El chico nuevo
Hacía ya tres años que tenía una relación con Draco y hacia dos años que lo había anunciado a su familia, no fue fácil, las miradas de desprecio hacia Draco eran evidentes, todos pensaban que él fue la razón por la que se divorciara pero si había seguido con ella después de la universidad fue por James, del cual sucedió Albus y la pequeña Lily. Fue un amor de preparatoria al que le siguió la universidad por quedar bien con sus se divorciaron lo único que dijo fue que tenía a alguien más, a nadie se le cruzo por la mente que no tenía nadie, solo que era gay.
Ginny se quedo con la custodia de los niños, la casa y el auto. En el momento de rehacer su vida tuvo que lidiar pagando una casa que tuviera al menos dos dormitorios para sus hijos y trabajar para mantenerlos a ellos, ya que Ginny no trabajaba y mantenerse al mismo.
Después fue el momento de entrar a los bares de ambiente. Al principio fue más miedo que nada, tener 40 y salir del closet cuando en la mayoría de los antros gay son jóvenes no es nada estimulante. Pero ahí fue cuando conoció a Draco. Acompañaba a sus amigas, cuando los dos se vieron. Tal vez fue el ambiente, el que no quisiera bailar con alguien que no le doblara la edad o el que fuera tan atractivo.
Intercambiaron teléfonos, tuvieron citas, y Draco, por capricho de Harry, termino viviendo con él.
Cuando Ginny se entero, no quiso que sus hijos vieran a Draco, incluso trato de quitarle la custodia, pero Harry hablo con ella y la hizo tranquilizarse. Después de dos años, Harry pensó que ya era suficiente tiempo y decidió presentar formalmente a Draco a sus hijos.
-Tranquilízate Harry
-Es que llegaran en cualquier momento
-No se supone que debería ser yo el nervioso?
-Creo que no deberían venir hoy –tomando el teléfono- si llamo a Ginny todavía puedo cancelar…
-No vas a llamarla –le arrebato el teléfono y lo miro con cierto hastió- no vas a darle la satisfacción de que piense que no puedes tener una nueva vida, solo no estés nervioso que me alteras
-Lo siento, es que…. –suspirando- es por los niños ¿y si están incómodos?
-No pensé que fuera un ogro para caerles tan mal -dijo frunciendo el ceño-
-No eres tú, son los niños -sentándose en el sillón- ellos aun me culpan del divorcio y no quiero que piensen que no me preocupo por ellos por tener una nueva vida.
-No sé lo que pensaran, pero son tus hijos Harry -Se sentó junto a Harry poniendo su frente en su hombro- ellos te aman y…
El sonido del timbre lo interrumpió.
-Supongo que no hay marcha atrás -dijo limpiando sus lentes-
-Solo espero que no signifique lo que yo pienso -Murmuro-
Draco se adelanto y abrió la puerta y ahí estaban. Los tres se le quedaron viendo, más adelante se veía la camioneta de Ginny arrancando dejando una nube de polvo. Se escucharon unos débiles hola, Harry se metió entre Draco y abrazo a sus hijos.
-No saben cuánto los he extrañado chicos –abrazo y beso a cada uno- Vamos, pasen
-Papá! -Dijo James restregándose la mejilla- ya te dije que no me gustan los besos!
-Eso no es cierto James! -le boicoteo Lily- que el otro día… Ahh!
Harry vio cuando James le pego en el brazo, estar con sus hijos y Draco en la misma casa todo un fin de semana seria toda una odisea.
-James, no le pegues a tu hermana y discúlpate –lo miro seriamente- y ahora quiero presentarles a Draco, ya saben que es mi pareja y que vive conmigo y espero que se lleven bien con el.