Autora: Ambrella King

Pareja: Drarry (Draco Malfoy X Harry Potter)

Fandom: Harry Potter

Disclaimer: Nada mío excepto la trama. Ya saben.

Nota de la autora: Mi segunda colaboración y esta vez en AUs. Esto será corto. u.u Disculpen si hay un poquitín de Ooc, más con algunos personajes, ¡recién comienzo! Comentarios ¡bienvenidos! Besotes.

Resumen: Esta vez, Harry y Draco, ¡y un helado para variar!

Este proyecto participa en el Festival Top! Draco 2016, celebrado por las páginas "We Love Drarry" y "I love BottomHarry"

Advertencias: Mucho fluff (entiéndame, ponerle problemas a estos dos no es de mi estilo (?) Ahora quiero mucho amor)

Primera parte

Estudiar y trabajar era lo que la mayoría de jóvenes hacían en Surrey, lugar donde vivía un joven llamado Harry Potter. Exactamente en la calle Privet Drive numero 4 él vivía junto a sus tíos Petunia y Vernon Dursley, y su primo Dudley. Harry había estado viviendo con ellos desde que tenía uso de razón y pues, no era tan malo. Especialmente desde que cansado que lo traten como estropajo, Harry se enfrentó a su tío Vernon y lo amenazo con acusarlo a la policía sino dejaba de tratarlo mal. Funcionó. Algo. De eso ya 4 años, cuando Harry tenía 13 años, ahora ya tenía 17.

Una alarma sonó y Harry se desperezo. Había estado acostado en su cama. Miro la hora, ya eran las 4pm. Se cambió, aún seguía con ropa de instituto, y salió de su "cuarto". Salto la gran verja trasera de la casa de sus tíos y se fue caminando. La bicicleta vieja, que se había podido comprar con su primera paga de su primer trabajo, estaba descompuesta.

Después de la amenaza hecha a su tío, los maltratos cambiaron a la indiferencia extrema. Sus tíos se desatendieron de él. Nunca más le volvieron a dirigir la palabra si es que no era un caso de vida o muerte y con eso, todo. Nada de comida, ni prestarle el baño, nada. Botaron sus ropas (las poquísimas que tenía) al jardín trasero y le dijeron que se las arreglara él solo. Harry acomodo la casa del perro Rojo que se había muerto cuando Dudley de pequeño lo asfixio hasta matarlo, según él solo le hacía "cariñito", a un lugar habitable. Como fue un perro grande pudo caber él y sus cosas. Limpio las telarañas y a partir de ese día ese fue su cuarto.

Después de eso se la paso sin comer por tres días y no podía encontrar trabajo ya que era muy pequeño. Pero un día lo encontró. Un tal señor Granger lo contrato como ayudante en su consultorio de dentista. No iba a hacer mucho, solo ayudarle a pasarle cosas que necesitaba cuando atendía a clientes o limpiar. Eran trabajos sencillos. El único problema que había era que el tal consultorio estaba en otro lugar, Hamsphire. Era media hora ida y media hora vuelta en carro. Pero Harry no tenía uno, así que ni bien regresaba de la escuela se iba caminando todo ese largo camino. El señor Granger era muy buen dentista y muy buena persona. Le dijo que le había contratado porque vio, esa vez que Harry caminaba por las calles pidiendo trabajo, que veía en él un espíritu luchador. Cuando Harry iba al consultorio las primeras veces, nunca veía a nadie que no fuera los clientes que tenía el señor Granger pero un día llegó y en una esquina estaba una niña sentada con un gran libro que al parecer de Harry se notaba muy pesado en su regazo. Tenía el cabello súper alborotado y el color muy parecido al del señor Granger. Eso fue lo primero que pudo notar de aquella niña. Más tarde su jefe le dijo que ella era Hermione, su hija. Ella solo sonrió y Harry observo unos grandes dientes sobresalientes. Él también le sonrió y, con el tiempo, Harry y Hermione comenzaron a hablarse y conocerse. Se hicieron amigos.

Harry sonrió muy grande al recordar, saco su pequeño celular del bolsillo y vio la foto de la pantalla. En ella estaban él y su amiga castaña, con una inscripción debajo "Hermione y Harry, amigos hasta el final"

Siguió caminando.

Nota final de autora: Este capítulo fue más como ambientación, ya en el siguiente se notara más. Siento si es muy corto, el siguiente será más largo, sino que tenía que cortarlo justo ahí :/ Comento que siempre me ha gustado la amistad de estos dos y no pude evitar escribirla. Descuiden que, como ya dije, en el siguiente ya aparecerá nuestro hurón rubio preferido. ;)