Hola de nuevo, siento haberme ido asi por asi, me aventuré en la alegría de la vida y todo lo demás, antes tengo muchos proyectos aqui y un crossover tan loco que terminarán insultandome, no se porque, pero lo presiento.
Ahora he vuelto con otro fic de Albafica x Agasha, esperando que puedan gustarle, tal como suelen pedir, en verdad amo mucho ésta pareja, solo espero que les guste y que comenten con toda libertdad, sin importar que sea, ok.
Disclaimers: Saint Seiya The Lost Canvas pertenece a Shiori Teshigori, sólo soy un un chico que ama tanto éste ánime que no puedo dejar de encantarme con el Agafica.
Enjoy Please.
Te extraño y te necesito
Capítulo 1
Melancolía
Habia pasado ya tres años, al haber sido testigo de una cruenta y sanguinaria, guerra santa, que cobró la vida de tantos inocentes, asimismo como a los grandiosos caballeros dorados, ella experimentó lo que es sufrir por un ser tan amado y ahora su vida, es una confusa odisea, teniendo a un tonto como prometido, algo que se rehusó, por amor, por el caballero Albafica, su Albafica, su corazón estaba destrozado sin poder adular lo fuerte y valeroso que es, pese a su frialdad.
"Te extraño mucho, mi Albafica, por favor regresa".
Lágrimas caían de esos ojos color olivo, un audible sollozo hizo enfurecer nuevamente al cretino de su prometido — ¿De nuevo estás llorando por Albafica? — ella lo miró con el ceño fruncido — ¡Superalo! Él éstá muerto y no volverá, así que adaptate a tu destino, mujer tonta.
Un cruel insulto que le molestó a la chica, percibió toda esa ofensa. ¿Quién demonios se cree que es para insultar así a su amado Albafica? ¡Nada! Sólo es otro tonto más de todos los estolidos del universo.
— !Basta¡ — la chica da una fuerte pisada — Deja de sacarme en cara al señor Albafica, tu no sabes lo que pasé y por ello no quiero éste compromiso, eres un tonto y... — de una fuerte bofetada la calla, dejándole la suave mejilla hinchada y con la marca de su mano, se inclina a donde ella cayó y le jala el pelo de su coleta.
Sus ojos se turbaron con el dolor de esa garra jalando su hermoso cabello color marrón — ¡Cállate estúpida! — acercandola bruscamente hacia él — Si más recuerdo, el imbécil de tu padre me hizo un préstamo y quedamos en que me pagaría y sabes que es lo que le pedí, pues a ti — lanzandola al suelo — Te lo advierto, si te portas renuente, van a perder la casa y se quedarán en las ruinas.
— Mi padre lo hizo para alimentarme — sacudiendose la falda de su vestido.
— Gran error — el hombre se fue dejandola aun en el suelo, ella lleva sus manos al rostro y lloró tanto como nunca antes lo habia hecho.
"Albafica, mi amor, regresa, por favor, ayúdame, ya no soporto esta injuria, no quiero estar con otro hombre, quiero estar contigo" — la lluvia cae y ella no dejaba se sollozar, por culpa de ese hombre insolente, rufian, arrogante, idiota — "Te necesito" — deja caer su cuerpo, sin darle importancia a la lluvia, mientras sus lagrimas fluyen, como un río torrencial, deplorando la perdida de su amado.
Una vez que ha escampado, ella camina rumbo a casa, su padre la ve empapada, con frío, la cara golpeada, los ojos hinchados de tanto llorar y su pelo sacudido y alborotado, tal como las escobas, corrió a abrazarla, al sentir el calor de su progenitor, ahogó y desató un llanto — Oh hija, mi pobre hijita, perdóname por haber caído en el chantaje de Raul, por favor perdóname Agasha, lo hice por ti y por ella.
Agasha pausó su sollozo — Si ella estuviera aqui, le daria una tunda a Raul, pero ha pasado un año en que Ambrosine falleció, siempre le pegaba a cualquier tonto que me insultaba, era mi única amiga y le tocó tal cruel destino — sus ojos tuvieron un brillo, pero de lágrimas — Al igual que mi Albafica, los extraño mucho papá.
Lyssandro ya sabia de los sentimientos de su hija hacia el caballero dorado y le daba tanta tristeza verla sufrir y soportar tanto agravio por el idiota de Raul y su estúpido orgullo, en parte el florista se sintió muy culpable en hacer ese préstamo a ese maldito hombre cuyo chantaje, dio resultado.
— Yo fui el culpable — cabizbajo tocó la cabeza humeda de su hija — Nunca debi aceptar tal propuesta, sin saber que él me empujó a una horrible trampa, yo tampoco quiero que te cases con ese hombre tan vulgar, mil veces prefiero tu felicidad a que sufras.
Ella niega secando sus ojos con las palmas de sus manos — No fue tu culpa, se que estamos necesitados desde que mamá nos dejo — al ser mencionada la mujer que Lyssandro tanto amó, lloró por la pérdida de su adorada esposa.
— Mi Amalia, mi dulce y bella esposa — a Agasha le dolía ver a su padre llorar por su amada madre, la mujer quiem la trajo al mundo y que le proporcionó, un amor tan puro, un amor maternal, le dio todo su cariño y afecto, le dio un bello nombre cuyo significado es "Agradable o buena" uno que nunca olvidará, pero de repente enfermó y fallecio, dejando un gran vacío en el corazón de sus seres amados — Perdón, no debí...la hecho tanto de menos, cada día que te veo, me recuerda mucbo a tu hermosa madre.
Agasha da una pequeña sonrisa — Siempre me decian "te pareces más a tu mamá, que a tu padre" tambien la extraño, sin embargo nos dejo tantos hermosos recuerdos, momentos de mucha alegría y sobretodo su infinito amor.
— Y ahora que casi eres una mujer bien crecida, ella estaría tan feliz de ver que has crecido tan saludable y que eres casi su retrato vivo — su ademán se modifico a uno fúnebre — Y a la vez, decepcionada del peor error que cometí.
Las grandes esmeraldas se llenaron de tristeza, sus manos y brazos abrazaron su propio cuerpo, el rostro haciéndose a un lado y tocando la mejilla abofeteada con una mano que se la sacó de su cuerpo — Mamá estaría tan feliz de conocer al hombre que amo, no importa cuánto me rehuse, él siempre volverá a insistir, nunca me dejará hasta haberme hecho tan miserable mi vida.
El hombre con quien iba a casarse, era un sujeto millonario y malvado y perverso con las mujeres, tuvo una obsesión por Agasha, que planeo sabotear al humilde florista Lyssandro, el pobre cayó en su sucio truco y un vil chantaje que le costó la inocencia de su hija, afortunadamente éste aun no le pone sus mugrosas garras encima, pero la obligará.
Su amigo Pekfo la oteo desde lejos, negando junto a Selinsa quienes estaban preocupados por ella — Pobre Agasha, no merece esto, ese hombre es una víbora, tan venenoso y desagradable, deberíamos ayudarla.
— Aun estamos en eso — el muchacho da una sonrisa — Todos los aldeanos y caballeros, juntamos suficiente dinero para pagarle a ese hombre malvado —sin embargo el dinero no era todo lo que le hace falta a Agasha, esto le hizo borrar su sonrisa — Ella extraña a Albafica de piscis, desde que pereció ante Minos de grifo, nunca ha dejado de llorar por él, tal como tus amigos, lo hacen por el señor Aldebaran de tauro.
— Odio ver a mi amiga sufrir y todo por culpa de un cretino sin cerebro — tenia una roca en su mano y la pulveriza con su cosmos — La próxima que ese hombre le pegue, se las verá conmigo.
Pekfo ríe de ver lo avanzada y fuerte que es la amazona entrenada por Aldebaran de tauro, al igual que Teneo quien actualmente porta la armadura de tauro y quien heredó la fuerza sobrehumana del toro furioso.
— Me alegra que hallas fortalecido tu espíritu — la chica de pelo celeste ruboriza un poco y juega un poco con uno de sus mechones de su corta cabellera — Espero que a Teneo le valla bien con sus misiones como caballero de Athena, aunque sólo esté Shion como patriarca.
— Me encantaria ver como Yuzuriha reaccionará al enterarse que su maestro es ahora el patriarca — dando una risita — Quedará más que impresionada, orgullosa que un muviano como él, represente en el santuario, un rango muy importante.
— Se me ocurrió una gran idea — ella lo miró algo confundida, pero interesada en la propuesta — Si el señor Shion es el patriarca, podemos pedirle ayuda y así ese tonto dejará a Agasha en paz ¿Qué dices?.
Ella afirma — Es una magnifica idea, vallamos donde el patriarca — Pekfo asiente y camina junto a Selinsa rumbo al santuario, de repente se topan con Pakia el ex discípulo del Cid, ella lo saluda de la mano.
— ¿A dónde van con tanta prisa? — Pakia estaba cargando un saco muy pesado de harina, ya que estaba ayudando a su padre a elaborar ricos panes de leña, crujientes y suaves por dentro, así que Selinsa decidió no callar y contarle lo que estaba pasando — ¿Otra vez ese idiota molestando a Agasha? Es un animal y no tiene respeto por las mujeres, no puedo creer que ese tonto le halla abofeteado a la pobre de Agasha, ese agresivo lo pagará.
— Calma, estamos en camino con el señor Shion y él nos ayudará — Pekfo agarró su mano antes que salga corriendo a pegarle a ese salvaje animal —Comprendo que ese hombre merece una paliza, pero si lo hacemos, nos convertiremos también en animales salvajes.
Pakia sentia que su sangre hervía de tanta ira. ¿Como se atreve ese inepto a maltratar a una hermosa mujer como Agasha? Tan dulce, tan sencilla, tan humilde ¿Y que sea humillada por un cretino mostrenco? ¡Nunca, ni en un millón de años! Ella no tiene la moral tan baja a rebajatse de forma patetica ante un idiota bueno para nada. El ex aprendiz tenia ganas de romperle la mandíbula a ese hombre, pero lo que Pekfo dijo es verdad, así se convertirían en lo que Raul es, un hombre agresivo y malo.
— Por favor amigos, no soporto ver a Agasha llorar — Pekfo sostenia a Pakia ao igual que Selinsa — Emplearé el excalibur y lo haré pedacitos y...
— No lo hagas, si el señor Cid te viera ejecuanto su poderosa técnica en alguien que no vale, se decepcionaria, tu fuiste un aprendiz y recuerda que no eres un ser agresivo — Selinsa le sacude de los hombros — Te lo ruego, piensa bien antes de actuar.
Pakia se tranquiliza — Para eso vamos a buscar a Shion, no dejaremos que ese hombre se salga con la suya, Agasha es nuestra amiga y la protegeremos a como de lugar — Pekfo alza el pulgar dando una sonrisa — Todo se solucionará, de veras.
Selinsa también afirma — Por Agasha — los chicos también asienten y exclaman lo mismo "Por Agasha" , subiendo las doce casas zodiacales, pidiendo el debido permiso, sin hacer un ruido que moleste a los pocos caballeros que protegen su templo, con su signo del zodiaco, hasta llegar al gran salón del patriarca, con delicadeza abren la puerta, a su lado estaba Teneo de tauro — Teneo, amigo, que alegría verte — la chica amazona lo saluda con un abrazo.
— Lo mismo digo — su gesto fue serio al dejar el abrazo de su amiga — He oído todo lo qie sucede en Rodorio y lamento tanto por la señorita Agasha, debe estar aguantando tanta tortura, pobre chica, es muy humilde para merecer eso, el señor Shion estará gustoso de ayudarlos — abre dos grandes puertas y caminan por un largo pasillo con alfombra hasta llegar ante el patriarca — Señor Shion, soy Teneo de tauro y solicito su ayuda para la joven Agasha, ella...
— Pude escucharte y me da tanta rabia, saber que ese sujeto abuse de su fragilidad a imponerse y tratarla tan mal — Shion se levanta de su pedestal — Es increíble que halla gente tan malvada como esa, la joven Agasha sufrió tanto por Albafica y lo pude ver, pero que halla alguien y se entrometa, es algo imperdonable.
— Patriarca, vi a Agasha con la cara abofeteada — Selinsa a pesar que estaba tan calmada, no pudo evitar sacar su rabia — Se que ese sujeto tiene su botín con mucho oro, pero eso no excusa en alzarle la la mano a la pobre de Agasha.
— lo sé y la ayudaremos — caminando hasta los tres — A ella y su padre, es una joven tan inocente que vio morir frente a sus ojos a Albafica de piscis, aguantó un profundo dolor en su pecho y que venga un barbajan a fastidiarla y a someterla al miedo, jamás.
En la primera prision del inframundo, el caballero Albafica, despertó y sus ojos cobalto se apabullaron al ver a un Minos deprimido, sus ojos algo desenfocados y solo daba suspiros, ni siquiera hacia una mueca sadica, tan serio, su agobiante gesto no lo expresaba en lagrimas, ni estando triste, sino con callar y que todo le de igual.
"¿Qué le ocurre, antes al verme, me retaba a una pelea, se burlaba de mi?" — enfocando sus sentidos en un distraido juez — Ahora es diferente, está perdido, como si algo le hubiesen quitado. ¿Qué le ha sucedido?.
Minos a penas lo tomó en cuenta — ¿Piscis, no? ¿Deberias largarte a ver a tu amada flor? Ya no tienes nada que hacer — lo miraba con desprecio — ¡Esfumate, al menos siéntete afortunado de ser revivido!.
Albafica lo atisbó absorto, no sabia como fue traido a la vida y sobretodo ¿Por qué Minos ya no quiere verlo, ni retarlo a un duelo, ni mostrar interés en Agasha? — ¿Qué dijiste? —el juez permanecía callado en su pedestal, rabiando que se largara de una buena vez — ¡Deja de evitarme! ¡Responde maldita sea!.
— ¡Fuiste revivido por ella, grandisimo hijo de puta! — su tono fue agresivo, cargado de odio y a la vez una profunda y misteriosa tristeza que no la puede surgir en lágrimas, ni gestos afligidos, de un manoton, hace caer una copa de oro — ¡¿Ya estás satisfecho, eh?! Ahora lárgate y vete con tu Agasha y déjame sólo.
Albafica dio en el tino, Minos tenia sentimientos ocultos que lo carcomen — ¿Es por ella? — le regresa la misma mirada enfurecida — ¿La extrañas, piensas en ella todo este tiempo? — por primera vez Minos lo elude y oculta tras una máscara fría su aflicción.
— ¡Vete al diablo! — lo sabía, lo sabía, el motivo de su agresión, es que Ambrosine es la primera mujer que él amó — Al menos has revivido, tu patética diosa nunca me devolverá a ella, jamás lo hará, la detesto y a todo su séquito, empezando contigo, Albafica — le da la espalda — ¡Vete, lárgate y no regreses!.
¡Bingo! ¡Dio en el blanco!.
Minos se sentía deprimido, Albafica hizo algo tan insólito, se acerca a Minos, él percibe su presencia, que ganas tiene de puñetearlo y decirle una larga lista de insultos, hasta quenpa garganta le quede seca, decirle todo sin escrúpulos, sacando su gorila interno y desatar la tremenda ira por la pérdida del amor de su vida, la amó y viceversa, fue la primera vez que él tiene un flechazo por una divinidad, algo que nunca sintió en largos siglos, ni siquiera cuando era el rey de Creta, se fijo en una mujer por amor.
— Creí ser preciso y te vallas de...
Piscis sin mas preambulos, coloca una mano en su hombro — Lamento mucho que ella ha perido su vida, ejecutó el dumanis (fusion de las armas de los dioses olimpicos como Zeus, Poseidón y Hades), lo hizo por el bien del universo, para que todoa construyamos una sociedad distinta.
Minos absorto con recordar las palabras de ella antes de sucumbir "Construyan una nueva era, una sociedad de hermandad y libertad" fue lo ultimo que escuchó antes de fallecer, una marejada de emociones invadieron la mente del juez, quiso hacer una compensación con hacer una risa diabólica, pero sólo calló, sus labios permanecieron sellados y la garganta hecha nudo, sus ojos algo turbios y el cuerpo paralizado.
¿Qué sucederia si alguien ve al juez sanguinario en depresión? Dirian que es "Patético", un cruel y crudo estereotipo de que se ha vuelto patético, entre ella y Minos fue casi "el fruto del amor" solo que no tuvieron crios. La mujer que impacto ese duro o viceversa, ambos se dieron lo que nunca tuvieron y es "Amor".
Minos frunce el ceño, el pulso de su corazón estaba siendo lento. Cada vez que miraba el ocaso, le recordaba esa hermosa y larga cabellera cobriza, anaranjada, que danzaba por cada paso que daba, más la tela blanca que cubre su pálida piel, su orgullo no le permitió manifestar ésta melancolía, con el temor que su deidad se mofara de sus sentimientos, criado para ser una maquina de destrucción, al igual que ella, viven para asesinar.
— ¿Qué piensas conseguir con esto? ¿Acaso tienes idea de lo que pasó? El señor Hades me comentó, que su habilidad especial, era la reencarnación, pero con esto — ignorando el gesto preocupado de Albafica — Ella no regresará, entiendelo, ya no puede reencarnar, está muerta, al menos se agradecido que te dejo con vida.
Minos tuvo razón y Albafica no podia negarlo, lo hizo para que se encuentre con Agasha — Debe haber una solución, lo que sea.
— No la hay — masculló seriamente, con los ojos cubiertos por el fleco — No hay solución, ahora, vete.
Minos dejo solo a piscis, regreso a su alcoba, se sentó sobre la cama y abrió un pequeño cofre do de estaba un cáliz, opaco y sucio, eso es un objeto que ella tenia, cierra sus ojos y recuerda cuanďo ella lo tenía en sus manos — Al menos ya eres libre, pequeña princesa".
Lune detras suyo, se mantuvo en cautela, sin hacer un leve sonido, percibió roso el enojo y aflicción de su señor juez — Ha permanecido así durante un año desde que Ambrosine murió, ojalá hubiera algo que anime a Minos, ni siquiera Anna logra establecerlo — cuando iba a hacer un carraspeo.
— Ah, eres tu Lune, quiero que lleves a piscis a la superficie, sacalo de aqui y no quiero titubeos — ordenó dándole la espalda sin darle una ojeada — Es una orden — apenas pudo decir un "si señor" comprendía lo que Minos siente, lo vio salir, e hizo lo mismo, fue hasta donde Albafica que permanecía de pié.
— Piscis, ya es hora que vallas a Rodorio — afirma y lo teletranspota hasta donde una vez fue el castillo de Hades, que ahora está en ruinas, debe regresar a la villa y reencontrarse con su amada Agasha, empezó su caminata — "Agasha ten paciencia que ya voy por ti".
Todos habian colaborado con un granito de arena, para pagarle al egoista de Raul, fueron a casa de la florista y se llevaron una gran sorpresa, finalmente podían librarse de esa pesada y ardua deuda, para reincorporarse a su vida cotidiana de vender flores, los demás cuando se fueron, un grupo de sujetos rompieron la puerta de su hogar con una patada, asustando a la chica.
— ¡¿Qué hacen aquí?! ¡Ya tenemos lo que debemos y asi la deuda estará saldada! — los tres bandidos se hicieron a un lado y era Raul quien planeo el sabotaje — Aquí está lo que te debemos, ahora deja a mi hija en paz — el hombre se mostraba ceñudo y Raul da un resoplido.
— No te das cuenta que quiero a tu hija — dos hombres agarraron bruscamente del brazo a la castaña, mientras se sacudía en forcejeo a ser soltada — Ella será un pequeño complemento, por que nuestra presa es algo muy grande.
— ¡Sueltenme! ¡Quitame las manos de encima! — Lyssandro horrorizado de como se llevan a su hija a la fuerza, el muy desgraciado se lleva a Agasha en sus narices ¡Qué idiota es!.
— ¡Nooo! — corrió hasta ella — ¡No te la lleves! ¡No me quites a mi hija! — pero dos hombres le pegaron y lo tiran al suelo — ¡Hija, Agasha!.
— ¡Ayúdame papá! ¡Por favor no me dejes! — ambos extiraban sus manos para alcanzarse, hasta que una fusta los separa — ¡Papáááá! — la meten a la carroza de forma adusta, Lyssandro herido en el piso gritó con lágrimas en los ojos.
— ¡AGASHA! — vio el carruaje alejarse, los demás salieron a ayudarla y el hombre lloraba y negaba aun en el suelo — ¡No, no, no! ¡Mi hija, mi muchacha fue raptada por ese canalla! ¡Quiero a mi Agasha de vuelta!.
Calisto su mejor amigo, lo qyuda a incorporarse — No podemos permitir que se salga con la suya, debemos rescatar a Agasha, pero antes, te acompañare al santuario y veremos si Teneo nos puede ayudar — el panadero limpia la cara de Lyssandro y van corriendo rumbo al santuario — Ten fe, la vamos a recuperar.
Lyssandro asiente de forma débil — Nos tomaron desprevenidos, solo somos unos humildes aldeanos, no tenemos armas y...
— Lo sé, esos bárbaros creen que pueden tomar a nueatras hijas cuando se les dé la gana, se equivocaron al pensar que pueden venir a raptar a una joven como la suya Lyssandro, no quiero que le pase lo que le sucedio a Krystal — el florista absotro que Calisto le cuenta que esos tipos ya han hecho de las suyas — También raptaron a mi hija y le hicieron daño, ahora es madre joven y por ello quiero vengarme de ese papanatas, pagará muy caro lo que le hizo a Krystal.
— Así es, si se mete con Agasha, se mete conmigo, no volveré a tener miedo nunca más — ambos padres decididos a hacer su propia justicia y que éste hombre nunca más les ponga las garras encima a sus hijas.
Coninuará...
Ahora si diré que este proyecto lo estamos haciendo Ambrosine-Mink y yo con todo nuestro cariño para Ezarelle quienes a pesar de que solemos renunciar, nos levanta y yo hare todo a mi propio gusto, que ni vengan a berrinchar que wa wa wa wa wa, aqui hacemos una fusión de nuestras parejas y recuerden que todos están invitados.
Para el siguiente capitulo ambos padrea afectados por la autocracia de Raul, iran junto a Albafica para rescatar a Agasha.
Los saludo desde el proyector, su buen vecino y fans numero 1 del Agafica, su alocado amigo Kevin Levin
