Holaaaa! etto... Solo vengo a Publicar esta historia porque es un regalo y la verdad es que no soy muy buena para esto... sinceramente prefiero leer y volar en mi imaginacion, que escribir ya que nunca fue muy buena...

Este regalo es para la señorita... Fernanda Garcia, ella fue la persona que me toco en el intercambio Navideño de Hinata Kisu...

Disclaimer: Los personajes no son mios... son del Gran Maestro Masashi Kishimoto...

Sin mas que decir... espero que les guste.

Naruto Uzumaki era conocido por ser la persona más fuerte del mundo ninja… pero esto sobrepasaba sus límites, sentía que en cualquier momento se desmayaría, su esposa daría a luz en cualquier momento a su pequeño y primer hijo.

Su vida no podía ser más feliz, además de haber cumplido su sueño de ser hokage… iba a tener una familia, su propia familia…

-Ya amigo… Hinata estará bien.- Sasuke, su mejor amigo se encontraba allí, dándole ánimos, después de tanta sangre y lagrimas derramadas lo había logrado traer… su sonrisa se ensancho pero aquel nerviosismo no desaparecía.

-Naruto todos estamos aquí… hasta el viejo amargado de Hiashi-sama.- dijo sonriendo Kiba señalando a Hiashi.

Todas las personas que habían compartido con él, maravillosos momentos se encontraban en ese lugar, compartiendo el momento más feliz que podría tener.

-Gracias chicos… no sabría que hacer si no estuvieran aquí.-

-Yo solo vine a ver a mi hija y a mi nieto… solo espero que no salga igual que su padre.- hablo Hiashi sonriendo levemente.

Aquel comentario hizo que los demás soltaran una carcajada, estaban felices por su amigo, aquel muchacho que tuvo que pasar millones de cosas pero siempre con una sonrisa.

-Naruto… ¿Cómo se llamara tu hijo?-

-Todavía no lo elegimos….- le contesto Naruto sonriendo.

Siguieron conversando entre gritos y risas como sus vidas habían cambiado tanto… las guerras nunca se acabarían pero disfrutarían todo lo que pudiesen la paz que tenían ahora.

-¡Naruto!- el grito de Sakura hizo que todos pusieran su atención en ella.- Hinata ya dio a luz.- dijo sonriendo.

Todos quedaron sorprendidos esperando la reacción de Naruto, la cual solo fue pegar un salto y salir corriendo a la sala de partos.

-Típico de Naruto.- comento una divertida Ino.

Estaba muy nervioso, tenía miedo de que algo malo pasara…

Abrió suavemente la puerta y se encontró con la imagen más hermosa que allá visto, su bella esposa se encontraba con su pequeño hijo en brazos dándole el pecho, levanto su rostro y se encontró con la mirada miel de Stunade que le estaba sonriendo con dulzura.

-Naruto entra… tu familia te está esperando.- le dijo sonriendo de forma maternal.

-Gracias.- susurro entrando suavemente y caminado hasta la cama.

-Hola Naruto-kun.- la suave y dulce vos de su esposa hizo que todo miedo desapareciera.- ¿Quieres tenerlo?- le pregunto sonriendo.

Con un poco de miedo lo tomo entre sus brazos y su sonrisa se ilumino, tenía unos mechoncitos rubios y cuando le vio a los ojos se sorprendió eran como dos grandes lunas iguales a los de su mujer.

Era tan frágil que tenía miedo de que se rompiera en cualquier momento.

-Es hermoso… ¿verdad Naruto-kun?-

-Si Hinata-chan, es hermoso….- susurro Naruto maravillado.- Bienvenido al mundo… Minato-chan-

Holaa de nuevo!... espero que les alla gustado y mas a ti... Señorita Fernanda... y sino perdon! u.u