Aviso: Nada de PLL me pertenece #JustSaying


Escribió la manera espontánea de su sonrisa encontrada sin saberlo a tiempo, el roce dulce y delicado de sus labios, su mirada perspicaz y juvenil, la manera en que sus manos lo buscaban, deseosas, ardientes, incontrolables, la naturalidad de su presencia capaz de refrescar la más calurosa tarde de verano. Escribió sobre su carácter y como en cierto punto se volvía insoportable, sobre su horrenda costumbre de guardar secretos y esa manera suya de quebrarse sin llorar. Escribió todo lo bueno y malo de ella.

Y aunque no quería hacerlo, también escribió sobre esa noche quieta de verano donde con unas palabras arrancó la esperanza de sus ojos.

Lo siento-incluso recordó la manera en la que lo dijo-Nicole me necesita ahora… ella está pasando por mucho…

Lo imagino, he pasado por algo… similar ¿recuerdas?-inquirió Aria con un hilo de voz-pero ahora que ella está de regresó… yo necesito saber… ¿Qué significa eso para nosotros?

Se posó entre ellos un incómodo silencio donde Ezra la miró sin saber que responder mientras se pasaba las manos por la cara y el cabello sintiéndose abatido.

Estoy contigo-dijo al fin-pero no voy a dejarla sola-Aria asintió solemne.

Nadie dijo nada más.

Y Ezra lo intentó, atendía su creciente negocio en la cafetería, intentaba escribir un libro cuya trama al parecer no iba a ninguna parte y se las arreglaba para llegar a dormir con su prometida, todo esto pasando horas en el hospital cuidando de su antiguo amor, intentando revivir su sonrisa. Nunca la dejó sola, no hubo un día que no le llevase flores para levantar su ánimo, no obstante poco a poco su tiempo y esfuerzo se enfocaron cada vez más en cuidar de ella dejando de lado lo demás.

Y una madrugada, después de llegar a casa luego de una guardia nocturna en el hospital encontró a Aria de frente con una pregunta custodiada en sus labios, lista para ser disparada.

¿La amas?-inquirió sin más. Él bajó el rostro intentando descifrar lo que sentía cada vez que cuidaba a Nicole, lo que sentía cuando dormía con Aria y aunque quiso, de su boca no emergió ninguna palabra. El hombre simplemente la miró con un gesto de disculpa y no hubo que decir más. Aria asintió, dejando derramar las lágrimas que ya no tenía sentido contener y se internó en la habitación de ambos saliendo unos segundos después con una maleta tras de sí donde aparte de sus ropas, zapatos y afectos materiales estaban empacados la dulzura de un amor que se asfixiaba intentando ser comprensivo, una promesa rota de estar juntos para siempre y el resto de otros sueños muertos.

Y cuesta creerlo pero él la dejó ir. Había escuchado numerosas veces por boca de la literatura que tanto amaba que cuando algo está destinado a ser, irremediablemente pasa, que aquello que dicho coloquialmente se deja ir, si es tuyo vuelve, por eso y por sus confusos sentimientos hacia Nicole no la detuvo.

Paró de escribir mirando la distancia. Un lustro de inviernos había caído sobre sus hombros desde aquella noche y aun así dolía como aquella vez, aun sentía el vacío de su ausencia que solo se incrementó cuando Nicole simplemente no resistió cuatro largos años de tratamientos psiquiátricos que intentaban borrar su pasado y puso fin a su sufrimiento con 70 pastillas y algo de alcohol.

"Ezra, lo siento-había escrito en su nota de despedida-te amo, pero a veces todo el amor del mundo simplemente no es suficiente"

¿No era suficiente? A veces la odiaba por escribir aquello. La odiaba porque ella se había rendido y decidió renunciar a lo que tenía, creía que solo rechazaba su vida y que por eso era su decisión pero… ¿Y lo que le había hecho perder a él? Ezra perdió Nicole, perdió a Aria y un futuro con ella, perdió 4 años de su vida intentando reparar algo que estaba irremediablemente roto desde el principio.

Decir que nunca olvidó a Aria es correcto, siempre la recordó, durante todos esos años la molesta duda de saber que no había tomado la decisión correcta hizo mella en su pecho pero por respeto a Nicole nunca se planteó volver a buscarla, Sin embargo después de todo lo ocurrido el chico se encontró preguntándose si aquella rosa muerta que dejó tirada en la calle de la soledad habría llegado a perdonarlo, se preguntó si todo ese amor que no supo apreciar por intentar salvar algo más seguiría allí y la necesidad de salir a buscarla, de volverla a ver se apoderó de sus sentidos.

Sabía que las cosas no habían acabado bien, lo comprobó cuando intentó contactar con ella electrónicamente y no logró hacerlo, de antemano sabía también que sus amigas lo tenían en la lista de personas no deseadas pero eso no lo detuvo a la hora de tomar un avión de vuelta a Rosewood. Ezra no sabía que esperar (si es que podía volverla a encontrar) pero aun así decidió lanzarse a la estacada porque después de todo no hay peor lucha que la que no se realiza.


Nota de la autora:

Decidí publicar este mini fic (tiene 6 partes nada más) como previo al estreno de los úlitmos 10 caps de la serie /3. Cabe recalcar que este es el resultado de una noche de insomnio, PLL y la extraña fijación que surgió en mi cabeza entre una canción y la relación del Ezria añadiendole a demás el drama que conlleva "el regreso de Nicole" (léase con tono dramático).

Ah otra cosa! aviso desde ya que la cosa con los ships va a quedar medio rara aun así espero que les resulte... tan extrañamente interesante como a mi me resultó XD

En fin nos leemos la siguiente semana, hasta entonces estaré encantada de leerlos en la sección de comentarios. ;3