Ok no creo en las presentaciones, asi que.. Los personajes pertenecen a suzanne collins la historia es mia blah, blah.


- Ya te dije que no.

- Vamos! Por favor, sabes que lo necesito!

- Me importa un carajo, te harás daño.

- No soy de porcelana ¿sabes?

- Pues no eres precisamente de acero!

- Me he encargado de tipos mas grandes que tu!

- ¿Y eso que?

- Puedo con el trabajo Gale y lo sabes, solo son un montón de chicas tontas tratando de pasar. Generalmente solo hay que cuidar las puertas y hacerle de sus gatos. - dije en tono conciliatorio.

- Kat, aveces las cosas se salen de control, son miles, no me perdonaría si te pasara algo.

- No me va a pasar nada. - Gruñi.

- Mira, nisiquiera te darán el trabajo, no hay ninguna mujer en seguridad.

- El solo quería que dejara de insistir.

- Lo harán si me ayudas, tu dijiste que pagaban muy bien, sabes que necesito hacer esto por Prim.

- Yo te daré el dinero. - sus ojos me decían que lo haría, pero yo no aceptaría regalos.

- Es suficiente, iré contigo mañana quieras o no y con o sin tu ayuda entrare.- El trabajo se trataba de ser parte de seguridad de una banda de rock (muy famosa) de la que yo algunas veces había escuchado y visto en televisión, pero no conocía su música. Según Gale no era nada difícil y yo necesitaba un trabajo para ayudar a mama a pagar el colegio de Prim, ¡Pero Gale se había puesto como loco! solo se negó, pensé que me ayudaría, maldición.

- Haz lo que quieras. - Se dio la vuelta y bajo del auto estrellando la puerta.

Yo lo había estado llevando y trayendo del trabajo esta semana, su auto estaba en el taller y no había tenido dinero para arreglarlo hasta hace unas semanas que empezó a trabajar para esa banda. Y yo lo había hecho enojar, conociendo a Gale no se le pasaría el enojo hasta que yo dejara la idea trabajar con el. ¡Pero es que era un trabajo tan sencillo! solo tenia que estar ahí, no dejar pasar a las personas y si, complacer a los idiotas de la banda, pero y que, pagaban en un par de días lo que ganaba en cualquier trabajo en una semana, no podía desaprovecharlo. Ademas, ellos se iría de gira en unos meses. Y si las cosas salían bien probablemente Gale se fuera con ellos... Yo no planeaba quedarme sola.

Me dirigí a casa preparandome psicológicamente, mi madre atascada en deudas y de mal humor, el estúpido gato que solo me gruñía y Prim, tan inocente y alegre, ella creía que todas las cosas se solucionaban con una buena actitud y optimismo. Siempre tratábamos de que no se diera cuenta de los problemas económicos, pero no era tonta, a la vez ella trataba de que no nos diéramos cuenta de que también se preocupaba y levantarnos el animo, era un azul y dorado rodeado de grises, siempre con su brillo personal. Sonreí, tal vez si no fuera por el colegio de Prim todo seria mas fácil, pero mama y yo queríamos lo mejor para ella y ademas sus calificaciones le daban el 70% de beca, no podíamos defraudarla con ese 30%. Yo conseguiría ese trabajo y me encargaría de todo, estaba decidida.

Acelere y me dirigí a casa.

- Ya estoy en casa! - grite a las paredes. - ¿Prim?!, ma.. - nadie contesto, camine a la sala y vi una nota en la mesa.

" Fuimos por hamburguesas, llegaremos en un rato" escribió mama "Te quiero" estaba escrito con la letra de Prim, sonreí y guarde la nota en mi bolsillo.

Podía esperar por la cena, pero estaba muy cansada y necesitaba estar completamente despierta para conseguir ese trabajo mañana. Arrastre los pies a mi cuarto con un nudo en el estomago ¿Que estaba haciendo?

Solo me basto sentir el golpe de la puerta del auto para sabe que Gale seguía enojado, no saludo y se quedo enfurruñado viendo la ventana. Perfecto, si quería ponerse de ese modo no iba a evitarlo, acelere un poco mas de lo adecuado y deje la vista al frente, tenia que llegar al hotel 5 estrellas en el centro de la ciudad, ahí se habían hospedado los miembros de la banda por tiempo indefinido. Llegamos a lugar y se bajo volviendo a estrellar la puerta, para ese entonces yo ya estaba harta.

- Si vuelves a estrellar la puerta de mi auto regresaras en autobús - gruñi.

- Debí haber venido en autobús - Contesto.

Rodé los ojos, ya estábamos aquí, ¿que sentido tenia enojarse?.

Entre tratando de seguirle el paso pero caminaba demasiado rápido, apenas tuve tiempo de ver el lugar, pero supuse era muy hermoso y elegante.

- Pedro picapiedra - Alcance a escuchar que le dijo al del mostrador, se que por un segundo lo vi como si le hubiera crecido un tercer ojo, después me enoje pensando que estaba jugando conmigo, al final di por hecho que había escuchado mal al ver al botones indicando que piso y habitación.

- ¿Viene con usted? - Pregunto el botones en la puerta del elevador.

- Soy su novia - Mentí antes de que Gale pidiera que me hecharan, vi un brillo malvado en sus ojos era capaz de hacerlo.

Me vio con los ojos como platos y entramos al elevador, el silencio se volvió mas incomodo en el elevador y lo voltee a ver. Era mi amigo y me dolía que estuviera enojado conmigo sin importar que fuera una estupidez.

- ¿Enserio no vas a ayudarme? - Pregunte como ultima esperanza.

- Katniss... Me preocupas, no quiero que te suceda nada.. pero eres mi amiga y.. supongo que tengo que hacerlo- termino como quien no quiere la cosa.

- Enserio!? - le sonreí de oreja a oreja y le di un abrazo Sabia que no me fallarías - Me devolvió el abrazo con un brazo por la cintura y sentí sus labios en mi cabello. Era la segunda vez que lo hacia ese mes, lo tenia bien grabado y me sorprendió igual que la primera, no me parecía un gesto amistoso. Me parecía mas amoroso, me separe de el y pude ver cierta queja en sus ojos, desee saber que pensaba, ¿enserio me quería? o ¿yo solo estaba exagerando? La puerta del elevador se abrió interrumpiendo mis pensamientos "aquí voy" pensé.

Cruce la puerta detrás de Gale.

- ¿Que haces todos los días? - Que estupida! jamas le pregunte que hacia exactamente.

- Camino, me paro fuera de su puerta y espero. - contesto serio pero parecía divertido.

- No te creo! ¿como se supone que pida el trabajo?! o ¿a quien?.

- hmp - rodó los ojos y se paro en la puerta.

-Dijiste que me ayudarías.

- En una hora nos reunimos todos los guardias y escogemos la estrategia, yo generalmente quedo cerca de los miembros de la banda.

- ¿Por que?

- Por que piensan que soy sigiloso y rápido, no seria conveniente que un gorila golpeara a un fan frente a las cámaras, yo solo los detengo de manera mas... prudente.

- mmm - asenti.

Nos paramos fuera de la puerta de la banda, de hecho eran 2 y muy grandes, parecían las puertas de una mansión.

- idiotas - susurre.

- No tiene sentido que estés aquí si vas a insultarlos, perderás el empleo sin siquiera tenerlo.

- Me comportare. - prometí.

- Ahora - suspiro - a esperar, te dije que era fácil, pero llega a ser aburrido, tal vez sea bueno tenerte aquí... claro si estas cerca de mi. No soportare que te manden con los otros idiotas a cuidar las entradas.

- Gale sabes que soy tan buena como tu, tal vez mas - sonreí de lado.

- Presumida - contesto sonriendo. - Pero de ninguna manera, eres muy pequeña, te faltan fuerzas.

- Soy mas ágil, te falta velocidad.

- No es nada en una pelea real, ademas te conozco, puedo predecir tus movimientos.

- Y yo los tuyos!

- No es nada si no puedes detenerlos. - mientras decía esto se acerco a mi y uso su ante brazo para empujarme a la pared, quise detenerlo pero tenia razón, iba lento pero imparable. Sentí la pared a mi espalda y la cercanía de Gale, acerco su rostro a mi oido y susurro - ¿Lo ves?, no puedes hacer nada. - con voz ronca, mi piel se erizo y puse mis manos en sus hombros para alejarlo. En ese momento la puerta del penthouse se abrió y yo salte alejandome de Gale, el no me detuvo.

- Ho...la.. - dijo un chico sorprendido, me basto un segundo para identificarlo, pero bastantes para asimilarlo, el era el vocalista de la banda Peeta... algo, pero se miraba tan.. espectacular en persona. Su cabello rebeldemente desordenado, sus pantalones oscuros a la medida exacta pero sin estar apretados, su chaqueta de cuero negra y una camiseta de botones verde militar sin planchar, me parecía imposible que alguien tan descuidado se viera tan... Sexy y guapo, poniendo mas atención note sus converse negros desgastados, una placa colgando de una cadena en su cuello y su muñeca derecha con al menos 5 pulseras diferentes que se perdían entre si. Y sus ojos azul mar, se parecían a los de Prim, pero estos tenían un toque peligroso. Nos miro sorprendido solo un segundo y después volvió a tomar una manera despreocupada.

- Gale, deberías habernos dicho que traerías a tu novia, el portero estaba preocupado. Pensó que era una fan loca que planeaba matarnos a todos con un trozo de plastilina y un clip. - Mientras decía esto miraba el pasillo distraído como si esperara ver algo interesante.

- No solo.. - Comenzó a explicar.

- Yo no soy su novia! - interrumpí.

- ¿que? ¿prefieres ser su gatita? - pregunto mientras alzaba una ceja en mi direccion. Estaba apunto de contestar de manera grosera y golpearlo, pero Gale se puso en medio bloqueandome.

- Es una amiga, viene por cuestiones.. laborales.

- Mmm quisiera decir ya veo, pero lo que vi no fue exactamente laboral - rodeo a Gale con un movimiento ligero y se paro frente a mi. - Lo siento, pero no contratamos ese tipo de... servicios - Me guiño un ojo y le lance un puñetazo al rostro, pero me detuve a pensarlo mejor, eso dejaría una marca, tal vez una demanda. Para mi sorpresa esos segundos fueron necesarios para que el supiera lo que iba a hacer, detuvo el golpe con una sola mano, después le di un rodillazo en el estomago y su expresión cambio a puro dolor. Perfecto, sin marcas.

- Iba a ser tu maldita defensa. - dije en voz alta esperando que me escuchara y comenze a caminar hacia el elevador tratando de mostrar algo de dignidad.

- Alto! - Grito con la voz ahogada. Me detuve en seco, tal vez quería un hueso roto pensé con malicia, ¿Como era posible que estuviera tan enojada?

- Mande - Conteste de manera encantadora y vi algo raro en su expresión que no supe identificar.

Tomo aire y se puso de pie con ayuda de Gale, una parte de mi cabeza recordó la mano de Gale en el hombro del chico cuando me insulto, si no lo hubiera golpeado yo lo hubiera hecho el y hubiera perdido su trabajo... Y todo por mi culpa.

- Ven, por favor. - Lo vi unos segundos pensando si ir o no, pero recordé que venia por trabajo y no por mi orgullo. Suspire y regrese. - Gale, ¿por que no me traes un capuchino? - Gale lo vio con una ceja alzada.

- No se supone que te quedes solo. - Replicó.

- Pues ella no parece una terrorista exactamente. - Bufe.

- No iré. - la expresión de Peeta cambio. - Es una orden. -

Gale lo soltó y se dirigió tenso al elevador y vi el esfuerzo que hacia el rubio para mantenerse de pie.

- ¡Tardate mucho! - le grito antes de que entrara al elevador, aun a esa distancia note los nudillos apretados de Gale y su mandíbula, estaba muy enojado...

- Sientate - ordeno mientras se recargaba en la pared y se deslizaba al suelo, yo lo observe hasta que palmeo aun lado de el y decidí sentarme, total, ¿cuantas veces tienes la oportunidad de sentarte al lado de una estrella de Rock?

- Te molesto mucho mi... insinuación ¿no? - comento divertido.

- Por supuesto, no soy ninguna prostituta.

- Lo siento, pero tienes que entender, no estabas en una posición exactamente.. amm como decirlo. - volteo su mirada al techo buscando una palabra, como si fuera de suma importancia encontrar la correcta. - Bah, no encuentro la palabra - O tal vez no. Suspire.

- Que tal si volvemos a empezar... necesito el trabajo y...

- Mm me parece bien, pero eres una chica. No sirves como seguridad, o amenos no exactamente cuidando entradas o deteniendo gente, tampoco eres grande ni imponente... ¿Por que piensas que me sirves de algo? Al menos que quieras ser una bailarina, pero no pareces querer nada que tenga que ver con lentejuelas... pero podría conseguirte algo de cuero... - Todo lo decía con tanta y tan molesta indiferencia, que quería golpearlo de nuevo, solo que esta vez no tenia motivos suficientes, solo quería que cerrara la boca.

- ¿Siempre eres asi? - En mi cabeza estaba hechando humo, era un imbécil que se sentía superior a todos, tal vez debería golpearlo de nuevo..

- Aaa, no, solo los miércoles.

- Hoy es lunes.

- Exacto. - Este tipo estaba loco.

- Soy rápida, se Muay Thai, aikido y capoeira, de algo he de servir.

- ohh, impresionante. - alzo las cejas de la misma manera que un padre condescendiente a un niño que le explica algo que ya sabe y algo de sarcasmo.

- Mira si no vas a dejar de molestarme no tiene sentido, creo que ya te divertiste lo suficiente. - Estaba apunto de levantarme cuando me tomo del brazo. Lo vi a los ojos sorprendida por la sensación, y sus ojos estaban tan... indefensos. Pude ver algo diferente en el... algo que no alcance a identificar. Me soltó y se levanto también.

- Bueno, tienes razón, me divertí lo suficiente. - Volvía a ser el chico burlón y despreocupado.

- Entonces me voy. - Me di la vuelta y volvió a tomarme del brazo, pero esta vez solo pude ver sus ojos un poco entre cerrados, como si estuviera esperando algo. - ¿Que? - Solté, ya estaba harta de sus jueguitos.

- Dije que ya jugué bastante, bienvenida a tu nuevo trabajo. ¡Serás mi guarda espaldas personal! -

- Que?!... pero... - No sabia que decir, estaba segura de haberlo arruinado todo, ademas era un imbécil! Piensa en Prim, piensa en Prim... Me quede viéndolo con la boca abierta en una combinación de confusión e indignación, el toco mi barbilla con su indice y la cerré.

- ¿Quieres el trabajo no? - Siguió algo mas serio.

- Si, pero pensé.. - No encontraba las palabras asi que decidí ser honesta. - Estaba segura que lo había arruinado todo.. y ¿ahora resulta que quieres que sea tu guarda espaldas personal? - pregunte confundida - acabo de golpearte!.

- Quieres el trabajo o no, ya me canse de rodeos... - miro sus uñas con indiferencia.

- Si. - subió la mirada y me vio a los ojos.

- Correcto, cuanto antes empieces mejor, mañana aquí a las... ¿Que horarios tienes disponibles? ¿Estudias? - pregunto con una ceja levantada.

- Todo el día, acabo de terminar la prepa, bueno, hace unos 6 meses.

- mmm, entonces... ven mañana a las 7 am y empezaremos con el entrenamiento - tenia una sonrisa que me dio escalofríos, ese entrenamiento no seria nada agradable.


Ahora si, me llamo andrea como pueden ver en mi nombre de usuario, pero, ustedes vienen a leer, asi que conoscamonos con el tiempo, por ahora seria increible de su parte si me dejaran su opinion :D esta historia tiene mucho tiempo guardada en las notas de mi ipod, y decidi publicarla, a ver que pasa ;) .

Siempre me han gustado mas los chicos malos, pero aun asi Peeta seguira siendo un amor, solo que con el tiempo sabran el por que de esa manera tan... digamos molesta de ser, espero que les guste mi historia, a mi me gusta jajajaja, la razon por la que escribo es por que tengo tiempo buscando una historia asi y como nadie la ha escrito decidi hacerlo yo, ahora dejare de escribir por que si no, no me dentendre nunca.

suerte ;D