todos ganamos- sentencio con firmeza, sin dejar lugar a réplicas al respecto.
Jason salió del despacho enojado, azotando la puerta detrás de él, no quería casarse, los sirvientes se quitaban de su camino al ver a su señor del humor de los mil demonios para que no se desquitara con ellos. Desgraciadamente no todos tuvieron la misma suerte y alguien se tropezó con él.
- ¡¿Qué demonios te pasa Jason?!- Cuestiono Tim al cruzarse con su hermano mayor, que lo había empujado para hacerlo a un lado – ¿Se puede saber por qué estas de mal humor, más de lo normal?-
-¡¿Y a ti que te importa, Reemplazo?!- Dijo para después seguir su camino rumbo al patio de armas para descargar su furia, dejando a un muy consternado Tim atrás.
-Es culpa del matrimonio arreglado.- Explico Richard a su hermano menor cuando le pregunto acerca del humor matutino del segundo Wayne.
-¿Matrimonio... arreglado? Pero no estamos en guerra como para que Padre obligue a Jason a casarse- Dijo Tim en un tono expectante pero lo que más le extrañaba era que Bruce nunca había tenido problemas con la libertad de Jason y Richard pero ahora el mayor había sentado cabeza, le dijo una voz en su interior, se casó y pronto tendrá a su primer hijo los días de Dick y los prostíbulos habían terminado desde hace mucho-
Richard soltó un hondo suspiro -¿Por qué no me acompañas en un paseo al patio de armas? Prometí vigilar a Damian en su entrenamiento, así te contare todo- Así Tim y Dick empezaron a caminar en dirección al lugar mencionado mientras el mayor le contaba todo el plan de su padre con ese matrimonio.
