Titulo: El encuentro que cambio mi vida.

Parejas: BalthazarxDean, SamxCas, insinuaciones de un GabrielxBenny, CrowleyxMeg, ZacariasxBela

Personajes secundarios: Crowley, Meg, Gabriel, Benny, Zacarías, Bela, Lucifer, Lilith, Tom, John, Mary.

Rating: k+

Género: AU, romance, Hurt/Confort.

Capítulos: 16 + 1 epilogo.

Disclaimer: Los personajes de supernatural pertenecen a Eric Kripke.

Resumen: Sam se compromete con Castiel y Dean no tolera la idea de que su hermano se vaya a casar con el hombre que ama. Durante la fiesta de compromiso conoce a un misterioso hombre con el que termina acostándose. Con lo que Dean no contaba, era que ese misterioso hombre iba a cambiar su vida por completo. BalthazarxDean, SamxCas.

Notas del fic: Este historia iba a ser un CasxDean pero cuando terminé de escribirlo me gusto como quedó, así que deje la idea original de un BalthazarxDean, es el primer fic que escribo de esta pareja pero me gusto como quedo :)

Capitulo 1

La noticia que destrozó mi vida.

Dean releyó la tarjeta de invitación por enésima vez, la sexta vez que lo hizo ya no lloraba, las lágrimas se habían acabado y solo lo invadía un profundo pesar. Su hermano menor, Sam, se iba a comprometer con Castiel, su mejor amigo y el hombre que amaba en secreto. La noticia lo había tomado por sorpresa, ya no podía decirle lo que sentía a Castiel, no quería traicionar a su hermano menor.

Cuando terminó con las horas en el hospital, se marchó por el pasillo cabizbajo, hoy era la gran noche, todos se reunirían en el salón de un lujoso hotel para celebrar la fiesta de compromiso de ambos. La idea lo hizo deprimirse aun más. Una mano se posó en su hombro y se volteó despacio.

-Luces horrible-

-No estoy de humor Crowley-

-Claro, hoy es la gran noche ¿verdad?- Dean asintió- No tienes que ir-

-Debo hacerlo, es mi hermano y mi mejor amigo-

-Dean-

-¿Iras?-

-Claro, alguien debe darte apoyo moral, Meg y yo pasaremos a buscarte-

-Gracias-

-¿Ya terminaste?-

-Sí, tengo que ir a buscar mi traje para la noche y Sam quiere verme antes del evento-

-¿Estarás bien?-

-Honestamente… no lo sé-

-Llámame si pasa algo-

Le palmeó el hombro en señal de apoyo y se marchó por el pasillo para terminar sus horas en el hospital. Dean trabajaba como psicólogo en el hospital regional, Crowley y Meg trabajaban en urgencias como enfermeros, ambos eran sus amigos desde la universidad y eran los únicos que sabían del amor no correspondido que sentía por Castiel.

Luego de pasar por el traje se dirigió a su departamento, eran las siete y media, y la fiesta comenzaría a las nueve. Comió un poco y se vistió mirándose al espejo, no estaba seguro de cuánto podría hacer durar esa farsa pero debía haberlo. Era su hermano menor, el pequeño Sammy, el hermano que cuidaba con su vida, y por otro lado estaba Castiel, su mejor amigo desde la escuela media, el chico que siempre lo apoyó en todo, de quien comenzó a enamorarse desde que entraron a la universidad pero jamás encontró la ocasión para hacerlo y cuando por fin se decidió, Castiel le contó que estaba saliendo con Sam. Dean se había forzado a sonreír y felicitarlos por la noticia, aun cuando estaba destrozado por dentro.

EL ruido del timbre lo hizo salir de sus cavilaciones y fue a abrir la puerta, saludó a Sam con una sonrisa.

-¿Estás listo, Dean? Ese traje te queda genial-

-Gracias, ¿Cómo va todo?-

-Listo pero estoy muy nervioso, esto es un gran paso para nosotros- dijo sentándose mientras Dean le pasaba una cerveza- No puedo creer que después de cuatro años saliendo, nos vamos a comprometer-

-¿No me digas que te arrepientes?-

-¡Jamás!- dijo Sam fingiendo indignación- La duda ofende-

-Solo bromeaba, tranquilízate, estoy seguro que Cas esta igual o peor-

-Mucho mejor, si parezco un psicótico a su lado- Dean se rio bebiendo su cerveza- Quería pedirte un favor Dean, no hay nadie a quien más pueda pedírselo-

-Sammy-

-Son dos cosas, primero, quiero que guardes esto…- Le pasó una cajita negra.

-Esto es…-

-Sí, los anillos de compromiso, por favor Dean, solo confió en ti para esto-

-Claro- respondió algo temeroso.

-Y lo segundo, Cas y yo estuvimos hablando y nos gustaría que fueras uno de los padrinos-

-¿Qué?-

-Cuando nos casemos a fin de año-

-¿Fin de año? Pero solo falta un mes para eso-

-Sí, lo diremos en la fiesta así que no se lo digas a nadie- le guiño un ojo- Seria un honor para nosotros, Cas te aprecia mucho y yo te quiero aun más. ¿Qué dices?-

Dean lo miró unos segundos sin dar crédito a lo que oía. Iban a casarse en un mes, en solo un maldito mes más, Castiel estaría fuera de su alcance para siempre. Contuvo lo mejor que pudo, las lagrimas que amenazaban con caer.

-¿Dean?-

-Claro que lo hare, enano- lo abrazó para disimular sus ojos llorosos- Estoy muy feliz por ustedes-

-Gracias Dean, tengo al mejor hermano del mundo- Dean lo abrazó más fuerte- Ya, no te pongas sentimental aquí- dijo sonriendo- Guarda esas lagrimitas de emoción para la fiesta-

-Idiota, yo no lloro- contesto sonriendo. Sam sacó su celular para responder, dio un par de asentimientos y se levantó.

-Tengo que irme, Cas esta algo inquieto con los últimos detalles, quiere una noche perfecta-

-Es su fiesta de compromiso Sammy, tienes que complacerlo-

-Claro, nos vemos en la fiesta Dean-

-Nos vemos Sammy-

-Gracias Dean, eres el mejor-

El mayor cerró la puerta y ya no pudo contener las lágrimas que amenazaban con caer. Miró los anillos en la cajita y los apretó con fuerza en su mano. Ya no podía hacer nada, iban a casarse dentro de un mes.

Crowley y Meg pasaron a buscarlo a las 20:45pm, no había mucho tráfico a esa hora pero querían llegar puntuales a la fiesta. Dean iba mirando por la ventana mientras Crowley conducía. Meg lo miraba preocupada.

-No tienes que hacerlo Dean, dile a Sam lo que sientes por Cas, estoy segura que ellos no quieren herirte, si supieran esto-

-No Meg… no quiero que sientan lastima por mí… Dios…- se llevó una mano a la cara- Estaré bien…-

-Dean-

Crowley estacionó el auto y los tres entraron al hotel para dirigirse al salón de eventos. En la entrada estaban algunos amigos que tenían en común, Dean saludó a Ruby, Zacarías y Miguel. Buscó con la mirada a la feliz pareja pero no estaban por ningún lado, supuso que estarían en la habitación arreglándose para la fiesta. Se excuso del grupo que se había formado para ir hasta la mesas y tomar un trago, necesitaba algo para calmar sus nervios. Sintió una mano en su hombro y casi deja caer la copa.

-Me asustaste Bela-

-Lo siento guapo, ¿Cómo estás?-

-Bien ¿Y tú?-

-Ocupada con el trabajo, mi jefe es un ogro- dijo tomando una copa para beberla- ¿Cómo va todo en el hospital?-

-Bastante bien, aunque creo que me extenderán el horario-

-¿Y porque?- pregunto Bela mirándolo.

-Un colega está con licencia y me pidió tomar algunos de sus pacientes-

-Eres tan bueno Dean, no dejes que se aprovechen de ti-

-Está bien, me gusta mi trabajo-

-Eres un encanto- dijo acariciando su mejilla despacio- No entiendo cómo estás soltero-

Dean solo sonrió, no le faltaba compañía ni mujeres dispuestas a estar con él pero solo le importaba una persona, Castiel.

Poco a poco fueron llegando todos los invitados a la fiesta, eran cerca de treinta personas, amigos de Sam y Castiel. Dean conocía a la mayoría porque fueron amigos en la universidad pero a varios los veía por primera vez. Mientras algunos bailaban en el centro, él se dirigió hacia la mesa de cocteles para tomar otra copa y algo de comer. Iba a tomar una copa de champan cuando su mano dio contra otra, alzó la mirada para encontrarse con unos ojos azules que lo miraban.

-Lo siento- se excuso el hombre, Dean notó un acento extraño pero agradable, parecía mayor que él y era bastante atractivo.

-Está bien- respondió Dean quitando la mano, el hombre tomó la copa y se la entregó, el menor la tomó despacio- Gracias-

-Salud- dijo tomando una copa y chocándola contra la de Dean- Nos vemos-

Dean lo vio caminar hacia un grupo de que estaba conversando alegremente. Nunca había visto a ese chico antes así que supuso que era un amigo de Castiel.

A las nueve y media hizo su gran entrada la feliz pareja, Dean estaba con Meg, Crowley y Zacarías, observó como ambos subían tomados de la mano hacia el escenario con una copa de champan en su mano. Castiel estaba sonriendo mientras Sam tomaba el micrófono.

-Hola a todos, antes que nada, queremos darles las gracias por venir- varios invitados aplaudieron y otros silbaban- Ya chicos, pórtense bien- dijo Sam sonriendo- Aun queda mucha fiesta por delante- Castiel dejó la copa en la mesita que había un lado y le quitó el micrófono a Sam besando su mejilla.

-Vamos a saltarnos los preámbulos, gracias a todos por venir a nuestra fiesta de compromiso, esperamos que se diviertan mucho, tenemos unas sorpresitas para todos los gustos- dijo pícaramente- Disfruten-

Sam lo abrazó por la espalda para depositar un beso en su mejilla. Dean los miró tristemente y se excusó hiendo a la mesa por otra copa. Evitó por todos los medios, encontrarse con la parejita feliz pero fue imposible, a las once, ambos se acercaron a él sonriendo. Castiel lo abrazó con fuerza.

-Cálmate- dijo Dean sonriendo- Tu novio se pondrá celoso-

-Idiota, si tu eres como mi hermano- respondio Castiel sonriendo.

-¿Cómo están para terminar de colocarse las ataduras?- pregunto Dean intentado restarle importancia a las palabras de Castiel.

-No digas eso- dijo Sam sonriendo- Será la condena más dulce de mi vida- Castiel lo miró sonriendo y se apartó de Dean para tomar su mano- Dentro de poco haremos la postura de anillos, cuando subamos al escenario, te acercas-

-Claro- dijo Dean sonriendo.

-Gracias Dean, Sam me contó que aceptaste ser nuestro padrino para la boda- terminó diciendo bajito para que nadie se enterara- No sabes cuándo te quiero- volvió a abrazarlo con fuerza.

Dean estaba por desmoronarse, si no hubiera sido por la intervención de Crowley, hubiera comenzado a llorar en ese preciso instante. Él también quería a Castiel pero no de la misma manera, lo amaba, lo amaba más que a nada en el mundo.

-Felicidades, a la parejita- dijo Crowley abrazando a Sam y luego a Castiel- ¿Cómo están para el gran paso?-

-Nerviosos- respondió Sam por los dos- Espero que no me dé un ataque en el escenario-

-No digas tonterías cariño- dijo Castiel abrazándolo- ¿Qué hago si te pasa algo?-

-¿Te pondrías triste?-

-Tonto, sabes que te amo-

-Yo también te amo Cas-

-Ya tortolitos, se comportan o se van al cuarto- dijo Crowley sonriendo- Meg quería hablar con ustedes, está por allá-

-Vale, acuérdate de lo que te dije Dean- espetó Sam antes de ir con Castiel hacia donde estaba Meg.

-¿Estás bien, Dean?-

-Sí…-

-Podemos irnos-

-No… ya estoy aquí, puedo soportar unas horas más-

Dean hizo su mejor esfuerzo para no quebrarse cuando Sam y Castiel se colocaron los anillos e intercambiaron algunos votos. La peor parte la tuvo cuando Castiel lo forzó a decir algunas palabras, el mayor apenas pudo negarse, ya que estaba frente al micrófono.

-Mmm… Bueno, hola…- miró a Castiel y este le hizo un gesto para que continuara- No sé qué decir… supongo que debería felicitar a la pareja y esas cosas… mi hermano, el pequeño Sammy, me parece ayer cuando venias corriendo a mi lado porque alguien te molestaba en la escuela- se escucharon algunas risitas en el publico- Maldición, no podías hacer nada solo y mírate ahora, a punto de casarte con ese pequeño angelito. Castiel es uno de mis mejores amigos, hemos vivido varias cosas juntos y me sorprendí bastante cuando me dijiste que estabas saliendo con mi hermano, soy testigo de cuanto se aman… y sé que mi hermano sabrá cuidarte como mereces, Cas… sé que mi hermano te hará feliz porque de lo contrario le pateare el trasero- varias personas en el publico de rieron. Dean se volteo a mirar a la pareja, podía sentir que estaba a punto de llorar- Sé que ambos serán felices y se cuidaran mutuamente… está demás decirles que siempre podrán contar con mi apoyo, que les deseo de todo corazón que sean felices…- unas lagrimas cayeron por sus mejillas- Lo siento… estoy siendo demasiado sentimental-

Castiel esbozó una tierna sonrisa para abrazar a su amigo con fuerza, Dean respondió a su abrazo mientras intentaba controlarse.

-Gracias Dean, eso fue hermoso- Castiel se apartó un poco para limpiar las lagrimas del mayor- No te preocupes, estaremos bien, has hecho tanto por mí, que no tengo manera posible de agradecértelo-

-Cas…-

-Gracias Dean- Sam se acercó sonriendo para abrazar a su hermano mientras lloraba.

-Eso fue precioso Dean, aunque no me gusto la parte donde me ibas a golpear- Dean se rio- Gracias-

Dean bajó del escenario regañándose mentalmente, al final había terminado llorando, aunque la mayoría pensaba que era la emoción del momento.

EL resto de la fiesta procuró alejarse de la feliz pareja, a media noche, se fue por el pasillo hacia el baño del primer piso, llevaba varias copas encima y estaba algo mareado. Abrió la puerta y chocó contra alguien.

-Lo siento- dijo con una pequeña sonrisa.

-Ojitos verdes- Dean alzó la vista.

-Eres tú… ojitos azules-

-¿Qué haces aquí? Estás un poco ebrio-

-No es cierto-

-Tu discurso fue bastante emotivo pero lucias muy triste-

-¿Qué?-

-Esos ojitos lucían muy tristes, aun cuando te forzabas a sonreír-

-No es cierto… estaba feliz por ellos-

-¿No quieres que tu hermano se case?-

-Claro que sí… él tiene derecho a ser feliz y Cas es un hombre increíble… ambos serán felices-

-Ahí- dijo indicando sus ojos- Tienes esa mirada triste de nuevo-

-Yo…-

Antes de que pudiera contestar algo, el extraño de ojos azules comenzó a besarlo, no supo si fue por el alcohol o lo miserable que se sentía pero colocó sus manos en los hombros del extraño y cerró los ojos para dejarse llevar mientras el hombre lo empujaba al baño.