Renuncia: Creo que queda claro que estos peculiares personajes no son de mi pertenencia sino este intento humilde de cooperar con el fandom en español.
Advertencias: Yaoi (relación chico/chico) Ichikara/KaraIchi (a su criterio) Twincest, posible y único One-shot, la relación en cuestión es implícita y depende mucho de como ustedes consideren a los personajes en mi forma de escribir así que en los reviews espero saber en que mejorar (en otras palabras cada quien sabrá si considera esto OoC).
Nota: Dedicado a una persona especial para mi que considero mi hermana, ella merecía que hiciera el mejor intento de lograr esto.
Comencemos de nuevo
Era verdad que ninguno de los 6 era mejor que otro, entre todos eran una escoria por lo menos que intentaban ser una base "normal" de personalidades pero ¿Qué pasaba cuando quedaba un hueco mental en el cual uno dejaba de actuar como era? Tal como le pasaba a Todomatsu cuando se trataba de hablar sobre su familia, no deseaba pertenecer al mismo nivel que los demás aun cuando fuera imposible cambiar la genética solo por ese deseo de no tener que ser comparado con esa cadena de desastres, al igual que con Ichimatsu quien le costaba ser lo que en realidad era por diferentes temores de defraudar a los de su alrededor por eso su máscara de desinteresado, cruel y tirano que bajo presión era un asco para idealizar y tener la mente fría, Choromatsu con el deseo de que todos los de su alrededor actuaran como quería, que maduraran al modo en que establecía a pesar de no ser el mejor, llevando a la desesperación, Osomatsu siendo el irresponsable mayor el cual ante los logros de los demás se frustraba, siendo quien más necesitaba una compañía para mantenerse con tranquilidad, sintiéndose menos a pesar de ser el "responsable", Jyushimatsu siendo un tornado de energía y espontaneidad, difícil de comprender hasta el punto en que era como una evolución del "desastre" y luego Karamatsu ¿Qué era lo que podía preocupar a Karamatsu?
Quizás ser ese "hueco" donde los demás no prestaban atención ¿Era necesario decir las razones? Sentía como si fuera el menos querido, incluso menos que pajamatsu, por todos los cielos ¿Qué dilema era ese? ¿Necesitaba ser invisible con las personas que llevaban parte de su rostro para que el mundo lo observara? Resultaba ser demasiado, incluso para alguien como el lo era.
¿Por qué sus hermanos lo dejaban en segundo plano? Entre su persona y las peras estás quedaban en un mejor lugar. Un maullido fue lo suficiente para que abriera un ojo y lo observara saltar a la mesa justo donde se encontraban sus lentes para jugar con ellos, si los rompía no iban a ser los primeros, si los dejaba iba a ser un maldito milagro siendo que le pertenecía a Ichimatsu ¿Cómo lo sabía? Primeramente, era el único en toda esa casa que era tan bueno con ellos, en segunda ya los reconocía a la gran parte a simple vista y en tercera fue cuando su hermano menor entro dispuesto a brindarle comida al animal.
-¿Sigues sin intentar hablar con otros?- no tuvo una respuesta inmediata solo una mirada desinteresada en sus palabras –Deberías intentarlo, dejar de lado a los gatos por unos momentos e interesarse en ser un poco más sociable ¿No te parece? Las personas te verán como un inadaptado social-
-¿Y eso que me importa? Ellos son mejores que las personas, no te juzgan y te aceptan sin importar como sea y no son igual de irritantes que tu-
Considerando que la mayoría de tiempo la forma en la que Ichi se dirigía a Kara era de una manera cruel o cortante a ninguno les llegaba a extrañar, mucho menos al mayor.
Solo logro sonreír antes de pararse y asentir -Entonces es lo mismo que aquí, todos somos enemigos incluso siendo brothers, lo entiendo, estoy solo en esto ¿Cierto? Siempre me encontré alone, no tengo hermanos e inclusive tu estarías alegre de que yo no estuviera aquí, lo entiendo-
El menor solo lograba mirarlo como si tratara de concentrarse en algo más interesante de lo que siempre iba a considerar un "show" o por lo menos en el intento de mostrar eso; iba a decirle las dulces palabras de "poco me importas Cacamatsu" pero al mirar como esa sonrisa se bajaba a una expresión sin nada que mostrar se alertó, no era oscuridad, no era venganza o ira simplemente era como si ese algo que lo hacía Karamatsu ya no resplandeciera como esos jodidos pantalones.
-¿Por qué no pudimos ser amigos? ¿Best friends?-
-¿Eh?-
La conversación termino por morir cuando los demás matsus ingresaron con diferentes ruidos emitidos por las diferentes personas que acabaron con el ambiente, cada uno con sus planes solo dejando que Karamatsu escapara sin decir más que eso sin ninguna explicación ¿Amigos? ¿Es acaso que de verdad le estaba proponiendo eso? Una estupidez para la máscara que usaba y expresaba cuando solo dejo que la rutina lo consumiera pero muy en el fondo estaba ese temor de haber decepcionado a alguien quien siempre lo apoyaba.
Rechinido de dientes con un malestar ¿Qué demonios estaba diciendo? Hablaba de su hermano, el orgulloso, el quién podía continuar con su actitud a pesar de ser rechazado, quien siempre lo apoyaba y creía a pesar de no mostrar agradecimiento ante eso, haberlo salvado ante la incómoda situación que vivieron y al final aceptando la derrota de ser mal visto por Osomatsu ¿Por qué terminó por aceptar encubrirlo cuando honestamente había sido una basura?
-¿Ichimatsu?- Totty lo llamó al ver que la comida estaba siendo más de lo que normalmente le daba eso y que la maldita aura negra estaba casi consumiendo todo su lugar y haciendo que la sala comenzará a congelarse
No estaba de más decir que entre los 4 se encontraban en una esquina por su propia seguridad.
-Tsk- cortó sus pensamientos, dejando de lado su deber para retirarse sin ver a ninguno de los otros incluso a Jyushimatsu preguntando qué era lo que sucedía
¿Estaba preocupado por lo que esas palabras hicieron en su interior?
La respuesta fue un condenado sí haciendo que la noche fuera una condena que se volvía larga y cansada, las palabras rebotaban en su mente, repitiéndose de una manera culpable como si la víctima siempre hubiera sido su hermano cuando el realmente lo era ¿Cierto? Le costaba creer en otros, le torturaba no ser que los demás lo comprendieran a tal punto en que la locura de ser un fallo desquiciaba pero ¿Dónde estaba las razones para que lo fuera ahora? Se encontraba a su lado solo logrando hacer que tuviera que verlo dormir tan plácidamente cuando en su cabeza se armaba una guerra que no daba esperanzas de dejar sobrevivientes. Irritante ¿Por qué ahora algo si le importaba? O más bien un alguien ¿Qué tan complicado era mandar a la mierda a Karamatsu?
Tanto o por lo menos cuando este decidió darse la vuelta y que pudiera mirar su rostro tan…extraño ¿Hizo que perdiera su esencia? ¿Provoco un dolor que ni siquiera había planeado?
Su cuerpo moviéndose hasta poder conseguir ser un ovillo entre la lucha de mantener su cuerpo a salvo de sentirse estrujado y lentamente desgarrado, haciéndole pensar en tantas cosas en donde al final la palabra culpable se pintaba en su frente y brazos mientras que la palabra inhumano golpeaba fuertemente hasta dejarlo sin aire.
¿Por qué costaba tanto admitir que lo que le aterraba se estaba cumpliendo? Le estaba fallando a su hermano, a quien más trataba de comprenderlo a pesar de que no se sintiera cómodo teniendo en cuenta que envidiaba tanto su manera de relacionarse con el mundo, las cursilerías o frases en parte tontas que hacía, la manera en que deseaba relucirse, su maldita seguridad ¿Por qué no las podía tener? ¿Por qué le daba tanto miedo tenerlas cuando él se las brindara? ¿Por qué trataba de alejarse de Karamatsu cuando le podría estar agradecido?
Cerró los ojos dejando escapar un costoso respiro, maldiciendo por lo que ahora estaba pasando, no debía sentirse mal. No necesitaba ser compasivo, no necesitaba de otros, el mismo bastaba para mantenerse, jamás lo iba a ocupar para sostenerse…
¿Tan miserable era para querer defenderse a pesar de que estaba claro?
No quiso saber la respuesta solo deseaba poder descansar y dejar de sentirse una basura humana.
¿Pero qué no era eso? ¿No se supone qué eso era lo que creía?
(…)
La mañana fue como se lo esperaba: un asco. Sus hermanos organizándose para ir a diferentes destinos más que nada Osomatsu buscando la manera de poder apegarse a uno para ir a gastar los últimos billetes "prestados" en apuestas de caballos, al inicio pudo escuchar leves comentarios con las sospechas de que hay algo perdido, cierto aire estaba fuera de su lugar ¿Lograba notarse? ¿Tan evidente resultaba? Iba a gritarles que le dejaran solo, que no necesitaba tenerlos ahí insistiendo sobre su personalidad aún cuando leves cosas hayan sido descubiertas gracias al ex gato psíquico pero "grata" fue su sorpresa al ver que su aura y ojeras no eran la atracción principal de aquel momento sino algo que se hacía pasar por Karamatsu.
¿Dónde estaban sus pantalones que te dejaban ciego? ¿O ese carácter desde el amanecer de querer ser deslumbrante? ¿En qué mundo Karamatsu dejaría verse de esa forma tan desalineada? Su cabello alborotado, su pijama por ningún lado, aquel rostro que no mostraba intento alguno de hacer una sonrisa, tan normal como la de ellos, sin pizca alguna de algún brillo. La había cagado, demasiado ¿Pero en qué momento resultaba siendo el único culpable? Podría decir que era cierto que era quien más insistió en orillarlo a una relación bizarra, peligrosa y violenta entre ellos; maldita sea ¿Por qué culpar a otros ya no era posible?
-Karamatsu ¿Vienes con noso-
-No-
Ni siquiera el 2° mayor pudo dar su opinión cuando Ichimatsu se negó a que se lo arrebataran en su momento de crisis.
-Necesitamos hablar el y yo a solas ¿¡Entienden malditos!?- ¿Creían que su humor era del carajo? Entonces no lo han visto con sueño, culpable y lleno de presión
Todomatsu miro a Choromatsu quien terminó por observar a Jyushimatsu para que este al final se quedara viendo a Osomatsu quien en la escala del 1 al 10 era quien la cara de horror no se reflejaba por temor sino con cierta incomodidad de por medio como para hacerlo retirarse casi con las manos alzadas en una frase "Yo no voy a interrumpir de nuevo" dejando ahora a 3 matsus confundidos que con las palabras alentadoras del 4° "Creo que vamos a morir" y una risa que cada vez bajaba de volumen prefirieron no enterarse de nada y mantener sus traseros a salvo, igual, saber todo de los demás podría tener problemas como para que les interesara verse en ese enredo.
-¿De qué quieres hablar? Pensé que todo había quedado claro-
¿Y su tono? ¿Qué pasaba con el tono de galán de novelas baratas? Observar no era mucho pero no estaba consciente de que más hacer, estaban ahí ambos pero si necesitaba hablar con el verdadero Karamatsu era probable de que tuviera que desplegar ese lado el cual sello por cuestiones de seguridad propia. Se sentía inseguro ¿Las cosas se podían arreglar con palabras? Más bien ¿Sabía usar las palabras correctas que no fueran un insulto?
Uno de sus mejores talentos quizás era quedarse observando la situación por horas sin emitir palabra o sonido alguno como si se indujera a un trance del cual era la única manera de estar asegurando que su atención no iba a desviarse lo cual por cierto resultaba ser tétrico o fastidioso dependiendo de sus hermanos ya que Karamatsu no mostraba miedo o desaprobación con lo que era. Iba a explotar ¿Odiarlo iba a ser su dilema por toda su existencia?
-Ichimatsu-
-¿Ah?-
-No quiero escucharlo otra vez, puedo entenderlo con una-
¿A qué se refería?
-Perdón por no ser el mejor de los hermanos, prometo ya no molestarte ¿Okay? I understand, you hate me-
¿Alguna vez les ha pasado que piensan tan rápido que razonarlo suena ilógico o bastante lento? ¿O ese impulso silencioso que solo sucedía porqué sí? Se le daba muy bien esas situaciones cuando se encontraba bajo presión de cualquier tipo por eso no fue de sorprender que su mano terminara en forma de puño para golpear al mayor en la mejilla con tal fuerza que lo hizo tambalear hasta caer por chocar, ambas miradas se cruzaron y lo único inteligente que pudo asimilar su cabeza era "la desventaja de no poder inventarte un resfriado en tiempos de calor" si decir tonterías era un peligro debió sospechar que también hacerlas contaba como uno o bien, era peor.
-¿¡Por qué me has golpeado!?-
Porque era un idiota.
Porque no sabía cómo expresarse.
Por el hecho de tener miedo.
Que no era bueno usando las palabras ¿Necesitaba darle una lista?
La impotencia de expresarse ahora era un problema mayor ¿Cómo iba a explicarse? ¿A puñetazos? Esta vez una llave no iba a funcionar para arreglarlo todo tampoco su siguiente acción que fue acercarse hasta donde se encontraba para tomarlo del cuello de la sudadera con una mano alzada al aire para brindarle otro puñetazo al escuchar "¿Necesitábamos estar solos para esto?" desesperaba, era cierto, a veces su paciencia no era su mejor virtud pero al ver al otro cerrar los ojos solo se detuvo.
-¿Con esto podemos llegar a las paces?-
¿Por qué le hacía eso? ¿Qué trataba de hacer con su cabeza? ¿Lo tomaba por un tonto? ¿Ingenuo?
De nuevo, el mundo estaba exigiendo reacciones inmediatas que llevaban a querer golpearlo en el rostro pero solo lograba detenerse a unos centímetros, mirando y observando, buscando entender lo que sucedía a su alrededor, frente suyo; era como estar enfermo y escuchabas a miles de personas diciendo que hacer y que no tanto que se llevaban la contraria y uno no llegaba a nada pero Karamatsu era el único aferrado a querer terminar todo en conveniencia suya ¿Kara se trataba de una clase de estúpido o alguien quien quería verle cara de uno?
¿Tal vez era como si se encontrara entre la espalda y la pared?
Lo odiaba, necesitaba hacerlo, era el escudo perfecto para todo lo que era, contener la basura insegura que era.
Otra vez, luego otra, dos, tres, cuatro veces más se convirtieron en varias donde cada una fallaron como si con eso abriera los diferentes candados con los que se mantenía preso hasta que las lágrimas comenzaban a escapar permitiendo que su cuerpo se reposara en el, rendido, asustado, tan débil y real por esos momentos que comenzaba a temer en que el mundo le hiciera daño. Ichimatsu no era un ser malvado amante del poder pero era algo de lo que aprendió aferrarse para que los demás no esperaran lo que tal vez nunca en su vida tendría pero ahora en lo único en que podía sostenerse era en el mayor, apretando entre sus manos su vestimenta para dejar que el llanto se pasara, arrepintiéndose por todo lo que le ha hecho pasar.
-Lo siento Karamatsu-niisan- chillaba como un niño temeroso, avergonzado por sus actos, patético, sin idea alguna de lo que estaba bien o estaba mal, no deseo llegar a eso pero si continuaba seguramente moriría, la presión empezaba a perforarlo y hacerlo agonizar –Lo siento tanto Karamatsu-niisan- repetía casi en un tono que solo sus pensamientos podrían percibir si no fuera porque sus labios se movían aclarando que por lo menos creaba un sonido roto
Pudo sentir como unos brazos lo rodearon sin hacer esfuerzo uno de estrujarlo como si requiriera un permiso que fue concedido cuando se aferro con locura a ese cuerpo, buscando el hueco de entre el cuello y el hombro para que su rostro no se visualizara, hacer su intento de respirar con normalidad para tomarse su tiempo de abatimiento ya que no permanecería así, con nadie, no existía excepciones, iba a coexistir de nuevo con su mentira.
-Oh little brother ¿Cuándo fue que nos perdimos?- acarició su cabeza en espera de que se pudiera relajar y dejara de sentirse tan herido –No éramos esto- cantaba como si de una canción de cuna se tratara a pesar de que tocara con el tema actual en el cual se involucraron ¿Por qué algo se quebró entre ellos? ¿Cuándo fue que hubo una abertura? –Deja de estar llorando-
-No estoy llorando-
-¿Quieres que te traiga un pañuelo?-
-No-
-¿Quieres que te cante?-
-No-
-¿Puedo levantarme?-
-¡No!-
Silencio, no existía más que sus respiraciones, llanto silencioso que trataba de ahogarse para no sonar tan fracasado, la forma en la que dejaba que su cuerpo se deslizara en el de este, corazones latiendo con suavidad como para dejar que esa paz se quebrantara con cualquier situación, los aromas se combinaban, el menor oliendo a gato con un toque de sudor cuando el mayor olía a colonia barata y productos de belleza de sospechoso origen y aroma. Los sonidos cambiaban ahora a suave ronroneos en armonía con aquella mano que trataba de concentrarlo en relajarse para que dejara de parecer un berrinche que prontamente iba a ser enterrado y jamás comentado o no para los demás. Bostezo, se encontraba apacible a comparación de momentos atrás y la noche en vela, escuchar las absurdas y tontas palabras de su hermano eran como una droga que adormecía varias funciones, como si de poner reposo a un aparato se tratara.
Apestaba, el olor llegaba a marearlo tanto que se encontraba haciendo el esfuerzo de aspirarlo más.
-Hueles horrible-
Rió, solo para sentir como este lo soltaba pero sin dejar de estar recargado –I smell a winner-
Hizo un bufido más la advertencia de que era similar a una alcantarilla.
Un nuevo bostezo apareció dejando que lentamente se acomodara entre sus brazos a modo de usarlo como cama.
-Si le dices a alguien sobre esto te voy a matar-
-¿Esperabas que se lo dijera a alguien?-
Gruñó, teniendo que chasquear la lengua al final –Gracias-
-¿Uh?-
Todo se mantuvo en silencio o por lo menos eso se suponía ya que escuchaba las mil disculpas innecesarias que solo hacían que ambos se sintieran unos idiotas.
(…)
-¿Karamatsu?- Osomatsu fue el primero en entrar (o al menos de una forma obligatoria) pisando con cuidado y resignándose a lo que pudiese encontrar, era como un campo de guerra
Primero pánico, en segunda fue la sorpresa, la tercera llegó a ser la incredulidad que se expandió por cada uno de los hombros que se encontraban mirando la escena, tan espantados por lo que sus ojos miraban, como si hubieran perdido la cabeza y ahora solo les quedaran alucinaciones pero ¿Quién los podía culpar? ¿Ichimatsu y Karamatsu durmiendo abrazados como si fueran amigos del alma en esos instantes? Lo más importantes ¿Ichimatsu estaba siendo abrazado como si se tratara se proteger a un niño? El caos se hubiera formado si no fueran en si los matsus con ideas en la cabeza y planes malvados que llegaban a ligarse con la extorsión o fotos que iban a torturar por un largo tiempo al 4° hermano.
Lamentablemente estaba aprovechando por conciliar el sueño que tanto perdió dedicándole sus pensamientos a este.
