(Disclaimer: Hetalia no me pertenece, ni sus personajes, ni Disney, ni sus historias que luego yo mejoro, yeah! D-digo…emm… jajaja .D )

Well, antes que nada gracias a los que os halláis atrevido a pasaros por aquí.

Espero que disfrutéis del primer cuento de muchos más que habrá!

No quiero enrollarme mas y os dejo ya con… Los tres cerditos!

En lo más profundo del bosque vivían juntos tres cerditos. El mayor de todos era Arthur, el que le seguía se llamaba Alfred, y el más pequeño de los tres era Matthew.

Un día tanto Alfred como Matthew se independizaron y cada uno fue por su lado, queriendo construirse cada uno la casa de sus sueños. Arthur, como su hogar le traía tristes recuerdos al encontrarse solo, decidió marcharse y emprender una nueva vida, construyéndose otra casita sólo para él.

-Bueno... s-será mejor que e-empiece... -murmuró Matthew estrujando a su osito de peluche, buscando por todas partes algo con lo que construir su casita- Oh! e-esto…será perfecto...-sonrió mientras cargaba con un montón de paja-

-¡Hahahahaha! ¡El hero construirá una enoooorme casa para el solo! ¡hahaha! -reía felizmente Alfred, que cargaba sin mucho esfuerzo con un montón de ramas, palos y demás-

-Bloody hell... ¡e-ese par de idiotas! -maldecía Arthur recordando a sus dos pequeños "hermanitos" mientras construía su bonita casa con unos duros ladrillos-

Un día, cuando Matthew ya tenía hecha su casita de paja, Alfred la suya de palos, y Arthur de ladrillos, apareció por la zona un malvado lobo de pelaje albino y ojos rojos.

-¡Kesesese~! ¡aquí está el awesome yo! -gritó a pleno pulmón en cuanto divisó a Matthew que paseaba por allí-

-¡...! ¡U-un lobo..! ¡un lobo! -gritó asustado, corriendo a esconderse en su casita-

-Kesesese~ ¡no huyas del awesome Gilbert pequeño cerdito! -volvió a gritar mientras corría hacia la casita- ¡Hey! ¡si no me abres para que pueda comerte, el awesome yo soplará y soplará y tu casucha derribará! -dijo con una gran sonrisa-

-N-no...no pienso salir...-murmuró Matthew temblando dentro de la casa-

-¿Qué? ¡No te oigo! Kesesese~ ¡está bien! ¡tú lo has querido! -gritó el lobo, y empezó a soplar awesomemente hasta que la casita se vino abajo-

-¡Uaaaah! -Matthew estrujó a su osito y salió huyendo de allí, dirigiéndose a casa de su heróico hermano-

-¡Kesese! ¡dije que no huyeras del awesome yo, maldita sea! -gritó Gilbert corriendo detrás de él-

-¡Hahaha! ¿...hum? ¿Quién será? -se preguntó Alfred asomándose por la mirilla de su puerta hecha de palos-

-¡…P-por favor! ¡ábreme…! -dijo Matthew desesperado y aporreando la puerta-

-¿Quién eres? -preguntó Alfred al no reconocer al que estaba fuera-

-¡Matthew! -gritó viendo como el lobo se aproximaba-

-Who? -seguía preguntando el heróico cerdito-

-T-tu hermano… ¡...p-por lo que más quieras ábreme! -suplicó al borde de las lágrimas al sentir como ya estaba al alcance del lobo-

-¡Oooh! ¡pero si eras Mattie! hahaha~ ¿Por qué no lo habías dicho antes? -dijo muy sonriente Alfred al abrir la puerta y ver a su querido hermano temblando-

Rápidamente Matthew entró en la casa empujando a Alfred y cerró bien la puerta dejando escapar un suspiro de alivio.

-Esto ¡...Hey! ¿¡Quién eres tú y que haces colándote así en mi casa! -dijo Alfred al observar bien al otro cerdito- ¡Ah! ya.. que eres tú! hahaha, ¿y bien? ¿qué ocurre? ¿qué te trae por aquí? Echabas de menos al hero, ¿verdad? ¡hahahaha! si es que no se puede vivir sin m…-fue interrumpido por unos fuertes golpes en su puerta-

-¡Vamos cerditos! ¡Abridme ahora mismo o el awesome yo se morirá de hambre, y nadie querría esa desgracia mundial! ¿verdad? kesesese~ -gritó Gilbert relamiéndose-

-¡Uaaaah! ¡u-u-un lobo! Oh my god! ¡un lobo! ¡un lobo! -chilló Alfred zarandeando a Matthew al ver a Gilbert desde la ventana-

-…T-tranquilo...e-estaremos a salvo aquí -dijo Matthew tratando de tranquilizarle, pero golpes más fuertes se oyeron desde el exterior-

-¡Si no me abrís el awesome yo soplará y soplará y esta poco awesome chabola volará! kesesesese~ -gritó Gilbert cogiendo aire para luego soplar awesomemente-

-¡No es un chabola, es mi guarida secreta! ¡todos los héroes deben tener una! ¡y-y yo soy uno! ¡a-así que no te tengo miedo! ¡hahaha! -dijo Alfred recobrando su espíritu de hero, pero este voló junto a toda la casita- ¡Uaaaah! -chilló agarrando a Matthew y corriendo hacia la casa de Arthur que se encontraba cerca de allí-

Mientras tanto, Arthur se encontraba en su casita tomándose un delicioso té, ajeno a todo lo que estaba pasando.

-¡Artie! ¡Hey Artie! ¿estas ahí? ¡sé que estás ahí! ¡a-abre ahora mismo al hero! ¡Arthuuur! -gritaba Alfred aporreando la puerta, capaz de romperla en cualquier momento-

-...- Arthur frunció el ceño fingiendo no oír nada, o mejor dicho, fingiendo que no estaba en casa-

-¡Hey! ¡Arthur! ...te veo~ ¡hahaha! -dijo Alfred ahora pegando su cara al cristal de una de las ventanas, Matthew también estaba pegado a éste, pero Arthur no se percató del segundo cerdito-

-¡...Grrr! ¡Maldito bloody git emancipado! ¡Lárgate de aquí! ¡no quiero verte! -chillóArthur con ira, apunto de lanzar su té contra la ventana, cosa que no hizo porque su taza era demasiado cara-

-¡Hahaha! yo también me alegro mucho de verte Artie~ ¡p-pero me persigue un malvado lobo! ¡a-así que déjame pasar, please! -dijo Alfred ahora con cara de terror-

-...y-yo también estoy aquí...hey... -dijo Matthew al oir como Alfred no lo mencionaba-

-…Hum...-Arthur fue a abrir la puerta de mala gana, no quería pero algo le obligaba en ayudar a ese idiota-hero-cerdito- Bien, p-pero mas te vale que no sea mentira y ¡...uah! -gritó al ver como Gilbert corría hacia ellos a gran velocidad. Alfred y Matthew entraron corriendo dentro de la casa y Arthur cerró la puerta con llave-

-Kesesese~ ¡Estúpidos cerditos! ¡¿No os dais cuenta de que estáis destinados a ser el almuerzo del awesome yo? ¡Venga, es todo un honor! kesesese~ -rió el awesome y hambriento lobo- ¡Si no me abrís por las buenas, destruiré esta casa por las malas!- gritó para volver a coger aire y soplar awesomemente- ¡¿Eh? ¡¿P-por qué no se viene abajo con mi awesome soplido? -gritó Gilbert confuso-

-¡Ahahaha! ¡estúpido lobo! ¿Crees que vas a derribar esta casa? -dijo Arthur con una sonrisilla desde la ventana-

-...Buu...n-no puede porque el hero esta en ella, ¡¿v-verdad? -dijo Alfred escondido debajo de una mesa junto con Matthew-

-No idiota...es porque está hecha de ladrillos -dijo Arthur mirándole mal-

-Kesesese~ ¡si no puedo derribarla, entonces encontrare la forma de entrar! ¡El awesome yo jamás se rinde! -grito Gilbert alejándose de la casita-

-¿…Q-qué vamos a hacer? s-seguro que volverá...y...y...entrará, y nos c-comerá...-dijo Matthew temblando ligeramente, saliendo de debajo de la mesa-

-Hum, no te preocupes...tengo una idea -dijo Arthur mientras observaba su chimenea-

-¡Oh! ¡Ya sé, ya sé! ¡Construimos un súper rayo destructor! ¡Dejamos la puerta entreabierta, y cuando ese malvado lobo asome su hocico por ella lo encendemos y lo freímos! ¡hahaha! ¡y entonces seremos nosotros quienes nos lo comeremos a él! ¡Es una idea genial! Hey Artie, ¿tienes pan de hamburguesa por aquí? ¡voy a hacerme una hamburwolf! -dijo Alfred sonriendo ampliamente y yendo hacia la cocina en busca del pan-

Arthur y Matthew suspiraron con mucha paciencia. Al rato Arthur se dirigió a su chimenea y mandó a Matthew a por agua, la que echaron en la gran caldera que tenían puesta. Arthur encendió el fuego y el agua empezó a hervir.

-Kesesese~ ¡sólo al awesome yo se le podría ocurrir la awesome idea de entrar por la chimenea! -dijo sonriente Gilbert subido al tejado de la casa- Ho ho ho~ ¡Feliz navidad! ¡El awesome papa Gilbert ya esta aquí~! -gritó bajando por ésta y cayendo de lleno al agua hirviendo- ¡Uaarghh! -chilló quemándose sin poder salir de la caldera-

-¡Ahahaha! ¡Sufre la maldición del agua hirviendo, bastardo! -dijo Arthur con una sonrisilla malvada, Matthew lo miró asustado y sin entender-

- Oh, ¿al final va a ser sopa de lobo? ¡Hahaha! -dijo Alfred al salir de la cocina, viendo a Gilbert en la caldera-

-¡Ay! E-el awesome yo no...¡aah! p-puede quemarse s-su…¡aauch! ¡awesome pelaje! –gritó éste y finalmente consiguió salir del agua hirviendo, quedando algo quemado huyó awesomemente lejos de allí- ¡Kesesese~! p-pero...volveré, ¡ya lo veréis! ¡E-el awesome yo siempre vuelve! -gritó desapareciendo en la profundidad del bosque-

-¡Hahaha! ¡pero el hero estará aquí esperándote para darte otra lección! -gritó Alfred desde la puerta, Arthur le miro con mala cara, mas no dijo nada-

Y así fue como gracias a un awesome lobo, los tres cerditos volvieron a vivir juntitos y felices.

FIN

Hey! espero que os hay gustado.

Si es así podéis dejar un awesome review! Y si no… también! xD

P.D: los próximos cuentos serán mucho más largos! .D

bye~