Ok, no pido perdón por haberme creado esta cosa extraña, prefiero darle rienda suelta a mi loca imaginación, para los que les llame la atención, son bienvenidos a leerlo, si no, pues no pasa nada, lo seguiré escribiendo de todas formas jejeje
Titulo_Luna de miel en Konoha.
Autor:kallenparms
Faondom:SPN/ Naruto Shippuden
Pairing:Destiel/Sasunaru
Clasificacion: Nc/17
Advertencias: Completamente OCC. Cruce de caminos entre un anime y una serie "normal"
Descargo de responsabilidades: Naruto pertenece a Kishimoto (lastima T.T), al igual que SPN es propiedad de Kripke, hago esto sin animo de lucro, sólo dando rienda a mi lado pervertido.
Resumen: Baltasar les obsequia un viaje a Dean y Castiel como regalo de "bodas" lo que el ángel mayor no les dijo es a donde los mandaría, Naruto y Sasuke disfrutan por fin tranquilamente de su amor, hasta que llegan un par de desconocidos a su aldea. ¿Que les espera a ambas parejitas? Como lograran Dean Y Sasuke controlar sus celos al ver que sus parejas parecen llevarse sumamente bien entre ellos?
Nota: Esto es Completamente OCC. En mi mundo, Castiel a ganado la lucha en el cielo, vive una relación completa con Dean y Balty y Samm son los cuñados perfectos. Igual en Konoha no me estoy basando al cien a lo que es la aldea, ni el como van hasta ahora los mangas y el anime, mi Naru y Sasu viven su amor abiertamente, apoyados por Tsunade obba-chan y Jiraiya no a muerto
Capitulo 1 Regalo de ¿Bodas?
-Cas te tengo un obsequio – canturreó de manera juguetona, logrando que el aludido prestase atención.
-¿De que estas hablando Baltasar?
-Pues de que va a ser – contestó como si fuese obvio a lo que se refería – tengo el regalo perfecto para ti y para Dean.
Castiel le miró de forma interrogante; vale que no tenía un gran repertorio de emociones descifradas, pero podría jurar que lo que estaba atravesando por su pecho en ese momento podría describirse como ¿Angustia, o tal vez ansiedad? Francamente no lo tenía muy claro, pero no era una sensación agradable. La sonrisa que ostentaba Baltasar más que de alegría podría considerarse maliciosa.
-¿A que te refieres con eso de "regalo"? – inquirió luego de varias cavilaciones.
-Los humanos tienen como costumbre otorgar un presente a una pareja que a consolidado su relación. – Castiel quedó con la boca abierta por dicho comentario, más no pudo emitir palabra.
Baltasar siguió con su razonamiento, tratando de explicar su punto.
Sí, mira, ahora que Dean y tú son algo más que ángel y protegido, eso convierte al cazador en mi familia, es decir, Dean ahora es mi "cuñadito" – expresó con burla la ultima palabra – por tanto yo como tu hermano mayor y tratando de congraciarme con él, me veo en la obligación de otorgarles un obsequio; mostrando así que estoy completamente de acuerdo y feliz con la decisión que han tomado.
La cara de Castiel era un poema, algo parecido a un tic nervios apareció en su ojo izquierdo; sin embargo valiéndose de toda su entereza logró reponerse.
-Baltasar, - comenzó de manera pausada, intentando de ese modo que su punto de vista le quedase completamente claro a su hermano mayor. – una parte de lo que estas diciendo es verdad, si es cierto que familiares y conocidos dan obsequios a una pareja ya conformada per…
-Ah no, - le interrumpió – no me vengas con que Dean y tú no son ese tipo de pareja. Vale que no sean una pareja convencional, puesto que no entran dentro de los estándares normales. Obvio jamás habíamos podido decir que un ángel formaría una relación sentimental solida con un humano, más si la esencia del ángel se encuentra en un contenedor masculino y el ser al que le otorga su amor es también un hombre. Como sea, a lo que yo voy es a que Dean y tú se aman, por donde lo veas, se complementan perfectamente, son una linda pareja y Samm y yo los vamos a apoyar en todo.
La lógica utilizada por el mayor, no permitió replica alguna por parte de Castiel, Baltasar hablaba tan seguro de sí, que el ojiazul continuó escuchando aquello sin chistar, aunque aun no se convencía del todo.
Vamos Cas, deja de ser tan parco y disfruta un poco los placeres; te juro que papá no se molestará, o al menos no mucho, después de todo él tiene la culpa de todo lo que esta pasando, por haber abandonado el paraíso sin dejar siquiera una notita.
Había que admitir que de cierta forma Baltasar tenía una pizca de razón, así que Cas haciendo a un lado su actitud negativa, por fin decidió aceptar lo que su hermano le ofrecía.
-¿Y cual es ese regalo que tienes preparado? – se permitió preguntar
El mayor no pudo estar más complacido al ver que lo había logrado convencer al cabeza dura de su hermano.
-Es un viaje, a un lugar que estoy seguro que tú no conoces, tampoco creo que Dean lo conozca, pero sé que les gustará. Anda ve y dale la noticia a tu amorcito, para que haga los arreglos pertinentes. Por Samm no te preocupes, ya le informé sobre mi plan sobre mi plan y estuvo completamente de acuerdo, de hecho yo le cubriré las espaldas ahora que ustedes no estén; quien sabe, puede que tal vez él y yo acabemos como Dean y tú. – terminó con risilla socarrona.
Castiel ignoró el sarcasmo de su hermano, tenia asuntos que atender; con un movimiento de cabeza se despidió dispuesto a darle la noticia a su cazador.
Los Winchister se encontraban en uno de tantos moteles, compartiendo como ya era costumbre la habitación con dos desvencijadas camas.
Samm se recostó boca arriba sobre el lecho, acomodando su espalda sobre las mullidas almohadas. El día había sido duro, terminaron por darle caza a un Rungaro, no sin llevarse varios golpes en el proceso, ahora se relajaba haciendo zapping en el televisor.
Ninguno de los programas llamaban realmente su atención, constaba de varias películas que ya había visto infinidad de veces y uno que otro filme porno, gracias a que Dean seguía con su manía de contratar dicha programación. Él no lo entendía, lo consideraba un gasto innecesario puesto que Dean ya no se dignaba a ver ese tipo de filmes desde que estaba con Castiel.
FLASH BACK
"-¿Para que ver en video algo que puedes estar practicando deliciosamente con tu pareja? – respondió con sorna al cuestionamiento de su hermano menor.
-¿Y entonces para que lo contratas?
-Para ti hermanito, para que tengas un estimulo cada vez que utilices a la Manuela – contestó sardónico – enserio Sammy, me preocupas, pasas eternidades sin follar, eso no puede ser normal.
-Mira Dean, mejor no hables – se defendió molesto e indignado - el que tú te la pases tirándote a Castiel no significa que yo también tenga que andar metiendo la polla en cualquier parte ¡Por Dios Dean, si por ti fuera te la vivirías dentro del culo de Castiel, eso si que no es normal! – terminó exaltado.
-Pero ¿Apoco no nos vemos muy bien juntos? – preguntó con una sonrisa boba surcándole el rostro.
-ARGGGHHH – gruñó con asco al recordar la escena en que se despertó por los gemidos y se encontró con su hermano bien enterrado en el interior del ángel – eres un degenerado, no tienes respeto por nada.
-Vale no seas exagerado"
FIN DEL FLASH BACK
Bufó fastidiado apagando el televisor y apunto estuvo de dormirse, pero vio frustrados sus propósitos al escuchar el ya tan conocido e indiscutible aleteo del ángel de ojos azules.
-Cass – saludó incorporándose al borde de la cama – creí que hoy no te verías con Dean.
-Hola Samm – respondió con su ya acostumbrada inexpresividad.
-Hola nene – saludó Dean con efusividad llegándoles por detrás.
Salió del baño presuroso al escuchar la voz de su amado ángel
-Hola Dean – sonrió de manera casi imperceptible.
-Pensé que no vendrías hoy – comentó tomándolo por la cintura y plantándole un beso que cada vez iba tornándose más apasionado.
-¿Por qué no se buscan un cuarto para los dos? – gañó el Winchister menor con molestia.
-¿Envidia hermanito?
-Jodete
-Je, creo que de eso se ocupara Castiel en unos instantes ¿Verdad nene? – incitó con sorna
El ángel se sonrojó hasta las orejas al escuchar la expresión de su pareja. Podía permanecer inapacible la mayor parte del tiempo, pero el rubio siempre lograba descontrolarlo por completo.
-Mira – señaló hacia las mejillas de Castiel - ¿No es adorable cuando le entra la vergüenza?
Samm negó con la cabeza, Dean a veces era demasiado infantil y por que no decirlo imbécil.
-No hagas caso al cretino de mi hermano Cass, dime ¿Qué te trae por aquí, quieres que les deje solos?
-No Samm, puedes quedarte. Lo que vengo a tratar con Dean no es nada privado.
-HUMM – se quejó Dean con desilusión - ¿Entonces que te trae por aquí Cass?
-Estuve hablando con Baltasar, me hizo una propuesta y quería saber tu opinión Dean.
-¿Qué te propuso?
-El cree que somos una pareja estable – confesó abochornándose – y a decidido regalarnos un viaje.
-¿De verdad? – preguntó emocionado el oji verde, Samm no se sorprendió, después de todo él ya había hablado al respecto con Baltasar. -¿Y a donde iremos?
-Hm, dijo que era sorpresa, pero que nos gustara.
-¿Y que esperamos, para cuando es?
-Si los dos quieren, ahora mismo – los tres que hasta ahora se mantenían en la habitación voltearon sorprendidos hacia el nuevo intruso que hacía acto de presencia.
-¿Baltasar?
-Sí hermanito soy yo, la verdad que no podía perderme la cara de mi cuñadito cuando le dieras la noticia, así que los espié, como sea, si así lo quieren los puedo mandar ahora mismo.
Dean y Castiel se vieron a los ojos, como preguntándose en forma muda, conectando con sus miradas y estando de acuerdo asintieron al unisonó.
-Bien, pues prepárense.
En un abrir y cerrar de ojos, Baltasar hizo su magia, sacó del bolsillo de su chaqueta un pequeño frasco con algo parecido a una poción, lo arrojó al piso cerca de los pies de los amantes y recitó algunas palabras en lenguaje extraño, algo que ni Castiel pudo descifrar.
El azabache rodaba colina abajo abrazado al cuerpo del rubio de ojos azules, reían felices de poder compartir la tarde juntos, Naruto regresaba de una misión de rango A y Sasuke tenía aun que cumplir su condena en la aldea, por lo que Tsunade-sama no le permitía salir de la villa.
-Espera Sasuke, creo que se me a enterrado una piedra en la espalda – se quejó aun con la sonrisa en su bello rostro.
-No seas quejica dobe
-Que no me llames dobe, teme, que me dolió de verdad – contestó haciendo puchero.
-Hnm no entiendo como te quejas de una simple piedrita, cuando has regresado de algunas misiones con la mayoría de los huesos rotos.
-Ja, tienes razón – respondió con una sonrisa tan grande y luminosa que dejó al azabache deslumbrado.
-Anda – le instó a levantarse, tendiéndole la mano en el proceso – tengo preparado un día de campo cerca del bosque, con comida y frutas, se que te gustara.
-¿Con ramen también? – pregunto cual niño de brazos.
-Sí, Naruto, con ramen también.
-Pues que esperamos? - y acabando la frase salió a toda velocidad, dejando atrás al azabache.
-Espérame usuratonkashi
-Alcánzame si puedes. – gritó ya demasiado lejos.
Luego de correr como desquiciado tras el lindo Kitsune, saltando sobre los arboles y utilizando su Sharingan para no perderlo de vista, hasta que por fin le dio alcance.
-Dobe, te pedí que me esperaras – reprendió tomándolo peligrosamente por la cintura con ambas manos.
-Quería ganarte, conozco como piensas, así que sabía que tendrías aquí lo que habías preparado.
En efecto, el rubio conocía casi al cien lo que atravesaba por la mente del ojinegro, no por nada se paso años persiguiéndolo para traerlo de regreso hasta la aldea, sabia que estaría cerca del muelle donde se sentaba cuando era pequeño, ahí se encontraba la canasta de comida.
Sasuke había planeado la tarde, comerían al borde del lago, sentados sobre la estructura de madera, luego brindarían con el sake que logró pillarle a la vieja Tsunade en uno de sus descuidos, verían el atardecer, y cubiertos por la negra noche, sólo iluminados por las estrellas le haría el amor hasta caer rendidos.
-Sasuke la verdad jamás pensé que estaríamos así, crei que al volver correrías a los brazos de Sakura-chan.
-No digas tonterías dobe, Sakura jamás llamó mi atención en esa forma, es una buena amiga, y le agradezco que se haya preocupado por mi todo este tiempo, pero yo a quien quise siempre fue a ti.
Naruto se sonrojó al máximo con aquellas palabras, Sasuke era frio y callado la mayor parte del tiempo, mostrando una careta de vale madrismo ante todos, levantando una coraza impenetrable a su alrededor, se sentía tan bien ser el único al que permita contemplar su lado sensible.
Desde que le confesó que era su mejor amigo en el valle del fin, se prometió no dejarlo escapar, y ahora que lo tenía a su lado, así, en esa forma, no se arrepentía de nada.
El poseedor del Sharingan se enterneció por la imagen de ingenuidad que mostrada el rubiecito en esos momentos, no pudo evitar creer que se miraba demasiado comestible y se lanzó a sus labios, siendo recibido con gusto por el otro, que le respondió en el acto.
-Hmm… Sas… uke… mmm – gimió al recibir el apasionado beso, que descontrolaba sus sentidos haciéndole perder por completo la razón.
Todo el cuerpo le ardía y comenzó a frotarse contra el ojinegro, instándole a recostarse, para luego trepar sobre él.
Parecia que todo iba de maravilla, comenzaron a desnudarse, el calor de sus torsos eran brasas ardiendo, roces erráticos sobre la espalda, jadeos y besos repartidos por sobre el cuello del rubio, una sensación tan placentera, que nada les haría parar en ese momento.
Bueno, eso pensaron.
Un poderoso estruendo se escuchó a sólo unos metros de distancia de ellos, un gran resplandor en tonalidades azules y blancas que les deslumbro, dejándolos sin visión por varios segundo, se abrazaron por instinto, sorprendidos enormemente por dicho acontecimiento.
Un chapuzón de agua se levanto, dejando ver que algo muy pesado había caído con mucha velocidad en el lago.
Al ver que la actividad cesaba dentro del agua, se acercaron con cautela para averiguar que había sido todo eso.
-Espera Naruto, yo iré a ver de que se trata.
-No necesito que me protejas – contestó molesto, ganándose un bufido.
Sasuke comprendió que no lograría convencer al rubio de que se mantuviera alejado, así que aceptó que le acompañara a ver que había caído al lago.
A punto estaban de lanzarse al agua, cuando de las profundidades emergieron dos figuras, braceaban desesperados para llegar a la superficie.
Los ninjas les veían estupefactos. ¿Quiénes eran esos tipos? Ya a simple vista eran extraños, uno de piel muy pálida cabello negro y ojos azules, completamente remojado que pretendía mantenerse a flote, manteniendo el agarre en su compañero, evitando así que el otro se hundiera. El otro de piel bronceada y de cabello rubio, no tanto como Naruto, pero si lo tenía un poco claro, además de ojos verdes rodeados de tupidas pestañas.
-Cas – profirió con voz ahogada uno de los desconocidos, jalando la mayor cantidad de aire a sus pulmones.
-¿Q…Quienes son ustedes? – preguntó Naruto algo nervioso, adoptando su posición de pelea, protegiéndose las espaldas al lado de Sasuke.
Los recién llegados volvieron la vista hacia la persona que les estaba llamando y ambos abrieron los ojos azorados.
Continuara…
Buenos, hasta aquí llegamos, ya no me disculpo ni digo para cuando actualizo los otros fics, sólo he de decir que tenía esto ya muy enraizado en mi cabecita y me estaba volviendo loca, esto es una ida de olla completamente PWP
