Esta oscuro, se abre una puerta, era Twilight vestida con su bata de laboratorio típica de ella, sus lentes, botas militares y un pantalón de mezclilla negro no faltan en ella, al entrar a la habitación que parece un refugio anti-bombas, rodeado con suministros médicos y armamento civil, en medio hay una silla y mesa donde ella se dirige a sentarse, toma su cámara del bolsillo eh inicia a grabar.

-Hola a todos los que logren encontrar esta video cámara, bien, ya pasaron unas horas desde que me separe de mis amigas, salvándome a mí misma de los malditos bonekill…- dice a la cámara Twilight soltando lágrimas de los ojos mientras saca una berreta de su bolsillo poniéndola en la mesa.

Inicia a llorar después de eso, levantándose de la silla para buscar entre los cajones, en ello saca un wiski escoses y un vaso, se vuelve a sentar y bebe entre lágrimas volviendo a hablar a la cámara.

-Rainbow Dash, quiso que yo desarrollara junto a ella una curar de esa enfermedad que azotaba a equestria hace dos años, y miren lo que hice, acelerar la maldita enfermedad, pero de una manera horrible, convirtiéndolos en "ellos", ahora estoy sola, aquí, después de perderlas de vista y ya creo, que murieron…-

Dice volviendo a llorar y agarrando la berreta y apuntándose en su cara, llorando y regresando a hablarle a la cámara.

-Ahora, en este preciso momento, aquí y ahora, les presentare en vivo la muerte de quien creo esta enfermedad, solo quise hacer un antibiótico por Rainbow Dash, y su hija, pero ahora, solo veo que he causado la muerte de equestria, yo, solo digo, como la que intento salvar una epidemia, fracasando y creando una nueva, y, como yeguas y caballos que son, espero que me perdonen, aquí y ahora, es, mi adiós…

Es abierta la puerta del refugio donde estaba Twilight, disparando al momento cortando la cámara...

Dos años atrás…

Se oye una alarma, es la alarma de Rainbow Dash, ella estaba tumbada en su cama, con todo alrededor desordenado y con ropas en cada parte de su cuarto, con sus cascos tira la alarma y esta se apaga.

-Bien, hora de volver a trabajar…- dice así misma mientras se levanta de la cama tropezando con una camisa roja de cuadros.

Camina hacia su armario, lleno de prendas desacomodadas, entre ellas saca y se viste con una camisa de botones blanca larga y un saco negro, pantalones y zapatos negros.

Se dirige al cuarto de su hija, abriendo la puerta entra a la habitación que es de color rosado, con peluches en estantes y cajones, Rainbow Dash camina a la cama donde está su hija Rose Flash vestida con una pijama azul con arcoíris, quien está conectada por una máquina de pulsaciones y un suero, Rainbow Dash rasca su melena del color de un arcoíris para levantarla.

-¡Como estas mi campeona!- Dice Rainbow Dash enérgica y feliz a su hija quien le responde.

-Como siempre- Da un estornudo- Bien mamá, solo quisiera saber si tienes ya las medicinas.- Le dice a su madre Rainbow Dash débilmente y angustiada agarrando su peluche.

-No, te, preocupes hija, por el momento no lograre conseguirlas por el escaso dinero que tengo, pero recuerda, tu tía Twilight lograra crear una cura, eso significara que no necesitarás más medicinas.-

Le responde a su hija con felicidad terminando en seriedad, se despide de ella con un beso en la frente, en eso le pone más sarapes y se dirige a la puerta cerrándola.

Baja las escaleras, se dirige a la cocina que está sucia, con platos sin lavar, busca en el refrigerador algo de leche pero al abrirlo se da cuenta que no hay ni siquiera un plato podrido, toda la nevera vacía, enojada, cierra la puerta del refrigerador diciéndose a sí misma

–Bueno, ayer no comí, hoy también, pero mañana me darán mi paga.-

Se dirige a la puerta, sale de su casa la cual esta despintada y sucia, va a su auto también sucio y descuidado para subirse en él, sacando las llaves y poniéndolas en el arranque, conduce afuera de la casa para ser saludada por su vecina.

-Hola vecina, como esta su hija y usted hoy- Le dice Derpy a Rainbow Dash vestida de una camisa azul con un dibujo de una burbuja y pantalones de mezclilla, cortando los arbustos.

-Como siempre.- le dice Rainbow Dash a Derpy yéndose deprisa sin oír la respuesta de su vecina.

Se dirige a la carretera para llegar a la ciudad, se ha hablado de que la enfermedad que azota hoy en día a equestria se encuentra más en las ciudades, por lo cual los ponis no creen y siguen caminando y viven su día a día en las calles, en sí, ir a la ciudad es una sentencia a morir aunque nadie lo sepa, ya que ahora los trabajos en casa son los que se gana más y los que son afuera son los más peligrosos.

Llega al edificio de Genetic Corp, antes de salir del auto, se coloca una mascarilla, al salir del automóvil, va a la puerta y coloca su tarjeta para que se abran las puertas, llega al salón principal donde se quita la mascarilla, llega cerca de la recepción llegando al ascensor, al entrar al ascensor también una Pegaso logra detenerlo y entrar caminando al lado de Rainbow Dash.

-Hey Rainbow, sabes que mañana es dia de pago, no?- dice FlutterShy tímidamente vestida de una camisa de botones azul claro y una falda que llegaba a sus cascos traseros y unas zapatillas blancas.

-Mira FlutterShy, te he dicho miles de veces que no deseo hablar en el trabajo, ahora solo déjame pensar en cómo mantener la luz, agua, la casa y medicinas.

-Oh, bueno, yo, solo, quería convivir contigo, amiga.- Dice FlutterShy apenada y alejándose de Rainbow Dash.

FlutterShy se baja en el piso 10 y Rainbow Dash baja en el piso 16, pasa por los cubículos de los demás para dirigirse al suyo y volver al trabajo, inicia a hacer las cuentas de las ventas que se han hecho para los militares.

Una hora después, el jefe la llama y ella va a la oficina de él, llega y se sienta en una silla que está enfrente de la mesa del jefe, amueblada en si la oficina y mesa, el jefe se sienta.

-Para que quería verme jefe, el pago es hasta mañana, no?- le pregunta al jefe asustada y pensante.

-RainbowDash, yo sé que este trabajo es mucho para ti, más que nada por tu hija, pero, sabes que en la vida solo se tiene una validez a la vez.- le responde Shining Armor a Rainbow Dash vestido de traje negro con corbata roja y camisa de botones blanca.

-De, que ha-habla jefe?.- dice Rainbow Dash más asustada de lo normal mientras se limpia el sudor que sale de su cara y tragando saliva.

-Lo siento, pero ya que estoy al mando por la presidenta Celestia, te tengo que decir que, esta despedida.- dice mientras sella algunos papeles y checa su ordenador.

-¡Que!- Exclamó Rainbow Dash soltando lágrimas.

-Puedes venir mañana para recoger tus cosas, por lo demás esta despedida.- dice sin culpa y angustiado por lo dicho.

-¡Pero usted sabe lo que me hará esto, mi hija no tiene las medicinas y ni siquiera tengo para pagar la luz, comida y la casa!- Exclama asustada y en llantos abalanzándose a Shining Armor jalando la corbata entre desesperación.

-¡Suéltame o llamaré a seguridad!- Dice Shining Armor enojado hacia Rainbow Dash.

-¡No entiende, mi hija morirá!- Grita y suelta lagrimas Rainbow Dash siguiendo jalando la corbata de Shining Armor.

-¡Seguridad!-

Dice Shining Armor trayendo a los guardias y llevándose a Rainbow Dash, ella intenta uir de los guardias quienes no la dejan ir, es llevada por todos los cubículos donde los que trabajan hay la inician a ver incluyendo a FlutterShy.

Los guardias la llevan a la puerta y la lanzan fuera del edificio tirándole sus cosas y su pago a la acera y quitándole a la fuerza su gafete, le cierran la puerta y la dejan afuera en la lluvia, entre lágrimas saca una foto de su hija, la observa por unos minutos para caer al suelo y llorar, se levanta e inicia a recoger sus cosas y las mete a su auto, se queda en silencio dentro del auto por cinco minutos, saca su teléfono y marca a una persona.

-Hola, quisiera, saber- suelta lágrimas que la impiden hablar- Cuando es el plazo límite de mi casa, mi código es 12356820.- le habla a la operadora.

-Su casa será envergada en un plazo de dos días si no paga la tarifa de los doce meses sin pagar que serían de setenta mil dólares, gracias por llamar a casas pony, que tenga un buen día.- le dice la operadora colgando después de lo dicho.

Rainbow Dash checa el dinero que le dieron, viendo que su pago es de dos mil dólares, tira el dinero al suelo y deja caer su cabeza al volante eh inicia a llorar.

-No, sé que hacer, no puedo hacer nada, si mi hija muere, mi vida esta arruinada…- dice Rainbow Dash entre lágrimas.