-¿Has leído esto? -dijo Dianna mientras entraba en el trailer y dejaba una revista sobre el tocador.

Lea, que se encontraba sentada frente al espejo mientras se retocaba los labios, la miró y luego dirigió su mirada a la revista, que cogió con sus manos.

En portada había una foto de ellas dos, tomada un par de días atrás cuando habían ido de compras juntas. Lea se encontraba agarrando el brazo de la rubia mientras se miraban sonriendo, seguramente después de que alguna de las dos había dicho algo divertido.

Y debajo de la foto se encontraba el titulo.

"¿Algo mas que amistad?"

Lea suspiró y lanzó la revista lejos de ella.

-¿Otra vez andan con eso? -dijo con tono cansado.

Dianna se sentó en uno de los sillones que adornaban el lugar sin dejar de mirarla.

-Eso parece... -dijo en el mismo tono.

La otra la siguió con la mirada a través del espejo y después se giró para observarla mejor.

-¿Tu entiendes porque esa obsesión con que estamos juntas? Si yo tengo novio y tu has mostrado mucho interés en los chicos -dijo intentando encontrar una explicación.

Dianna meditó la respuesta.

-Según dicen es que tenemos mucha química y nuestros gestos son de atracción, no de amistad -se encogió de hombros.

-Lo de la química es algo que no puedo negar, lo reconozco -afirmó Lea mientras se incorporaba para después sentarse al lado de la rubia apoyando la cabeza en su hombro- pero lo de los gestos no estoy de acuerdo, si fuesen de atracción serian de otra manera.

Dianna rodeó los hombros de la otra con su brazo y la miró sonriendo.

-¿A si? ¿Como serian? -se rió suavemente.

Lea la miró y sonrió de forma traviesa.

-Pues ya sabes... te tocaría el culo, me mantendría todo el día pegada a ti, acariciaría tu piel... ese tipo de cosas.

Dianna se rió aun mas.

-Creo que todo eso ya lo has hecho y en mas de una ocasión -le recordó.

Lea puso cara contrariada mientras intentaba recordar, hasta que su cara se iluminó comenzando a reír

-Bueno vale, puede que si lo haya hecho. Pero no es de manera sexual, ya lo sabes.

Dianna asintió.

-Lo se, pero ya sabes como son los periodistas y la gente en general -le acarició la cabeza con suavidad.

-Creo que todo esto es por nuestros personajes, por el amor-odio que hay en su relación. Ahí si que hay tensión y la gente lo interpreta por sexual -se quedó callada durante unos segundos y después prosiguió- ¿Te imaginas que nuestros personajes acabasen juntos?

Dianna se rió.

-Creo que a mas de uno le daría un infarto de la emoción y otros me odiarían por separar a la famosa y querida pareja de Rachel y Finn -bromeó.

Lea abrazó la cintura de la otra con suavidad.

-Se acabarían acostumbrando, nos vemos adorables juntas.

-Eso es cierto -dijo mientras la miraba sonriendo.

El teléfono de Lea comenzó a sonar así que se levantó y acercándose al tocador donde lo había dejado, lo cogió y miró quien era.

-Mi publicista... -dijo con desgana mientras miraba a Dianna.

La otra le lanzó una mirada de animo y la morena por fin respondió.

-¿Si?... Si lo he visto... Solo fuimos de compras... Ya lo se... -frunció el ceño- Me da igual lo que digan... ¿Pero porque tengo que esconderme? No hacemos nada malo... -suspiró- Lo que tú digas... Si, ya hablamos después

Colgó y se dejó caer en el sofá volviendo a la misma posición en la que estaban antes de ser interrumpidas

-¿Que pasó? -le preguntó Dianna mientras volvía a acariciar su cabeza.

-Lo de siempre -suspiró cansada- Que los rumores siguen extendiéndose, que puede afectar a mi carrera, que tengo que tener cuidado, que seria mejor que no nos vieran juntas en publico y ese tipo de cosas -se abrazó mas a ella.

Dianna la observó durante unos minutos.

-¿Crees que tiene razón? -dijo lentamente.

Lea la miró confundida ante la pregunta.

-Se que lo que dice tiene sentido, sobretodo para mi carrera, pero es que no hacemos nada malo, solo somos unas amigas que van juntas a comprar. ¿Porque tengo que ocultar eso?

-Porque la gente lo malinterpreta -afirmó.

Lea suspiró de nuevo y se separó levemente de ella para observarla mejor.

-¿No quieres que nos vean juntas en público? -preguntó dolida.

-No he dicho eso, solo quiero saber que piensas respecto a eso.

Lea alzó una ceja.

-Pienso que mi carrera es importante si, pero también lo son mis amigos y no los voy a dejar de lado para llegar a la cima.

Dianna suspiró y se pasó la mano por el pelo echándolo hacia atrás.

-¿Y tú que piensas? -preguntó Lea al ver que la otra no decía nada.

Se miraron durante unos segundos antes de que la rubia respondió.

-Sabes que yo no estoy acostumbrada a que me persigan por la calle, que evalúen cada paso que doy en mi vida juzgándolo e interpretándolo como ellos quieren. Tú lo llevas con naturaleza, como si no te importase, siempre con una sonrisa en tu rostro, pero yo me siento presionada, mucho. No me gusta que se metan en mi vida privada.

-Eso viene con la fama... -dijo de forma delicada Lea.

-Lo se, pero yo no busco la fama, solo busco trabajar en lo que me gusta y que la gente sepa valorarlo, la fama para mi es una carga que viene con el trabajo.

Lea la miró detenidamente.

-¿No te gusta tener fans que te quieren y te apoyan?

-Si me gusta, me hacen sentir querida y a gusto con lo que hago, pero por otra parte me molesta que quieran saber mas allá de lo que es mi trabajo, que lo quieran saber todo de mi.

-Comprendo... -dijo Lea mientras la abrazaba- Aprenderás a sobrellevarlo, ya veras.

Dianna le correspondió mientras asentía

-Eso espero... -susurró.

De repente la puerta del trailer se abrió y Jenna entró a toda prisa.

-¡Lea! ¡Has visto... ! -se detuvo al ver a las dos abrazadas en el sofá

Las chicas la miraron y asintieron.

-Lo hemos visto -dijeron a la vez.

-Ah... -dijo Jenna sin saber muy bien que decir.

Se las quedó mirando durante unos minutos hasta que volvió a hablar.

-La verdad es que, si no os conociera, yo también pensaría que sois pareja.

Las otras dos se miraron y fruncieron el ceño para después volver a mirar a Jenna.

-¡No os enfadéis! -dijo rápidamente- Es que no os separáis nunca y siempre estáis.. bueno, así -las señalo para dar a entender que se refería al abrazo.

Dianna suspiró y se separó de Lea para después ponerse de pie mientras que la morena se cruzó de brazos.

-Somos amigas, es normal que nos abracemos -dijo Lea.

-Nosotras también somos amigas y no hacemos eso -explicó Jenna.

-Porque tú tienes una personalidad diferente -se justificó Lea.

-¡Ya vale! -dijo de repente Dianna haciendo que las otras dos la miraran sorprendidas.

Cogió aire y se giró para mirar a Lea.

-Nos vemos luego, ¿de acuerdo? -la morena asintió y Dianna le dio un beso en la mejilla para después salir no sin antes lanzarle una mirada furiosa a Jenna.

-Que humor... -dijo Jenna cuando se quedaron a solas.

Lea giró los ojos.

-Sabes que le molestan ese tipo de comentarios, no se porque sigues haciéndolos -le recriminó.

Jenna sonrió traviesa.

-Por que es divertido ver como se pone.

Lea frunció el ceño y luego se rió suavemente.

-Eres imposible.

-Lo se -dijo mientras se sentaba en el mismo sitio que antes ocupaba la rubia- Pero en serio le afectan demasiado, parece que le gustas y no quiere que la descubran -bromea Jenna.

Lea le lanza una mirada furiosa y automáticamente Jenna se arrepiente del comentario.

-Por ese tipo de comentarios es por lo que se molesta y con razón -se levantó y salió rápidamente del trailer dando un portazo.

Jenna se quedó con la boca abierta aun sentada y cuando reaccionó salió corriendo detrás de la morena.

-¡Lea! ¡Espera! -consiguió alcanzarla en uno de los pasillos- Era una broma, lo siento.

Lea se detuvo y la miró aun enojada.

-Ya tenemos que aguantar lo que dicen de nosotras fuera de aquí, no quiero tener que andar preocupada de lo que penséis también vosotros si la abrazó.

-Lo entiendo -dijo lentamente- No volveré a hacerlo.

Lea suspiró.

-Bien -y siguió caminando por el pasillo.

-¿A donde vas? -le gritó Jenna.

La morena siguió caminando y la ignoró


Al final de la jornada de trabajo, que desgraciadamente había acabado bastante tarde debido a una escena que tuvo que hacer con Chris, Lea se dirigía a su coche junto con el chico cuando de repente los dos se detuvieron al ver que Dianna salia por una de las puertas del estudio y se dirigía a su coche sin darse cuenta de la presencia de los chicos.

Los dos se miraron confundidos, ya que estaba oscuro, pero no tanto como para no verlos, parecía que la rubia iba perdida en sus pensamientos y por eso no los había visto.

Chris se encogió de hombros y Lea comenzó a caminar rápidamente para alcanzar a la otra.

-¡Di! -le llamó cuando casi estaba llegando a su lado.

Dianna del susto dio un pequeño salto y se le cayó el bolso al suelo, en el que estaba buscando las llaves unos segundos antes.

Lea rápidamente llegó a su lado y observó a la rubia que la miraba asustada con una mano en su pecho.

-¿Me quieres matar? -le recriminó y la morena no pudo evitar sonreír

-Eso seria lo ultimo que querría -dijo sonriendo aun mas.

Dianna se rió suavemente y se agachó para recoger sus pertenencias esparcidas por el suelo. Lea la imitó ayudándola

Cuando se volvieron a incorporar, Lea le dio las cosas que había recogido y se quedaron mirando.

-Gracias -dijo suavemente la rubia.

Lea le dedico una sonrisa.

-Chris y yo vamos a ir a cenar por ahí, ¿quieres venir? -le preguntó señalando al chico que se encontraba alejado de ellas apoyado en el coche de la morena esperándola

Dianna la miró confundida al principio ya que no había visto al chico, pero siguió la mirada de la morena y luego la volvió a mirar.

-La verdad es que no me apetece mucho -dijo mientras se mordía el labio y comenzaba a caminar de nuevo.

Lea frunció el ceño y la siguió.

-¿Estas bien? -le preguntó preocupada.

-Claro -dijo sin mirarla mientras llegaba al coche.

Abrió la puerta pero Lea se la cerró colocándose entre ella y el coche haciendo que la rubia la mirase contrariada.

-¿Que te pasa? -siguió preguntando Lea mientras la miraba a los ojos.

Dianna le devolvió la mirada para después suspirar pesadamente.

-Lo siento... -susurró- Ha sido un día muy largo y solo quiero llegar a casa y descansar -le explicó algo avergonzada.

Lea continuó observándola detenidamente.

-Hay algo mas... -afirmó.

Dianna desvió la mirada sin poder evitarlo.

-¿Como eres capaz de ver tan bien a través de mi? -preguntó algo confusa.

La otra se encogió de hombros sin dejar de mirarla.

-¿Aun sigues pensando en lo de esta mañana?

Dianna se mordió el labio aun sin mirarla.

-Odio que juzguen de esa manera mis actos... -dijo lentamente.

-¿Por qué te importa tanto lo que piensen los demás?

-Porque en este mundo es lo que importa. Da igual lo que tu hagas o digas, todo se basa en como lo interpreten los demás -intentó explicar la rubia.

-¿Quieres que dejemos de vernos en público? -dijo de repente Lea haciendo que Dianna la mirase asustada- No me mires así, si lo que te preocupa es lo que digan al vernos juntas, esa es la solución.

-¡No! -dijo rápidamente la rubia- no quiero eso... -suspiró y se pasó la mano por el pelo nerviosa.

-¿Entonces? -preguntó confundida la morena.

-Solo... me preocupa que a la gente le importe mas esto -señalo a la morena y luego a ella misma- que nuestro trabajo.

Lea le sonrió dulcemente.

-Eso no pasara. Hoy somos noticia, pero mañana alguien mas estará en esa portada y se habrán olvidado de nosotras -intentó tranquilizarla.

-¿En serio lo crees? -le preguntó Dianna ya que ella tenia bastantes dudas al respecto.

-Si, pero de todas maneras, si no es así, no me importa. Trabaja y vive tu vida, lo demás no importa Di.

Volvió a suspirar y asintió.

-Intentare pensar así

-¿Segura que no quieres venir con nosotros a cenar? -le volvió a preguntar.

-No, pero gracias -dijo sonriéndole levemente.

Lea la examinó y después asintió.

-Si necesitas hablar, ¿me llamaras? -dijo mientras se apartaba y le abría la puerta a la otra.

Dianna se sentó en el coche y después la miró.

-No prometo nada.

La morena frunció el ceño y cerró la puerta mientras que la otra bajaba la ventanilla para seguir hablando.

-Eres una cabezota -le recriminó Lea.

Dianna sonrió traviesa.

-Lo se.

-A veces echo de menos vivir contigo para que no te puedas escapar de mi.

La otra se rió suavemente.

-Y yo, era agradable, aunque agotador. Tienes demasiada energía para mi -dijo tomándole el pelo.

Lea se cruzó de brazos haciéndose la ofendida.

-Pues bien que te gustaba que me pasara el día pegada a ti -le recriminó.

-Eso es algo que no puedo negar -le sacó la lengua.

Lea no pudo evitar comenzar a reír y después introdujo su cabeza por la ventanilla y besó suavemente la mejilla de la rubia.

-Descansa -le susurró.

Dianna le sonrió dulcemente.

-Tu también -arrancó el coche- Y dale saludos a Theo de mi parte.

Lea asintió y observó como la otra se alejaba de allí. Después de perderla de vista comenzó a caminar de vuelta con Chris que seguía esperándola en el mismo sitio.

-¿Está bien? -le preguntó mientras los dos entraban en el vehículo

-Solo está algo agobiada por lo que dicen de ella en las revistas -le explicó.

-Es normal, a mi también me pasa y eso que no recibo tanta atención como ella -se calló unos segundos- ¿Sera porque no tengo tan buen cuerpo como ella? -bromeó fingiendo estar meditándolo

Lea se rió y se pusieron en camino hacia el restaurante.

-Seguramente -le respondió y los dos comenzaron a reír


A la mañana siguiente Lea se encontraba aun acostada en la cama cuando el sonido del timbre la despertó.

Levantó la cabeza aun con los ojos medio cerrados intentando asimilar aquel sonido que había interrumpido su sueño. A los pocos segundos el timbre volvió a sonar y ella dirigió su mirada al despertador de su mesilla.

Maldijo por lo bajo al darse cuenta que eran apenas las 7 de la mañana y se levantó para después dirigirse hacia la puerta mientras se restregaba los ojos intentando eliminar el sueño de ellos.

En el camino hacia la puerta se dio cuenta de que la casa estaba vacía, así que Theo ya debía de haberse ido a trabajar hacia rato.

Por fin y con gran, esfuerzo ya que había caminado casi arrastrándose, abrió la puerta encontrándose a una Dianna sonriéndole dulcemente y con una bolsa en sus manos.

Lea al verla no pudo evitar que una sonrisa se formase en su rostro.

-Buenos días -dijo Dianna mientras entraba en la casa aunque la morena no la había invitado.

Pero eso era algo común en ellas, la confianza que tenían les permitía hacer ese tipo de cosas.

-Buenos días.. -masculló Lea aun algo dormida.

Dianna la miró aun sonriendo mas y se dirigió a la cocina seguida de la otra.

Usó la bolsa sobre la mesa y comenzó a sacar cosas.

-¿Que es eso? -preguntó curiosa Lea.

-El desayuno por supuesto -explicó- No iba a venir a estas horas, despertarte y no traerte algo para hacerte feliz -bromeó.

Lea se rió.

-¿Y como sabias que estaría durmiendo? -cuestionó.

Dianna alzó una ceja y sonrió traviesa.

-Dado que no tienes que ir a trabajar hasta las 10 y las horas que son, solo podrías estar haciendo dos cosas -Lea la observaba curiosa- Una es dormir y la otra implica a cierto novio tuyo, en cualquiera de las dos situaciones, necesitaba compensarte por venir a estas horas.

Dianna terminó de hablar y le guiñó un ojo a la otra, mientras que Lea no podía evitar sonreír ampliamente por lo que acababa de decir la otra.

La rubia terminó de sacar las cosas y le tendió el café que había traído para la otra.

Lea lo cogió aun sonriendo y lo olió para después mirarla.

-¿Como me gusta? -preguntó divertida.

-Por supuesto.

-¿Que haría yo sin ti? -bromeó Lea.

-No lo se, yo a veces también me lo preguntó -continuó con la broma la otra mientras se sentaba a la mesa después de haber cogido los cubiertos necesarios para comer.

Lea la imitó y empezó a mirar lo que contenían las cajas de comida.

Su rostro se iluminó cuando vio que se trataba de todo lo que le encantaba.

-Me consientes demasiado -dijo comenzando a comer.

Dianna se rió y ella también comenzó a comer.

-Puede ser, pero merece la pena.

-¿Porque? -preguntó después de tragar.

-Por verte sonreír así -dijo para después sacarle la lengua.

Lea comenzó a reír

-¿Así que con mi sonrisa puedo conseguir lo que quiera, eh?

Dianna la miró detenidamente mientras sonreía traviesa.

-Seguramente, si -dijo riéndose

-Lo tendré en cuenta -dijo señalándola con el tenedor dándole mas énfasis a sus palabras y después continuo comiendo.

Cuando terminaron de desayunar y recogieron todas las cosas, las dos se volvieron a sentar en la mesa de la cocina y se quedaron mirando, hasta que Lea rompió el silencio.

-¿A que debo tu visita? Y no es que me queje -aclaró- en absoluto.

Dianna sonrió levemente y desvió la mirada.

-Quería compensarte por lo de ayer. No debería haberme puesto así -explicó.

Lea hizo un gesto para quitarle importancia.

-No tienes que preocuparte por eso Di.

-Es que no quiero que pienses que me importa mas lo diga la gente a nuestra amistad.

-Nunca he pensado eso. Solo quería hacer las cosas un poco mas fáciles para ti.

Dianna suspiró y apoyó su barbilla en su mano.

-Creo que solo estoy un poco agobiada por toda la presión de los medios, los fans, los publicistas, el manager... -dijo con tono cansado.

Lea se levantó y se acercó a ella para abrazarla. Dianna cerró los ojos y apoyó la cabeza en el pecho de la otra ya que al estar sentada su cabeza quedaba a esa altura.

-¿A que hora tienes que ir a trabajar? -preguntó Lea después de unos minutos de estar acariciando la cabeza de la otra.

-A las 10 tengo una entrevista en el set y a las 11:30 tengo una escena con Mark -explicó sin abrir los ojos.

Lea sonrió.

-¿Así que era eso? -dijo haciendo que la otra la mirase confundida- Estas nerviosa por la entrevista -aclaró.

Dianna se mordió el labio y asintió. Lea volvió a acariciarle la cabeza.

-Todavía me acuerdo de tus noches en vela antes de una entrevista -continuó Lea bromeando.

-Y tú siempre acompañándome para que no estuviera sola.

La rubia suspiró y se incorporó para después mirar a la morena que la miraba sonriendo.

-Comiendo helado y viendo películas -prosiguió la morena.

Dianna se rió y asintió.

-¿Sabes que eso podemos seguir haciéndolo no? -le preguntó Lea.

Desvió la mirada y se apoyó en la encimera.

-Ya no es lo mismo -dijo tristemente- Ademas, no quiero robarte el poco tiempo que tienes con Theo.

Lea la miró frunciendo el ceño.

-Mi tiempo lo administro yo a mi manera y si tú me necesitas voy a estar allí, al igual que si él me necesita -se calló unos segundos y después prosiguió- No pienses que te vas a librar de mi solo por que tenga novio -bromeó.

Dianna se rió suavemente.

-Ni se me había pasado por la cabeza -bromeó.

-Yo se que eso es lo que quieres -continuó la morena fingiendo estar indignada.

-La verdad es que si, pero no hay manera -dijo Dianna seria.

Lea la miró con la boca abierta hasta que Dianna no pudo aguantar mas y comenzó a reír

-¡No tiene gracia! -le recriminó pegando suavemente el brazo de la otra.

-Si hubieras visto tu cara te darías cuenta de que si la tiene -dijo entre risas la rubia.

Lea se cruzó de brazos y le dio la espalda a la otra dándole a entender que estaba enfadada.

Pero al verla, Dianna se acercó a ella lentamente y la abrazó por la espalda.

-Sabes que me encanta pasar tiempo contigo -le susurró al oído- No me quiero librar de ti.

-No se yo... -le respondió aun con los brazos cruzados.

-Solo no quería que descuidases a Theo por mi. Porque se que cuando te preocupas por alguien e intentas ayudarle, te olvidas de todo lo demás -le explicó.

Lea la miró de reojo.

-No es que me olvide de lo demás, es que cambio mis prioridades temporalmente -dijo poniendo cara de niña buena.

Dianna se rió suavemente y le dio un beso en la mejilla.

-Creo que es hora de que me vaya -le informó separándose de ella.

Lea se giró para mirarla después de mirar la hora.

-¿Tienes mucha prisa? -le preguntó.

-No mucha, ¿por? -le respondió intentando averiguar que pasaba por la cabeza de la morena.

-¿Me esperas y vamos juntas? -le pidió.

Dianna se mordió el labio.

-Van a estar allí los periodistas para mi entrevista. No creo que sea conveniente que lleguemos juntas.

Lea suspiró y miró al suelo.

-Cierto, tienes razón. No me había dado cuenta.

La rubia la miró sintiéndose culpable.

-¿Que tal si para compensarte, te invito a comer?

-Hoy tengo el horario un poco apretado, no creo que me de tiempo a salir para comer, tendré que picar algo allí -le explicó tristemente.

Dianna meditó durante unos segundos y después se acercó a ella para abrazarla. Lea por su parte se apoyó en su pecho y le correspondió al abrazo.

-Nos vemos allí entonces, ¿de acuerdo? -le preguntó Dianna.

Lea simplemente asintió abrazándose un poco mas fuerte a ella para después soltarla y mirarla a los ojos.

-Me debes una comida -dijo sonriendo traviesa.

Dianna se rió y asintió.

-Y la tendrás, no te preocupes -dijo para después besar su mejilla.

Lea sonrió aun mas y la acompañó hasta la puerta.

Cuando la rubia se hubo ido, Lea se dirigió a la ducha para prepararse para el largo día de trabajo que tenia.


-¡Corten! -oyó Lea después de terminar una secuencia.

Se giró hacia el director esperando su veredicto.

-Ha quedado bien -les informó- Tenéis media hora para comer, luego proseguimos.

Lea sonrió feliz por haber terminado ya la escena porque la verdad es que hacia ya rato que se moría de hambre. Suspiró y miró como sus compañeros se dirigían hacia el exterior, en dirección al puesto de comida que se colocaba para los trabajadores del estudio.

Recordó la propuesta de la rubia de salir a comer con ella y volvió a suspirar. Le apetecía mucho estar con la ella y sobretodo no tener que comer la comida del estudio, que digamos no era de muy buena calidad.

Comenzó a caminar siguiendo a sus compañeros cuando de repente oyó como la llamaban al otro lado de la estancia.

-¿No pensaras en serio en ir a comer esa porquería no? -preguntó Dianna divertida.

Lea se giró y su rostro se iluminó. La rubia se encontraba apoyada en uno de los decorado sonriendo mientras en una de sus manos se balanceaba una bolsa de comida.

Se acercó hacia ella feliz.

-Pensé que no tenía otro remedio -le explicó.

Dianna sonrió aun mas.

-Suerte que estaba yo aquí entonces -le sacó la lengua- ¿En tu camerino o en el mio?

-Ui, eso ha senado a proposición indecente Lady Di -colocó sus manos en sus caderas para fingir estar indignada.

-Ya sabes que mis proposiciones siempre son indecentes -siguió con la broma mientras le guiñaba un ojo.

Las dos comenzaron a reír y Lea la abrazó.

-Mejor vamos al tuyo, que está mas cerca -cogió su brazo y comenzaron a caminar hacia el trailer de la rubia.

Dianna la miró divertida.

-No sabia que fueras vaga -dijo tomándole el pelo.

-No lo soy -le respondió frunciendo el ceño- Solo estoy cansada -explicó.

Llegaron rápidamente y se tiraron prácticamente en el sofá para después comenzar a sacar la comida de la bolsa colocándola sobre la mesa.

-¿Qué tal la entrevista? -le preguntó Lea.

Dianna suspiró.

-Bien, dentro de lo que cabe. Por lo menos no me preguntaron sobre ti -dijo y comenzaron a comer.

-¿Estabas nerviosa? -siguió preguntando la morena.

Dianna la miró de reojo mientras se metía el tenedor en la boca.

-Ya sabes que si -tragó el bocado- Pero solo me preguntó cosas de la serie, alguna que otra cosa personal, pero nada de importancia, así que... -se encogió de hombros- no me puedo quejar.

-¿Alguna pregunta interesante?

Dianna meditó durante unos segundos.

-Si, me preguntaron si Beth volvería a aparecer en la serie.

Lea la miró detenidamente.

-¿Y que respondiste?

-Que no lo sabia, pero la verdad es que me ha hecho pensar. Se podría crear una buena trama con esa historia, pero parece que se han olvidado de ella. Ahora parece que mi personaje nunca a tenido una hija.

Lea asintió lentamente.

-Me he dado cuenta, pero nosotras no podemos hacer mucho al respecto, ya lo sabes.

-Lo se, es solo que me gustaría trabajar sobre eso, que quiera ver a su hija, que quiera saber como está, no se, algo para poder crear emociones.

-¿Quieres pasarte los capítulos llorando o triste? -bromeó la morena.

-No estaría mal -se rió suavemente- aunque las dos sabemos que la dramática de la serie es tu personaje.

-Ciertamente -se rió con la rubia y siguieron comiendo.

Pero unos golpes en la puerta las interrumpió.

Mark asomó la cabeza y les sonrió.

-Aquí estáis -dijo y después su cabeza volvió a desaparecer -¡Aquí estestán! -gritó.

Las dos se miraron sin comprender que pasaba hasta que de repente Mark se internó en el trailer seguido de Chris, Amber, Jenny y Cory.

-¿Que hacéis aquí? -cuestionó la rubia.

-Comer con vosotras -respondió Mark sonriendo aun mas mientras se sentaban como podían alrededor de la mesa.

Dianna alzó la ceja y miró a la morena que se encogió de hombros.

-¿Que habéis traído? -dijo Lea mientras se inclinaba rebuscando en la comida de los demás- Iugh... carne... -puso cara de asco y se volvió a sentar en el sofá a su lado.

Dianna suspiró y siguió comiendo mientras la morena comenzaba a mantener una conversación con Cory sobre la canción que tenían que cantar ese día juntos.

-¿Os hemos interrumpido? -preguntó Chris en un susurró a la rubia.

Dianna lo miró y negó con la cabeza.

-Solo estábamos hablando.

Chris observó el rostro contrariado de la otra y añadió.

-¿Quieres que los saqué de aquí para que esteis solas? -siguió susurrando para que el restó no lo oyeran.

-No, da igual Chris -dijo de manera cansada.

El chico se encogió de hombros y siguió comiendo su comida.

Al poco rato aparecieron también Naya y Heather.

-¿Os escondéis de nosotros? -dijo Naya al entrar y acomodarse como podía en aquel lugar tan pequeño y con tanta gente.

-¡Para nada! -dijo Lea sonriendo- aquí hay sitio para todos.

Dianna giró los ojos y se hundió mas en su asiento, dejando la comida a un lado, se le había quitado el apetito.

Fueron pasando los minutos y Dianna solo observaba a sus compañeros, que mantenían conversaciones animadas entre ellos, a veces hacia algún comentario cuando le preguntaban, pero nada mas, hasta que miró la hora y se incorporo de su asiento haciendo que todos la mirasen.

-Creo que ya deberíamos volver, ya se acabó la hora para comer -les informó.

Los chicos asintieron y comenzaron a recoger sus pertenencias mientras que la rubia, esquivándolos, consiguió salir del trailer.

Nada mas hacerlo respiró profundamente.

-¿Estas bien? -oyó que le decía Lea a sus espaldas.

La otra la miró y asintió.

-Necesitaba algo de aire fresco -le explicó.

-Siento que nos hayan interrumpido -dijo mientras en su cara se formaba una sonrisa triste.

-No pasa nada -mintió- Se ve que tú lo has pasado muy bien y eso es lo que importa.

Lea se mordió el labio levemente y se acercó a la rubia cogió su brazo con suavidad y comenzando a caminar hacia el set.

-Lo hubiera pasado mejor a solas contigo -dijo en un susurró provocando que Dianna la mirase algo sorprendida.

Pero la morena siguió caminando sin ni siquiera mirarla dándole a entender que no esperaba una respuesta.

-Venga chicos a trabajar -les dijeron cuando entraron en el decorado del aula de Glee club.

Las dos se separaron y se dirigieron hacia los maquilladores para que los retocasen, no sin antes lanzarse una ultima mirada.