El diario de Ema
By: Lita Wellington
Capítulo Uno
"Querida Hermanita"
La vida de Ema con su gran familia era la envidia de sus compañeras de universidad, vivir con trece hermanos y no unirlos ningún lazo de sangre eso sí que era una tentación. Actualmente Ema Asahina, se encuentra estudiando Administración de Empresas en Meiji University.
Pronto sería su cumpleaños veintiuno el 08 de Octubre y sus hermanos le estaban preparando su festejo, esta fecha era importante porque cumpliría la mayoría de edad y sus padres estarían con ella. Que más podía pedir ella como cumpleaños bueno… Ema tiene un pequeño secreto.
Querido Diario:
Adoro los días domingos, sabes el ¿Por qué?, es el día que están todos mis hermanos reunidos, si mis trece hermanos a quienes amo de manera fraternal, solo que mis sueños no son tan castos que digamos, ellos son los culpables bueno… casi todos ya te he contado anteriormente sobre los hermanos Asahina.
Nuevamente volví a soñar con Natsume, los sueños con él van mejorando, me encontraba en su departamento disfrutando de una sesión de sexo realmente salvaje, la única vez que estuve en ese lugar fue el día que descubrí, quien pensaba era mi padre resulto ser mi padre adoptivo, mis padres biológicos murieron cuando yo era bebé.
Mis queridos hermanos creen que soy una chica casta y pura, en teoría estoy realmente empapaba gracias a la ayuda de mis mejores amigas, la práctica aun continuo en primera base.
Aun continuo sin novio, eso se lo debo a mis trece celópatas particulares, han espantado a todos mis pretendientes en los últimos tres años, prefiero dedicarme a mi carrera y seguir escribiendo mis sueños eróticos, qué más quisiera que estos se volvieran realidad ese sería mi mejor regalo de cumpleaños.
Hasta aquí te dejo querido diario debo bajar a desayunar ya deben estar todos reunidos y es un placer verlos todos juntos aunque sea una vez al mes.
Ema
Los planes de Ema para ese domingo era desayunar con sus hermanos, ayudar en la cocina e ir al cine con sus dos mejores amigas Hana y Yukime. Decidió ponerse una minifalda color azul marino, una blusa blanca que dejaba descubierto los hombros, se hizo una sencilla cola de caballo alta, en cuanto saliera complementaria con unos botines azul marino y maquillaje discreto.
- Buenos días – saludo Ema, le gustaba ver la mesa del comedor con todas las sillas ocupadas.
- Buenos días – respondieron todos al unísono.
Al verla bajar las escaleras, todos quedaron con la boca abierta, Ukyo por poco tira la jarra con jugo de naranja encima de Wataru.
- ¡Que sexy hermanita! , ¿saldrás con tu novio? – Hikaru siempre con su comentario para hacer rabiar a sus hermanos
- No, mi último pretendiente huyo de la ciudad después de recibir una amenaza de muerte – respondió Ema mientras recogía la jarra del café de la cocina.
- Es una lástima, era un muchacho agradable, recuerdo que lo conocí cuando fui a recogerte y te dio ese beso en la frente mientras esperaba tu respuesta de noviazgo – Hikaru veía las caras descompuestas de sus hermanos, aunque quería saber ¿quién? fue el de grandiosa idea de correr al último pretendiente de Ema.
- Voy al cine con mis amigas – continuo la conversación Ema mientras discretamente veía la cara de pocos amigos de sus hermanos.
- Puedo ir contigo hermana mayor – Wataru fue el primero en ofrecerse
- NI lo sueñes Wataru, tienes que estudiar, tus notas no han estado muy bien, eso lo hable con tu profesora la semana pasada – golpe bajo de Masaomi
- No es justo – el chico de catorce años cruzo los brazos en señal de protesta.
El desayuno transcurrió con la tranquilidad de siempre, los hermanos Asahina disfrutaban estar junto a su querida hermana, Ema les representaba el cielo y el infierno, la pasión y la lujuria.
Hace cuatro años se convirtió en su hermana por el matrimonio de sus padres, lazos de sangre no los unía en absoluto, la amaban, la idolatraban cada uno a su manera, no era secreto entre los hermanos sus sentimientos por ella, Louis salía de ese conflicto porque se consideraba su caballero con armadura junto con Juli que ya tenía un año de haber desaparecido de la vida de Ema.
Tenían una regla de oro y tabú entre ellos, por más que desearan a Ema nunca la tocarían, lo que ellos no sabían que su hermanita tenía otros planes en su cabecita y ellos eran los causantes de sus sueños más estimulantes.
Después del desayuno cada uno se fue a sus actividades del día, los únicos que quedaron en casa fueron Ema, Ukyo y Wataru, este último se encerró en su habitación a estudiar.
Ema se encontraba lavando los platos del desayuno y Ukyo revisaba en su pizarrón si alguien comería en casa, discretamente veía a Ema, definitivamente hoy se veía sexy y esa blusa no era de gran ayuda.
- Maldición me corte – Ema rompió uno de los vasos, se hizo un corte en el dedo índice de la mano derecha.
- Dejame ver – Ukyo reviso el dedo – no es muy grave no es necesario de sutura, una bandita será más que suficiente – en uno de los cajones de la cocina tenía un botiquín de primeros auxilios.
- Gracias Ukyo – Ema le dio un beso en la mejilla de agradecimiento – creo que es momento de irme, no llegaré tarde.
- Si adelante diviértete.
Ema se dirigió a su habitación para terminar de arreglarse y media hora después salía de Sunrise Residence.
Ukyo opto por irse a la biblioteca para revisar un nuevo caso por demanda de divorcio ya que nadie llegaría temprano y simplemente preparo algo sencillo en la cocina para cuando Wataru fuera a comer, sería el único que comería en casa, además lo hizo para despejar su mente, el beso de agradecimiento de Ema, le despertó pasiones reprimidas, mas tuvo que contenerse y no comérsela a besos. ¡Ay Ukyo si supieras lo que quiere Ema!
= o =
Wataru se aburrió de estudiar, fue a la cocina, no le gustaba usar el elevador optaba subir por la escaleras al pasar por el cuarto de Ema, la puerta estaba entre abierta, iba a cerrar la puerta, sin embargo su curiosidad fue mayor y entro sin permiso, si sus hermanos se enteraban que invadió el espacio de su hermanita, debía considerarse muerto.
La habitación olía al perfume de Ema, todo se encontraba en orden, estaba a punto de salir cuando vio un cuaderno de pasta dura color rojo que llamo su atención, en la portada con letras doradas decía "Diario".
- Tengo curiosidad – Wataru paso uno de sus dedos por las letras doradas – solo será unas líneas – el menor de los Asahina abrió el diario y comenzó a leer la primera página.
Querido Diario:
Hace poco cumplí 19 años y soy muy feliz con mi gran familia, quiero a mis hermanos y a mis padres, sé que es mutuo el cariño.
Mamá te obsequio, me dijo que era para guardar mis memorias y cuando quiera volver a revivirlas tú me ayudes a hacerlo realidad, es la primera vez que escribo en uno y lo comienzo por lo siguiente, últimamente he tenido sueños no tan puros y castos, la culpa es de ellos, mis adorados hermanos, son endemoniadamente atractivos, que si tengo que quemarme en el infierno por tener una noche de pasión y lujuria con cada uno de ellos, no me importa, lo acepto con gusto.
Diario tu serás mi confidente de hora en adelante, sabrás mis íntimos secretos y fantasías.
Ema.
Wataru cerro de golpe el diario, eso era demasiado, las diferentes tonalidades de rojo cubrieron su rostro, se maldecía una y otra vez por haber invadido el espacio personal de su hermana mayor y peor aún leer algo tan personal.
Su Ema, su querida Ema, la chica dulce, quería sentir los placeres de la vida, se preguntó si él podía estar ahí, aunque fuera en pocas líneas, reviso algún detalle algo que dijera que Ema lo deseaba, no tardó en encontrarlo.
Querido Diario:
Soy cruel, mas debo confesarte que Wataru siempre sería mi hermanito, no me ha despertado ninguna fantasía, a diferencia de los demás, al ser el menor de la familia todos lo han sobreprotegido, conmigo incluida pronto cumplirá trece años.
Solo quiero que encuentre una chica que lo ame y aprenda a valerse por sí solo, que tome sus propias decisiones sin depender de Masaomi quien siempre ha sido su figura paterna.
Louis es mi caballero con armadura, tenemos una hermosa hermandad, en una ocasión me confeso: "Ema, todos están locos por ti, desde que llegaste a Sunrise Residence sus vidas cambiaron por completo, yo siempre te veré como mi querida hermana".
Ema
Wataru le dolió leer aquellas líneas de Ema y ahora tomaría revancha, tomo el diario antes de salir reviso que nadie estuviera cerca, se fue rápido a su habitación, cerro con seguro, prendió su impresora y comenzó a escanear las páginas de diario.
= o =
Después de la película Ema y sus amigas caminaban con dirección a nueva cafetería recién inaugurada donde la especialidad eran los pasteles de fresas y budines.
- Dime Ema ¿Cuándo me vas a presentar a tus hermanos?, no seas egoísta – una chica pelirroja se colocó enfrente de ella esperando su respuesta.
- Yukime no sea cuchillito de palo, si tienes plan de conquista con uno de sus hermanos mejor espera sentada, ellos solo tienen ojos para Ema – respondió una joven pelinegra.
- Dentro de un mes es mi cumpleaños, ese día te los puedo presentar a todos – sonrió Ema a sus amigas.
- Aun festejas con pastel y regalos, eso ya es antiguo, mejor vamos de antro será más interesante – continuo la pelirroja – además es tu mayoría de edad.
- Tendré que pedir permiso, además estarán mis papás también – Ema se colocaba su chamarra ya que la tarde comenzó a enfriar.
- Solo que tendremos que dejar el festejo para el sábado 11 de octubre – la pelinegra se animó con la idea.
- No se diga más, festejaremos tu cumpleaños 21 en un antro, será un grupo reducido de compañeros de universidad, además Kazuo Miyaki quiere salir contigo, será un buen pretexto así tus hermanos no intentaran hacerle alguna maldad.
No era ningún secreto para las amigas de Ema, Yukime Ikeda y Hana Maruyama, que los trece hermanos de Ema, la protegían demasiado, la tenían en un pedestal, desde que comenzó su carrera en Meiji University, han conocido a más de una docena de prospecto novios y estos han huido sin decir adiós.
El último fue un chico de intercambio procedente de México, que por error quiso salir con Ema, solo que de la noche a la mañana regreso a su país.
Hana lo localizó días después y le contó que había recibido un sobre con el dibujo de un corazón con una daga atravesada con la leyenda "Date por muerto, si intentas tocarle aunque sea un cabello a mi querida hermanita".
Yukime fue la primera irse, recibió un mensaje de su novio que ya estaba en el lugar acordado, salir con ellas fue plan con maña, sus padres no estaban de acuerdo con esa relación, su novio era mayor que su amiga por nueve años.
Hana era la confidente de Ema y sabía de sus sueños nada castos, ambas tomaban café y una rebana de pastel de fresa en la nueva cafetería que tenía un ambiente muy acogedor.
- Por tu cara tuviste otro sueño, ahora ¿quién fue la víctima? – soltó de golpe Hana
- Hoy fue el turno de Natsume – respondió Ema cabizbaja
- Es el empresario que tiene su empresa de videojuegos – Hana disolvía un sobre de sustituto de azúcar a su café.
- Si es él – Ema suspiró – Natsume ya me ha besado, solo ocurrió una vez cuando tenía poco de estar con ellos, fue porque me desaparecí varias horas y lo mandaron a buscarme.
- Te atrae igual que tus otros hermanos – su amiga esperaba la respuesta, el silencio de Ema lo dijo todo – amiga en lugar de estudiar Administración de Empresas, mejor dedícate a escribir novelas eróticas, tienes mucha tela de donde cortar.
- Tú y mi diario son mis confidentes y... – Ema se levantó rápido de su asiento y comenzó a tomar sus cosas para irse.
- ¿Qué pasa Ema? – Hana tomo una de las manos de la castaña para tranquilizarla.
- Olvide cerrar la puerta de mi habitación y deje encima de mi escritorio el diario, si alguien lo lee, me voy a morir de la vergüenza.
- Bien, vamos a hacer esto, primero respira hondo y profundo, todos respetan su espacio personal, no pueden haber entrado a tu habitación, tomate tu café y nos vamos a te acompaño a tu casa.
- Muy bien – aunque Ema no estaba muy convencida con la idea, quería salir volando a su casa en esos momentos
= o =
Ema y Hana llegaron minutos antes de las ocho de la noche, para su suerte no había nadie todo estaba apagado, como lo sospechaba la puerta estaba entre abierta, al entrar encendió la luz, respiro de alivio al encontrar el diario tal como lo dejo en la mañana.
- Te lo dije amiga todo en orden, bueno es momento de irme, nos vemos mañana en la universidad, además tenemos a primera hora clases de inglés
- Gracias Hana por acompañarme hasta aquí.
Ema solicitó un taxi para su amiga, era lo mínimo que podía hacer después de que ella se desviará de su casa, la despidió en la entrada del residencial, cuando subía las escaleras se encontró con Wataru.
- Buenas noches hermanita, te divertiste con tus amigas
- Sí, me fue mi bien después del cine pasamos a una nueva cafetería, luego te llevo tienen un…
- No me interesa, ya es tarde ¿por qué no entramos?, - Wataru consiguió lo que quería al interrumpir a Ema – salí a despejarme un rato, mañana tengo que levantarme temprano estoy a cargo de la limpieza del salón con otros compañeros.
Wataru iba unos pasos delante de Ema, faltaba poco para llegar a la puerta principal se giró para verla de frente y sin mediar palabra, la beso en los labios, la abrazo para sentirla cerca de él.
- Ahora sí, me voy a dormir, dulces sueños querida hermanita – Wataru entro al elevador que llego al piso tres donde estaba su habitación.
Ya en su habitación Ema tocaba sus labios, era la primera vez que Wataru la besaba, pensó es adolescente, sus hormonas le están jugando una broma pesada, mientras secaba su cabello con la secadora, tomo con su mano libre su diario y lo guardo en el lugar de siempre, se metió a las cobijas y a dormir.
Lo que no sabía Ema que sus secretos más íntimos serían revelados y el culpable estaba maquinando la manera de sacar provecho a la situación, ya no sería el niño dulce, que tenía sobreprotegido ahora cambiaría su manera de pensar y que Ema lo viera como un nuevo prospecto para sus sueños.
Continuara…
Desde que conocí Brothers Conflict, me encantaron los hermanos Asahina, Ema si que tiene suerte, lástima que fueron pocos capítulos.
Espero que este fic sea de su agrado, últimamente mi imaginación está muy prolífica y le pienso sacar provecho, para terminar los fics que quiero entregar este 2018, junto con el Diario de Ema.