¡Haro, haro~! Whoa, cuanto tiempo sin publicar un fic de SoMa ;-; Y si, sé que tengo uno pendiente por seguir, y lo haré en cuanto tenga tiempo, de verdad D:

Igualmente, me alegro de poder publicar ahora ese one-shot de SoMa que espero que les guste.

Como siempre, Soul Eater no es mío, es de Mak... Atsushi Okubo.

Y como no hay nada más que añadir... ¡Lean!

El volumen de la música estaba tan alto que apenas de podía escuchar a otra persona aunque gritara cerca a tu oído.
Los cristales de la mansión retumbaban al ritmo de la música de forma amenazante, pues daba la impresión de que se rompería en cualquier momento.
Una chica de cabello cenizo, bailaba al ritmo de la música junto a sus amigas. El vestido negro ceñido que llevaba realzaba delicadamente sus curvas. La falda corta y los tacones hacían ver sus piernas estilizadas, elegantes, tan delicadas que no podía pensar en otra cosa que tocarlas.
Y es que aunque el no lo supiera, ella había pasado la mañana planeando con Liz la mejor manera de impresionarle. Y al parecer, había conseguido su objetivo.
Soul se aclaró la garganta y tiró del nudo de la corbata. Cada vez era más difícil no mirar a Maka, no darse cuenta de su belleza. Y eso complicaba el hecho de que aún vivían juntos.
El cuerpo de la rubia se movía al ritmo de la música de manera seductora, de manera que Soul no podía mantener el auto control.
El problema no era sólo su cuerpo, era la sonrisa en su rostro al bailar y las breves miradas que le dirigía.
Avanzó entre la gente hacia ella. Maka sonrió como habitualmente y pasó entre sus amigas.
—Pensé que no llegabas.—gritó sobre la música.
Ella torció la boca y sacudió el pelo.
—No te creas tan importante, Evans.
El albino soltó una carcajada y es que por el ataque de nervios de Kid con la simetría de la decoración, había tenido que adelantarse y dejar a Maka ir sola.
Sin persarlo, la rodeó por la cintura estrechandola contra él.
—¿Bailamos?
La ojijade asintió, y movió los pies, arrastrando a su pareja hasta la pista de baile.
Soul se veía tan bien con ese traje negro. Con esa sonrisa torcida suya y sus ojos color rubí clavados en ella.
Maka sintió un escalofrío. Sacudió la cabeza ligeramente, y empezó a mover al ritmo de la música.
Aprovechando el ambiente y la música, decidió acercarse más a él, dejando que sus cuerpos de tocaran.
Las manos del albino la atraparon por la cintura, disminuyendo esa pequeña distancia entre ellos. Ahora sí que sus cuerpos se tocaban casi por completo, si no fuera por sus elegantes trajes...
La música se detuvo. Liz se acercó animadamente a ambos y sonrió a Soul.
—¿Bailas conmigo?-preguntó.
Una nueva canción invadió la mansión. Maka torció el gesto y se alejó sin decir nada, sin dejar de observar a su amiga bailar con Soul.
"No te acerques tanto", pensaba cada vez que el cuerpo de Liz rozaba el suyo. Sin embargo, parecía que a él no le importaba en absoluto, haciendo que sus sentimientos de celos aumentaran cada vez más.
En un acto repentino, tiró de Kid, quien se acercaba a su lado para pedirle bailar, a la pista de baile y repitió sus movimientos cerca de él.
Las miradas de ambos se cruzaron. Soul cogió a Liz por la cintura, ofreciéndole a Maka otra sonrisa de las suyas.
La rubia frunció el ceño, y movió las caderas cerca a las de Kid, al ritmo de la melodía.
Entre miradas fulminantes y sonrisas torcidas, una nueva canción había terminado.
Arma y técnico se miraban a través de la gente. Maka giró la cabeza, caminando de manera furiosa hasta el balcón de la parte izquierda.
—Eres un idiota Soul, un idiota.—repetía— Idiota.
—Soy un idiota.—dijo él detras de ella, sosprendiendola.
La ojijade se volvió bruscamente y apretó los puños.
—¡Idiota!—soltó de manera infantil, agitando los brazos a sus costados.
Soul se acercó a ella y con la mano en su barbilla la obligó a mirarle. La mano libre, atrapó una lágrima que había escapado de sus ojos brillantes.
—Tú también eres idiota—susurró cerca a su oído.
Ella retrocedió, chocando con la fría barandilla de metal.
—¿Y porqué soy un idiota?—preguntó el albino con toda tranquilidad.
Maka abrió la boca para reponder, pero volvió a cerrarla. ¿Porqué? Por bailar así con Liz, mientras que algo así sólo debía hacerlo con ella...
Sus mejillas se encendieron al darse cuenta del motivo de su fastidio. Si, ella también era idiota.
—¿Y bien?—insistió él.
—Olvidalo. No tiene caso.—murmuró— Volvamos adentro.
Iba a pasar por su lado cuando el albino la detuvo.
Su brazo derecho la aferraba con fuerza por la cintura y la mano izquierda sujetaba su barbilla obligándole a mirar sus ojos rubíes.
—No deberías tener celos de Liz.—sonrió burlonamenente.
—¿¡Qué!? ¿Celos?
Maka intentó zafarse del agarre, empujando con ambas manos en su pecho.
—Tampoco me hizo gracia que bailaras así con Kid.
La atrajo más hacia sí, pegando su cintura contra la de él.
—Preferiría que lo hagas sólo conmigo.
Maka estaba apunto de protestar, cuando los labios de la guadaña atraparon los suyos.
Sus brazos perdieron fuerza para empujarle, una de sus manos cogió el cuello de la camisa y la otra se enredó en su cabello blanco, aumentando la intensidad del beso.
Las manos de Soul recorrían su espalda con suaves caricias.
Tras unos segundos de un beso intenso, ambos se miraron a los ojos.
—No estaba celosa.—dijo ella, soltandose del agarre y caminando hacia la puerta.—Vamos, la fiesta sólo ha empezado.

Giró sobre si misma para dirigirle una sonrisa pícara.

Soul sonrió, observando las largas y elegantes piernas de la rubia al andar. Si, la fiesta sólo había empezado.

Aw, y hasta aquí... Espero que no se note mucho mi pequeña obsesión con esta pareja :$

¡Como siempre espero sus reviews!

Por cierto, tengo pensada na continuación para este one-shot. Una parte final lemmon... Hue hue. *cara pervertida*

Asi que, PREGUNTA: ¿Quieren una continuación con lemmon?

¡Besoos!