Caminabas rápidamente por la oscura calle mientras maldecías internamente tu suerte. Eras nueva en la ciudad de Edge y en menos de tres días te habían transferido a ese lugar. La persona que debía guiarte por la ciudad al parecer te detestaba y te dejo a la deriva y para empeorar las cosas aun no te habían activado la línea telefónica y el tren que debías tomar para llegar a tu apartamento sana y salva había chocado precisamente ese día en el que habías salido tarde de la universidad.
Suspiraste y seguiste caminando pero un pequeño ruido te hizo mirar hacia atrás. Tuviste un pequeño paro cardiaco al ver dos siluetas masculinas siguiéndote. Tragaste fuerte y aceleraste el ritmo. Miraste nuevamente por tu hombro para ver que los hombres se acercaban. Sin pensarlo dos veces te pasaste a la otra calle pensando que, tal vez, ellos seguirían derecho y te mirarían como una loca por haber hecho tal cosa pero para tu "suerte", los dos hombres se pasaron a tu lado. Caminaste mas rápido y ellos te imitaron, dejaste a un lado el pudor y la razón para salir corriendo. Al escuchar los pasos de tus perseguidores decidiste meterte en un callejón oscuro un tanto estrecho. De pronto tendrías ventaja por ser delgada pero los hombres pudieron maniobrar bien.
Tus pies empezaron a fallarte, volteaste a la izquierda y entraste a otro callejón después de cruzarlo te sorprendiste al entrar en una pequeña calle, era amplia, algo malo, muy malo para ti. Jadeabas por la fatiga e ignorando la poca energía que te quedaba seguiste corriendo. Te sentiste un poco aliviada al no escuchar pasos siguiéndote y al ver una luz mas adelante. Corriste como pudiste, pensaste que esa pesadilla se acabaría pues la luz se había convertido en un pequeño bar. Te faltaban un par de pasos para llegar pero para tu "suerte" los dos hombres cayeron frente a ti con unas sonrisas depravadas. Retrocediste un paso y chocaste contra algo duro, subiste la mirada y te encontraste con un hombre gigantesco y musculoso
-nos diste un problema muñeca-dijo uno de tus perseguidores mientras te empujaba contra la pared-eres escurridiza-el hombre tenía un peinado extraño, tenia los cabellos peinados hacia arriba y en su cara tenia un tatuaje
-pero eso cambiara después de partirte esas piernitas tan deliciosas-hablo el otro sonriendo con superioridad, llevaba una pañoleta en su cabeza y su cabello le llegaba hasta los hombros, era de color verde claro-¿qué te pasa?-se acerco a ti y tomo con fuerza tu muñeca-¿te comió la lengua los ratones?-rio un poco por su chiste
-vamos a ver si eres muda-hablo el primero mientras se te tiraba encima como un cazador que tiene a su presa justo donde quería.
Viste todo en cámara lenta, tu corazón latía intensamente. Sentiste tus lagrimas recorrer tu rostro, negaste lentamente con tu cabeza y gritaste-¡AYUDA!-tu mano libre se movió como si tuviera vida propia y tus uñas se incrustaron en la cara de tipo que se te había lanzado encima. Escuchaste el gruñido del hombre y la risa del que te tenía agarrada. Su agarre se volvió mas fuerte y te retorciste un poco por el dolor
-vaya muñeca eres una fiera, pero eso lo vamos cambiar. Tuk ven a jugar-el gigantesco hombre se acerco a paso lento. Forcejeaste sin éxito-quieta gatita o si no...
El hombre que te tenía acorralada salió disparado hacia el piso. Tus piernas te fallaron y te resbalaste contra la pared hasta casi tocar el piso. Algo te jalo con suficiente fuerza para hacerte caminar. Lo ultimo que viste fue la cara de sorpresa del tal Tuk, a un hombre moreno casi igual de grande y musculoso a Tuk y a un joven de cabello rubio y puntiagudo con una gran espada sostenida con una sola mano. Te entraron a la fuerza al un pequeño bar y en ese momento te diste cuenta de la persona que te había sacado de esa espantosa escena
-tranquila todo va estar bien-te dijo la mujer con una tenue sonrisa. Tenía el cabello azabache y liso, era un poco mas alta que tu pero lo que mas te llamo la atención fue ver lo hermosa que era y no cabe mencionar su bien proporcionado cuerpo-¿cómo te llamas?
Balbuceaste un poco antes de responder-m-mi nombre es _
-¿quieres algo de tomar?-te dijo amablemente. Asentiste y en menos de un minuto te trajo un agua aromática caliente-por cierto me llamo Tifa
-gra-gracias-dijiste nerviosamente. Trataste de agarrar el vaso pero te diste cuenta del temblor en tus manos. Miraste a Tifa y luego escuchaste un disparo-¡haa!-dijiste en un hilo de voz
-no te preocupes, estas a salvo
-pe-pe-pero, ellos...
-están bien-nuevamente te cogió de la mano y te sentó en una mesa cerca de la barra. Te puso el agua frente a ti y se sentó al otro lado-¿qué hace una chica tan inocente como tu en un lugar así?
Nuevamente balbuceaste antes de decir algo concreto-e-e-es que salí tarde y... el tren que debía tomar choco y... no quería tomar un taxi sola y... camine...
Sentiste como las cálidas lagrimas resbalaban, lloraste entre tenues quejidos y sentiste como Tifa te abrazaba cálidamente, aun estabas un poco aterrada por lo sucedido. Querías irte a casa. Escuchaste un par de disparos mas y luego escuchaste el sonido de las sirenas. Secaste con tu manga las lagrimas y miraste temerosa la puerta, no querías hablar con nadie y menos con un policía. La puerta se abrió y entro el hombre moreno seguido del rubio, miraste a Tifa un poco sorprendida por verlos sin ningún rasguño.
-¿cómo se encuentra la niña?-" ¿niña?" pensaste un poco indignada-¡oh! Pero si aquí estas
-_ te presento a Barret-Tifa señalo al corpulento hombre-y a Cloud-miraste al rubio y vaya que quedaste sorprendida. Era el hombre mas atractivo que hubieras visto, sus ojos azul-verdoso brillaban de una forma mística y extraña, tenía buen físico y a pesar de que no era muy alto lo viste como el hombre mas perfecto del mundo. Cuando volviste a razonar, apartaste la mirada rápidamente, agradecías que tu cara siempre estuviera neutra porque si no jurarías que estarías roja y con la boca abierta además de babear
-gracias-susurraste
-¿qué? No te escuche ¿acaso te comió la lengua los ratones?-Barret rio ante su "chiste" pero tu lo miraste instantáneamente con el seño fruncido. Al parecer sintió que tenías tu mirada clavada en el porque te miro y empezó a ponerse nervioso o eso creíste. Pero a decir verdad Barret había sentido como miles de cuchillos se clavaban en todo su cuerpo, además del escalofrío que recorrió toda su espina, solo una mirada tuya basto para atemorizar al grandulón-l-lo siento
-Barret eso no fue para nada gracioso-le regaño Tifa
-¡ya dije que lo siento!-se agacho rápidamente a tu lado-por favor lo siento-te suplico, tu solo inclinaste un poco tu cabeza para responder afirmativamente-¡gracias! Sabes creí que me clavarías un cuchillo
-no soy capaz-respondiste con reproche
Barret rio con mucha fuerza-eres divertida _, vaya eso fue un buen calentamiento-te sonrió ampliamente y tu también lo hiciste pero tímidamente-¡mira la hora! Es hora de dormir, fue un gusto conocerte _-y sin mas el gran hombre subió por las escaleras
Miraste a la nada pensando que hacer, no querías molestarlos, además acababas de conocerlos pero la sola idea de salir a la calle te aterraba-es mejor que te quedes-escuchaste la voz de Cloud-es muy peligroso salir a estas horas-tu corazón empezó a latir como loco, su voz era profunda y seductiva... ¡¿en que estabas pensando?! Borraste ese pensamiento de tu mente, que vergüenza.
-Cloud tiene razón, quédate esta noche, mañana te podríamos llevar a tu casa
-no quiero molestarlos
-tonterías, te quedaras aquí-asentiste obediente hasta que...-y dormirás en la habitación de Cloud.
Rechazaste educadamente dando escusas y pidiendo que te dejara dormir en el sofá. Te pareció increíble lo testaruda que podía llegar a ser Tifa. Te hizo callar y te llevo a rastras a la habitación de Cloud. Cuando las dos desaparecieron por las escaleras, Cloud quedo pensativo recordando la mirada que habías utilizado sobre Barret, debía admitir que hasta a el le dieron escalofríos. Miro nuevamente las escaleras y suspiro rendido. Al parecer demostraste no ser tan "inocente". Cloud saco un saco de dormir y lo coloco cerca de las escaleras, al sentarse al lado del saco te recordó, no eres muy alta, tienes cabellos oscuros y ojos de color _, puede que no seas la chica mas hermosa pero eres bonita, no, linda y muy diferente, se podría decir, según la perspectiva de Cloud, que eres única, hasta ahora el no había conocido a alguien como tu.
Estabas tendida en la cama mirando el techo, te sentías incomoda, muy incomoda. El olor que desprendía la cama te embriagaba de una forma extraña. Miraste hacia tu izquierda y recordaste que tu celular estaba casi sin batería, también recordaste con frustración que debías llamar a tus padres pero sin un plan telefónico, te era imposible contactarlos. Te levantaste lentamente y te acercaste al escritorio de Cloud donde se encontraba tu pequeño bolso, con pasos casi inaudibles te acercaste a la puerta y la abriste un poco. Todo estaba oscuro, todos deberían estar dormidos, así que decidiste buscar por ti misma un cargador. Después de abrir varios cajones encontraste el cargador de un Iphone y luego el enchufe, mientras lo conectabas no te diste cuenta que unos ojos azul-verdosos te miraban. Cloud había subido por una almohada y al dejar la puerta semi abierta te vio esculcando en sus cosas, lo primero que se le cruzo por la cabeza fue que eras una agente de Shinra pero después de ver que sacabas el cargador decidió dejarte en paz.
Te despertaste un poco agitada, habías tenido una pesadilla, te acurrucaste contra las cobijas y te hiciste un pequeño bulto. Cerraste los ojos para volver a dormir pero el llamado de Tifa te hizo levantarte. Saliste del cuarto y bajaste al pequeño comedor. Tifa te sonrió dulcemente y tu la saludaste, cuando te sentaste viste a dos niños mirándote fijamente
-chicos, les presento a _, ellos son Denzel y Marlene, Marlene es la hija de Barret y Denzel vive con nosotros
-buenos días-dijiste tímidamente
-buenos días-respondieron al mismo tiempo con entusiasmo
-a comer-Tifa coloco los platos con el desayuno frente a ustedes y empezaron a comer. Cuando ibas a la mitad, Cloud apareció de la nada-Cloud siéntate, desayuna con nosotros
-tengo trabajo por hacer-respondió secamente
-bueno, por lo menos podrías llevar a _ a su casa
-¿Barret?
-salió temprano-Respondió Marlene
-Bien, la llevare.
Te sentiste un poco mal, al parecer lo estabas molestando mas de la cuenta. Después de terminar recogiste tus cosas, dejaste todo en su lugar y te despediste de todos. Al salir de bar, viste el letrero "7th Heaven, que nombre tan extraño". Esperaste a Cloud, lo seguiste por la calle dejando una buena distancia y viste sorprendida la motocicleta. Te pusiste nerviosa, jamás habías montado en una. Te subiste con la ayuda de Cloud y te sonrojaste un poco cuando te dijo que te agarraras fuerte de el. Al encenderlo el motor rugió asustándote. Recorrieron las calles a gran velocidad, tu le decías, como podías, por donde ir. Hasta que llegaron a un edificio un poco elegante. Te bajaste de la moto y te despediste, entraste al edificio y escuchaste la moto alejarse. Subiste a tu apartamento y llamaste inmediatamente a tus padres omitiendo el "asalto" para no preocuparlos luego te sentaste en el sofá "debo darles algo a cambio por su ayuda" pensaste mientras sonreías levemente recordando a Cloud "a Cameron le encantara este lugar".
