El mismo AU del KonoKido pero un poco antes en la línea de tiempo.

Disclaimer: Nada me pertenece, Kagerou Project es propiedad de Jin/Shizen no Teki-P y Shaft.


Kano era un experto mentiroso, hábil tanto con las palabras como con su lenguaje corporal, tanto que incluso llamarle un experto se quedaba corto, ¡Kano era un genio! Un carismático genio que podía hacer lo que le viniera en gana y salir de los problemas en los que se metía con solo un par de palabras.

Justo lo contrario de Momo. Ella era torpe, se liaba con las palabras y terminaba diciendo cosas que cualquier persona con dos dedos de frente sabía que no se debían decir, seguramente hasta ella sabía que lo que había dicho no era algo bueno pues no tardaba nada en disculparse, pero no podía evitar ser siempre honesta.

Y sin embargo, a pesar de ser tan diferentes, eran como uña y carne

Tal vez no estaban siempre juntos como se esperaría de esa expresión (Momo estaba siempre rodeada de gente y él...él prefería pasar sus descansos solo), pero no era complicado saber lo mucho que se preocupaban por el otro. No era raro verles apoyados en el poyete de la ventana, hablando con el otro desde su habitación como si los años que pasaron separados no hubieran ocurrido y siguieran siendo los mismos niños pequeños que habían sido tanto tiempo atrás.

-Mo-Mo -Eran las sílabas clave, él decía eso y ella se asomaba a su habitación para encontrarse con él en la suya, mirándole con una sonrisa adornando su rostro, la misma sonrisa juguetona que mostraba a todo el mundo, antes de abrir la boca y decir las palabras que repetiría toda su vida solo por ver la forma en la que las mejillas de la mayor se cubrían de rojo- Tal vez "senpai" sería mejor...

Después de que la Kisaragi consiguiera decir que no quería que la llamara así, empezaban su conversación. No eran temas especialmente interesantes, las típicas palabras que dos amigos intercambiaban. Él, como el caballero que se suponía que era, dejaba que fuera ella quien condujera la charla y que hablara todo lo que quisiera, aportando algún comentario puntual y alguna broma cuando tenía la oportunidad para verla amenazar con cerrar la ventana sino paraba.

-Senpai -Tras su despedida, el rubio volvió a hablar, ignorando por completo la mirada de reproche por parte de la joven y contraatacando con una sonrisa burlona- El sábado no tienes nada que hacer, ¿Verdad?

El viernes echaban una serie que ella no se perdería por nada del mundo por lo que no era un día que se pudiera considerar libre y el domingo seguro que estaría haciendo todos los deberes del fin de semana a última hora, la había visto tantas veces hacerlo que apostaría su brazo derecho a que volvería a hacerlo.

Por supuesto ella asintió, olvidando que seguro que le mandarían hacer durante esos dos días de vacaciones, como si se le hubiera olvidado también que todavía era una alumna de instituto con los derechos y deberes de una.

-Entonces pasaré a buscarte sobre las diez.

Y cerró la ventana, no esperando una respuesta por parte de su amiga (quien por cierto se había quedado en el sitio procesando lo que le acababa de escuchar). Tras unos segundos que se hicieron eternos, el sonido de un "¡V-Vale!" atravesó el cristal y Kano notó como su corazón por fin volvía a latir de una forma normal.