Disclaimer: El Lórax y sus personajes pertenecen a Dr. Seuss
Nota de la autora:
Bueno, tras un receso de más de un año de escribir en , he regesado con mi nuevo fandom, Oncest.
No contiene violencia y, he de reconocer, es algo, o muy, fluffy. Pero es el primero. De momento voy a la mitad del fanfic, pero espero terminarlo pronto. De igual forma, aseguro actualizaciones periódicas y constantes.
Sin más que decir, disfruten :)
Prólogo
Once-ler miró a su alrededor por primera vez en varios años. Lo que alguna vez fue un gran bosque de Trúfulas lleno de colores luminosos y animalillos cantarines, ahora quedaba reducido a troncos cortados, un cielo grisáceo y una bruma pestilente que se extendían hacia el horizonte. ¿Qué había hecho? ¿Cómo pudo haberse dejado enceguecer de aquella manera por su propia avaricia? ¿En qué clase de monstruo se había convertido?
Miró hacia abajo, encontrando al Lórax de pie, observándolo con sus decepcionados ojos. Sabía que había hecho mal al romper su promesa, al ignorar cualquier intento de ayuda por parte del pequeño anaranjado. Pero su propio ego le había hecho obstinarse a la idea de que el Lórax no sabía de eso, de que no le importaba que al fin lo hubiera conseguido. Qué error había cometido al no escucharlo.
-¿Ves ahora lo que has causado, Greed-ler?-le preguntó de manera pausada, sin enojo, solo con la decepción marcada en cada sílaba, nombrándolo por el apodo que se había ganado en los últimos años. "Greed-ler", el nombre le quedaba tan bien como sus guantes verdes hechos a la medida. –Lo destruiste todo.
-Yo no…-comenzó a decir, con voz ronca, pero las palabras no salieron de su garganta. Su boca se había secado súbitamente, tanto que le costaba decir algo como excusa, aunque tampoco era que tuviera una.
-¿No querías que esto sucediera? ¿No sabías que esto podía pasar?-terminó por decir el Lórax, con ojos acusatorios y subiendo un poco la voz. Era obvio que no había cabida para una excusa tan mala como las que se le hubieron podido ocurrir a Greed-ler.-Pues bien, ya está hecho. Destruiste todo lo que alguna vez hubo aquí. Acabaste no solo con los árboles de Trúfula, sino con todo lo demás. Los animales que te acogieron tuvieron que huir de ésta destrucción y contaminación que por tus caprichos causaste.
-¿No puedes arreglarlo? ¿No puedes utilizar tus poderes y revertir esto?-inquirió con desesperación en la voz. Ahora que veía las consecuencias de sus actos, quería enmendarlo todo a cualquier precio. No importa qué tuviera que dar o sacrificar a cambio de ello.
-No funciona así.-suspiró el pequeño ser anaranjado. Ojalá, pues hubiera evitado que eso pasara.
-Entonces dime cómo lo puedo revertir.-en sus ojos podía notarse la culpa y el dolor que sentía por sus terribles actos. -Dime, Lórax. Ayúdame a remediarlo.-lo agitó un poco tomándolo por los hombros.
-Hay una forma.-musitó el peludo ser.-Pero debes asegurarte de conseguirlo, porque es la única oportunidad que obtendrás. Si lo arruinas ésta vez, ya nada podrá hacerse.-le advirtió, levantando un dedo para dejarlo en claro. Greed-ler asintió. Haría lo que fuera por recuperar el bosque que él mismo se encargó de destruir. –Debes volver al pasado y encontrar tu antiguo "yo". Tienes que convencerlo de alejarse del camino equivocado, del que tú tomaste, ¿entiendes?
-Sí, sí, lo entiendo.-asintió con rapidez.
-Más vale que así sea o esto-señaló el desolado valle-seguirá igual.
-¿Cómo viajaré al pasado?-cuestionó Greed-ler, notando que no tenía la menor idea de cómo podía suceder si quiera eso. Pero el Lórax no parecía preocupado por aquél detalle importante, en lo absoluto.
-En eso sí puedo ayudarte.-respondió. –Solo recuerda lo que te he dicho.
Todo comenzó a desenfocarse frente a sus ojos, mientras las palabras del Lórax seguían resonando en su cabeza. No comprendía lo último que su peludo y antiguo amigo le había dicho, no consiguió escucharlo con claridad. Pero de algo estaba seguro: si lo echaba a perder de nuevo, no habría vuelta atrás.
N/A: Se aceptan críticas constructivas, sugerencias y opiniones :) Espero perdonen faltas de ortografía que se me hayan pasado. :)
¡Hasta el siguiente!
