Disclaimer: Fairy Tail pertenece a Hiro Mashima. Este fic participa en el reto de noviembre del foro 413 days!: Enlace mágico: Juvia nos cuenta una historia de amor del foro: 413 days.
Advertencias: Como es costumbre en mi, no puedo contra mi increíble nivel de distracción, así que no negaré la posibilidad de dedazos e incoherencias. Me disculpo con anticipación por ellas.
Nota de la autora: He aquí el primero de los drabbles de este reto. Por alguna razón que desconozco, tenía las tres partes guardadas y listas pero sin publicar ―¡deshonor sobre mi!(?― y hasta ahora lo noto, por eso lo tardía de mi contribución. En otra ocasión lo habría dejado pasar, pero por primera vez en mucho tiempo me siento conforme con uno de mis proyectos, así que no quise dejarlo morir.
Reto Noviembre:
Elemento pareja: Dejar plantado/a.
.
―The Wait―
.
His wait
.
.
Con mirada perdida observa su vaso vacío, y se cuestiona que ordenará esta vez cuando la mesera regrese a cuestionarle si no desea cambiarse al bar. Claramente está estorbando, ocupando el espacio de algún potencial cliente mientras se sumerge en la humillante espera.
Sabe que probablemente debería marcharse, pero se niega a la idea de que el asiento al otro lado de su mesa jamás resulte ocupado.
Llegaría, por supuesto que llegaría, la espera por esa noche había sido mutua, o eso había creído hasta entonces. Tiene sus dudas ahora, y aunque lucha por encontrarle una explicación lógica a su inesperada ausencia, a cada milimétrico movimiento del gran reloj sobre la rustica pared, se hacen crecientes la angustia y el temor.
¿Por qué no ha llegado? ¿Acaso no planea hacer su aparición? La incertidumbre cala hondo, y se convierte en molestia a medida que los ojos curiosos continúan observando en su dirección.
Las personas deberían ocuparse de sus asuntos más a menudo.
Avista a la empleada del lugar con su mirada fija en su dirección, y no requiere de gran poder de comprensión el percibir que no tardará en dirigirse a su mesa. Analiza la idea de pedir de una vez la cuenta, una hora y media de retraso son su límite.
Su paciencia se acaba, y el mar de serenidad que a menudo refleja su persona, se siente a punto de ebullición, mientras que la incógnita de esa ausencia comienza a tomar cuerpo en su oprimido e inseguro corazón.
No faltaría, no le otorgaría tal desplante. ¿O sí?
Su orgullo herido le grita que se marche, que olvide esa noche y el encuentro que jamás sucedió, pero su instinto descuerda, y le ordena obstinante que salga en su búsqueda y se asesore de que todo está bien.
Porque de otro modo no faltaría. No, definitivamente no lo haría.
La chica se acerca a su mesa una vez más, pero la calla antes mismo de que gesticulara palabra alguna al pedirle la cuenta. Deja una gran propina como agradecimiento a su paciencia, y se aleja ante la mirada penosa de todos los presentes.
No necesita su empatía y compasión. Necesita respuestas.
Avanza poco en su andar cuando en la oscuridad de la noche una presencia conocida se le arrima, pero suspira sin ganas, no siente deseos de socializar en absoluto.
El pelirrosa sonríe, y se acerca amistoso y con prisa, pero lo evade sin pena y continúa su andar.
―Oi, Gray. Tengo algo que..
―No tengo tiempo Natsu. ―lo corta y se aleja.
No tiene tiempo para peleas, meseras recalcitrantes o desconocidos entrometidos. Solo una cosa tiene en mente en ese momento, y todo de si está centrado en ello.
Debe encontrarla y obtener respuestas, porque Juvia Loxar, lo ha dejado plantado.
.
―460―
~Gracias por leer~
