Nos llamamos "mejores amigos" porque es lo único que conocemos.
Existen muchos tipos de amor.
Amor filial, amor fraternal. Amor platónico y amor sexual.
Viktor le había obligado a aprender sobre el amor incondicional como condición para prepararle un programa corto, y si bien en un principio le había costado definirlo, pronto encontró la respuesta en su abuelo, la persona a quien más quería.
Después de todo, "incondicional" significa "sin esperar nada a cambio", ¿no es así?
Y en un principio utilizó esto para llevar "Agape" a su máximo esplendor.
– Él es mi mejor amigo. – Fue lo primero que escapo de los labios de Yurio cuando una fan indiscreta se atrevió a preguntar "¿cuál es tu relación con Otabek?". Parecía que esperase un vínculo similar al que Viktor y el Katsudon habían desarrollado, pero Yurio no sentía que fuera lo mismo.
Sí, sin duda ya no podía vislumbrar su existencia sin la presencia del kazajo, pero no se veía admitiendo eso en voz alta.
– Hoy me preguntaron sobre mi relación contigo.
– ¿A ti también, Beka? – Sin duda el resto del mundo tenía muy poco de qué preocuparse si uno de sus principales intereses era la evolución de la relación entre dos patinadores.
Pero Yurio se mentiría a si mismo si dijera que no le generaba un poco de curiosidad la respuesta de Otabek.
– Sí.
– ...
– Les dije que eres mi mejor amigo. – Yurio no supo si el sentimiento que le atravesó fue alivio o dolor. Es decir, él había dicho lo mismo y debería alegrarse por ello, pero algo dentro de él se sentía inconforme. Y al parecer Otabek notó esto, porque sonrió de esa manera que a muchos les resultaba enigmática, pero a Yurio le tranquilizaba. – No sé si esa sea la mejor manera de referirme a ti. Pero es lo único que conozco, así que hasta no definir bien este sentimiento… Déjame llamarte "mejor amigo", Yura.
Ah, pensó Yurio, es igual a mi. El joven ruso tampoco conocía muchos tipos de amor, pero "mejor amigo" sonaba especial y Otabek era especial para él, así que hasta no descubrir un mejor término…
– Tú también eres mi mejor amigo, Beka.
Un reportero cruzó el mar de cámaras y micrófonos que rodeaban el menudo pero hermoso cuerpo del hada rusa, dispuesto a obtener una primicia jugosa. Los rumores sobre el rubio y el aclamado héroe kazajo no paraban de circular entre los aficionados. – ¡Yuri Plisetsky! ¿Cuál es tu relación con el patinador de Kazajistán, Otabek Altin?
Al escuchar el nombre "Otabek Altin", en el rostro del talentoso niño se dibujó una sonrisa mientras respondía sinceramente.
– Nos llamamos "mejores amigos" porque es lo único que conocemos.
