Capítulo 0: I could follow you to the beginning

[Narra Hayley]

¡Paramore!, ¡Paramore!, ¡Paramore! Era todo lo que escuchaba. Los fans gritaban por nuestra banda, esperando a que comenzara el concierto. Estaba nerviosa, no sabía cómo iba a ser todo. Este era el primer concierto que tendríamos luego de la salida de nuestro cuarto álbum.

Sin dudas mis nervios eran justificados, las cosas habían cambiado mucho desde nuestro álbum anterior. Ya no éramos los mismo miembros, solo éramos tres de los cinco que habíamos lanzado aquel álbum, Brand New Eyes, el álbum que dejó notar la tensión dentro de la banda.

Ahora las cosas parecían estar bien, con Jeremy y Taylor estábamos más unidos que nunca, y otra vez podía decir que estaba con mis mejores amigos viajando por el mundo haciendo música. En el 2009 y 2010 no podía decir lo mismo, solo había una relación profesional entre todos, ya no salíamos juntos como lo hacíamos antes y todo era más difícil en comparación a los tiempos que habíamos tenido anteriormente.

Ahora me encontraba en mi camarín terminando de alistarme para salir al escenario mientras vocalizaba y corría por todas partes. De pronto mi celular comenzó a sonar, lo cual era raro ya que todos sabían que estaba a punto de comenzar el show, pero bueno, si estaban llamando en estos momentos debía ser importante ¿no? Vi el celular, era un número desconocido, esto era más raro aún, pero igual contesté.

-¿Hola?- dije y solo sentí un suspiro- ¿quién es? Por favor, quien quiera que seas habla, no tengo mucho tiempo- dije

-Hayley…- dijo con inseguridad una voz que nunca confundiría

-Josh- tragué saliva, ok, ¿esto era un sueño o algo así?- ¿qué quieres?- pregunté dudosa

-Pedirte perdón porque fui un tonto, y desearte buena suerte- dijo y cortó

Su voz sonaba con tanta tristeza y seriedad como la última vez que lo escuché hablar, tal como esa vez donde me dijo ''adiós, hasta nunca'' entre lágrimas. ¿Por qué me había llamado? No lo sé, pero escuchar su voz una vez más provocó una sensación nostálgica en mí. Yo lo quise mucho, aunque la palabra mucho era demasiado poco para expresar lo que sentí alguna vez por el, por eso todo esto se me hacía más doloroso aún. Es difícil pensar que solo unas pocas palabras podían provocar en alguien lo que su llamada provocó en mí, pero yo era un frágil cristal que se rompía fácilmente cuando se trataba de él. No hablaba con Josh desde ese día en el último concierto con el y Zac, y no fue más que para saludarnos y despedirnos. A Zac lo había visto y saludado un par de veces luego de su partida de la banda, pero a Josh era como si se lo hubiera tragado la tierra. Algunas lágrimas brotaron de mis ojos, su llamada era algo que realmente no esperaba que sucediera.

-Al escenario en 3 minutos, Hayley- dijo un asistente de la banda al otro lado de la puerta del camarín

Me miré al espejo, tenía los ojos brillantes y noté que las lágrimas habían corrido mi maquillaje. Limpié mi cara, me puse un poco de delineador de ojos y salí. Me fui corriendo a la parte más cercana al escenario porque ya se escuchaba la batería y a Jon y Justin tocando, allí, a punto de salir estaban Taylor y Jeremy.

-¿Y tú cómo estás? Te ves nerviosa y tienes los ojos brillantes- dijo Jeremy, el siempre notaba cuando estaba rara

-Estoy ansiosa y nerviosa, pero lo de mis ojos no es por eso- dije

-¿Qué pasó?- preguntó Taylor- ¿estuviste llorando, verdad?

-Si- contesté

-¿Por qué?- preguntó Jeremy

-Después les cuento… ¡Jerm, te toca entrar!- dije y salió al escenario, de pronto comencé a sentir un leve dolor de cabeza y una puntada en el pecho

-Hayley, ¿te sientes bien?- preguntó Taylor

-Si, estoy bien- mentí- ya sal al escenario- dije y subió, luego de unos segundos, cuando era mi turno de entrar a escena comencé a brincar hacia el escenario, me acerqué al micrófono y comencé a cantar, habíamos comenzado con Feeling Sorry, era la primera vez que partíamos con esta canción.

En verdad estábamos disfrutando volver a una gira, pero mi dolor de cabeza y las puntadas en el pecho aumentaban. Por surte llegó el momento de la canción en la cuál nos deteníamos. Me subí a mi caja, aquella caja en la que por años había hecho headbanging y que aún seguía acompañándonos en los shows.

-¡Buenas Noches Nashville! ¿Están listos?- pregunté y los gritos no tardaron, los flash de las cámaras se hacían incesantes, mi cabeza comenzó a dar vueltas y mi vista se nublaba pero no podía fallarles a nuestros fans, debía seguir- ¡We Are Paramore!- grité con todas mis fuerzas y mis lágrimas comenzaron a salir, los nervios y ansiedad del concierto sumado a lo que sentí por haber escuchado a Josh hace unos minutos me consumían lentamente, comencé a ver todo negro, mis piernas temblaban y de pronto me desvanecí.

*2 horas después*

Abrí los ojos, veía algo borroso. Me encontraba en un hospital, Jeremy y Taylor dormían en dos sillones que estaban en la habitación.

-¡Chicos!- exclamé y despertaron

-Hayley ¿cómo te sientes?- preguntó Jeremy

-Mejor, ¿qué pasó? ¿Qué pasó con el show?

-Lo postergamos- sonrió Taylor- ¿qué te pasó? Antes de subir al escenario dijiste que estabas bien

-En realidad creo que me sentía muy nerviosa y ansiosa… además recibí una llamada inesperada

-¿De quién?- preguntó Jeremy

-De Josh… el señor Joshua Neil Farro- contesté

-¿Te trató mal o algo?- preguntó Taylor

-No. Se escuchaba triste, me pidió perdón por ser un idiota, me deseo suerte y cortó- respondí- aún no me explico la razón de su llamada, ni que fue lo que lo hizo pedirme perdón

-Eso es raro- dijo Jeremy confundido y de pronto comenzaron a abrir la puerta, era el, y esto no podía ser verdad- Josh ¿qué rayos estás haciendo aquí luego de todo lo que dijiste al irte de la banda?- lo increpó

-Tranquilo Jeremy, vengo a hablar con Hayley, además la vi desmayarse en el concierto y me preocupé- contestó, ¿el preocuparse por mí? ¿Es enserio? Todo esto era demasiado loco para ser realidad

-Si quieres conversar con ella háblale en otro momento, ahora está descansando, y sobre lo de preocuparte, deberías haberlo hecho antes, cuando le hiciste daño- le respondió Taylor

-Chicos, gracias por defenderme, pero déjenme conversar con el, no será mucho- les sonreí

-Pero…- dijeron

-Salgan, cualquier cosa les aviso- les dije y salieron de la habitación

-¿Qué quieres Josh?- suspiré

-Pedirte perdón, fui un idiota, tu siempre tuviste razón- dijo triste sentándose en mi cama

-¿De qué hablas?

-Nunca debí terminar contigo, nunca debí casarme con Jenna y jamás debería haberme ido de la banda- contestó

-Que tarde te diste cuenta- respondí fría

-Hayley, yo… yo aún te amo, nunca he dejado de hacerlo, me dejé llevar por la rabia y por eso quiero que me perdones, sé que te dañé, y sé que es tarde para recuperarte, pero nunca lo es para pedir perdón- tomó mis manos pero las alejé, ¿cómo se atrevía? ¿Después de todo lo que me hizo?

-Vete Josh- dije con los ojos llorosos

-Perdóname- dijo triste

-¡Vete, por favor!- dije y se marchó

Los chicos entraron y junto con ellos el doctor. Me dieron de alta y mis amigos me fueron a dejar a mi casa, me dejaron acostada en mi cama.

-¿Estarás bien, pequeña?- preguntó Jeremy

-Si- sonreí

-Si Josh te viene a molestar nos avisas ¿si?- dijo Taylor y asentí

-Ya se han preocupado bastante por mí, ahora deben irse a sus casas a descansar- dije

-Bueno, adiós, nos vemos, te estaremos llamando- se despidió Jeremy

-Adiós Hayley, mañana te vendremos a ver- se despidió Taylor

-Adiós chicos, y gracias- sonreí y se fueron

Me quedé pensando en lo de Josh. ¿Habrá sido verdad todo lo que dijo? ¿En verdad estaba arrepentido? ¿En verdad aún me amaba? Todo esto era tan raro, tan difícil de creer. Una parte de mi quería creerle y quería ser feliz con el recordando los viejos tiempos, pero mi otra parte quería no volver a verlo jamás luego de todos los errores que habíamos cometido y que nos habían hecho daño a todos. De todas formas las cosas jamás volverían a ser como antes ni aunque lo perdonara, estábamos como al principio, solo que ahora las cosas no podían cambiar.

Si tan solo hubiera una máquina del tiempo… todo sería más fácil, podría volver al principio a revivir todo y tratar de evitar que cometiéramos errores. A veces se me hacía extraño pensar en lo rara que siempre fue nuestra relación, del odio al amor y del amor al odio, y allí es donde nos encontrábamos de nuevo, en el odio.