Aclaraciones: En esta historia, ambientada en el mundo de Naruto, Itachi no mató a todo su clan, es más sigue siendo Ninja de Konoha, y por lo tanto Sasuke nunca se fue de la villa

Aclaraciones de la historia: En esta historia, ambientada en el mundo de Naruto, Itachi no mató a todo su clan, es más sigue siendo Ninja de Konoha, y por lo tanto Sasuke nunca se fue de la villa. Orochimaru tampoco apareció, puede que lo incluya más adelante, pero no sería tan fuerte. Además Naruto no posee el Kyuubi en su interior (así me ahorro algunos problemas, je) La historia transcurre cuando ellos ya tienen 25 años. Naruto, Sasuke y Sakura fueron compañeros por un tiempo, pero luego se separaron tomando cada uno su camino, y siendo entrenados por distintas personas (Tsunade entrenó a Sakura, Jiraya a Naruto y Kakashi a Sasuke). Va a aparecer el nombre de Akatsuki pero como verán no tienen el mismo objetivo que en la serie. Creo que por ahora eso es todo, cualquier cosa la aclararé en su momento o pregunten si hay algo que no les queda claro.

Aclaraciones de la autora: bueno he vuelto, jaja. Espero que les guste esta historia como la otra, aviso q es bastante triste y no tendrá mucha acción. Si hay algo q no se entiende háganmelo saber. Bueno me despido saludos y suerte!!

Capitulo 1

Desde hacía ocho años que el país del Fuego estaba en guerra contra los países de la Tierra, del Rayo y del Agua. Por lo tanto con los únicos aliados poderosos con los que contaba la aldea oculta de la hoja era con los de la aldea oculta de la arena. Los demás países intentaban no involucrarse en los asuntos de las grandes naciones, pero eso era muchas veces inevitable.

Esta terrible guerra había traído consecuencias devastadoras para las distintas villas, para sus habitantes y en especial para los que luchaban en ella, es decir, los ninjas. Mucho se perdió, y hay cosas que jamás se podrían recuperar…

Sakura caminaba por unos largos pasillos con tranquilidad. Al llegar a una puerta la tocó. Cuando le permitieron el paso, lo hizo. Se encontró con una mujer rubia que a pesar de ya estar en sus sesenta pasados, carecía de arrugas y no había cambiado en absoluto desde que la conocía. Sakura saludó con una leve inclinación.

-Sakura te tengo una nueva misión –dijo la Hokague. En su rostro había algo extraño, Sakura estaba segura de ello, conocía a su antigua sensei y sabía que le estaba ocultando algo importante.

-¿De qué se trata? –preguntó fingiendo falta de interés.

-Hace unos días unos ninjas entraron a nuestra biblioteca y robaron varios documentos importantes. Sabemos dónde están, pero es difícil hacer un ataque directo, además nos costaría demasiado, haremos lo mismo que ellos, los recuperaremos en silencio. Este es el jefe del grupo –Tsunade le pasó una foto- parece que pertenece a una importante organización, llamada Akatsuki, que es la que está ayudando a las aldeas enemigas en la guerra.

-Bien, será fácil –contestó la chica sin inmutarse guardándose la información que le entregaba Shizune.

-Necesitarás compañeros para esta misión.

-Trabajo mejor sola.

-Solo es para protección, este hombre es muy peligroso, tendrás por lo menos uno.

-Puedo cuidarme sola.

-No me discutas. Puedes elegir al compañero que te plazca, pero no irás sola, esta es una misión de rango S –Tsunade sabía a quién elegiría la chica, por eso no se preocupó por dejarle la decisión a ella. Lo importante era que no notara nada.

-Si es así, entonces elijo a Naruto.

-Está bien, hablaré con él. Puedes irte. Sales en dos días.

Sakura saludó con una inclinación y se esfumó en una nube de humo. Al llegar a su casa se sacó su máscara de AMBU y se miró al espejo.

Ya tenía 25 años, había entrado al AMBU a los 20, luego de un arduo entrenamiento y muchas misiones. Pero antes de ello había sido muy distinta a lo que era ahora. Vestía con colores claros y era alegre y risueña. Y tal vez nunca hubiese sido un AMBU, más bien hubiese preferido la tranquila vida de un Chunnin. Ahora era totalmente opuesta. Su cabello rosa era lo único más colorido en su vestimenta de AMBU negra. Había preferido que también su chaleco fuera negro a diferencia de sus demás compañeros porque se sentía a gusto así.

¿Cuándo había cambiado? Suspiró recordando con desagrado ese día. Se sacó los protectores de los antebrazos y dejó su katana arriba de la mesa, luego se dirigió a la cocina.

Se preparó una comida ligera, no tenía mucho apetito. Su mejor amigo Naruto también había cambiado, no tanto como ella, pero por lo menos ahora era más maduro. Por eso lo había elegido a él. No había nadie mejor para ese trabajo. Él no pertenecía al AMBU, era un Jounnin, que trabajaba duro para cumplir su sueño: ser Hokage. Tenía su propio equipo, pero seguramente encontraría un reemplazo por unos días. Jamás la dejaría sola si lo necesitaba, eso era lo bueno del rubio. Siempre se podía contar con él.

Pensó en su otro compañero Sasuke, y desechó la idea de inmediato. Hacía bastante que no hablaba con él (más específicamente desde ese día), sólo lo veía de pasada. Sería estúpido pedirlo como compañero, ya que no soportaba estar cerca de él. Sasuke también estaba en el AMBU pero pertenecía a la Fuerza de Tortura e Investigación.

Tomó las hojas que Shizune le había dado y empezó a leer. Hacía ya varios años que estaban en guerra y su trabajo no la dejaba casi respirar. Pero últimamente sus problemas habían aumentado. Pensó en bañarse para tratar de relajar su mente y cuerpo y luego salir a dar una vuelta.

………………………………………………

-Uzumaki Naruto, tienes una misión de rango S.

-Pero Tsunade-sama, pensé que ya tenía una misión asignada con mis alumnos. No puedo dejarlos solos.

-No será así, les daremos otro líder. Sakura me pidió que te nombrara a ti su compañero…

-¿Sakura?, eso es raro, ¿por qué? –Naruto se asombró ante el comentario. Era amigo de Sakura desde hacía mucho tiempo, pero también desde hacía mucho tiempo que ella ya no era la misma y jamás quería que la ayudaran. Además últimamente casi ni trataban.

-Le dije que necesitaba de un compañero, y te nombró a ti.

Naruto se quedó pensativo. No quería dejar a sus alumnos con otro ninja que no fuera él. La misión era muy peligrosa, aún estaban en guerra, no podían fallar o eso significaría la muerte. Pero por otro lado no quería abandonar a su amiga, ahora que había pedido su ayuda.

-¿Cuánto durará la misión?

-Es por tiempo indefinido, ella debe recuperar unos documentos, pero no podemos determinar cuánto tiempo le costará obtenerlos.

-Está bien, pero quiero que pongan a Kakashi con mis alumnos, no aceptaré si no es así.

-Naruto hay otra cosa. Esto es muy importante, confío en que no dirás nada…

-¿Sucede algo?, se ha puesto pálida.

-El consejo y otros AMBU sospechan de Sakura. Creen que es una traidora que le está dando información de nuestros movimientos al enemigo.

-¡¿Qué?!, ¡eso es imposible!, no creerás eso ¿verdad?... Sakura ha cambiado mucho desde ese día, pero no se convertiría en espía.

-Naruto ella estuvo con el enemigo durante seis meses… además que por su trabajo se junta mucho con ellos. Es posible también que sea una espía doble, que dé información a ambos bandos, ya que lo que trae siempre es verdadero…

-¡No puedo creer que lo consideres!, ¡es Sakura!, la kunoichi que arriesgó todo por esta villa, y que lo arriesga.

-¡Naruto! –Tsunade se había parado de su asiento y miraba a Naruto con ira y dolor mezclados en sus ojos- ¡no me hables de esa forma!, sé quien era, pero no sé en quien se ha convertido…

-Eso pasó hace mucho tiempo, Tsunade-sama, hace seis años, si fuera una espía la hubiéramos descubierto mucho antes…

-Ese es el problema Naruto. Un buen espía no se deja mostrar hasta que el momento es propicio. Es decir, en nuestro caso, cuando la guerra está balanceada, un movimiento en falso y ellos ganarán. Últimamente, el enemigo ha descubierto todos nuestros ataques, parece como si conociera nuestros movimientos y planes.

-Pensé que eso se decía a último momento para evitar esas cosas. ¿Por qué sospechan de Sakura?

-Porque ella integra el grupo de personas que dirigen las operaciones. Si no está en una misión, ayuda en el planeamiento de estrategias, sabes lo inteligente que es. Ella, Shikamaru y Kakashi son nuestras mentes más valiosas.

-Hay algo más… hay algo que me está ocultando…

-La última misión fue planeada por ella… -Tsunade cerró los ojos por un momento tratando de contener el dolor que la estaba embargando- Lee iba entre los integrantes del grupo de ataque… él ha… ha muerto Naruto… hace unos minutos me he enterado.

Naruto se sintió desfallecer. Los ojos se le llenaron de lágrimas.

-¿Cejotas?

-Lo siento, sé que eran buenos amigos…

-Ella… ¿ella lo hizo?, ¿nos ha traicionado? –Naruto casi no se podía mantener en pie por el dolor que sentía en su interior. ¿Acaso ella era la culpable?

-Eso es lo que deberás averiguar Naruto. Pero no irás solo. Un antiguo compañero irá contigo. ¡Sasuke ya puedes pasar!

Sasuke entró a la habitación, Naruto se había quedado paralizado al oír el nombre de su amigo. Hacía mucho que no se veían, y su vieja amistad había quedado en el olvido. Si todo hubiese sido distinto ese día… nada de esas cosas estarían sucediendo. Sakura sería una mujer feliz, tal vez junto a ese hombre serio y frío que se encontraba frente a él. Probablemente Lee seguiría vivo en ese momento. Naruto miró los ojos de Sasuke.

-Sasuke –dijo con tristeza.

-Si ella es la traidora la traerán primero conmigo. Si la entregamos al consejo la torturaran y la encerrarán para siempre.

-Ya deberían saber que la tortura no serviría de nada con Sakura –dijo Sasuke con sequedad, Naruto sintió un escalofrío recorrer su espalda al escuchar esas palabras. Por supuesto que no serviría de nada. A la kunoichi la habían torturado mucho tiempo y aún así jamás habló. O eso es lo que él creía y ella había dicho.

-Lo sé, por eso quiero que la traigan conmigo. Sasuke no irá todo el tiempo con ustedes Naruto, pero estará cerca recabando información de otros lados. Otros irán con ustedes para hacer lo mismo. Serán Neji, Tenten y Sai.

-Está bien –respondió Naruto.

-Es muy inteligente, tendrás que ser muy cuidadoso Naruto.

-Lo sé…

-¿Estás seguro de que podrás hacerlo? –le preguntó Sasuke con desconfianza- ustedes dos son amigos y…

-Pensé que también era tu amiga…

-Sabes que ya no, Naruto. No respondiste mi pregunta. ¿Tus sentimientos por ella no afectarán la misión?, la vida de muchos depende de que hagas las cosas bien.

-Lo sé, lo haré bien.

-Bien pueden irse, en dos días partirán.

………………………………………………

Sakura salió de su casa vestida con una musculosa gris y una pollera negra. El pelo se lo había atado en un rodete, dejando algunos mechones que caían en su rostro. Caminó un rato sin ningún destino en particular. Hasta que escuchó pasos a su espalda cuando volteó se encontró con alguien que no esperaba ver ese día.

-Uchiha…

Itachi sonrió levemente y se inclinó en señal de saludo.

-Una chica tan linda no debería caminar sola por la calle.

La kunoichi no respondió lo miró esperando a que él hablara.

-¿Qué pasa Sakura?, ¿te comieron la lengua los ratones? –Itachi se acercó a ella.

-¿Qué quieres? –preguntó sin moverse de su sitio.

-¿Qué tienes para mí?

-No sé nada, en dos días me voy a una misión.

-Y no piensas decirme nada –sonrió- está bien, te lo dejaré pasar porque hoy estás de luto –Sakura lo miró sin entender- ¿no sabías?, hoy murió Rock Lee.

La kunoichi abrió los ojos totalmente sorprendida por la noticia.

-Te jactas de carecer de sentimientos, pero, querida mía, ahí están, demasiado fuertes en tu ser. Odio, miedo, rencor, tristeza, dolor… todos juntos, tus ojos te traicionan.

-¿Por qué haces esto? –preguntó con frialdad.

-Limítate a cumplir con tu trabajo Sakura –Itachi volvió a acercarse a ella hasta que sus rostros quedaron a unos pocos centímetros- extraño lo que fuimos una vez.

-¿De qué hablas Uchiha? –preguntó Sakura con burla- sólo me divertía contigo, nunca "fuimos" nada –el rostro de Itachi se transformó y tomándola del mentón con fuerza la atrajo más a sí.

-Entonces supongo que no tendré remordimientos si te hago mía ahora -¿por qué siempre lo hacía enfadar de esa manera? Itachi se maldijo a sí mismo por ser tan impulsivo, no quería tratarla así.

-Me tocas un solo pelo y…

-¿Y qué?, no me amenaces, chiquilla, tenemos un acuerdo y eso vale para cualquier cosa que pida. ¿Entendido? –ahora no podía dar marcha atrás con sus palabras debería continuar con ese jueguito.

-El acuerdo sólo era por información.

-Eso ya lo veremos –Itachi la soltó- tú fuiste la que te acercaste a mí, recuérdalo. Tú me buscaste –Itachi la miró con sorna y luego desapareció.

Sakura furiosa golpeó la pared que tenía al lado provocando que se rajara. Luego empezó a correr. Hacía mucho tiempo que no lloraba y no iba a empezar ahora, pero sintió un gran dolor, un dolor que pensó que de alguna manera había olvidado, el dolor por la pérdida de alguien querido. Cuando llegó al cementerio pudo ver que todos sus compañeros estaban allí. Ya estaban tapando la tumba de Lee. No se acercó. Se mantuvo a lo lejos con la vista fija en el lugar donde yacía el chico que una vez, hacía ya tanto tiempo, había jurado protegerla hasta la muerte. Y ella había sido quien lo envió a ese destino. Él estaba muerto por ella. Lo había traicionado, a él y a todos.

Naruto la vio, o más bien presintió que ella estaba allí. Se acercó a la kunoichi que carecía de expresión alguna. Por supuesto, Sakura no lloraba, ni siquiera por alguien tan querido por ella. ¿O era que ya no quería nadie?, ¿cómo podía él saberlo?

-Sakura…

-¿Qué pasó? –preguntó como si en realidad no le importara.

-Una emboscada, no tuvieron oportunidad, eran muchos, nadie sobrevivió.

La chica cerró los ojos por un momento y cuando volvió a abrirlos, parecía que nada hubiese sucedido. Naruto casi vuelve a llorar, no sólo por su amigo muerto, sino por esa mujer que tenía frente a sí, que no se parecía en nada a la médico ninja que él tanto había amado.

-¿Te enteraste de la misión? –preguntó la mujer con la vista fija en la tumba.

-Sí… Sakura… ¿no vas a decir nada?

-¿Sobre qué?

Sakura pudo ver la desilusión en el rostro de su amigo, pero no se ablandó en absoluto. Ya habían pasado por eso. Otros habían muerto y sus nombres yacían tallados en la roca negra que conmemoraba a los héroes caídos en batalla. Una simple roca que jamás podría mostrar el valor de esas personas que ya no estaban entre ellos. Esas personas que de alguna manera ella admiraba, deseaba poder tener la fuerza que una vez los había caracterizado, porque a pesar de que demostrara lo contrario, carecía totalmente de ella. Y ahora estaba atrapada…

-¿Has perdido también tu capacidad para sentirte triste?, ¿para llorar?

-Llorar es para débiles –respondió con simpleza y desechando la idea con un ademán de su mano.

-Eso no es cierto y lo sabes.

-Sí lo es. Si sólo lloras no logras nada.

-Lamento que pienses así. Nos veremos pasado mañana –Naruto se fue, estaba completamente enojado con su amiga en ese momento, pronto se le pasaría, pero si no se alejaba de ella la golpearía. Se limpió las lágrimas que no paraban de salir de sus ojos y se dirigió a su casa.

-Sí –contestó ella más para sí que para el rubio.

Poco a poco, la gente se fue yendo también. Tenten lloraba mientras era abrazada por Neji, quien la sostuvo para poder irse. A su lado se encontraba su pequeño hijo. Quien también lloraba por la muerte de su tío postizo.

Ino también estaba destruida, hacía muy poco había perdido una hija y ahora otro amigo, Sakura admiró la fuerza de ella y de Sai para poder seguir adelante a pesar de todo y apretó los puños con fuerza cuando su antigua amiga pasó a su lado sin notarla.

Shino caminaba lentamente con la cabeza gacha, seguido por un gran perro blanco. Kurenai se fue con paso lento con su hijo.

El que peor se veía era el antiguo maestro de Lee, Kakashi le dijo una palabras de consuelo, pero nada era suficiente en ese momento para él. Gai fue el último en irse, a excepción de Sakura, que esperó a que ya nadie estuviera, para acercarse. Tocó en silencio la piedra con el nombre tallado. Luego se inclinó y tomó un poco de tierra de la tumba.

-Lo siento Lee… tal vez yo debería estar ahí en tu lugar… lo siento… -su voz no reflejó sus verdaderos sentimientos, se levantó al escuchar el crujido de ramas detrás de ella. Se dio vuelta colocando un kunai en el cuello de la persona que tenía a su espalda.

-Me pregunto, ¿por qué lo lamentas? Tú no hiciste nada –Sasuke parecía estar observando hasta el fondo de su alma con sus oscuros y penetrantes ojos. La chica mantenía el kunai en su cuello.

-En parte sí –respondió ella- yo fui la que sugirió que debían ir ninjas fuertes a esa misión, Lee era de los mejores.

-Aah, ¿vas a bajarlo? –le preguntó señalando el kunai. Sakura lo guardó, sin quitarle la vista a su antiguo compañero de equipo.

-¿Qué haces aquí?

-Vine a despedirme de él. Fue un digno rival. Le debo mucho.

-Ya veo te dejaré solo entonces.

-Lo apreciaría. Ah Sakura –la chica se detuvo- sé mas cuidadosa para la próxima, si hubiese sido un enemigo, ya estarías muerta. No me sentiste hasta que estuve a tu lado.

-Lo tendré en cuenta Uchiha. Veo que ya no consideras que necesito protección, es un avance.

Sasuke entrecerró los ojos pero no respondió.

La kunoichi llegó a su casa y fue directo a acostarse, aunque por su mente pasaban muchas cosas que no la dejaban descansar. Su vida se había tornado oscura y desesperanzada. No existía nada más importante para ella que cumplir sus misiones con éxito. Los sentimientos eran inútiles, se repetía a menudo, era cierto, pero lo que no era cierto es que había podido borrarlos por completo. No, aún estaba el dolor.

Recordó el rostro de Naruto y se sintió aún peor. Él jamás la había mirado así. Estaba decepcionado, lo sabía. Pero no había nada que pudiera hacer. Estaba cansada de dar todo por esa villa y sólo recibir malas noticias, estaba cansada de esa injusta vida que no se apartaba de ella, pero que se iba del lado de buenas personas. Como sus amigos ya muertos. ¿Amigos?, no ninguno era ya su amigo. Ni siquiera Naruto. Conocidos sonaba mejor.

Pensó en Sasuke y se preguntó si sería igual que su hermano. Era lo más probable, era un Uchiha. Entonces él… no le importaba. Ahora podría estar lejos de Konoha por un tiempo. Por alguna razón odiaba estar en ese lugar. Todo le traía recuerdos tristes y dolor. Como esa vez… esa vez que el enemigo acabó con su vida como la conocía…

Recién a las tres de la mañana pudo conciliar el sueño para levantarse a las seis. De todas formas se sentía totalmente descansada. Se vistió con su traje de AMBU, se colocó su máscara de tigre y se tapó el delatador pelo con una bandana gris. Se colgó en su espalda una mochila con todo lo que necesitaba y su katana y partió rumbo a la entrada de Konoha.