Prologo

Casa Granger

Papeles

Papeles

Y más papeles

En cada cajón que Hermione abría había más y más, ya no sabía qué hacer, iba a cursar su sexto año en Hogwarts, sus padres habían fallecido por un accidente automovilístico, lucharon durante seis meses en estado de coma, pero para mala suerte no lograron sobrevivir. Hermione trataba de ocultar su dolor con obligaciones, no descansaba nunca de sus obligaciones, como sus padres murieron tan repentinamente no dejaron nada escrito lo bueno es que era hija única y no tenía que pelear con ningún hermano sobre la herencia.

-Como maldita sea puede tener un par de dentistas tantos papeles. – Hermione exclamo en voz alta y sintió el vacío de la casa y como su voz revotaba en las paredes.

Hermione en ese momento se tiró rendida, no entendía como ella sola iba a poder con todo eso, alejo a sus mejores amigos, no ha salido de su casa desde que regreso de Hogwarts, ni siquiera leer libros de magia la ponían bien.

Sin querer patio el enorme armario que tenía en el que el cuarto de sus padres, este empezó a balancearse y no le quedo de otra cosa que rodar o le caía todo el armario encima pero no contó con el hecho de que hubiera una caja enorme llena de...

- ¡Mas papeles! Esto debe ser una broma... - Hermione no pudo seguir con sus quejas ya que al ver bien los papeles vio que en realidad eran del ministerio de Magia.

Entre tantos papeles que parecía más un tipo de contrato, ella no entendía muy bien lo que era, solo sabía que sus padres lo habían firmado, ni siquiera aparecía la fecha ni nada, luego al final de esto había un hechizo, pero Hermione por temor a que sea algo ilícito fue al Ministerio de Magia directamente, pero dejo esa última hoja en su casa por un presentimiento.

Ministerio de Magia

-Necesito hablar realmente urgente con el ministro o con alguien de alto cargo. – Decía Hermione por enésima vez al encargado que parecía no entender esa tan simple frase.

-La entiendo señorita Granger, pero si no es el motivo tan urgente por el cual necesita al ministro sin previa cita no puedo hacer nada. – Decía el encargado sin si quiera mirarla.

- He encontrado en una casa MUGGLE papeles que incluyen al ministerio de magia, ¿Creo que eso es suficiente? – El encargado pareció que se demoró un poco en captar la información, tardo unos segundos en escribir algo en una especie de computadora.

- En breves momentos lo atenderá un ministro y un Auror por favor, tome el elevador a la sala 5D que la están esperando. – Dijo ya mirándola.

- Gracias, pensé que me quedaría aquí para siempre. – Por lo general Hermione no usaba ese tono, pero sentía que últimamente las cosas le salían mal apropósito.

Luego de dar un par de vueltas en el raro elevador del ministerio llego a la sala 5D donde una señora de vestido morado, caucásica, con maquillaje todo de morado estaba en frente de la puerta en un tipo de escritorio.

-Disculpe tengo un tipo de cita con el ministro y un Auror. – Hermione sospechaba de lo que iba a pasar en esos instantes.

-Lo tengo entendido, pero señorita Granger sabe cómo se maneja el ministerio y cómo andan todos atareados, así que le pediré que me de los papeles que iba entregar para dárselos y de ahí le enviaremos una carta cuando se sepa que es lo que ha pasado. –

Hermione ya ni contesto estaba demasiado casada y enfadada solo dejo los papeles sobre el pupitre y se retiró sin más. Se fue directamente a su casa a arreglar las cosas para iniciar el año escolar ya era 20 de agosto y como iban las cosas sentía que después no tendría tiempo.

Así fue como sucedió las cosas, luego de días de espera en las que Hermione aprovecho para ordenar todas las cosas y ponerlas a su nombre, además de que tenía declararse independiente y así poner todo a su nombre y dejar todo en regla, ya que ella no tenía ningún tipo de madrina o padrino que se haga cargo de ella como el caso de Harry tenía a su tío ella literalmente no tenía nada.

Era 25 de agosto en la casa Granger

Hermione podía decir que tenía un día tranquilo sin ningún tipo de preocupación, todo este tiempo había dejado de dormir y de hasta comer solo tomaba agua, alguna que otra vez cocinaba y desayunaba todos los días tostadas sola o con mantequilla.

Pero cuando por fin se estaba animando a comer algo, su ventana empezó a sonar como si algo la golpeara, era una lechuza, que tenía una carta amarrada en la pata. Ella sabía que no era de Ron porque su lechuza se hubiera estrellado contra la ventana, ni tampoco podía ser de Harry por que ayer él le había enviado una carta y ni siquiera le había respondido. Entonces si no eran de sus amigos... ¿De quién era?

Capítulo 1: Aquí cambio

Inmediatamente cuando Hermione vio el sello supo de qué se trataba aquella carta, se quedó un tiempo pasmada, no sabía realmente que le esperaba ahí dentro, tenía miedo pero como buena Gryffindor la abrió y leyó rápidamente lo que decía dentro.

Muy buenas tardes señorita Hermione Granger, se le solicita de manera inmediata en el ministerio, ahí la estarán esperando un ministro y un Auror para explicarle lo que se ha encontrado luego de muchas investigaciones, le recalco, se le solicita de manera imperativa.

No pasaron ni 5 segundos cuando Hermione e levantó y fue corriendo hacia su chimenea y así transportarse hacia el ministerio, al llegar se dirigió hacia el mismo lugar en donde estuvo la última vez, pero esta vez no había nadie en la recepción así que decidió entrar de frente pero justo antes de tocar la puerta escucho a dos hombres conversando y ella se detuvo para escuchar.

-Ya sabemos que es Granger pero dime tú como es que le explicaremos todo esto. - Hermione intuyó que se refería al documento que entregó, en ese momento se lamentaba no haberlo leído completamente, era algo que posiblemente hubiese hecho antes pero no entendía que le había pasado en ese momento.

-No tenemos otra opción ella debe saber sobre la adopción, además que eso cambiaría de muchas maneras su vida. - Hermione sintió como el alma se salía de su cuerpo por unos segundos, luego empezó a retroceder muy lentamente hasta que chocó con un cuerpo.

-Lucius Malfoy. - Ella no pudo emitir ninguna otra palabra.

-Hermione...que gusto verte. - Hermione tuvo la impresión de que él quería decir "Granger" pero no lo dijo.

Miles de preguntas estaban en su cabeza pero la que más le retumbaba era "¿Sera que los Malfoy son realmente su familia?"

-En tu cara se te nota las miles de preguntas y con gusto te podría responder un par de ellas pero debemos entrar porque yo también tengo unas y no Hermione yo no soy tu padre ni mucho menos mi esposa tu madre. - El aire volvió a los pulmones de Hermione pero seguía con cierta angustia e inseguridad de entrar.

Luego de unos segundos en la cual Hermione se quedó en blanco, se enderezó y asintió con la cabeza y es cuando se dio cuenta de que ahí estaba a Señora Malfoy, dio unos toques a la puerta y entro seguida de los Malfoy.

-Buenos días, gracias por venir. - hablo el ministro sentado en su escritorio. - Hemos hecho que venga por el hecho que se ha encontrado muchas cosas de mucha importancia en su vida señorita Hermione, se ha citado a los señores Malfoy por en los documentos se les menciona.

- Exactamente cómo es que una familia muggle está relacionada con una de las familias más aristocráticas del mundo mágico... - Hermione se mostraba muy segura pero realmente es que estaba en un manojo de nervios.

-Realmente no hay manera sutil de decir lo que tenemos que decirte, no existe. - Continúo al parecer el Auror. - Pedimos por favor que no se interrumpa al menos hasta que se haya terminado.

- Para empezar voy a explicar que eran los documentos que encontraste en tu casa. - Miro a Hermione por un segundo. - Entre todas las hojas estaban tu acta de adopción y de nacimiento, también había como un condición es que al cumplir los 18 años se le informe de todo lo que usted posee como herencia, al tener usted aun 16 años pero huérfana se le tiene que informar de una vez por todas. – Le entrega unos papeles a la castaña.

- En los papeles que usted puede ver en el sobre hay unos árboles genealógicos en las que usted puede divisar toda su familia, la cual usted no reconocerá aún…también va a encontrar su partida de nacimiento. Antes de seguir diciendo todo lo que resta del sobre tengo que explicarle lo que está pasando, sus padres en realidad eran Greta Bellerose y Rommel Griffin, en resumen usted viene de una familia de linaje puro aunque muy difícil de encontrar, para que tenga una idea de sus orígenes, se dará cuenta que su apellido ahora sería Griffin que proviene de la criatura mitológica Grifo y Bellerose proviene de Francia, ahí nació tu madre y estudio en Beauxbatons.- El Auror hablaba mientras caminaba de un lado para otro y parecía como si relataba una historia, más bien un cuento.- Lo que sucedió fue que tus padres a querer lo mejor para ti, velar por tu seguridad tuvieron que esconderte porque el señor Tenebroso que los perseguía, todo esto fue en secreto, el único lugar que los mortifagos nunca te buscarían seria en el mundo muggle así que te dejaron en un orfanato y te adoptaron los Granger, tu madre antes de eso te aplico un hechizo para que cambiaran algunos rasgos como los ojos, cabello, cuerpo que podían hacer que te reconozcan, debe haber un hechizo que revierta todo eso que sería el que uses cuando estés fuera de peligro.

-Ahora que ya sabes tú historia, tu origen, ahora toca explicarte cómo es que intervienen los Malfoy aquí. – Empezó a hablar el ministro. – Los Malfoy son los que han guardado las llaves de tus cuentas en Gringotts, la tuya y la familiar, también las llaves de la mansión de tus padres.

-En esos documentos no se informa que también yo me he encargado de los dos negocios que tenían tu madre y tu padre, cada centavo está en la cuenta de Gringotts de tus padres. – El señor Malfoy intervino

Hasta el momento no había emitido palabra alguna Hermione, parecía que ni siquiera respiraba, no se movía, se sentía realmente ahogada y no sabía muy bien qué hacer.

-Esto es mucho para mí… - Hermione se levantó y salió corriendo.