Los personajes aquí mostrado pertenece a sus respectivos dueños. ADVERTENCIA spoiler a los que no le dan seguimiento al manga, una disculpa para ellos.
Espero que les guste
Noche 1: Sueños
En un gran y viejo castillo, ubicado y protegido en las ruinas de una civilización, ciertas criaturas festejaban el regreso a ellos de Scherezada, después de todo, como magi, al morir tendría que regresar a ese lugar y no como todos los demás.
-No te preocupes Scherezada, el estará bien- una gran cabeza, que era levantada por esas criaturas que habitaban con ellos lo mantenían en posición –Él es amigo de Aladdin… y si él lo reconoció como tal… es obvio que es por algo… Titus será un gran magi- sus palabras eran dirigidas al antiguo magi de Rem, que solo asentó con la cabeza al no tener la habilidad para hablar, recordando que acababa de dejar ir a su "hijo".
-Y a qué extraño lugar llegamos…- entre los sonidos de las criaturas, se escucharon palabras humanas, llamando así la atención de todos los moradores –vaya… creo que el lugar no es lo extraño aquí- un hombre vestido de manera descuidada, con unas gafas gruesas que cubren sus ojos color café y cabello despeinado miraba con asombro a aquellos seres, inclinándose a su altura y picándolos juguetonamente.
-¿Que eres?- el guardián del lugar mostraba una mirada preocupada, al ver a alguien en ese lugar es obvio que no sería humano.
-Vaya… la cabeza es descortés… - el hombre ya se encontraba sentado, con una de las criaturas en sus pies jugando despreocupadamente –Mi nombre… es Joyd… se podría decir… es cansado hablar en tu idioma… y bien- sonrió sin preocuparse en lo más mínimo, esperando respuesta del asombrado ser, al ver que su pregunta era hecha a un lado
-Mi nombre es Ugo y soy guardián de este templo… así que dime… ¿Qué eres?- insistió al hombre que se ponía de pie, poniendo a esos seres a un lado
-Se podría decir… humano- el hombre levanto la cabeza, sonriendo, en ese momento su piel se transformaba en gris, dejando atrás sus lentes y descuidada apariencia, recogiendo su cabello de manera elegante hacia atrás, dejando ver sus estigmas en la frente, Ugo veía como el rukh a su alrededor se teñía de negro –Estamos en medio de un juego… bueno de hecho era el inicio de la función… pero no esperaba que tu mundo sería tan reducido…- ya se encontraba detrás del guardián, tocando una gran puerta de oro con escrituras en ella –Vaya… es interesante… supongo… que el juego no se cancelara después de todo- sonrió siniestramente al momento en que Ugo trataría de detenerlo –No tengo intenciones de tener peleas innecesarias… por lo menos… no eres de mi interés… - en ese momento, todo se oscureció
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Aladdin se despertaba asustado, había tenido este extraño sueño de Ugo en esa situación, normalmente soñaba con el final de Alma Torán, entonces este no sería un sueño simple… ¿era alguna forma de pedir ayuda de Ugo? O ¿alguna advertencia?
-¿Qué pasa Aladdin?- Morgiana se levantaba a su lado, Alibaba seguía dormido, la habitación tambaleaba, en signo de estar en alguna embarcación.
-Tuve un sueño…- murmuro el joven magi, quedándose pensativo si era correcto comunicárselos a ellos, de repente recordó las palabras de Alibaba –cuando despierte Alibaba se los cuento- había decidido ya no llevar nunca más una preocupación tan pesada él solo, y aunque era diferente, ya no se sentiría así más.
Estaban de camino a Sindria, después de un arduo trabajo de reconstrucción en Magnostadt, se había decidido hacer la cumbre Mágica, en donde Aladdin diría toda la verdad que el sabia de Alma Torán a los reyes que él consideraba importantes, a un día de llegar al puerto de este reino que les tendió la mano y les brindo abrigo cuando lo necesitaban.
-Esto es algo que le tenemos que decir a Sinbad- Alibaba se mostraba preocupado ante el sueño que había tenido su amigo.
-¿Crees que él puede ayudar?- Morgiana no entendía muy bien la situación.
-No creo que pueda recibir alguna ayuda- Aladdin se encontraba algo triste, sus amigos no entendían –El lugar donde esta Ugo, solo si él lo desea, puedo llegar en sueños… un lugar exclusivo de Magis-
-Ya veo… entonces no tenemos la manera de ayudar- Alibaba se rascaba con desesperación la cabeza –Waa como te puedo ayudar Aladdin- el joven príncipe se sentía desesperado al no poder aliviar de alguna forma a su amigo.
-No te preocupes Alibaba… sé que Ugo está bien… después de todo lo que vi fue un recuerdo- Aladdin se trataba de animar a sí mismo –lo preocupante es… que algo entro a nuestro mundo… y fue en el momento en que Titus regreso- recordó parte de su sueño, la conversación de Ugo con la magi fallecida, esto sorprendió a sus amigos, el ambiente se oscureció aún más, al saber que eso paso hace algunos meses.
-Entonces… tenemos que esperar- Morgiana les daba algunas palmadas a sus amigos, tratando de animarlos, así sin más, el día se terminó y a la mañana siguiente, ya desembarcaban en el reino de Sindria.
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Bien, aquí les dejo el inicio de mi historia, espero tener actualizaciones pronto, hasta luego.
